Dentro de los planes de modernización de su flota, la Armada de los EE.UU. mantiene en curso la iniciativa para dar de baja a varios de sus cascos más antiguos con la intención de incorporar nuevas unidades e incrementar sus capacidades. Dentro de este proyecto, la Armada norteamericana pasó a retiro al crucero USS San Jacinto, buque que operó con la fuerza por 35 años.

La Armada de EE.UU. elevó en 2022 un requerimiento para retirar 39 buques, plan que resultó modificado atento las impedimentos planteados por el Comité de Servicios Armados del Senado, el cual manifestó la negativa para dar de baja a 13 de esas unidades navales.

Uno de los puntos manifestados por la Armada de EE.UU. sobre los crucero de la clase Ticonderoga, es que muchos de los buques ya han sobrepasado el límite de su vida útil, requiriendo procesos de mantenimiento cada vez más complejos y con mayor frecuencia. Esta situación no solo va en detrimento respecto a la disponibilidad de cascos, sino que también demanda una considerable inversión, la cual podría destinarse a la construcción de nuevos destructores Arleigh Burke Flight III.

La nómina propuesta para el año fiscal 2023 incluyó cinco cruceros Ticonderoga, entre ellos el USS San Jacinto CG-56. La intención de la Armada de EE.UU. es dar de baja todos los buques de la clase en cinco años, decisión que ha elevado algunas dudas en cuerpos legislativos sobre la capacidad de la Fuerza disponer unidades navales en caso de necesidad. Preocupación que va de la mano de una creciente demanda por mantener presencia naval, principalmente en la zona del Indo-Pacífico.

El crucero USS San Jacinto fue comisionado el 23 de enero de 1988 en Houston, Texas. De acuerdo con lo detallado por la Armada de EE.UU. el buque efectuó un breve despliegue en apoyo de la Operación Escudo del Desierto, donde actuó como Comandante de la Fuerza de Combate Antiaérea del Mar Rojo, lanzando los primeros misiles de crucero Tomahawk como parte de las salvas iniciales de la Operación Tormenta del Desierto.

Otros despliegues destacados del San Jacinto incluyeron apoyo directo a las operaciones Southern Watch, Inherent Resolve e Iraqi Freedom; así como la extendida lucha contra el terrorismo. En enero de 2020, el crucero desplegó como parte del grupo de ataque del portaaviones USS Dwight D. Eisenhower en el Mar Arábigo, batiendo el récord de la Armada de EE.UU. de días consecutivos en el mar con 206 días.

Una vez desactivado, el USS San Jacinto será remolcado a las Instalaciones de Mantenimiento de Buques Inactivos de la Armada en Filadelfia, Pensilvania, donde quedará en estado de Activo de Apoyo Logístico (LSA). La Armada de EE.UU. aún cuenta con más de una quincena de cruceros de la clase Ticonderoga, buques que tienen un horizonte de vida cada vez más reducido.

Imagen de portada ilustrativa. Créditos: US Navy

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1 COMENTARIO

  1. en un presupuesto post guerra fria no da mantener estos monstruos de barcos. es mejor optimizar con fragatas multipropósito que estos gigantes.

    los tipo 55 chinos probablemente corran la misma suerte en unos años.

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