Relaciones China - EE.UU


La cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que tuvo lugar este lunes en Bruselas (Bélgica), sirvió para trazar los nuevos lineamientos de la política de la Alianza hacia el país asiático, que podría ser caracterizada por una mayor confrontación.

Declaración de los líderes de la OTAN y reacción de China​

Durante una conferencia de prensa previa a la reunión de alto nivel, el secretario general de la organización, el noruego Jens Stoltenberg, subrayó que la Alianza Atlántica debe "reforzar" su estrategia para contrarrestar el ascenso de China. "El desarrollo militar de China, su creciente influencia y su comportamiento coercitivo también plantean algunos retos para nuestra seguridad", señaló. "Tenemos que abordarlos juntos como alianza", agregó.

Stoltenberg destacó que el gigante asiático "no comparte los valores" de los Estados miembros de la OTAN, haciendo referencia a la represión de las protestas en Hong Kong. A parte de eso, hizo hincapié en que a lo largo de los últimos años se ve "una importante acumulación militar" por parte de Pekín, que está "invirtiendo fuertemente en nuevas capacidades militares".

El secretario general dijo que Pekín "se está acercando" a los países de la Alianza Atlántica en el ámbito tecnológico y llamó a los integrantes de la OTAN a "invertir más en tecnología y también en asegurarse de dar un paso adelante en lo que respecta a las ciberdefensas".

En el comunicado final de la cumbre, China fue denominada por primera vez como "un desafío sistémico" para la seguridad de los países de la OTAN y el orden internacional. Además, los miembros acordaron aumentar el financiamiento de las actividades de la organización a fin de contrarrestar las amenazas y desafíos que presentan Rusia y China.

Cabe destacar que esto contrasta con las declaraciones al final de la cumbre previa de la Alianza, que tuvo lugar en Londres en el 2019. En ese momento, los países europeos miembros de la OTAN aún no estaban preparados para apoyar plenamente la línea dura de EE.UU. hacia China.

Ante este panorama, conviene citar la opinión de la canciller alemana, Angela Merkel, expresada después de la cumbre. Merkel subrayó que la decisión de la OTAN de nombrar a China como un desafío no debe ser exagerada, porque China, como Rusia, también es un socio en varias áreas. "Tenemos que encontrar el equilibrio adecuado", declaró.

A su vez, la misión de China ante la Unión Europea acusó este martes a la OTAN de exagerar la amenaza que supone el país asiático y "crear confrontación". En una declaración, desde la representación diplomática se instó a la organización a ver el desarrollo de China "racionalmente" y a dejar de "exagerar varias formas de la teoría de la amenaza de China", así como a "no usar los intereses legítimos y los derechos legales de Pekín como excusa para manipular la política de grupo".


"La OTAN no puede existir sin 'un gran enemigo'"​

Según el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Alexander Grushko, citado por la agencia TASS, "la cumbre de Bruselas volvió a revelar el código genético de la OTAN: la Alianza no puede existir sin un 'gran enemigo', [...] el desafío chino fue añadido a la amenaza rusa".

En un editorial dedicado al tema, el periódico chino Global Times hizo hincapié en que la reunión de Bruselas manifestó el deseo de EE.UU. de explotar políticamente a los países de la OTAN. "Esta cumbre de la OTAN puede verse como un punto clave en la actitud de EE.UU. y Europa hacia China en el ámbito de la seguridad. Washington levantó el telón de una campaña de movilización política para utilizar el bloque de la OTAN a fin de llevar a cabo una competencia estratégica con China", sostuvieron.

Desde el punto de vista de Lucie Robequain del periódico francés Les Echos, la UE no debería unirse a la línea de confrontación con China, propulsada por EE.UU. En términos económicos, energéticos y políticos, Europa depende demasiado de China y Rusia y, por lo tanto, no puede obedecer ciegamente a los intereses estadounidenses, especialmente desde que el año pasado Pekín sustituyó a EE.UU. como principal socio comercial de la UE.

Como señaló Matthias Nass, experto en la política de los países asiáticos, en un artículo para Die Zeit, la conclusión más importante de la cumbre es que el tema de la seguridad ahora abarca no solo al Atlántico Norte: "La OTAN está mirando a la región del Indo-Pacífico y tiene la intención de profundizar la cooperación con sus socios allí: Japón, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda".

