Chile adquirirá un poderoso satélite cívico-militar

No estaba "bardeando" a nadie, sino afirmando que por el precio mencionado solo podría tratarse de una satélite "escuela", y no de "un poderoso satélite espía".

Saludos.


La pregunta que yo haria es quien lo denomino "poderoso satelite espia"?.

Es un satelite con aplicaciones civiles y militares acotadas a los requerimientos
de los sectores involucrados (pesquero, forestal, urbanistico, etc...)

A veces hay que parar a ver quien pone palabras o nombres a las cosas, si lo
hace un periodista, una nota de prensa o un funcionario de gobierno o autoridad militar.

saludos.
 
Exacto,creo que anduvieron "inflando" al proyecto,como si las aplicaciones militares fueran su principal función....Como siempre los periodistas:svengo:
Como primera etapa (bueno,ya sería una segunda si contamos a la serie FASat)creo que es un gran paso...
 
Saludos a todos,sobre el famoso satelite,les puedo aportar lo siguente:



El consorcio EADS Astrium fue el escogido para fabricarlo:
Así será el satélite chileno



La Presidenta Bachelet se guardó la noticia hasta después de su gira a Canadá, país que había llegado hasta las semifinales con la empresa MDA. A la espera de la confirmación oficial, inspeccionamos en Francia las principales instalaciones de las que saldría el satélite chileno.

Mauricio Carvallo, Desde Toulouse, Francia

En una pieza de la talla de un edificio de tres pisos, se hace la prueba "marmicoc". Un ascensor especial baja al subterráneo con una caja sellada de cuatro por cinco metros y de unas cuatro toneladas. Como si hubiera entrado a una olla a presión, se atornilla una tapa de acero en el piso y enseguida la caja se remece violentamente, y se la calienta y enfría a las extremas temperaturas del espacio exterior. Es el test térmico final de un satélite pronto a ser lanzado desde la Guyana francesa, o Baikonur, Kazajstán.

Estamos en las afueras de Toulouse, al sur de Francia, cerca de España, una villa detenida entre la Era Romana y la Edad Media. En un convento está enterrado Santo Tomás de Aquino. Pero más acá es el futuro y en una veintena de edificios-hangares se proyectan, se construyen y se prueban los satélites europeos.

Es el centro espacial EADS Astrium, al que, según todos los indicios, el Gobierno de Chile entregará en los próximos días la responsabilidad de fabricar un satélite del tipo de observación de la Tierra. Es decir, no de telecomunicaciones, de TV, ni militar, sino que le permita saber qué se mueve, crece y está pasando aquí abajo.

Iniciamos la visita vestidos con delantal, y cabeza y zapatos cubiertos con plásticos. El satélite que quiere Chile necesita salas descontaminadas. Nos guían cinco altos ejecutivos franceses.

-Tenemos toda la paleta de productos de importancia estratégica -explica Jean Dauphin, director de los satélites EOS (Earth Observation System), y quien se haría personalmente responsable del proyecto chileno-. Pero sólo el espacio permite acceso a toda la Tierra. Además de que el satélite es necesario en lo civil (medio ambiente, meteorología, climatología), es muy importante por razones de defensa-seguridad: aporta las imágenes para tomar las mejores decisiones.

Vecina a estas instalaciones se levanta también la Agencia Francesa del Espacio, de la cual EADS Astrium es su principal cliente militar y civil. Tal vez por eso los empleados galos dominan numéricamente esta empresa privada. De sus más de 12 mil empleados (de los cuales el 70% son ingenieros) el 44% son franceses.

El apriete de los tiempos

El Gobierno de Chile tiene que apurarse si espera que el lanzamiento se realice en 2010, para el Bicentenario de su vida republicana. Incluso la Presidenta pretende adelantarlo para febrero de ese año, antes de que deje el poder. Pero la postergación del anuncio (por la muerte del general Alejandro Bernales y el viaje a Canadá) deja apenas 20 meses para afinar el proyecto, reunir todos sus elementos, construirlo, testearlo y elevarlo.

