Un F-104G Starfighter de la armada alemana en 1984, en una formación misión contra blancos en el mar, tuvo un contacto con el agua pero quedó ileso. La misión era hacer un pase a muy baja altura sobre el mar, con el apoyo técnico de un buque militar, dejar caer la bomba sobre el destino y recuperar altitud poco después. Pastoreo durante el vuelo, el piloto tuvo una pequeña distracción, que a esa velocidad y altitud en contacto con el agua. Además, el piloto lanzó la bomba a un punto donde ya habría venido recuperando, afortunadamente, a pesar del contacto, el Starfighter no tenía ningún daño grave que impidió el vuelo.