Búsqueda de ARA San Juan - discusiones paralelas

fepago

Colaborador
Una filmación muestra cómo pudo haber sido el estallido en las baterías del sumergible que provocó que la nave quede a la deriva con 44 tripulantes a bordo.


http://www.diario21.tv/notix2/noticia/92664_video-asiacute-habriacutea-explotado-el-ara-san-juan.htm
la filamcion es de un yanquie que investiga las historias de cortos en submarinos de la segunda guerra, los interruptores de esa epoca no son como los actuales, que tienen cortaarco y arrestallamas. esto muestra cortos en interruptores.

aca el film original:

 

tanoarg

Miembro del Staff
Moderador
El contacto del Cabo de Hornos a -915m. Termina su participación en la búsqueda del ARA San Juan.


gracias chile!!!...muchisimas gracias!!!!
 

nico22

Colaborador
https://www.clarin.com/sociedad/sub...-cementerio-barcos-olvidados_0_BJoJvhYWM.html

Misterio en el mar

Submarino ARA San Juan: la zona de búsqueda, un "cementerio" de barcos olvidados
Para los expertos está relacionado con la pesca ilegal.


La corbeta Robinson, vista desde Comodoro Rivadavia




En los 25 días que lleva desaparecido el ARA San Juan, los buques que participan del inmenso y costoso operativo internacional de búsqueda lograron detectar siete "indicios" en el fondo del océano. Estas pistas, que en un principio generaron ilusiones de poder hallar al submarino y a sus 44 tripulantes, por ahora se quedaron en eso: ilusiones.
Ya fueron descartados cinco de ellos, cuatro de los cuales eran pesqueros hundidos. No sería sorpresa que los dos restantes también lo sean. Es que el área rastrillada, un extenso sector de 40 kilómetros cuadrados con profundidades de entre 200 y 1000 metros, es un verdadero cementerio de barcos olvidados que expone el problema de la pesca ilegal en el Mar Argentino.
"Las imágenes no se corresponden con el submarino San Juan. Tenemos un video (de un objeto) a 940 metros, el cual según los rusos es una formación rocosa con incrustaciones", dijo ayer por la mañana Enrique Balbi, vocero de la Armada, en referencia a uno de los dos indicios que investigó en las últimas horas el sumergible Panther Plus. El otro, según aclararon desde el Ministerio de Defensa de la Federación Rusa, se correspondía con un barco de arrastre hundido a 833 metros.
Estos dos hallazgos se sumaron a otros tres que ya habían sido verificados días atrás. El 1 de diciembre encontraron a 200 metros un pesquero chino hundido en 2000 por su propia dotación y a 170 metros un buque potero dedicado a la pesca de calamar, probablemente ilegal por no figurar en ningún registro. El contacto a 477 con un "objeto cilíndrico" de unos 62 metros de largo detectado por el buque de investigación argentino Angelescu había encendido las alarmas por tener medidas muy similares al ARA San Juan, pero finalmente se determinó que la hélice no se correspondía con la del submarino. Era otro pesquero.
"No sorprende que aparezcan tantos barcos hundidos. En la zona del Mar Argentino que va de Puerto Madryn hacia el sur está uno de los caladeros (zona marítima donde los pescadores tiran sus redes por la abundancia de peces) más grandes del mundo", le explicó a Clarín Fernando Morales, perito naval y vicepresidente de la Liga Naval Argentina.
Mirá tambiénSubmarino ARA San Juan: Rusia dio detalles de lo que encontró en el fondo del mar

De acuerdo a los estándares fijados por la Organización Marítima Internacional, estos barcos son libres de hacer lo que quieran por fuera de las 200 millas. El problema, aclara Morales, es que "los pesqueros siguen a los cardúmenes" y los peces se van moviendo dentro y fuera de la zona económica exclusiva argentina por las corrientes marinas. Por eso allí, en el límite que marca esa línea imaginaria de 200 millas, una flota de pesqueros ilegales espera el momento justo para cruzar ilegalmente. En total, se estima que son más de 450 embarcaciones las que cada año realizan estas maniobras, lo que les permiten llevarse más de medio millón de toneladas de pescados y moluscos. La gran mayoría es de origen chino, aunque también hay japoneses, taiwaneses y españoles.
Mirá tambiénCómo es el sumergible ruso que podría llegar hasta el submarino
"Cuando ven que se aproxima una flota de la Armada o de Prefectura, vuelven a escapar del otro lado. Así operan hace décadas", agrega Morales. Si bien los buques son rápidos y mantienen un aceitado sistema de comunicación entre sí para alertarse unos a otros ante la posibilidad de que los atrapen, algunos no logran huir a tiempo. Es ahí cuando, antes de entregarse, perder la cargar y tener que pagar costosas multas, prefieren hundir la embarcación: "Siempre se mueven en flota. Después de abrir la válvula tienen dos horas para pasar a otro barco. No hay riesgo para la tripulación. Salvan la carga y después muchos hasta cobran el seguro. La mayoría de estos barcos no cumplen con las normas de seguridad, por lo que Prefectura tampoco les dejaría volver a salir a navegar. No les queda otra".

La corbeta Robinson, una noche en puerto. FOTO JUANO TESONE
Aunque parte de los hundimientos en el Atlántico Sur tengan que ver con esta metodología, muchas otras embarcaciones terminan en el fondo por no poder soportar las inclemencias del océano. Según Horacio Tobías, ex jefe de Inmersión del ARA San Juan, el Mar Argentino "es muy bravo": "Hay olas muy altas y muchos días seguidos de tormenta. Esto diezma a la tripulación. Pero si el barco se queda sin propulsión, el oleaje lo puede dar vuelta".
Justamente, en su viaje de Ushuaia a Mar del Plata, el ARA San Juan estaba patrullando la zona económica exclusiva argentina. "De detectar algún barco ilegal, se lo filma y se le toman imágenes con el periscopio. Son como fotomultas. A veces se llaman aviones o barcos para capturarlo", indica Tobías, mientras aguarda la verificación de los dos indicios restantes.
 