De acuerdo a Jorge Tamames, quien escribió una columna para el periódico español Público, la alianza occidental contra China es un anacronismo. "La estrategia [de Biden] parece más inteligente que las de sus predecesores. Pero la preocupación de fondo es idéntica: retener la primacía global de EE.UU. en un mundo que ha dejado de ser unipolar. Es un enfoque caduco, que choca con los intentos de la Unión Europea por desarrollar una acción exterior independiente".
 
El Pentágono está considerando establecer en el Pacífico un grupo permanente de buques de guerra para contrarrestar el creciente poderío militar de China en la región, informó este martes Politico con referencia a sus fuentes en el Departamento de Defensa de EE.UU. familiarizadas con el asunto.

Al mismo tiempo, el plan implicaría la creación de una operación militar para el Pacífico que permitiría al secretario de Defensa asignar recursos adicionales al 'problema de China'.

Un grupo de portaaviones de EE.UU. liderado por el USS Ronald Reagan ingresa al mar de la China Meridional

Un grupo de portaaviones de EE.UU. liderado por el USS Ronald Reagan ingresa al mar de la China Meridional
Estas ideas fueron propuestas por el grupo de trabajo especial para China, comisionado por Joe Biden en marzo del 2021 para evaluar las políticas y los procesos en el ámbito de la defensa relacionados con el país asiático. El grupo, dirigido por Ely Ratner, responsable de la política del Pentágono para el Indo-Pacífico, presentó recientemente las recomendaciones correspondientes al secretario de Defensa, Lloyd Austin.

Un funcionario de Defensa, que habló con Politico bajo condición de anonimato, enfatizó que ninguna de las iniciativas del grupo de trabajo de China está finalizada. "Estamos analizando una serie de propuestas en el Indo-Pacífico, [...] para sincronizar y coordinar mejor nuestras actividades, [...] pero hay muchas cosas y detalles aún por ultimar".

En caso de ser desplegada, esta escuadra sería similar a las Fuerzas Navales Permanentes del Atlántico, formación militar creada durante la Guerra Fría. Era una fuerza de reacción inmediata que podía responder rápidamente a una crisis, pero pasaba la mayor parte del tiempo navegando por la región, participando en ejercicios programados y haciendo escalas en puertos. Por lo general, estaba compuesta de entre seis y diez barcos (destructores, fragatas y auxiliares) de varias naciones de la OTAN.

Jerry Hendrix, analista de la consultora Telemus Group, sostuvo que la propuesta tendría un carácter disuasorio, porque "manifestará unidad de esfuerzo para contrarrestar las excesivas amenazas chinas al concepto de un mar libre y libre comercio con sus grandes reclamos marítimos territoriales".

Además, el especialista estima que la nueva formación militar en el Pacífico podría incluir a otros miembros de la OTAN, como el Reino Unido o Francia, que están aumentando su presencia naval en la región, así como Japón y Australia. No obstante, los funcionarios del Departamento de Defensa enfatizaron que aún no está claro si el grupo involucraría solo buques estadounidenses o incluiría también los de otras naciones.

La noticia llega unos días después de la cumbre de la OTAN en Bruselas, marcada por la alineación de los países europeos a la postura de confrontación de Washington hacia Pekín. En el comunicado final de la reunión el país asiático fue denominado por primera vez como "un desafío sistémico" para la seguridad de la Alianza y el orden internacional.

 

Sebastian

Colaborador
No encuentro confirmada esta noticia sobre la deserción a Estados Unidos del viceministro de Seguridad del Estado, Dong Jingwei.
 


El director de la CIA, William Burns, ha revelado que EE.UU. está examinando la posibilidad de desplegar especialistas chinos para competir de manera más efectiva con Pekín, calificando al país asiático como "el mayor desafío geopolítico" del siglo para Washington.

En una entrevista con NPR este jueves, el jefe de la agencia recordó que, durante la Guerra Fría, desplegaron "con razón" especialistas soviéticos tanto en el Departamento de Estado como en la CIA para asegurarse de que pudieran "competir de manera efectiva" con la URSS.

En este sentido, una de las posibilidades que se están explorando ahora mismo es "desplegar especialistas de China, ya sean oficiales de operaciones, analistas, tecnólogos también, para hacernos más efectivos en esa competencia, en esa rivalidad en el campo también", resaltó Burns.

