Los pasajeros se enteraron del problema del avión por los medios
Una nave de Copa aterrizó ayer en Córdoba con problemas en una turbina. Se desplegó un gran operativo de seguridad ante la posibilidad de accidente.
13/01/2011 00:01 , por Redacción LAVOZ
Los pasajeros se enteraron del problema del avión por los medios | La Voz del Interior
Para los pasajeros del vuelo CM463 de Copa Airlines el aterrizaje en el Aeropuerto Internacional Ambrosio Taravella de Córdoba no tuvo nada de especial, incluso tocaron tierra unos minutos antes de lo previsto, a las 3.06. Lo único que les llamó la atención eran las autobombas dispuestas en la pista.
Un rato después se enteraron que el dispositivo de seguridad que se había montado era por su propio vuelo. Resulta que el Boeing 737 que los transportaba desde Panamá sufrió desperfectos mecánicos que obligaron al piloto a tomar medidas de precaución.
Según la información brindada por la aerolínea, el capitán de la aeronave del vuelo CM463, HP1714 en la ruta Panamá-Córdoba, se percató de una indicación en cabina de sobreaceleración en un motor, poco antes del descenso.
“Cumpliendo con las medidas de seguridad, el capitán de la aeronave notificó al Control de Tráfico Aéreo que, en caso de que el motor no presentara condiciones óptimas, según lo establecido por los procedimientos, se declararía emergencia”, agregó el comunicado.
Desde el Aeropuerto se dispuso un operativo que incluyó la intervención de dos autobombas e integrantes del Grupo Especial de Salvamento (GES). Fuera de la estación, se cortó preventivamente el tránsito.
Sin embargo, los pasajeros ni se enteraron de lo sucedido. Guadalupe Altamirano, cordobesa que regresaba en el vuelo de Copa, comentó que al descender todos vieron las autobombas, pero que pensaron que se trataba de una asistencia para otro avión. “Después vimos que a la hora en que se declaró la emergencia, nosotros estábamos cenando”, agregó la joven. Altamirano descartó que se haya tratado de un aterrizaje de emergencia: “No se puso en marcha ninguno de los protocolos que se utilizan en esos casos, como reclinarse y poner la cabeza entre las piernas”.
La llegada a Córdoba fue, según la joven, sin inconvenientes. Relató que el aterrizaje fue sin sobresaltos, y que incluso llegaron unos minutos antes de lo previsto. “Nos enteramos de todo por nuestros familiares, que nos llamaron preocupados al enterarse de lo que había sucedido a través de los medios”, concluyó.
Copa indicó que “incidentes como éstos no son ajenos a la actividad aeronáutica, que todos los protocolos de seguridad fueron cumplidos estrictamente y que gracias al profesionalismo de su personal, así como el de las autoridades, en ningún momento se vio comprometida la seguridad de los pasajeros”.