No logro entender de dónde saca Bruce Rule los 40 milisegundos de la implosión. Si se trata de una conversión de energía potential en cinética, la implosión es básicamente la caída libre de una columna de agua que comprime a un pistón. Si tomo la dimensión menor del submarino del orden de 2 a 3 metros, la implosión no puede durar menos de .5 o .6 segundos. Por lo menos un segundo tiene que durar. No es fundamental la diferencia, pero me parece importante. Estoy tratando de conseguir la info de contacto de Rule, pero si alguien tiene clarificación la agradecería.
 

DSV

Colaborador
Un informe revela que el submarino colapsó en menos de un segundo
Un analista de la inteligencia naval de EE.UU. sostiene que los 44 tripulantes murieron en forma instantánea

DOMINGO 10 DE DICIEMBRE DE 2017
Mariano De Vedia

En su última comunicación, el jefe de operaciones del ARA San Juan transmitió la intención de "ir a 40 metros de profundidad para entrar al tanque de baterías, evaluar la avería y ampliar información". Según pudo saber la nacion, muchos marinos comienzan a preguntarse si esa decisión de revisar la avería constituyó el paso previo a una explosión.



Respuestas oficiales no hay, pero ese interrogante podría corresponderse con las conclusiones de un informe de la Oficina de Inteligencia Naval de los Estados Unidos, que analizó la señal acústica detectada el 15 de noviembre por la Organización del Tratado de Prohibición de Ensayos Nucleares y determinó que el submarino sufrió un colapso letal, que liberó una energía similar a una explosión de 5700 kilos de TNT, a 380 metros de profundidad.

El informe, al que tuvo acceso la nacion, fue elaborado por el analista acústico Bruce Rule y arriesga la tesis de que los 44 tripulantes murieron en forma instantánea, sin saber probablemente lo que pasaba.

El informe del especialista de la Oficina de Inteligencia Naval de EE.UU. -país que aportó varias unidades navales y aéreas para el operativo de búsqueda y rescate- concluye que el ARA San Juan se hundió verticalmente, a una velocidad de 10 a 13 nudos (18 a 24 kilómetros por hora).


Volverán a buscar el ARA San Juan en la zona de la explosión

"Aunque la tripulación pudo haber sabido que el colapso era inminente, nunca supieron qué estaba ocurriendo. No se ahogaron ni experimentaron dolor. La muerte fue instantánea", indica, lapidario, el autor del informe,

Su conclusión coincide con la polémica apreciación que la semana pasada formuló el ministro de Defensa, Oscar Aguad, al admitir en televisión que los tripulantes están muertos.

Se estima que el informe de Rule llegó a manos de la Armada, aunque no se le dio crédito oficial.

LA NACION consultó a la Fuerza Naval acerca del contenido del informe, pero no obtuvo respuesta.

Rule es analista acústico principal de la Oficina de Inteligencia Naval de EE.UU. Al analizar los datos del "evento anómalo, singular, corto, violento y no nuclear consistente con un explosión" -como lo definió en su momento el vocero de la Armada, capitán Enrique Balbi-, el informe precisa que la señal acústica fue producida por el colapso del casco de presión del ARA San Juan, a una profundidad de 380 metros.

El investigador llega a la conclusión de que el casco fue "completamente destruido en aproximadamente 40 milisegundos", una fracción de tiempo que representa "la mitad del tiempo mínimo requerido para el reconocimiento cognitivo de un evento".

Explica, además, que "la energía liberada por el colapso fue producida por la conversión casi inmediata de la presión del mar en energía cinética", en un movimiento del pistón de agua que ingresó al casco a una velocidad aproximada de 1800 millas por hora (2900 kilómetros por hora).


La Armada reveló imágenes de la búsqueda a más de 800 metros de profundidad

El informe de Rule no tiene en cuenta el estado en que se encontraba el submarino ni la reparación de media vida a la que fue sometida entre 2009 y 2014, durante el gobierno de Cristina Kirchner. Se limita, básicamente, a interpretar los datos que registraron la explosión. Y estima que el impacto que pudo haber sufrido al chocar con el del mar "no habría producido un evento acústico detectable a larga distancia".

Al señalar que antes de la explosión el submarino ARA San Juan pretendía sumergirse y continuar su tránsito hacia el norte, rumbo a Mar del Plata, el casco colapsó a las 10.58 del 15 de noviembre, tres horas y media después de su último contacto.

La entrada de agua
El comandante del submarino, capitán Pedro Martín Fernández, había advertido en un mensaje anterior por radiofrecuencia, a las 6 de la mañana de la fatídica jornada del 15 de noviembre, que "la entrada de agua de mar por el sistema de ventilación al tanque de batería N° 3 provocó un cortocircuito y el comienzo de un incendio en el balcón de las barras de la batería".

Añadía el comandante de la nave, según los mensajes difundidos el miércoles pasado por la Armada, que "las baterías de proa están fuera de servicio, en el momento de la inmersión" y que el submarino se encontraba "propulsando con un circuito dividido".

Fuentes navales consultadas por LA NACION niegan absolutamente la posibilidad de que el ARA San Juan haya sido víctima de un ataque.

"Hoy todo lo que se mueve en el mar está totalmente registrado. Nada se mueve en el mar sin que las potencias mundiales lo sepan. Si hubiera habido un inconveniente con algún submarino británico, Rusia o China habrían salido inmediatamente a denunciarlo", precisó un oficial retirado.

Lo concreto, sin embargo, es que a pesar de que todo lo que pasa en el mar está registrado, el submarino ARA San Juan no aparece.

