Con la reciente confirmación de la baja definitiva del destructor ARA Heroína y el transporte rápido multipropósito ARA Hércules, la Flota de Mar de la Armada Argentina parece no poder torcer el rumbo que la pone directamente en vías de extinción. Desde las últimas décadas han sido nulos los esfuerzos para incorporar nuevos medios a fin de, por lo menos, reducir la sangría en cuanto a capacidades y tamaño de la actual flota. Año tras año, el tonelaje global de la fuerza naval nacional se reduce, con buques radiados del servicio o que cada vez navegan menos, afectando de esta forma a la preparación de las tripulaciones, que no cumplen con los días de navegación pautados en los programas anuales de adiestramiento.
La situación no es una novedad en sí misma. La baja de dos buques más, con el agravante de que uno de ellos fue dado de baja luego de más de quince años varados en puerto por la bendita (o maldita) rueda lenta. Sin embargo, la duda cabe si, en caso de haberse resuelto su recuperación del Reino Unido, este buque hubiera sido capaz de volver a navegar con los actuales recursos de los que dispone la Armada Argentina. Esto se debe a que muchos componentes del ARA Heroína fueron empleados como fuente de repuestos para el resto de la clase Almirante Brown MEKO 360.
Más allá de los hechos consumados con la baja de los mencionados buques, la Armada Argentina no parece poder revertir un proceso sistemático de perdida de capacidades que se agrava año a año, con sus principales medios de superficie, las corbetas y destructores de la serie MEKO, alcanzando los cuarenta años de servicio, por citar un solo ejemplo. La duda cabe si, a esta altura, es viable avanzar en una modernización que se tendría que haber realizado hace por lo menos veinte años atrás, más allá de las actuales propuestas y programas en curso, siendo el más destacado el desarrollo de un nuevo radar AESA con el apoyo de INVAP.
La actualidad de la Flota de Mar solo vislumbra un futuro ominoso, mientras que desde el Ministerio de Defensa se pone el foco de sus esfuerzos de gestión en involucrar a las Fuerzas Armadas en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, sin ningún plan en paralelo de recomposición del Presupuesto de Defensa, a fin de siquiera alcanzar siquiera el 1% del PBI. Lo cual abre la duda, mientras miramos al interior en cuestiones ajenas al instrumento militar, ¿qué planes hay de recomposición del poder naval de la República Argentina para revertir esta situación?
Una opción es la adquisición como paliativo de buques de segunda mano con menos años que los que actualmente dispone la Armada, actuando, si se quiere, como una solución temporal. Para esto, se debería realizar una evaluación para avanzar y determinar qué tipo y clase de buques podrían suplir a las unidades que están más cerca del retiro que de volver al servicio.
No obstante, como se mencionó, esta situación solo sería un parche, si no se encara simultáneamente con un plan de renovación naval de envergadura que permita una nueva clase común o familia de buques de superficie, definiendo claramente qué tipo de capacidades deben tener estas unidades, haciendo hincapié en capacidades multimisión, antisubmarinas, antiaéreas, de vigilancia o patrullaje, o una combinación de todas estas con buques polivalentes.
La realidad demuestra que, de no avanzar con ninguno de los dos planes, durante el próximo plazo de diez años, la Armada Argentina solo quedaría conformada por un puñado de patrulleros y buques de apoyo de diverso tipo, con nula capacidad de combate. Al presente, la otrora poderosa Flota de Mar está en vías de extinción. Se está a tiempo de revertir esta situación, pero el margen cada vez es menor.
*Fotografías empleadas a modo de ilustración.
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adquirir combatientes de superficie de segunda mano en la situación actual sería un error, el salto tecnologico y armamentistico de las últimas decadas fue muy grande para volverlo viable, no hay barco relativamente moderno en cantidad como para comprar usado y las MEKO ya son demasiado obsoletas para seguir siendo viables como combatientes aún con actualizaciones.
la realidad es que toca renovar la flota en su totalidad y eso es una inversión de fácil 10mm dolares (asumiendo una flota principal de 9 corbetas, 4 fragatas y 2 destructores como la actual (aunque en mi opinión las corbetas ya no tienen razón de ser)), algo imposible para las FF.AAs en su actualidad y eso sería solo los Combatientes de superficie, ni hablar del resto de las capacidades como OPVs, reabastecimiento, LDP/LST/LHD, submarinos, helos, aviación naval, ETC.
hasta que no se revierta la situación política de abandono total a las FF.AAs la triste realidad es que estas van a seguir muriendo cada vez más rápido hasta solo quedar como complemento de las FF.SSs.
