Teniendo como marco la Base Aérea de Anápolis (BAAN), la Fuerza Aérea Brasileña sometió a su caza experimental Gripen a pruebas de vuelo en condiciones de altas temperaturas. Las evaluaciones realizadas buscaron corroborar y comprobar el comportamiento de la aeronave en esta clase de ambientes operacionales.

En base a lo divulgado por la empresa Saab, el caza Gripen seleccionado para esta clase de pruebas fue el FAB 4100. Esta aeronave fue la primera en ser recibida por la Fuerzas Aérea Brasileña siendo empleadas con fines experimentales, operando desde las instalaciones de Gavião Peixoto, donde se ubica el Centro de Pruebas de Vuelo Gripen (GFTC). De este modo, la aeronave realizó un vuelo con dirección a la Base Aérea de Anápolis (BAAN), ubicada en la ciudad homónima.

Caza Gripen E. Créditos Sputnik News.

La razón de la selección de esta ubicación se debió a que “Anápolis está ubicada a unos 1.100 metros sobre el nivel del mar y tiene temperaturas promedio de 35º C, por eso elegimos traer el caza, con base en Gavião Peixoto, en el Centro de Pruebas de Vuelo Gripen (GFTC), a Anápolis. Esta es también la ciudad donde ya operan los aviones de combate”, explicó Erik Magnusson, ingeniero de pruebas de vuelo de Saab responsable de las pruebas meteorológicas globales.

Tanto Saab do Brasil como Embraer destacaron que las pruebas se vienen realizando desde el pasado mes de septiembre, informando que: “Este es un paso importante que forma parte de la campaña mundial de pruebas del Gripen E, ya que las pruebas realizadas aquí son válidas para todos los aviones del modelo, no sólo para el Gripen brasileño. Esta fue también la primera prueba de este año fuera de Gavião Peixoto y en la base de la Fuerza Aérea Brasileña”.

En lo especifico a las pruebas a las que fue sometido el Gripen FAB 4100 estas estuvieron compuestas por una prolongada exposición en pista a la luz solar, acompaña de tres días seguidos de pruebas de vuelo operando en temperaturas medias de 32°, completando una hora de vuelo. El objetivo es validar el comportamiento de la aeronave y materiales que la componen para operar en esta clase de ambientes geográficos cálidos. Uno de los requisitos esgrimidos por la Fuerza Aérea Brasileña durante la formulación del Programa Gripen.

Por último, y de cara a los resultados de la prueba, Eduardo Kitada, ingeniero de sistemas de Embraer, responsable de las pruebas climáticas en Brasil, indicó que: “Los resultados iniciales fueron positivos y confirmaron mucho de lo que ya habíamos predicho. Los datos de todos los sensores ahora se utilizarán para validar que el Gripen puede operar con un rendimiento excelente en regiones con climas cálidos, secos y de gran altitud, como el que se encuentra en Brasil, o cualquier otro lugar del mundo con temperaturas similares“.

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