Más allá del trágico instante que les tocó padecer a los 44 tripulantes, la comunidad marina mantiene el espíritu de cuerpo y apoyan en general el criterio de la Armada de mantener la expectativa de los familiares hasta que no haya constancias de un desenlace fatal.

Antecedentes
La historia del siglo XX reconoce varios casos de submarinos que fueron víctimas de tragedias. La mayoría de las veces, sin sobrevivientes.

El informe de Rule cita el hundimiento del USS Scorpion, de la Armada norteamericana, que se hundió lentamente durante 22 minutos cerca de las islas Azores, hasta que colapsó, a 4000 metros de profundidad, en mayo de 1968, en medio de la Guerra Fría.

En un caso similar al ARA San Juan, se presume que en el Scorpion ingresó agua salada a las baterías, lo que produjo una brusca emisión de gas de hidrógeno que mató a la tripulación. Quedó flotando la hipótesis de si la entrada de agua se produjo por un impacto de torpedos de un submarino soviético.

En referencia al ingreso de agua en el compartimento de baterías, el propio Rule sostiene que "existe la posibilidad de que una secuencia similar de eventos ocurriera a bordo del submarino San Juan".

Cinco años antes se había hundido el submarino nuclear Thresher, a 2300 metros de profundidad. Otra pérdida militar para Estados Unidos durante la pulseada con la entonces Unión Soviética. El submarino se había lanzado a una prueba de inmersión para precisar hasta qué profundidad podía llegar y, en medio de esa experiencia, colapsó y se hundió.

Más reciente está el recuerdo del submarino ruso Kursk, que en agosto de 2000 se hundió con 118 tripulantes, luego de sufrir dos explosiones sucesivas en la sala de torpedos. Se estima que la última era equiparable a un terremoto de poco más de 4,2 grados en la escala de Richter.

Localizada al día siguiente, hubo que esperar otros diez días para alcanzar la escotilla del submarino. El operativo rescate se extendió durante más de un año, hasta que el 8 de octubre de 2001 se rescató al Kursk desde el fondo del mar. Tuvo un costo de US$ 65 millones.

http://www.lanacion.com.ar/2090019-un-informe-revela-que-el-submarino-colapso-en-menos-de-un-segundo
 

Derruido

Colaborador
Un informe revela que el submarino colapsó en menos de un segundo
Un analista de la inteligencia naval de EE.UU. sostiene que los 44 tripulantes murieron en forma instantánea
En su última comunicación, el jefe de operaciones del ARA San Juan transmitió la intención de "ir a 40 metros de profundidad para entrar al tanque de baterías, evaluar la avería y ampliar información". Según pudo saber la nacion, muchos marinos comienzan a preguntarse si esa decisión de revisar la avería constituyó el paso previo a una explosión.
Respuestas oficiales no hay, pero ese interrogante podría corresponderse con las conclusiones de un informe de la Oficina de Inteligencia Naval de los Estados Unidos, que analizó la señal acústica detectada el 15 de noviembre por la Organización del Tratado de Prohibición de Ensayos Nucleares y determinó que el submarino sufrió un colapso letal, que liberó una energía similar a una explosión de 5700 kilos de TNT, a 380 metros de profundidad.
El informe, al que tuvo acceso la nacion, fue elaborado por el analista acústico Bruce Rule y arriesga la tesis de que los 44 tripulantes murieron en forma instantánea, sin saber probablemente lo que pasaba.
El informe del especialista de la Oficina de Inteligencia Naval de EE.UU. -país que aportó varias unidades navales y aéreas para el operativo de búsqueda y rescate- concluye que el ARA San Juan se hundió verticalmente, a una velocidad de 10 a 13 nudos (18 a 24 kilómetros por hora).
http://www.lanacion.com.ar/2090019-un-informe-revela-que-el-submarino-colapso-en-menos-de-un-segundo<iframe src="http://www.lanacion.com.ar/herramientas/modal-video/-multimedio_id=114431" width="100%" height="650"/>
Volverán a buscar el ARA San Juan en la zona de la explosión

"Aunque la tripulación pudo haber sabido que el colapso era inminente, nunca supieron qué estaba ocurriendo. No se ahogaron ni experimentaron dolor. La muerte fue instantánea", indica, lapidario, el autor del informe,
Su conclusión coincide con la polémica apreciación que la semana pasada formuló el ministro de Defensa, Oscar Aguad, al admitir en televisión que los tripulantes están muertos.
Se estima que el informe de Rule llegó a manos de la Armada, aunque no se le dio crédito oficial.
LA NACION consultó a la Fuerza Naval acerca del contenido del informe, pero no obtuvo respuesta.
Rule es analista acústico principal de la Oficina de Inteligencia Naval de EE.UU. Al analizar los datos del "evento anómalo, singular, corto, violento y no nuclear consistente con un explosión" -como lo definió en su momento el vocero de la Armada, capitán Enrique Balbi-, el informe precisa que la señal acústica fue producida por el colapso del casco de presión del ARA San Juan, a una profundidad de 380 metros.
El investigador llega a la conclusión de que el casco fue "completamente destruido en aproximadamente 40 milisegundos", una fracción de tiempo que representa "la mitad del tiempo mínimo requerido para el reconocimiento cognitivo de un evento".
Explica, además, que "la energía liberada por el colapso fue producida por la conversión casi inmediata de la presión del mar en energía cinética", en un movimiento del pistón de agua que ingresó al casco a una velocidad aproximada de 1800 millas por hora (2900 kilómetros por hora).
http://www.lanacion.com.ar/2090019-un-informe-revela-que-el-submarino-colapso-en-menos-de-un-segundo<iframe src="http://www.lanacion.com.ar/herramientas/modal-video/-multimedio_id=114461" width="100%" height="650"/>
La Armada reveló imágenes de la búsqueda a más de 800 metros de profundidad

