El ACARS, Aircraft Communication Addressing and Reporting System, permite a la aeronave enviar y recibir informacion desde la compania, los servicios ATC, etc.
Cuando esta recibiendo o enviando informacion, el ACARS automaticamente busca la forma de hacerlo empezando por la forma mas "barata" que es VHF, si no lo logra intenta en HF, luego UHF y finalmente SATCOM.
Por otro lado en aviones de la generacion de un Airbus A330 se monitorea continuamente los sistemas del mismo y si existe una falla la cual se presenta en el cockpit a los pilotos en el EICAS (Engine Indication And Crew Alerting System) tambien se sumariza y envia a traves del ACARS al departamento de mantenimiento de la compania.
Obviamente no es el mismo grado de alarma que le da el sistema a los pilotos ni a la compania si se va a inoperativo una bomba de combustible que si se para un motor.
De todas formas esta sumarizacion y transmision de las fallas al dpto de mantenimiento permite mantener un mayor control de las fallas en cuanto a su recurrencia e historial.
Por lo que estoy leyendo en
www.flightglobal.com al parecer antes de que se produsca la desaparicion del avion Air France tuvo una transmision del ACARS de algun sistema que estaba fallando. Hablan de un cortocircuito lo cual algunas veces tambien es espurio o momentaneo y el sistema afectado vuelve a trabajar normalmente.
Del tema del rayo lo veo muy dificil, aunque en aviacion hasta que aparescan las cajas negras y se sepa que paso realmente nada se puede descartar.
Hoy dia los aviones tienen aislaciones que permiten en caso de ser impactados por un rayo que su energia no afecte los sistemas electricos.
Muchas veces cuando recibo el avion en el libro de novedades de mantenimiento encuentro que se ha detectado un impacto de rayo en el fuselaje y que se ha chequeado segun procedimiento.
En los aviones viejos o con mal mantenimiento que por alguna razon pierden esa aislacion el impacto de un rayo puede generar que se quemen los equipos electricos de abordo.
En fin, a seguir esperando y rezar porque alguien haya sobrevivido.