Comprar buques nuevos hoy en dìa con el actual presupesto es imposible,se deberia por ende, suplir carencias, esto es, adquirir un submarino de segunda mano o retomar los trabajos en el ARA SANTA CRUZ, adquirir dos fragatas antiaèreas que al menos, esten a la par en lo tecnològoco que hay en la regiòn, buscar algùn buque de desembarco de segunda mano, y el resto, hacer todas las modernizaciones posibles. Hay que mantener a la flota de combate cueste lo que cueste
No hay que ser tremendista. Con lo que tenemos algo es. Hay q mantenerlo nomas
Hay que empezar primero por los submarinos, luego por algunas corvetas/fragatas y me fijaría en las Gowind ya que tenemos los OPV de 1650 tn vienen versiones de 2500/3100 tn decentemente armadas y equipadas… pero todo es plata
Increíble que los mismos que decian que estaba mal mantener lo que teníamos. Ahora dicen que lo que necesitamos no lo podemos comprar, es decir, hay que quedarse sin nada…
Con el mas debido respeot: Que triste, todo y sin ánimo de criticar, ver al actual Ministro de Defensa preocupado por el tema del Narco Trafico, y al parecer no importale mucho sobre La Soberania Nacinal en el Mar que custodia la Armada Argentina, fijense desde que asumio no veo que se haya preocupado por la ARA, no se si ha ido a BNPB, (Corazon de la ARA), obvio no solo él sus antecesores lo mismo, que lastima no soy Militar, Abogado ni mucho menos Poliico, pero lo que nos ocurre es alarmante, por lo que veo, no les Interesa Nuestro Mar Arg. Malvinas, la Soberania Antartida etc. Claro eso no se ve. Y el Narco trafico si se ve, y puede llevar votos a favor. Si me sali del tema e incursione politicamente en esta misiva, respeto la desición, de ZM de publicarf o no mi comenario, saludos. Enrique.
Seria interesante que algún equipo tecnico institucionalmente determine que ganancias podría generar nuestro país en el Atlántico sur evitando a la par la depredación por terceros y en función de ellos, negociar concesiones de explotación pesquera, asignando por ley dichos recursos a la construcción y/o compra de buques de superficie de ultramar, aviones de control maritimo y desarrollo de satélites. A la par de legalizar la pesca permitiría realizar un estricto control de la ZEE de Argentina y de paso, control fuera de la milla 201 por aplicacion de la normativa internacional.
Adiós sueño azul. Drones, aviones, submarinos, radares, satélites, misiles de corta, media y larga, corbetas multimision y festejamos.
Digamos que la situación de carencia avanzada por parte de la Armada tiene como causa la falta de previsión estratégica y logística, hace muchos años atrás que debería haberse empezado con la modernización y/o reemplazo de las unidades de la flota, desde el fin del conflicto Malvinas el ARA empezó a perder sus unidades navales y aéreas y no se pensó en la necesidad de reequipamiento. Teniendo la superficie marítima que posee Argentina no debería haberse abandonado tanto la fuerza naval.
Los gobiernos deberían tener vergüenza de como trataron la defensa de nuestro país; parece que actuaron para el enemigo.
Seria interesante que algún equipo tecnico institucionalmente determine que ganancias podría generar nuestro país en el Atlántico sur evitando a la par la depredación por terceros y en función de ellos, negociar concesiones de explotación pesquera, asignando por ley dichos recursos a la construcción y/o compra de buques de superficie de ultramar, aviones de control maritimo y desarrollo de satélites. A la par de legalizar la pesca permitiría realizar un estricto control de la ZEE de Argentina y de paso, control fuera de la milla 201 por aplicacion de la normativa internacional.
