Con la presentación del Proyecto de Ley de Presupuesto 2024 diversos planes de reequipamiento para las Fuerzas Armadas Argentinas vuelven a ver la luz, brindando la oportunidad de relevar el grado de avance actual y lo que podría proyectar a futuro. Uno de estos sin lugar a duda es la construcción en astilleros locales de un nuevo Buque Logístico Polar para la Armada Argentina, a fin de complementar en las Campañas Antárticas de Verano (CAV) al rompehielos ARA Almirante Irízar.
Al día de la fecha TANDANOR continúa trabajando en la etapa de ingeniería con la empresa AKER de Finlandia, la cual es la que ha provisto el diseño ARC 133 sobre el cual se basará la construcción del futuro Buque Polar de la Armada Argentina. Si bien no se han brindado mayores detalles sobre el grado de avance, según lo reportado en el año 2022 se previa que la finalización de la etapa del diseño de ingeniería básica del proyecto estaría completada para el corriente 2023. Sin embargo, las noticias oficiales con respecto a esta cuestión no han abundado recientemente.
Una de las novedades de las cuales se hizo eco Zona Militar durante el 2023 provinieron del propio astillero durante la feria internacional LAAD 2023, expresando que: “el proyecto de construcción del Buque Polar para la Armada Argentina se encuentra “ya se encuentra en la etapa de ingeniería con la empresa AKER de Finlandia”. Indicando a su vez que el proyecto se realizará con el acompañamiento de un grupo de estudiantes de ingeniería de universidades nacionales (tales como el ITBA; UBA; UNDEF), de entre los cuales se seleccionarán a los respectivos profesionales que acompañarán todo el proceso de avance del proyecto en Finlandia. En cuanto a la solvencia económica, los fondos se encuentran aprobados desde la Jefatura de Gabinete de Ministros, a través de la financiación que brinda el Fondo Nacional de la Defensa (FONDEF)”.
Retomando lo observado en el Proyecto de Ley de Presupuestos 2024, se detalla en una de las planillas anexas que el denominado como “Proyecto construcción Buque Logístico Polar” será realizado a través de una operación de crédito público por un monto de USD 195.000.000 con un plazo de amortización de tres años.
De avanzar el proyecto, además de que se convertiría en la obra de construcción naval más importante de los últimos años, junto con la recuperación y modernización de ARA Almirante Irízar, permitiría a la Armada Argentina recuperar una capacidad que se perdió con el naufragio del ARA Bahía Paraíso a principios de 1989. Cumpliendo una función de complemento del rompehielos en tareas tales como el reabastecimiento de la Bases Antárticas permanentes y no permanentes que la Argentina sostiene en la Antártida, al igual que el apoyo a las actividades de investigación científica.
Detalles del Buque Polar Aker ARC 133:
- Longitud total: aproximadamente 131,5 metros
- Capacidad de peso muerto: no menos de 5.000 toneladas
- Propulsión: motores de propulsión eléctrica con líneas de eje y hélices de paso fijo
- Planta de energía: tres generadores diésel-eléctricos
Tal vez te interese El Ministro de Defensa firmará una Carta de Intención para la compra de ocho helicópteros AW109
Todavía no pusieron ni una chapa de acero. No sé cuanto más hay que esperar para que se de comienzo, si es que los fondos ya están asignados…
Ya no quedará hielo en la Antártica cuando lo terminen de construir.
Hay que investigar cómo puede un proyecto tan importante y tan consensuado, durar este tiempo, solo en “etapa de Ingenieria”, cuando ya todo está resuelto?
Es tiempo de hacer cuentas y determinar dónde va el dinero necesario, cosa que es políticamente incorrecto, pero necesario para el país
Ojalá se cumpla el proyecto. Tiene asesoramiento finlandés a través de un acuerdo de colaboración empresaria, lo que garantiza un diseño adecuado a nuestras necesidades, tiene participación de centros universitarios argentinos, con lo cual se logra continuidad científico-técnica a este tipo de programas, genera trabajo argentino y lo mas importante, se incorpora un equipamiento muy importante para el mantenimiento de nuestra posesión en el Continente Antártico.
Realmente no se ha tomado conciencia – al menos para la mayoría de los ciudadanos argentinos- que Inglaterra pretende el 90 % – sí, noventa por ciento – de la ocupación territorial argentina en dicho territorio, que poseemos en forma efectiva a partir del año 1904.
No quiero una nueva guerra con los británicos pero debemos estar preparados económica y militarmente para cuando pretendan quedarse con lo nuestro. Si bien durante el siglo 19 la Corona británica había dictado algunas normas referidas a la explotación por parte de pesqueros extranjeros, recién en el año 1943 durante la WWII envió una expedición militar (que después se transformó en civil bajo la denominación British Antarctic Survey) para proporcionar información meteorológica y de reconocimiento en el Atlántico Sur, que motivó reclamos de parte de Argentina y Chile, enviando Argentina en el año 1948 varios buques de guerra, lo que dio origen a la firma en el año 1949 entre los tres país el compromiso de no enviar a la región buques de guerra.
Existe también una demanda 1955) presentada por la Corona Británica ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya pero el reclamo es archivado por Argentina y Chile rechazan la jurisdicción de la misma.
Sin embargo durante los años posteriores se generaron escaramuzas entre personal argentino y británico. Esta situación anormal generó la firma del Tratado Antártico firmado el primero de diciembre del año 1959 que entró en vigencia en el año 1961. En este tratado (que se fueron adhiriendo otros países) se comprometieron las partes a retener la Antártida para fines pacíficos y de investigación quedando excluido el territorio de este tratado la región de las Islas Malvinas, quedando en suspenso el tema soberanía. Y esto de la soberanía no es una simple mención: se permite el sobre vuelo así como el paso de distintas naciones, aunque se ha preservado en el Artículo IV de que “Ninguna disposición del presente Tratado se interpretará:(a) como una renuncia, por cualquiera de las Partes contratantes, a sus derechos de soberanía territorial o a las reclamaciones territoriales en la Antártida, que hubiere hecho valer precedentemente…”.
Para concluir, sería importante que los próximos gobiernos argentinos enfaticen la enseñanza en las Escuelas primarias y secundaria sobre nuestra historia y nuestros derechos sobre la Antártida e Islas del Atlántico Sur. Estamos demasiados desmalvinizados.
Para los expertos, cuanto tiempo lleva pensar por donde pasa cada caño que lleva cables y fluidos por todo el barco desde agua potable, aguas negras, combustible, etc, etc? Cuanto tiempo lleva pensar en la mejor distribución interior de los distintos componentes y equilibrar la correcta distribución de pesos y aprovechamiento de los espacios? etc etc etc. Supongo también que depende de cuantas personas estén dedicadas y la experiencia que tengan el tiempo que llevara ese diseño, no? Y como es posible que no nos estén mandando un mail diario con sus avances para que podamos verificar que están trabajando correctamente!
Seguro se va a enojar alguno de los ingenieros navales por mis ironías!
Son modelos que hace mucho tiempo fueron estudiados, con todos sus detalles.
Aparte los finlandeses y los rusos son los más expertos.
Su economía depende en gran parte fe los rompehielos.