El informe de Rule no tiene en cuenta el estado en que se encontraba el submarino ni la reparación de media vida a la que fue sometida entre 2009 y 2014, durante el gobierno de Cristina Kirchner. Se limita, básicamente, a interpretar los datos que registraron la explosión. Y estima que el impacto que pudo haber sufrido al chocar con el del mar "no habría producido un evento acústico detectable a larga distancia".
Al señalar que antes de la explosión el submarino ARA San Juan pretendía sumergirse y continuar su tránsito hacia el norte, rumbo a Mar del Plata, el casco colapsó a las 10.58 del 15 de noviembre, tres horas y media después de su último contacto.
La entrada de agua
El comandante del submarino, capitán Pedro Martín Fernández, había advertido en un mensaje anterior por radiofrecuencia, a las 6 de la mañana de la fatídica jornada del 15 de noviembre, que "la entrada de agua de mar por el sistema de ventilación al tanque de batería N° 3 provocó un cortocircuito y el comienzo de un incendio en el balcón de las barras de la batería".
Añadía el comandante de la nave, según los mensajes difundidos el miércoles pasado por la Armada, que "las baterías de proa están fuera de servicio, en el momento de la inmersión" y que el submarino se encontraba "propulsando con un circuito dividido".
Fuentes navales consultadas por LA NACION niegan absolutamente la posibilidad de que el ARA San Juan haya sido víctima de un ataque.
"Hoy todo lo que se mueve en el mar está totalmente registrado. Nada se mueve en el mar sin que las potencias mundiales lo sepan. Si hubiera habido un inconveniente con algún submarino británico, Rusia o China habrían salido inmediatamente a denunciarlo", precisó un oficial retirado.
Lo concreto, sin embargo, es que a pesar de que todo lo que pasa en el mar está registrado, el submarino ARA San Juan no aparece.
Más allá del trágico instante que les tocó padecer a los 44 tripulantes, la comunidad marina mantiene el espíritu de cuerpo y apoyan en general el criterio de la Armada de mantener la expectativa de los familiares hasta que no haya constancias de un desenlace fatal.
Antecedentes
La historia del siglo XX reconoce varios casos de submarinos que fueron víctimas de tragedias. La mayoría de las veces, sin sobrevivientes.
El informe de Rule cita el hundimiento del USS Scorpion, de la Armada norteamericana, que se hundió lentamente durante 22 minutos cerca de las islas Azores, hasta que colapsó, a 4000 metros de profundidad, en mayo de 1968, en medio de la Guerra Fría.
En un caso similar al ARA San Juan, se presume que en el Scorpion ingresó agua salada a las baterías, lo que produjo una brusca emisión de gas de hidrógeno que mató a la tripulación. Quedó flotando la hipótesis de si la entrada de agua se produjo por un impacto de torpedos de un submarino soviético.
En referencia al ingreso de agua en el compartimento de baterías, el propio Rule sostiene que "existe la posibilidad de que una secuencia similar de eventos ocurriera a bordo del submarino San Juan".
Cinco años antes se había hundido el submarino nuclear Thresher, a 2300 metros de profundidad. Otra pérdida militar para Estados Unidos durante la pulseada con la entonces Unión Soviética. El submarino se había lanzado a una prueba de inmersión para precisar hasta qué profundidad podía llegar y, en medio de esa experiencia, colapsó y se hundió.
Más reciente está el recuerdo del submarino ruso Kursk, que en agosto de 2000 se hundió con 118 tripulantes, luego de sufrir dos explosiones sucesivas en la sala de torpedos. Se estima que la última era equiparable a un terremoto de poco más de 4,2 grados en la escala de Richter.
Localizada al día siguiente, hubo que esperar otros diez días para alcanzar la escotilla del submarino. El operativo rescate se extendió durante más de un año, hasta que el 8 de octubre de 2001 se rescató al Kursk desde el fondo del mar. Tuvo un costo de US$ 65 millones.
 

Daniel1962

Moderador
Miembro del Staff
Moderador
Un informe revela que el submarino colapsó en menos de un segundo
Un analista de la inteligencia naval de EE.UU. sostiene que los 44 tripulantes murieron en forma instantánea
En su última comunicación, el jefe de operaciones del ARA San Juan transmitió la intención de "ir a 40 metros de profundidad para entrar al tanque de baterías, evaluar la avería y ampliar información". Según pudo saber la nacion, muchos marinos comienzan a preguntarse si esa decisión de revisar la avería constituyó el paso previo a una explosión.
Respuestas oficiales no hay, pero ese interrogante podría corresponderse con las conclusiones de un informe de la Oficina de Inteligencia Naval de los Estados Unidos, que analizó la señal acústica detectada el 15 de noviembre por la Organización del Tratado de Prohibición de Ensayos Nucleares y determinó que el submarino sufrió un colapso letal, que liberó una energía similar a una explosión de 5700 kilos de TNT, a 380 metros de profundidad.
El informe, al que tuvo acceso la nacion, fue elaborado por el analista acústico Bruce Rule y arriesga la tesis de que los 44 tripulantes murieron en forma instantánea, sin saber probablemente lo que pasaba.
El informe del especialista de la Oficina de Inteligencia Naval de EE.UU. -país que aportó varias unidades navales y aéreas para el operativo de búsqueda y rescate- concluye que el ARA San Juan se hundió verticalmente, a una velocidad de 10 a 13 nudos (18 a 24 kilómetros por hora).
http://www.lanacion.com.ar/2090019-un-informe-revela-que-el-submarino-colapso-en-menos-de-un-segundo<iframe src="http://www.lanacion.com.ar/herramientas/modal-video/-multimedio_id=114431" width="100%" height="650"/>
Volverán a buscar el ARA San Juan en la zona de la explosión