Este consorcio espacial recibió solicitudes hasta 2011 por 12,9 billones de euros. De los 23 proyectos satelitales que en mayo buscaban fabricantes en el mercado mundial, ya firmó cinco contratos. A la vez, la fábrica de lanzadores Ariane tiene pedidos de aquí a seis años, porque incluye los misiles intercontinentales de la fuerza estratégica francesa.

"Somos los que más vendemos en el mundo", reconoce Dauphin. "El año pasado firmamos ocho contratos de satélites de telecomunicaciones, de los cuales lanzaremos siete el 2008. Los hacemos más rápido que aquellos de observación de la Tierra y científicos, que son más complicados. De los satélites EOS hay 18 en desarrollo. Con todas las especialidades podemos lanzar unos 12 al año".

Daniel Garando, responsable del programa EOS, plantea: "No tenemos perfectamente definidas las necesidades de Chile. Nos demoraríamos dependiendo del tipo de satélite que nos encargaría".

Pero, tranquiliza Christophe Roux, director del Programa de Exportaciones: "Estamos capacitados para entregar el sistema satelital en plazo tan limitado".

Esto obliga a un producto estándar, no demasiado especial. Según Dauphin, "sería imposible que uno con elementos novedosos pueda volar para entonces. Necesitamos la serie en producción".

Precisamente, una de las ventajas decisivas que destacó de EADS Astrium la comisión evaluadora chilena es que se puede ganar tiempo considerable al contar con todo en un solo lugar.

-Cuando nos piden un satélite de fabricación rápida, los reorientamos hacia nuestra línea de producción, pero adaptados a sus necesidades -agrega Roux.

Un ejemplo es el "Theos", de Tailandia. Como éste, el ejemplar chileno será de órbita polar, dará la vuelta al mundo en cien minutos a unos 650 o 750 kilómetros de altura, con espacio asignado y respaldado por normas internacionales. Combinará los elementos de uso civil, científico y militar, y será heliosincrónico: se programa para que el Sol ilumine los objetos de la Tierra que le interesan.

Lo que pesó en la decisión chilena

En la sala de integración sólo cinco ingenieros revisan una serie de satélites de gran tamaño en una decena de computadores. "Es que todo es automático", explica Gérard Berger, jefe de Marketing. "Son relevados una vez al día. Las pruebas requieren más que los seis meses que nos demoramos en armar un satélite".

Llama la atención una gigantesca cortina metálica que cierra el acceso. Allí se arman dos satélites militares franceses. Pero Garando revela bajo su gorro plástico que en la sala en que estamos se arma el satélite encargado por la Agencia Espacial Argelina, con las características que debería tener el chileno: de 130 a 150 kilos, cámaras ópticas y una definición fotográfica cercana a los 2 metros.

Justamente, una de las quejas de la empresa canadiense MDA es que Chile no vaya a contar con un metro de resolución fotográfica para poder identificar cualquier objeto terrestre. Argumentó que hacia 2010 muchos otros países habrán introducido satélites ópticos de 1,5 a 2,5 pero la mayoría tendría los de un metro.

Pero, según se informó en el Parlamento chileno, la resolución será "mejor que 2 metros", considerando que a mayor definición, más caro es el proyecto. Por esta razón la propuesta de EADS resulta un 10% más barata que la de MDA.

A la vez pesaron otros criterios generales: no sólo se evaluó técnicamente bien la calidad de las imágenes, sino también las formas de bajada de las informaciones (flexibilidad de antenas y segmentos terrestres), así como potenciales prestaciones para acceder después a otros satélites, y hacer fácilmente los "upgrades".

Igualmente influyó en la decisión chilena el hecho de que se harían responsables cinco países europeos: Francia, Inglaterra, Alemania, España y Holanda. Y que MDA se enfocara más a lo militar.

-También fue importante que EADS Astrium haya lanzado muchos satélites y que el 98% hayan sido exitosos -reveló una fuente chilena- y el tipo de seguros que ofrece por si algo fallara. En cambio, MDA fabrica sus satélites en tres países, y con varios subcontratistas.

Pesó igualmente el ofrecimiento de capacitación de ingenieros nacionales a través de becas universitarias en Francia. En Toulouse, Dauphin informa que "durante la fabricación de los satélites de Tailandia, Corea, Taiwán y Argelia, unos 80 jóvenes científicos aprendieron no sólo a operar los satélites y sus imágenes, sino también a fabricarlos en sus países".