La Armada Argentina tal vez no se extinga, sino convertida en una fuerza más parecida a la PNA que a una armada de batalla naval. Esto es gracias a la decidía de todas las gestiones presidenciales desde la vuelta a la democracia. Un país que tiene el mar soberano que tiene Argentina no puede prescindir de una armada poderosa y creíble. La falta de voluntad y visión estratégica de los sucesivos gobiernos han desinvertido en defensa, en lo que la ARA no ha sido un excepción. Esto no se arregla en una gestión, se necesitarán muchos años para recuperar capacidades modernas de combate naval, se necesitará una política de inversión que abarque varias gestiones presidenciales, lo que en Argentina es una utopía.
Las FFAA están siendo desguazadas desde hace más de 30 años , mañana si quieren Bolivia nos invade sin gastar un tiro !!!!
La Flota de mar que tuvimos en Malvinas, no sirvió de mucho, ya que un solo submarino paralizó las operaciones, se vieron inútiles a actuar por decirlo claro. El arma actual y desde hace rato sabemos que es el submarino, por eso países de sudamérica están invirtiendo en éste tipo de armas. Nuestro problema actual o desde hace rato laaargo, sabemos que es la pesca ilegal, es nuestra guerra; busquemos más patrulleros oceánicos, más aviones de detección, etc.
Con todo el respeto, desde el otro lado del Atlántico.
Dejando sentado desde este momento que creo firmemente que las Malvinas son argentinas, creo que la Guerra de las Malvinas fue un móvil estratégico de muy malo a pésimo. Cualquiera con dos dedos de frente se habría preguntado por las consecuencias económicas de esa Guerra…y de aquellos polvos, estos lodos.
Es muy triste ver que una de las Marinas de Guerra más potentes de Sudamérica se va viviendo al carallo poco a poco, pero no es solo la Marina, también las FFAA (aunque la compra de F16 puede paliar algo esa situación) y el Ejército tienen señalados problemas.
Hoy en día hay soluciones muy buenas para “ir tirando”; Navantia, en España, por ejemplo, tiene un catálogo para todos los gustos, con las serie Avante.
Desde luego, si no hay voluntad, nunca se encontrará un camino.
Ánimo, y un cariñoso abrazo a los primos del otro lado del charco.
Los destructores Meko 360 son excelentes plataformas, si descontamos su sistema de propulsión, por eso si se pudieran adquirir las fragatas tipo 122 ofrecidas por Alemania e implementar su sistema de propulsión a las Meko nuestras seria un buen camino para ir recuperando las capacidades maritimas de la flota, obiamente actualizando sus sistemas de armas y detección electronica, un avance serio a futuro es tratar de incorporar alguna/s tipo 123 y ni hablar de las 124.
Obiamente cuando la economia del pais lo permita, que a este paso, seria dentro de 10/15 años, pasiencia
Argentina no puede esperar 10 o 15 años para defender sus recursos naturales existentes en el Atlántico sur. Hay diferenciar esta situación del problema con Inglaterra. Si es necesario hay que pedir la colaboración de la Marina brasilera para controlar nuestra ZEE. La depredación que se está haciendo en este sector es enorme y las perdidas económicas y ecológicas son gigantescas. Hay un descontrol total, principalmente por pesqueros de bandera china. Y hoy a China le importa poco de nuestro país por el desplante recibido de nuestro actual gobierno.
Yo creo que si se hace una reasignación inteligente de recursos se podría tener una recuperación en unos 5 años, mas porcentaje de PBI, auditar y usar de manera transparente el FONDEF y tener un camino de equipamiento de urgencia para los próximos 10 años y ahí probar con material nuevo y proyectable a unos cuantos años, hoy tenemos muy poco en las 3 fuerzas, cualquier cosa que sirva seria bienvenida, como los f16 en aerea.
Lo principal es tener una fuerza de submarinos creíble y eficiente. Considerando la cantidad de costa ZEE, protección hasta milla 350 -lecho marino-, así como los intereses antárticos y el conflicto sobre Malvinas e islas australes, dicha flota no debería contar con menos 6 unidades.