Rusia dice que ha completado su retirada de Kherson.
El
Ministerio de Defensa ruso ha comunicado en la mañana de hoy viernes que había terminado de retirar sus tropas de la orilla occidental del río que divide la región de Kherson, en el sur de Ucrania, incluyendo la única capital de provincia que Moscú había capturado desde que invadió el país vecino.
En un comunicado difundido por las agencias de noticias estatales rusas, el
ministerio dijo que la retirada se completó a las 5 de la mañana del viernes, y que no quedó ni una sola unidad de equipo militar. No obstante, la retirada supone otro enorme revés para Rusia en su guerra de ocho meses y medio en Ucrania.
El
Kremlin se mantuvo desafiante el viernes, insistiendo en que el acontecimiento no representaba de ninguna manera una vergüenza para el presidente ruso
Vladimir Putin. Moscú sigue considerando toda la región de Kherson como parte de Rusia, dijo el
portavoz del Kremlin,
Dmitry Peskov, a los periodistas.
Añadió que el
Kremlin no se arrepiente de haber celebrado hace poco más de un mes la anexión ilegal de Kherson y otras tres regiones ocupadas o parcialmente ocupadas de Ucrania.
Poco antes del anuncio ruso, la oficina del presidente ucraniano
Volodymyr Zelenskyy describió la situación en la región de Kherson como “
difícil”. Informó del bombardeo ruso de algunos de los pueblos y ciudades que las
fuerzas ucranianas recuperaron en las últimas semanas durante su contraofensiva en la región de Kherson.
Los funcionarios ucranianos desconfiaban de la retirada rusa anunciada esta semana, pues temían que sus soldados pudieran caer en una emboscada en la ciudad de Kherson, que tenía una población de 280.000 habitantes antes de la guerra. Los analistas militares también habían pronosticado que los militares rusos tardarían al menos una semana en completar la retirada de las tropas.
El
asesor presidencial ucraniano Mykhailo Podolyak dijo el jueves que las tropas rusas en retirada colocaron minas en toda Kherson para convertirla en una “
ciudad de la muerte”. También predijo que bombardearían la ciudad después de reubicarse al otro lado del río Dniéper.
Tras advertir que la retirada rusa podría ser una trampa, algunos sectores del gobierno ucraniano apenas disimularon su alegría por el ritmo de la retirada.
“
El ejército ruso abandona los campos de batalla en modo triatlón: carrera de obstáculos, salto de longitud, natación”, tuiteó
Andriy Yermak, un
alto asesor presidencial. Los vídeos de las redes sociales, aparentemente filmados por los soldados en las rutas hacia Kherson, mostraban a los aldeanos abrazando a las
tropas ucranianas.
Recuperar la ciudad podría proporcionar a Ucrania una posición fuerte desde la que ampliar su contraofensiva en el sur a otras zonas ocupadas por Rusia, incluyendo potencialmente Crimea, que Moscú tomó en 2014.
Sin embargo, desde las nuevas posiciones de sus fuerzas en la orilla oriental, el
Kremlin podría tratar de intensificar la guerra, que, según las evaluaciones de Estados Unidos, podría haber matado o herido ya a decenas de miles de civiles y a cientos de miles de soldados.
Un ataque ruso con misiles
S-300 mató durante la noche a seis personas en Mykolaiv, una ciudad a unos 68 kilómetros (42 millas) de la capital regional de Kherson, dijo la oficina de
Zelenskyy el viernes por la mañana. Los equipos de rescate rebuscaron entre los escombros de un edificio residencial de cinco plantas en busca de supervivientes.
Zelenskyy calificó el ataque con misiles de “
respuesta cínica del Estado terrorista a nuestros éxitos en el frente”.
“
Rusia no renuncia a sus despreciables tácticas. Y nosotros no abandonaremos nuestra lucha. Los ocupantes tendrán que rendir cuentas por todos los crímenes contra Ucrania y los ucranianos”, dijo
Zelenskyy.
La oficina del presidente dijo que los drones, cohetes y ataques de artillería pesada rusos en ocho regiones mataron al menos a 14 civiles entre el jueves y el viernes por la mañana.
En la región de Dnipropetrovsk, se dispararon más de 50 cohetes durante la noche en torno a las ciudades y pueblos situados al otro lado del río Dniéper desde la
central nuclear de Zaporizhzhia, según el
gobernador Valentyn Reznichenko.
El estado del puente Antonivskiy, que une las orillas occidental y oriental del Dniéper en la región de Kherson, seguía sin estar claro el viernes, y podría ser clave para determinar si todos los rusos abandonaron de hecho la ciudad de Kherson.
Los medios de comunicación rusos sugirieron que el puente fue volado tras la retirada rusa;
los reporteros pro-Kremlin publicaron imágenes del puente al que le faltaba una gran sección. Pero
Sergei Yeliseyev, un
funcionario instalado por Rusia en la región de Kherson, dijo a la agencia de noticias Interfax que “
el puente Antonivskiy no ha sido volado, está en las mismas condiciones”.
El Ministerio de Defensa ruso ha comunicado en la mañana de hoy viernes que había terminado de retirar sus tropas de la orilla occidental del río que divide la región de Kherson, en el sur de Ucrania, incluyendo la única capital de provincia que Moscú había capturado desde que invadió el país...
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