El programa es conocido como LRS (Long Range Strike: ataque de largo alcance) y ya se están enfrentando la Northrop (primera foto) con un derivado del B-2 Spirit y la Lockheed-Martin (segunda foto). La fecha estimada de alta es para el año 2030, pero tal como ya adelantamos en el topic de “Modernización del B-2 Spirit”, éste seguirá en servicio al menos hasta el 2050 y se está confirmando que para el 2020/30 contará con armas láser de alta energía.
En relación a las propuestas del futuro bombardero, Northrop insiste con una aeronave tripulada aunque aparentemente los pilotos no tendrían visión externa y serían asistido por múltiples microcámaras. Lockheed encará su proyecto con un bombardero no tripulado.
Sea uno u otro, todo indica que a partir del 2030 las bombas serán historia, ya que el làser de alta energía viene ganando terreno. A partir del Boeing 747 ABL, ya se está trabajando en un pod con un cañón láser para el F-35 y los AC-130 Spectre.
En relación a las propuestas del futuro bombardero, Northrop insiste con una aeronave tripulada aunque aparentemente los pilotos no tendrían visión externa y serían asistido por múltiples microcámaras. Lockheed encará su proyecto con un bombardero no tripulado.
Sea uno u otro, todo indica que a partir del 2030 las bombas serán historia, ya que el làser de alta energía viene ganando terreno. A partir del Boeing 747 ABL, ya se está trabajando en un pod con un cañón láser para el F-35 y los AC-130 Spectre.