"Aunque la tripulación pudo haber sabido que el colapso era inminente, nunca supieron qué estaba ocurriendo. No se ahogaron ni experimentaron dolor. La muerte fue instantánea", indica, lapidario, el autor del informe,
Su conclusión coincide con la polémica apreciación que la semana pasada formuló el ministro de Defensa, Oscar Aguad, al admitir en televisión que los tripulantes están muertos.
Se estima que el informe de Rule llegó a manos de la Armada, aunque no se le dio crédito oficial.
LA NACION consultó a la Fuerza Naval acerca del contenido del informe, pero no obtuvo respuesta.
Rule es analista acústico principal de la Oficina de Inteligencia Naval de EE.UU. Al analizar los datos del "evento anómalo, singular, corto, violento y no nuclear consistente con un explosión" -como lo definió en su momento el vocero de la Armada, capitán Enrique Balbi-, el informe precisa que la señal acústica fue producida por el colapso del casco de presión del ARA San Juan, a una profundidad de 380 metros.
El investigador llega a la conclusión de que el casco fue "completamente destruido en aproximadamente 40 milisegundos", una fracción de tiempo que representa "la mitad del tiempo mínimo requerido para el reconocimiento cognitivo de un evento".
Explica, además, que "la energía liberada por el colapso fue producida por la conversión casi inmediata de la presión del mar en energía cinética", en un movimiento del pistón de agua que ingresó al casco a una velocidad aproximada de 1800 millas por hora (2900 kilómetros por hora).
http://www.lanacion.com.ar/2090019-un-informe-revela-que-el-submarino-colapso-en-menos-de-un-segundo<iframe src="http://www.lanacion.com.ar/herramientas/modal-video/-multimedio_id=114461" width="100%" height="650"/>
La Armada reveló imágenes de la búsqueda a más de 800 metros de profundidad

El informe de Rule no tiene en cuenta el estado en que se encontraba el submarino ni la reparación de media vida a la que fue sometida entre 2009 y 2014, durante el gobierno de Cristina Kirchner. Se limita, básicamente, a interpretar los datos que registraron la explosión. Y estima que el impacto que pudo haber sufrido al chocar con el del mar "no habría producido un evento acústico detectable a larga distancia".
Al señalar que antes de la explosión el submarino ARA San Juan pretendía sumergirse y continuar su tránsito hacia el norte, rumbo a Mar del Plata, el casco colapsó a las 10.58 del 15 de noviembre, tres horas y media después de su último contacto.
La entrada de agua
El comandante del submarino, capitán Pedro Martín Fernández, había advertido en un mensaje anterior por radiofrecuencia, a las 6 de la mañana de la fatídica jornada del 15 de noviembre, que "la entrada de agua de mar por el sistema de ventilación al tanque de batería N° 3 provocó un cortocircuito y el comienzo de un incendio en el balcón de las barras de la batería".
Añadía el comandante de la nave, según los mensajes difundidos el miércoles pasado por la Armada, que "las baterías de proa están fuera de servicio, en el momento de la inmersión" y que el submarino se encontraba "propulsando con un circuito dividido".
Fuentes navales consultadas por LA NACION niegan absolutamente la posibilidad de que el ARA San Juan haya sido víctima de un ataque.
"Hoy todo lo que se mueve en el mar está totalmente registrado. Nada se mueve en el mar sin que las potencias mundiales lo sepan. Si hubiera habido un inconveniente con algún submarino británico, Rusia o China habrían salido inmediatamente a denunciarlo", precisó un oficial retirado.
Lo concreto, sin embargo, es que a pesar de que todo lo que pasa en el mar está registrado, el submarino ARA San Juan no aparece.
Más allá del trágico instante que les tocó padecer a los 44 tripulantes, la comunidad marina mantiene el espíritu de cuerpo y apoyan en general el criterio de la Armada de mantener la expectativa de los familiares hasta que no haya constancias de un desenlace fatal.
Antecedentes
La historia del siglo XX reconoce varios casos de submarinos que fueron víctimas de tragedias. La mayoría de las veces, sin sobrevivientes.
El informe de Rule cita el hundimiento del USS Scorpion, de la Armada norteamericana, que se hundió lentamente durante 22 minutos cerca de las islas Azores, hasta que colapsó, a 4000 metros de profundidad, en mayo de 1968, en medio de la Guerra Fría.
En un caso similar al ARA San Juan, se presume que en el Scorpion ingresó agua salada a las baterías, lo que produjo una brusca emisión de gas de hidrógeno que mató a la tripulación. Quedó flotando la hipótesis de si la entrada de agua se produjo por un impacto de torpedos de un submarino soviético.
En referencia al ingreso de agua en el compartimento de baterías, el propio Rule sostiene que "existe la posibilidad de que una secuencia similar de eventos ocurriera a bordo del submarino San Juan".
Cinco años antes se había hundido el submarino nuclear Thresher, a 2300 metros de profundidad. Otra pérdida militar para Estados Unidos durante la pulseada con la entonces Unión Soviética. El submarino se había lanzado a una prueba de inmersión para precisar hasta qué profundidad podía llegar y, en medio de esa experiencia, colapsó y se hundió.
Más reciente está el recuerdo del submarino ruso Kursk, que en agosto de 2000 se hundió con 118 tripulantes, luego de sufrir dos explosiones sucesivas en la sala de torpedos. Se estima que la última era equiparable a un terremoto de poco más de 4,2 grados en la escala de Richter.
Localizada al día siguiente, hubo que esperar otros diez días para alcanzar la escotilla del submarino. El operativo rescate se extendió durante más de un año, hasta que el 8 de octubre de 2001 se rescató al Kursk desde el fondo del mar. Tuvo un costo de US$ 65 millones.

De dónde sale la.información de una explosión a.380m?
O tiene otra.data que la que se hizo pública, o especula (en base a qué?) O directamente inventa.

