Le veo poco sentido a tener dos sistemas de armas de diferente origen para la misma capa de defensa.
Tiene más sentido buscar proveedores diferentes pero cubriendo capas de diferentes de defensa.
El RBS-70 en su segmento tiene múltiples ventajas. Primero, es el que se esta adquiriendo, así que hay que apostar a acrecentar la cantidad y variedad para alcanzar mayor economía de escala y negociar transferencias de tecnologías. ¿Esa es una ventaja tecnológica? no, pero hay que tenerlo en cuenta.
Segundo, según múltiples fuentes, en realidad el misil es barato. El misil propiamente dicho costaría bastante menos de la mitad que un Stinger. Lo costoso es el lanzador y se prorratea su costo entre varios misiles, así que el costo total de una batería completa sería bastante más bajo para el RBS-70. Es uno de los factores que le ha permitido a los suecos ganar varias competencias. Y es un factor económico-financiero que nuestro país también debe tener en consideración. Por el mismo dinero, puedes tener más misiles y más lanzadores.
El dinero importa. Las cantidades también importan.
Tercero, el RBS-70 llega más rápido (creo recordar que un 50% más rápido) y más lejos (casi el doble de alcance). También más alto (1/5 adicional si la memoria no me falla). Permite cubrir una capa de defensa que en otros países tiene que resolver con misiles más costosos.
En pocas palabras, es un misil competente. Otro debate sería si se tratase de un sistema de armas obsoleto e incompetente y sus competidores le sacan varias ventajas. Pero ni una cosa ni la otra. El RBS-70 se mantiene competitivo.
Cuarto, se teme al "pulso humano", pero en las últimas versiones del RBS-70NG (como las que esta adquiriendo Argentina y Brasil) el sistema de guía ya no sólo es todo tiempo, sino que también esta automatizado o, si se prefiere, esta asistido por ordenador.
En pocas palabras, me parece que la elección del RBS-70NG ha consistido en una decisión muy racional. El problema es que el programa queda en suspenso o avanza a cámara lenta. La solución no es cambiar a otro programa de adquisición a medio camino o tratar de incorporar un segundo programa de adquisiciones simultáneamente. Es económicamente irracional. Lo más razonable es tratar de reactivar y reforzar el programa de adquisición que se eligió en primer lugar.
En todo caso, ¿es otro MANPAD la mejor solución? no necesariamente. Todos, sea el Stinger, el RBS-70 u otra alternativa, consten en baterías con relativamente pocos misiles y una cadencia de tiro reducida. Mucha gente para lanzar pocos misiles a cuenta gotas.
Si prestamos atención a lo que pasa en Israel y otros países y varios desarrollos recientes, como ejemplifica Muro dude Acero, quizás es el enfoque entero de defensa antiaérea de corto alcance esta cambiando.
Quizás hay que pensar en containers con decenas de misiles antiaéreos de corto alcance, capaces de enfrentar a múltiples amenazas aéreas simultáneamente.
Y para ese paradigma de defensa, ni los Stinger ni los RBS-70 ni ningún MANPAD clásico ayudaría. Según entiendo, para estos nuevos paradigmas de defensa a costa distancia se desarrolla una nueva generación de misiles.
Personalmente, creo que es conveniente continuar con MANPADs y, concretamente, el RBS-70NG, incluso versiones motorizadas como aquí ilustran.
Pero más que pensar en un segundo MANPADs como el Stinger y superponer sistemas, preferiría concentrar las energías en otros paradigmas de defensa y, especialmente, otras capas. Por ejemplo, NASAMs para la capa de 10 a 50 kilómetros (incluso más allá).
También hay que comprarle misiles a los F-16.
Finalmente, dada las tendencias respecto a enjambres de drones. Todos los misiles supersónicos, desde el más pequeño al más grande, pierden en economía. No economía en sentido monetario (que también), sino en cuanto a tiempos, producción, distribución, etc. Imposible tener las cantidades necesarias y abastecer los lanzadores lo suficientemente rápido. ¿Cómo enfrentar la llegada simultanea de 200 drones (según algunos ejercicios recientes)?
Me parece que hay que pensar en drones anti-drones y cañones antiaéreos para enfrentar a la creciente amenaza que representa la saturación de enjambres de municiones merodeadoras inteligentes.
Es decir, quizás se necesite una capa especifica de defensa anti enjambre de drones y ningún MAPADs esta a la altura para cubrir ello.
Recapitulando, por un lado hay que retomar el programa RBS-70NG y acrecentar su cantidad y variedad de plataformas que pueden lanzarlo. Con RBS-70NG alcanza y sobra para el segmento MANPADs.
Por otro lado, trabajar fuertemente en cubrir otras capaz de defensa aérea (misiles para los cazas, misiles antiaéreo de medio alcance, defensa contra enjambres de municiones).