La idea propuesta por EADS Astrium a Chile es que cuando el satélite nacional se lance al espacio y empiece a entregar sus datos, ya tendrá capital humano capacitado para manejar todo el sistema. Y en forma reservada. En las dos estaciones de control (en la Región Metropolitana y en el sur, dotadas de antenas parabólicas) sus telecomandos poseerían códigos exclusivos. Y las fotos, de cualquier parte del mundo se bajarían codificadas.

El francés descendiente de españoles, Eric Pérez, jefe de Negocios y hasta hace poco responsable de los satélites argelinos y tailandeses, asegura que "nombraríamos un jefe a cargo del proyecto chileno bajo las órdenes de Jean Dauphin. Se dedicaría solamente a éste, con un equipo de ingenieros de unos 20 años de experiencia". Este grupo ya se entrevistó con la delegación chilena, la que todavía le busca nombre al engendro.

La postergación del anuncio (por la muerte del general Alejandro Bernales y el viaje a Canadá) deja apenas 20 meses para afinar el proyecto, reunir todos sus elementos, construirlo, testearlo y elevarlo.

Los satélites EOS pueden ser de uso civil, científico o militar. Pero el que desea Chile combina los tres elementos y será heliosincrónico; es decir, se programa para que cuando pase sobre un territorio que le interesa el Sol ilumine los objetos que captará.

Ventajas y desventajas:

"La última licitación hace que este satélite sea más poderoso"

Una de las mayores críticas de empresas que participaron en la licitación (la inglesa-canadiense MDA y la israelita ImageSat) es que el satélite chileno no captará imágenes de 1 a 1,5 metro, las que usan los franceses.

La respuesta de los ejecutivos de EADS Astrium, Jean Dauphin y Christophe Roux, es que harían lo que pediría el Gobierno de Chile.

La otra crítica es que el satélite proyectado no capte imágenes de radar, esenciales en la noche o bajo las nubes.

-(Dauphin) "El radar consume mucha energía, y hay que enviársela desde la Tierra. Poner ambos elementos en un solo satélite es muy complicado y caro. Serían enormes y enviados por los lanzadores más potentes. En esta disyuntiva, Francia eligió lo óptico e intercambia las imágenes radáricas con los demás países europeos. Si un cliente nos pide que le captemos imágenes radáricas en cualquier parte del mundo, lo hacemos a través de InfoTerra, las cuales interpretará Spot Image. Ambas son filiales nuestras. Es lógico comenzar con el sistema óptico".

-¿Por qué el primer satélite se estimó en US$ 45 millones, y éste en 75 millones?

-(Roux)

Son dos procesos diferentes. La propuesta de la última licitación hace que este satélite sea superior, más poderoso.

-En caso de tensión en las fronteras chilenas, ¿qué pasaría con EADS?

-Nada. Un país tiene la autonomía y la soberanía total.

-¿Preocupa una nueva crítica de algún sector político chileno?

-No. Las escuchamos, las leemos, pero es parte de la democracia.

Consideraciones políticas:

Las razones de un anuncio postergado

Si no se anunció antes al finalista de una licitación en que participaron nueve países fue para no incomodar a la Presidenta Bachelet, quien iniciaba una gira a Canadá, la sede de la empresa semifinalista, MDA. Por eso, allá pudo responder la pregunta directa del Primer Ministro, Stefan Harper, diciendo que aún esperaba un informe técnico.

No obstante, este informe ya se había dado a conocer varios días antes en las comisiones de Defensa y de Ciencia y Tecnología del Congreso por una delegación del Ministerio de Defensa.

La sugerencia técnica recayó en EADS Astrium, y la decisión política y jurídica en el ministro José Goñi, y el jefe del proyecto, el subsecretario de Aviación, capitán de bandada (r) Raúl Vergara. De ahí el paquete pasó a La Moneda, donde sólo se espera la mejor ocasión para hacer el anuncio oficial tras el regreso de la Mandataria. Mientras, se juramentó a los protagonistas a no adelantar nada.