Igual ese informe no se había discutido acá hace unos días atrás? ( y no había salido bien parado)

O ya estamos empezando a agarrar lo que venga "para ir cerrando"?
 
De dónde sale la.información de una explosión a.380m?
O tiene otra.data que la que se hizo pública, o especula (en base a qué?) O directamente inventa.

Igual ese informe no se había discutido acá hace unos días atrás? ( y no había salido bien parado)

O ya estamos empezando a agarrar lo que venga "para ir cerrando"?

Me parece es el mismo y creo la nota debe estar motivada por la falta de noticias del SUSJ. Incluso en los medios ya uno se percata el SUSJ empieza a ser un tema marginal.
 

DSV

Colaborador
El ingeniero naval Horacio Tettamanti analiza los posibles escenarios

Hipótesis sobre el final del San Juan

A 24 días de su desaparición, el destino del ARA San Juan sigue siendo un misterio. Si hubo o no una explosión, una implosión, cómo influyeron la presión del agua y las corrientes marinas son algunas de las variables que se están investigando.

Por Renata Padín


El submarino ARA San Juan está diseñado para no ser percibido bajo el agua.

Horacio Tettamanti, ingeniero naval y mecánico, ex presidente de la Asociación Bonaerense de la Industria Naval, de la cual también es cofundador, plantea las hipótesis sobre lo ocurrido con el ARA San Juan, cuando se cumplieron 24 días desde la última comunicación.

–¿Qué vamos a encontrar cuando encontremos al San Juan?

–Bueno, es imposible decirlo. Pero sí podemos plantear hipótesis.

–¿Por ejemplo?

–En principio, hay claramente sólo tres posibilidades. Que se lo encuentre en la superficie, en equilibrio entre aguas o sobre el lecho marino. Como es obvio...

–... descartamos la primera posibilidad, ya lo habrían encontrado. ¿En serio es posible que esté flotando entre dos aguas?

–Sí, es posible. Todo depende de qué haya pasado, si le entró agua, cuánta, si se produjo una explosión, una implosión...

–Vayamos viendo cada una.

–Si entró agua, pero el casco resistió, se hunde hasta cierto punto y luego queda flotando, sin control, a la deriva. Pero si entró mucha agua, se va poniendo más pesado y se va hundiendo.

–¿Cuánta presión resiste? ¿Qué pasa si no resiste?

–Eso depende. El agua ejerce una presión de un kilo por centímetro cuadrado cada diez metros. Por eso, si el submarino está sumergido, una muy pequeña fisura produce un colapso.

–Claro, porque se produce un “encontronazo” de presiones, para usar un término científico.

–Exactamente. Pasa lo opuesto que en un avión, en donde también es muy grande la diferencia de presión entre el adentro de la nave y lo que la rodea. En un avión, la cabina debe presurizarse, se le “mete” más presión que al exterior para que pueda haber personas adentro. En el submarino, la presión interna es muchísimo menor que la exterior, también para que pueda haber personas en el interior.

–Y por eso, entonces, si se produce una fisura o una rotura en la cabina de un avión todo sale despedido con fuerza...

–... y en el submarino entra con fuerza.

–¿La presión del agua puede partir el casco? ¿De qué está hecho?

–Un submarino tiene un doble casco. El casco exterior, el llamado casco resistente, tiene 32 milímetros de espesor y es de una aleación especial de acero de alta resistencia llamado HY 80. Y para dar una idea de la tremenda presión, si el casco se rompe y entra agua y el submarino se hunde a la suficiente profundidad, el acero se deforma como si fuera papel y el submarino se achata por completo.

–¿Y por qué causas podría romperse el casco? Descartando el impacto de un misil o algo similar, ya que se supone que no había ninguna actividad de ese tipo en la zona.

–No, claro, eso está descartado. Hay varias causas por las que el casco de resistente puede romperse. Una es, por supuesto, por un mal cálculo estructural. El submarino está mal construido y no soporta la presión. De nuevo, también lo descartamos porque el San Juan hizo muchos viajes y estaba todo bien.

–¿Y entonces?

–Y, por ejemplo, que por alguna causa se sumerja a una profundidad superior a la que soporta. Si se produce alguna avería y el submarino empieza a descender descontroladamente, llega un punto en el que colapsa por la presión del agua. Y también puede entrar agua en el depósito de baterías, lo que puede generar un corto que puede producir un arco voltaico. La potencia de un evento así puede romper el casco de un submarino.

–Sí, la mezcla de agua y baterías es sumamente peligrosa. También puede producirse una nube tóxica por acumulación de hidrógeno si el agua de mar afecta las baterías.

–Sí, el hidrógeno es muy volátil y explosivo.

–Y si pasa eso, en un submarino no se puede abrir las ventanas y ventilar todo.

–Y... no.

–Entonces, ¿qué se va a encontrar?

–Además de las hipótesis acerca de qué pudo haber pasado, también hay que ver en dónde se lo encuentra.

–¿Por qué?

–Si el submarino, por cualquier motivo que fuera, se hundió hasta el lecho marino, hay que ver a qué profundidad está.

–¿Porque es muy caro reflotarlo?

–Por empezar, los trabajos para reflotar objetos a grandes profundidades son carísimos. Exigen mucho tiempo y son peligrosos para la gente que los realiza. Los trabajos para reflotar el Kursk, el submarino ruso, que estaba a sólo 108 metros de profundidad, demandaron dos años y cientos de millones de dólares.

–¿Cuánto pesa el San Juan?

–Si está sin agua, porque no se inundó, tiene un peso de 1700 toneladas. Pero si se inundó, debe estar rondando las 2500, 3000 toneladas.

–Inimaginable el tamaño del brazo de una grúa que pueda levantar eso...

