Seguramente algunos no entenderán el título o se desayunarán por primera vez con que la por entonces Unión Soviética llegó a adquirir a Irán un par de F-14A Tomcat’s. Aunque es difícil tener la historia oficial del hecho, lo que se sabe es que en algún momento de principios de la década del ochenta, la URSS procedió a comprarle a la fuerza aérea imperial iraní dos F-14 junto con un reducido lote de misiles AIM-54 Phoneix, AIM-7 Sparrow y AIM-9 Sidewinder.
La idea de la URSS no era otra que extraer la mayor cantidad posible de tecnología y diseño del avión, y sin dudas se le dio muy buen uso a ambos aviones. Varios de los prototipos del Su-27 Flanker (series T-10) e incluso los ejemplares de serie cuentan con el mismo diseño de fusión LERX/alas/fuselaje del VFX-404, empleado por el Tomcat. También se menciona que muchos sistemas de compensación del Su-33 Flanker D naval son copias exactas del Tomcat, especialmente en cuanto al sistema de flaps/slats y elevadores para operaciones en portaaviones.
Casualmente o no, el misil R-33 (AA-9 Amos) empleado por el Mig 31 se parece y mucho al AIM-54 Phoenix norteamericano, tanto que casi tienen las mismas configuraciones, dimensiones y pesos, aunque la cabeza explosiva del R-33 es de 47 Kg frente a los 60 Kg del Phoenix.
Aunque no hay confirmación de bases o unidades, los Tomcat fueron volados en muchas ocasiones frente a los Mig 25 y Mig 31 a fin de evaluar todos los parámetros de vuelo y especialmente su radar, los sistemas de defensa electrónica y el sistema de control de fuego. Al respecto se sabe que a pedido de Irán, los técnicos rusos trataron de integrar al avión el misil AA-9 Amos, pero la complejidad del radar AWG-9 del Tomcat lo impidió, aunque aparentemente quedó la puerta abierta para que luego se le integrara como misil aire-aire el Hawk, un misil antiaéreo.
En 1989, ambos F-14 con la estrella roja en las derivas y los códigos “01” y “02” fueron expuestos en el museo Monino cerca de Moscú, pero al cabo de pocas semanas fueron retirados y hoy se desconoce su paradero o estado.
La idea de la URSS no era otra que extraer la mayor cantidad posible de tecnología y diseño del avión, y sin dudas se le dio muy buen uso a ambos aviones. Varios de los prototipos del Su-27 Flanker (series T-10) e incluso los ejemplares de serie cuentan con el mismo diseño de fusión LERX/alas/fuselaje del VFX-404, empleado por el Tomcat. También se menciona que muchos sistemas de compensación del Su-33 Flanker D naval son copias exactas del Tomcat, especialmente en cuanto al sistema de flaps/slats y elevadores para operaciones en portaaviones.
Casualmente o no, el misil R-33 (AA-9 Amos) empleado por el Mig 31 se parece y mucho al AIM-54 Phoenix norteamericano, tanto que casi tienen las mismas configuraciones, dimensiones y pesos, aunque la cabeza explosiva del R-33 es de 47 Kg frente a los 60 Kg del Phoenix.
Aunque no hay confirmación de bases o unidades, los Tomcat fueron volados en muchas ocasiones frente a los Mig 25 y Mig 31 a fin de evaluar todos los parámetros de vuelo y especialmente su radar, los sistemas de defensa electrónica y el sistema de control de fuego. Al respecto se sabe que a pedido de Irán, los técnicos rusos trataron de integrar al avión el misil AA-9 Amos, pero la complejidad del radar AWG-9 del Tomcat lo impidió, aunque aparentemente quedó la puerta abierta para que luego se le integrara como misil aire-aire el Hawk, un misil antiaéreo.
En 1989, ambos F-14 con la estrella roja en las derivas y los códigos “01” y “02” fueron expuestos en el museo Monino cerca de Moscú, pero al cabo de pocas semanas fueron retirados y hoy se desconoce su paradero o estado.