Tiene más sentido buscar proveedores diferentes pero cubriendo capas de diferentes de defensa.
El RBS-70 en su segmento tiene múltiples ventajas. Primero, es el que se esta adquiriendo, así que hay que apostar a acrecentar la cantidad y variedad para alcanzar mayor economía de escala y negociar transferencias de tecnologías. ¿Esa es una ventaja tecnológica? no, pero hay que tenerlo en cuenta.
Segundo, según múltiples fuentes, en realidad el misil es barato. El misil propiamente dicho costaría bastante menos de la mitad que un Stinger. Lo costoso es el lanzador y se prorratea su costo entre varios misiles, así que el costo total de una batería completa sería bastante más bajo para el RBS-70. Es uno de los factores que le ha permitido a los suecos ganar varias competencias. Y es un factor económico-financiero que nuestro país también debe tener en consideración. Por el mismo dinero, puedes tener más misiles y más lanzadores.
El dinero importa. Las cantidades también importan.
Tercero, el RBS-70 llega más rápido (creo recordar que un 50% más rápido) y más lejos (casi el doble de alcance). También más alto (1/5 adicional si la memoria no me falla). Permite cubrir una capa de defensa que en otros países tiene que resolver con misiles más costosos.
En pocas palabras, es un misil competente. Otro debate sería si se tratase de un sistema de armas obsoleto e incompetente y sus competidores le sacan varias ventajas. Pero ni una cosa ni la otra. El RBS-70 se mantiene competitivo.
Cuarto, se teme al "pulso humano", pero en las últimas versiones del RBS-70NG (como las que esta adquiriendo Argentina y Brasil) el sistema de guía ya no sólo es todo tiempo, sino que también esta automatizado o, si se prefiere, esta asistido por ordenador.
En pocas palabras, me parece que la elección del RBS-70NG ha consistido en una decisión muy racional. El problema es que el programa queda en suspenso o avanza a cámara lenta. La solución no es cambiar a otro programa de adquisición a medio camino o tratar de incorporar un segundo programa de adquisiciones simultáneamente. Es económicamente irracional. Lo más razonable es tratar de reactivar y reforzar el programa de adquisición que se eligió en primer lugar.
En todo caso, ¿es otro MANPAD la mejor solución? no necesariamente. Todos, sea el Stinger, el RBS-70 u otra alternativa, consten en baterías con relativamente pocos misiles y una cadencia de tiro reducida. Mucha gente para lanzar pocos misiles a cuenta gotas.
Si prestamos atención a lo que pasa en Israel y otros países y varios desarrollos recientes, como ejemplifica Muro dude Acero, quizás es el enfoque entero de defensa antiaérea de corto alcance esta cambiando.
Quizás hay que pensar en containers con decenas de misiles antiaéreos de corto alcance, capaces de enfrentar a múltiples amenazas aéreas simultáneamente.
Y para ese paradigma de defensa, ni los Stinger ni los RBS-70 ni ningún MANPAD clásico ayudaría. Según entiendo, para estos nuevos paradigmas de defensa a costa distancia se desarrolla una nueva generación de misiles.
Personalmente, creo que es conveniente continuar con MANPADs y, concretamente, el RBS-70NG, incluso versiones motorizadas como aquí ilustran.
Pero más que pensar en un segundo MANPADs como el Stinger y superponer sistemas, preferiría concentrar las energías en otros paradigmas de defensa y, especialmente, otras capas. Por ejemplo, NASAMs para la capa de 10 a 50 kilómetros (incluso más allá).
También hay que comprarle misiles a los F-16.
Finalmente, dada las tendencias respecto a enjambres de drones. Todos los misiles supersónicos, desde el más pequeño al más grande, pierden en economía. No economía en sentido monetario (que también), sino en cuanto a tiempos, producción, distribución, etc. Imposible tener las cantidades necesarias y abastecer los lanzadores lo suficientemente rápido. ¿Cómo enfrentar la llegada simultanea de 200 drones (según algunos ejercicios recientes)?
Me parece que hay que pensar en drones anti-drones y cañones antiaéreos para enfrentar a la creciente amenaza que representa la saturación de enjambres de municiones merodeadoras inteligentes.
Es decir, quizás se necesite una capa especifica de defensa anti enjambre de drones y ningún MAPADs esta a la altura para cubrir ello.
Recapitulando, por un lado hay que retomar el programa RBS-70NG y acrecentar su cantidad y variedad de plataformas que pueden lanzarlo. Con RBS-70NG alcanza y sobra para el segmento MANPADs.
Por otro lado, trabajar fuertemente en cubrir otras capaz de defensa aérea (misiles para los cazas, misiles antiaéreo de medio alcance, defensa contra enjambres de municiones).