La Agencia Estatal de Adquisición de Armamento (DAPA) ha hecho trascender que el gobierno de Corea del Sur aprobó un plan para incrementar la producción de tanques Black Panther K2 con el objetivo de reforzar las capacidades y disponibilidad de medios del Ejército de la República de Corea del Sur

La aprobación de este proyecto por parte del gobierno surcoreano rondaría los USD 1.46 billones, estimando que se desarrollaría durante los próximos cinco años, según hizo trascender DAPA. Para este nuevo desarrollo, el gobierno también pretende colocar en los tanques una transmisión de fabricación nacional luego de superar las evaluaciones requeridas por la Agencia de Tecnología y Calidad de Defensa. Aún no está especificado el número de blindados a construir en estos nuevos lotes.

Recordemos que Corea del Sur ha estado avanzado en los preparativos para la producción de más tanques K2 Black Panther, frente al aumento del interés en el blindado por parte de clientes extranjeros y campañas de promoción. Por ejemplo, uno de los últimos y más relevantes acuerdos fue con el gobierno de Polonia, en la que se firmó un contrato con Hyundai Rotem para la adquisición de un total de 1.000 tanques K2 Black Panther.

Con este hecho, Polonia pasó a convertirse en el primer cliente extranjero del tanque K2 Black Panther, el cual pasará a equipar la creciente flota de blindados de combate de las Fuerzas Armadas Polacas, la cual ya cuenta con Leopard 2A4/A5 y M1A2 SEP v2 Abrams. No obstante, el tanque de origen surcoreano deberá competir en la consideración de los clientes con otras propuestas. Así atestigua la reciente decisión de Noruega de avanzar en la compra de nuevos Leopard 2A7, habiendo considerado también al K2 entre las posibles opciones, decantándose finalmente por el blindado germano.

Además de este nuevo pedido por tanques, el Corea del Sur también aprobó un plan adquirir en el extranjero más aviones de alerta temprana y control aerotransportado con el fin de reforzar su capacidad de vigilancia aérea. Según lo anunciado el proyecto se prolongará hasta el año 2031, aunque la DAPA no ha declarado el número de aviones que se adquirirán para la Fuerza Aérea del país asiático.

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