Durante el pasado fin de semana, por medio de una serie de fotografías y videos divulgados, se dio cuenta que la Fuerza Aérea de Irán recibió lo que serían sus primeros aviones de entrenamiento avanzado Yak-130 de origen ruso. Si bien al día de la fecha no se han brindado mayores detalles, la presencia de las primeras aeronaves enfocadas en el entrenamiento y formación de pilotos podría formar parte de los acuerdos entre el régimen iraní y Rusia para la compra de cazabombarderos Sukhoi Su-35.
La reciente novedad viralizada en redes sociales rápidamente muestra el arribó de un número no determinado de entrenadores Yak-130 a Irán, ya portando su nuevo esquema de pintura e insignias correspondientes con la Fuerza Aérea Iraní. Si bien al día de la fecha desde el régimen no se han producido un anuncio de carácter oficial, agencias de noticias del país, como el caso de IRNA, dieron cuenta del arribo de los aviones a la Base Aérea Babaei, ubicada en la ciudad de Isfahan, en el centro del país.
Siguiendo lo reportado por los medios locales iraníes, estos han hecho mención que la llegada de los nuevos Yak-130 responde a acuerdos alcanzado con la Federación Rusa. Esto gana relevancia en base al apoyo manifestado por Irán a Rusia en su invasión a Ucrania a través de la provisión de un importante número de vehículos aéreos no tripulados Mohajer-6 y municiones merodeadoras (popularmente denominadas como “drone kamikazes”) Shahed-131 y Shahed-136.
En contrapartida desde Moscú han avanzado en los necesarios acuerdos para la provisión de nuevos cazabombarderos Sukhoi Su-35. El hecho fue confirmado durante el pasado mes de marzo, logrando de esta manera escapar al conjunto de sanciones que pesan tanto para Irán y Rusia en lo referido a acceso a los mercados financieros. La situación demuestra que la profundización de lazos entre ambos gobiernos se hace cada vez mayor.
Si bien no se había reportado que la compra de los Yak-130 formará parte de los acuerdos, su incorporación al segmento de la aviación de entrenamiento de la Fuerza Aérea Iraní respondería a diversos fines. El primero renovar la envejecida flota de aeronaves empleadas en estas funciones, entre las cuales se destaca la presencia de aviones F-5 adquiridos a los Estados Unidos antes de la Revolución Islámica de los años 70´. Por el otro, en segundo lugar, para iniciar un proceso de entrenamiento y conversión que permita a los pilotos iraníes comenzar su preparación para operar a los futuros Su-35 provistos por Rusia.
Por último, no debe dejarse de mencionarse que el Yak -130 fabricado por la Yakovlev, además de su función de entrenador avanzado, puede ser empleado como avión de ataque, al contar con una amplia panoplia de armamento, el cual va desde misiles aire-aire, como diverso tipo de armas guiadas contra objetivos terrestres. Estas capacidades permitirán complementar a otras aeronaves empleadas en dichas funciones, las cuales, como es la tónica general en el inventario de la Fuerza Aérea de Irán, acumulan décadas de servicio.
*Fotografías: créditos a quien corresponda.
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