Brasil negocia adquisición de Gripen usados para evitar apagón en la FAB
19/09/2025
Brasil está negociando la adquisición de versiones anteriores de su nuevo avión de combate, el sueco Saab Gripen, para evitar un apagón en parte del sistema de defensa del país.
La falta de fondos y los altos costos ya han retrasado ocho años la entrega del último avión, y las adendas contractuales ya han costado el equivalente a seis aeronaves adicionales, según la FAB (Fuerza Aérea Brasileña).
Esta semana, el comandante de la Fuerza Aérea, el general de brigada Marcelo Damasceno, estuvo en Estocolmo para discutir los términos actuales de la cooperación militar con el país nórdico con el ministro de Defensa sueco, Pal Jonson.
Se firmó una breve declaración conjunta, cuya principal información fue la confirmación de la adquisición previamente anunciada por Suecia de cuatro aviones de transporte Embraer KC-390.
No menos relevante fue la negociación, revelada por Folha de S. Paulo en 2023, para la adquisición de más aviones Gripen para Brasil.
Hasta entonces, se conocía el acuerdo conjunto, pero lo que no está escrito es que Brasil no solo podría ampliar su flota del último modelo Gripen, el E/F, sino también comprar unidades usadas de la generación anterior del caza, el C/D.
No se ha tomado ninguna decisión. La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) y el gobierno sueco limitaron sus comentarios al documento publicado. Sin embargo, el fabricante sueco Saab no se pronunció.
Según personas familiarizadas con el asunto, la FAB aún no ha abandonado el análisis de una propuesta para comprar un lote de cazas estadounidenses F-16 usados, lo que representaría un importante golpe a la imagen de Suecia.
Esta negociación comenzó a principios del año pasado y se percibió en el mercado como una forma de impulsar la compra combinada de nuevos aviones Gripen y la venta del KC-390 a Suecia. Y funcionó.
El problema radica en que Brasil pretende ampliar su flota del nuevo caza E/F de 36 a 50 aviones, cuya primera unidad, fabricada en el interior de São Paulo, se espera que se incorpore este semestre. Para lograrlo, se requiere un aumento máximo del 25% en el contrato original de 2014, por un valor aproximado de R$5 mil millones.
Esto se considera inviable en su totalidad, por lo que se podría adoptar una solución mixta, con quizás 6 Gripen nuevos y 12 usados. El problema, que se aplica a una posible adquisición de F-16 listos para usar, es nuevamente la falta de fondos para compras directas.
El acuerdo en sí no sería inédito: de 2006 a 2013, 12 Mirage-2000 adquiridos a Francia mantuvieron la defensa aérea en el centro de Brasil hasta su vencimiento.
La principal preocupación de la FAB es la flota AMX, un avión de ataque terrestre ítalo-brasileño con base en Santa Maria, Rio Grande do Sul. Las 30 aeronaves, sin incluir las que se encuentran actualmente en funcionamiento, serán retiradas próximamente.
Sin embargo, todo depende del presupuesto. La semana pasada, el Jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea Brasileña, General de Brigada Walcyr Josué de Castilho Araújo, presentó un panorama desolador a los senadores de la Comisión de Asuntos Exteriores y Defensa.
Afirmó que los retrasos presupuestarios a lo largo de los años, como es bien sabido, han retrasado el programa Gripen. Según el cronograma de 2014, el último caza debía entregarse en 2024. Hasta el momento, hay diez aeronaves en Brasil, y la primera fabricada en Brasil podría volar este año.
Con el cronograma actual, poco realista, una avalancha de aeronaves llegaría al país para 2027, y el contrato se cumpliría. La nueva adenda negociada este año ya ha pospuesto la entrega hasta 2032, ocho años después de lo previsto inicialmente.
El costo de estas incorporaciones, 12 hasta la fecha según el brigadier, ha incrementado el costo del programa en un 13,43% a lo largo de los años, cifra que equivaldría a seis aviones adicionales según los términos acordados en 2014.
A esto se suma el costo de desarrollo, con la transferencia de tecnología a Brasil. El caza de tercera generación, el Gripen E/F, es esencialmente un avión nuevo. La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) no ha abordado públicamente esta queja, pero es ampliamente compartida por las autoridades.
Además, y esto supone un obstáculo para la eventual compra de modelos usados, el miembro más reciente de la OTAN, Suecia, está a la vanguardia de la renovada reacción de Europa contra Rusia tras la Guerra de Ucrania.
Con 96 Gripen C/D y un pedido de 60 E/F, el país ha decidido no ceder cazas más antiguos a Kiev por temor a su seguridad. Normalmente, menos de 70 de los 96 Gripen de Suecia están operativos, por lo que perder 12 unidades tiene un impacto significativo en las capacidades de Estocolmo.
Falta de verbas e atrasos no programa do Gripen E/F motivam análise de aquisição mista de unidades novas e antigas; alternativa semelhante já foi adotada com Mirage-2000
jornaldebrasilia.com.br
País pode comprar 12 modelos antigos do seu novo caça, mas ainda considera adquirir F-16 americanos
www1.folha.uol.com.br
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