¿Pero hasta qué punto se puede evitar?
Hay gente que se guarda sus preocupaciones muy adentro incluso simulando o mintiendo descaradamente a sus allegados, de hecho es parte del problema, que no lo pueden canalizar o buscar ayuda.
No es el problema financiero en sí lo que desencadena estás tragedias sino la imposibilidad de procesar la situación frente a sí y frente a terceros, por razones más profundas.
Lamentablemente así fue el suicidio del padre de un amigo cercano, su posición era relativamente mas cómoda que la del promedio general y tenía muchas herramientas con qué hacerle frente, pero para él, suponemos, se habra hecho insoportable, y fue una sorpresa total, sin ninguna señal de alerta.