–Sí, claro. A profundidad, sólo se podrán sacar imágenes cuando lo encuentren. Porque los minisubmarinos o ROV tienen “brazos” para manipular algunos objetos y herramientas, pero tampoco resisten grandes pesos. Y es muy peligroso mandar gente a trabajar más allá de los 600 metros, que es la capacidad de los batiscafos de rescate.

–¿Y las imágenes...?

–Entre las imágenes y el Santa Cruz, que es gemelo del San Juan, se puede estudiar lo ocurrido, investigar las causas, para evitar que vuelva a ocurrir. Y además, para los familiares es importantísimo.

–Sí, una vez que lo encuentren, se cierra una etapa.

–Claro. Ahora es una especie de limbo, no pueden dejar de esperar. Es importante saber qué pasó y tener la posibilidad de, aunque sea, desde un barco tirar flores al mar.

–¿Y puede ser que no lo encuentren?

–...

https://www.pagina12.com.ar/81682-hipotesis-sobre-el-final-del-san-juan
 

DSV

Colaborador
Me parece es el mismo y creo la nota debe estar motivada por la falta de noticias del SUSJ. Incluso en los medios ya uno se percata el SUSJ empieza a ser un tema marginal.
Si abrís las webs de los medios, siguen estando al tope o casi al tope las notas sobre el SUSJ. Si se lo encuentra, cuando sea el momento, el tema vuelve a explotar.

Hay que admitir una cosa, el tema del año era el caso Maldonado hasta que pasó esto y lo desplazó.
 
El Google Earth hay una función para ver naufragios, yo no logro ver nada, no se si en las copias pagas avanzadas se pueden ver.
 
Amigos argentinos ...
Este informe atribuido al especialista Bruce Rule ya se ha discutido aquí ... En cuanto a los miembros de este foro el periódico La Nación lo descubre con mucho retraso ... Debemos enfocarnos en la inconsistencia de este informe, que afirma haber sido la cuota de colapso de 380 metros. El ARA San Juan se hizo con acero HY80, lo que significa ser la produción de 380 metros una cota de buceo que sería sostenida por el casco de presión. Para un casco de presión hecho con acero HY 80 la cota de colapso, se cree, dé a partir de la cuota de 500 metros (entre 500 y 700 metros) ... No existe un valor preciso debido a los métodos de soldadura efectuados.

Pues bien... Como ya he dicho en mis anteriores intervenciones, creo que el SUSJ ha sufrido un colapso, teniendo por ello un destino análogo al del USS Thresher ... El USS Scorpion se inundó, por lo que está con el casco observable a 4000 mil metros de profundidad. Todos los naufragios de submarinos cuyo casco mantuvo la integridad en profundidades abisales sufrieron inundación antes de la cuota de colapso. Es el caso del K-129, del K-219, del Scorpion y del K-278 Komsomolets (el caso de este último es especial) ...

Si la hipótesis de la superación de la cuota de colapso es real, se observa la extrema mala suerte del SUSJ, pues el naufragio se daría justamente en el único tramo de la derrota para Mar del Plata donde eso sería posible, ya que durante todo el percusso transcurrido, y después a transcurrir, las cuotas de prodigencia máxima no superan la cuota de colapso. Habiendo seguido un destino análogo al del USS Thresher, el SUSJ habrá dejado como rastros de su naufragio sólo fragmentos en el fondo del mar, lo que perjudicaría enormemente el trabajo de intentar localizarlo. La USNAVY tomó 6 meses para localizar el Thresher sabiendo exactamente dónde se naufragó.

Cuando se da una implosión catastrófica muy poco puede ser observable en la exploración realizada en el fondo del mar, pues la hélice de bronce y la vela (entera, o en parte), pueden ser los únicos vestigios observables en el lecho marino. Vuelve a repetir que en caso de que haya habido un destino la superación de la cuota de colapso, al menos para la tripulación, el destino fue misericordioso, pues la muerte sobrevolaría en una fracción de segundo, lo que para la cognición del cerebro humano no es un evento distinguible .
 
–¿Y por qué causas podría romperse el casco? Descartando el impacto de un misil o algo similar, ya que se supone que no había ninguna actividad de ese tipo en la zona.

–No, claro, eso está descartado. Hay varias causas por las que el casco de resistente puede romperse. Una es, por supuesto, por un mal cálculo estructural. El submarino está mal construido y no soporta la presión.

--------

Leyendo ciertas preguntas (por ejemplo, "Descartando el impacto de un misil...") y la respuesta ("El submarino esta mal construido..."; como mucho podria haber dicho "mal reparado") esta claro este articulo de no sirve de mucho.

En fin.
 
Última edición:

tanoarg

Miembro del Staff
Moderador
hay veces que uno se pone a divagar y quizas le cae la ficha por un tema que no viene nada al caso....
ayer escuche que el san juan estaba cargado baterias en snorkel y que tardo 7 horas en hacerlo.... es ahi que un periodista comenta que un capitan de la armada dice que el tr1700 lo hace en 3 horas....
a lo que dije, que "que mala suerte" que tiene la fuerza submarina argentina, porque recuerdo que el san luis en malvinas tenia problemas de recargar sus baterias proque de los 4 motores diesel, solo funcionaban 3....y ahi me hizo ruido el tema...
y si el san juan tuvo que estar 7 horas haciendo snorkel porque de sus 4 motores, solo funcionaban 2?.... motores recorridos a 0 km en su MLU..
 

tanoarg

Miembro del Staff
Moderador
Sea problemas con los motores y/o las baterías, simplemente sería criminal que hayan autorizado a salir a navegar en esas condiciones. Sospechamos que hay mucha mugre bajo la alfombra y espero que se pueda aclarar aparezca o no el sub.
a eso voy...si tenes problemas en bateria, que te entra agua por el snorkel y "la potencial" salida de servicio de motores diesel....pues... estariamos hablando de una responsabilidad 100% de la ARA.
 