"El mayor desafío geopolítico del siglo XXI"​


El alto cargo admitió que EE.UU. ya no es el "único niño grande" en el bloque geopolítico, especialmente con el ascenso de Pekín. De hecho, se refirió a China como "el mayor desafío geopolítico al que se enfrenta EE.UU. en el siglo XXI", destacando el sector tecnológico como "el escenario principal de competencia y rivalidad" entre los dos países.

En particular, el funcionario hizo hincapié en "la vigilancia técnica ubicua" de China, que cuenta con ciudades inteligentes y con capacidades "muy avanzadas" de su servicio de inteligencia que hacen "mucho más complicado el espionaje en el extranjero". En respuesta, la CIA y toda la comunidad de inteligencia de EE.UU. también tienen que "transformar" su oficio, subrayó.
 


SEGÚN LA UNIVERSIDAD DE STANFORD

China se come a EEUU en la mayor batalla tecnológica de la historia​

China ha adelantado a Estados Unidos en la carrera de la inteligencia artificial, la clave para la aceleración del desarrollo tecnológico en todas las industrias y disciplinas científicas​


Por
Jesús Díaz
12/08/2021 - 05:00 Actualizado: 12/08/2021 - 19:47
China ha superado a Estados Unidos y se coloca como primera potencia mundial del desarrollo del principal motor tecnológico del planeta, la clave del desarrollo industrial y social en este siglo y los que vienen: la inteligencia artificial. Y no lo dice el gobierno chino sino la Universidad de Stanford.

El informe de la prestigiosa institución norteamericana — una de las catedrales de la inteligencia artificial del planeta — dice que, en 2020, el 20,7% del total de citas académicas sobre inteligencia artificial fueron sobre investigaciones chinas contra el 19,8% de científicos estadounidenses.


La diferencia se incrementa observando el número de estudios publicados en diarios científicos, como apunta el diario económico japonés Nikkei: el centro de estudios británico Clarivate ha contabilizado que China ha publicado 240.000 trabajos de investigación desde 2012 hasta ahora. Estados Unidos, 150.000. Y no son morralla, aseguran. Según esa organización, los desarrollos chinos son excelentes en multitud de campos, incluyendo el reconocimiento y la generación de imágenes.

No hay que olvidar que China lleva años enfocándose en el uso de esta tecnología para aplicaciones prácticas, como la vasta red de cámaras de alta definición para el seguimiento de personas por todas sus ciudades. Según apuntan los expertos en la materia, una de las claves del vertiginoso avance chino está en la cantidad de dispositivos conectados que tiene este país asiático. Esto genera una cantidad increíble de datos que son usados para entrenar a sus inteligencias artificiales.


Sólo ante el peligro​

El dominio chino se está empezando a acrecentar, hasta el punto de que el gobierno de los Estados Unidos ha decidido inyectar 1.500 millones en un sector que es estratégico para el desarrollo tecnológico mundial. Pero, como apunta el ex-CEO de Google Eric Schmidt, la situación es tan mala que EE.UU. necesita a Japón y Corea del Sur para poder contrarrestar el poder de la IA china.


China, mientras tanto, tiene un plan nacional de desarrollo de la inteligencia artificial en marcha desde 2017, inyectando miles de millones en decenas de universidades punteras que van desde la Tsinghua University hasta la Shanghai Jiao Tong University y la Academia de la IA de Pekín.

En total, cuentan con 2.000 investigadores a la cabeza del sector a nivel mundial. Y eso sin contar a los investigadores chinos que trabajan ahora en universidades norteamericanas. Algo que quedó patente en la conferencia internacional de IA de 2019, que contó con un 29% de presentaciones chinas por 20% de las norteamericanas.


Quien domine la IA dominará el mundo​

La inteligencia artificial no sólo existe para identificar personas, crear asistentes personales o hacer ‘deep fakes’, sino que está siendo la clave para el desarrollo rápido en absolutamente todas las disciplinas científicas e industriales, desde la creación de medicinas, vacunas y proteínas hasta nuevos motores espaciales, creación de baterías o la fabricación de nuevos materiales desconocidos.

Por no hablar de sistemas militares, como drones autónomos y misiles capaces de maniobrar por su cuenta para evitar defensas enemigas. No hay ningún límite en su aplicación y esto es sólo el principio.


Sin duda alguna — como dice Schmidt — quien domine la inteligencia artificial, dominará el mundo. China ya está a la cabeza y se está escapando del pelotón.
 
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