Según la propia Armada, en la última comunicación, el jefe de operaciones del San Juan indicó que era intención sumergirse a profundidad de seguridad (40 mts) con la finalidad de ingresar al tanque de baterías comprometido y ampliar la información de la avería, que de acuerdo a lo reportado una hora antes, estaba controlada. Teniendo en cuenta esta información y dando veracidad a todo este proceso informado, es claro que la explosión se produjo cuando estaban en tareas de revisión de la avería del tanque 3 y a 40 mts. de profundidad. No se comunicaron mas porque no estaban a profundidad de periscopio, sino tratando de resolver un problema a profundidad de seguridad. De acuerdo a esto, interpreto que el San Juan comunicó perfectamente sus intenciones de continuar la comunicación de la avería ni bien tuvieran mayores precisiones, para luego volver a contactarse con su base. Ya habían pedido cancelar su misión y volver a MDP, atento lo cual la misión estaba finalizada y la política de comunicaciones tambien. Claramente la prioridad era evaluar la avería y volver a puerto. Ahora bien, para mi es claro que lo que determinó la pérdida del San Juan, ocurrió mientras intentaban obtener mayor información del estado del tanque 3. Saludos.

De esta informacion, hay algo que no entiendo...

Tienen que hacer una revision al tanque de baterias, por lo cual, requiere moverse a 40 metros de profundidad.
No seria logico, al hacer este tipo de revisiones que implican un riesgo, y si no te queda otra que sumergirte (supongo, por el estaod del mar, asi evitar el movimiento),
- Si se esta en una zona profunda, moverse a zonas mas seguras antes de comenzar la reparacion?
- detener maquinas (o ir lo mas lento posible)
- comunicar la posicion actual y que no te moves de ahi hasta que resuelvas (o no) y vuelvas a comunicarte

me pareceria lo mas logico...
Esto de "me voy a profundidad segura, sigo andando mientras reviso, y esperame 12 horas hasta saber si me paso algo"... es raro.
 
consulta... que la verdad, ya imagino la respuesta pero y tampoco creo que sea trascendente dado que el problema parece estar bastante focalizado en tema baterias...

Los buzos tacticos que estaban en el San Juan... entre sus equipos, no llevan explosivos o algun otro material de ese tipo?
 
Buque “Cabo de Hornos” finaliza su tarea de búsqueda de submarino Argentino ARA “San Juan”
Domingo 10 de diciembre de 2017
El navío de la Armada de Chile, que es uno de los más modernos del mundo, permaneció apoyando la búsqueda durante 15 días, efectuando 3 contactos con estructuras metálicas en el fondo del mar, una de ellas aún en análisis por parte de Argentina, ya que pudiera tratarse del submarino siniestrado.

Tras un intenso trabajo que incluyó la navegación de casi 5 mil kilómetros y más de 340 horas efectivas de búsqueda, finalizó la comisión encargada al buque científico chileno AGS-61 “Cabo de Hornos” para apoyar a la Armada Argentina en las tareas tendientes a localizar al submarino ARA “San Juan”, el cual desapareció el 15 de noviembre en el Océano Atlántico con sus 44 tripulantes a bordo.

La decisión de que el buque chileno regresara a la patria, se adoptó considerando que la Armada Argentina realizó un cambio en el protocolo de rescate, ahora a búsqueda de los restos y que el trabajo de prospección y mapeo del fondo marino asignado a nuestro país ya ha finalizado exitosamente, logrando recorrer una zona de 2.700 kilómetros cuadrados, equivalente a 200 mil canchas de fútbol, estableciendo 3 puntos posibles donde pudiera estar el submarino hundido, dejando el análisis posterior en manos de la Armada Argentina.

Aunque buques de diversos países han participado en las tareas de ayuda a la Armada Argentina, el AGS “Cabo de Hornos” y el ARA “Malvinas” del país trasandino, eran los únicos que continuaban hasta hoy trabajando en la zona día y noche.

Cabe destacar que en las tareas de búsqueda efectuadas el “Cabo de Hornos” pudo demostrar todas las capacidades tecnológicas de prospecciones del fondo marino en 3D que poseen sus equipos de sonares y que permiten ubicar objetos a gran profundidad en el océano. Este equipamiento ubica al buque dentro de los 5 más modernos y equipados del mundo en este tipo de labores.

El Capitán de Navío César Miranda, Comandante del buque “Cabo de Hornos” señaló que “en el marco de las incesantes labores y de los múltiples contactos establecidos, realizamos un hallazgo de un objeto a 940 metros de profundidad a través de los ecos del buque, aún resta que la Armada Argentina con apoyo del buque ruso “Yantar” y un robot submarino, precise la naturaleza del objeto detectado, pero de todas formas estamos orgullosos del largo y sacrificado trabajo efectuado para apoyar a un país amigo”.

El Comandante Miranda agregó que “nos retiramos de nuestra zona asignada de búsqueda con la satisfacción de haber entregado nuestro mejor esfuerzo y profesionalismo, ayudando con nuestra tecnología disponible a la búsqueda del ARA San Juan”.

El buque se encontraba en el área de Chiloé finalizando un crucero científico de 30 días, cuando recibió la orden de dirigirse a Punta Arenas para apoyar a la Armada Argentina. Fue así que realizaron un reabastecimiento de 7 horas en una faena nocturna y a la dotación compuesta por 45 personas se sumaron 5 más del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA), con el fin de contar con un equipo multidisciplinario para enfrentar óptimamente las tareas previstas. Una vez todo en norma, continuaron con tránsito hacia el Atlántico.

Está programado que el “Cabo de Hornos” realice una recalada logística en Punta Arenas, para luego retornar a su puerto base, ubicado en Valparaíso.

https://www.armada.cl/armada/notici...-busqueda-de-submarino/2017-12-09/104403.html
 
Arriba