La decisión es complicada. En 2006, en el gobierno de Ricardo Lagos, EADS Astrium ya había alcanzado la finalísima en una licitación con sólo cuatro participantes. Pero a pesar de que a comienzos de la administración Bachelet llegó a Santiago el Presidente francés Jacques Chirac con la evidente intención de firmar el acuerdo, tras dos meses se llamó a un nuevo proceso. El mismo Chirac dio instrucciones de seguir adelante."


Buena información, a fin de cuentas, no será de la máxima resolución, pero tal como se sospechaba, estara asociado al sistema satelital de los países que trabajan con EADS, y podremos acceder a sus satelites de manera integrada.

Para comenzar no está nada de mal.

"Diario:El Mercurio, Domingo 15 de junio de 2008

Pregunta:
Argentina no posee tres..??
Saludos.
 
Los Leoparad II tienen protección NBQ. O sea que son aptos para proteger a su tripulación en ambientes de guerra Nuclear, Química y Biológica, más no para soportar un pepinazo nuclear.
Creo que es un sistema de aire filtrado y limpiado que deja al vehículo sobrepresurizado para que no entre el aire externo.

Corrijanme si me equivoco.
 

Yamamoto

Forista Perseguido
Los Leoparad II tienen protección NBQ. O sea que son aptos para proteger a su tripulación en ambientes de guerra Nuclear, Química y Biológica, más no para soportar un pepinazo nuclear.
Creo que es un sistema de aire filtrado y limpiado que deja al vehículo sobrepresurizado para que no entre el aire externo.

Corrijanme si me equivoco.

Todo es correcto, salvo del hecho que, necesitan el suficiente combustible para llegar a una zona segura en cualquiera de los 3 casos.... :banghead:

Pesimistas saludos
 
Ciencia y Tecnología en Argentina y Chile.

Estimados,

Creo que el tema de la Ciencia y Tecnología en Argentina y Chile es uno más de esos mitos perennes.

Recomendaría mirar las siguientes cifras para ambos países:

% PIB dedicado a la I+D
Science CItation Index (SCI)
Coeficiente de invención

Después conversamos.
 
Estimados,

Creo que el tema de la Ciencia y Tecnología en Argentina y Chile es uno más de esos mitos perennes.

Recomendaría mirar las siguientes cifras para ambos países:

% PIB dedicado a la I+D
Science CItation Index (SCI)
Coeficiente de invención

Después conversamos.

¿Y porqué no aporta Ud. esos datos junto a los links?
 
Creo que el tema de la Ciencia y Tecnología en Argentina y Chile es uno más de esos mitos perennes.

En el caso de Argentina, creo que no. En Chile no conozco el caso en detalle. Ahora, si llegaste a esa conclusión mirando el % de PBI invertido en paises en desarrollo y comparándolos con las potencias económicas, me parece que el análisis quedó un poco corto.

Acá hay una buena referencia en cuanto a indicadores CyT de argentina:


http://http://www.mincyt.gov.ar/indicadores_2006/publicacion/indicadores_2006.pdf

Objetivo 1% del PBI en el bicentenario (creciendo a un 6-8% anual):

http://http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-106507-2008-06-23.html


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DEFINICIONES DE LINO BARAñAO, A SEIS MESES DE LA CREACION DEL MINISTERIO DE CIENCIA

“Hay que romper la disyuntiva biocombustible vs. alimentos”

Barañao dice que es responsabilidad de su ministerio buscar alternativas rentables a la soja. Reivindica el papel social de la ciencia y al mismo tiempo propicia su acercamiento a la empresa. Y revela que está generando financiamiento adicional en energía, salud, agroindustria y desarrollo social.

Por Nora Veiras

Lino Barañao asumió hace seis meses con la misión de crear el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva. Doctor en Biología, pionero en el desarrollo de la clonación vacuna en la Argentina, está convencido de la necesidad de acercar la ciencia a la empresa. No le escapa al debate, al contrario, lo promueve. Dice que se debe cambiar la matriz productiva del país para hacer base en la ciencia y la tecnología. Defiende el financiamiento externo como un instrumento aunque aclara que “la investigación básica se realiza con recursos genuinos”. Considera que el debate sobre una nueva Ley de Educación Superior es una oportunidad para redefinir la universidad: “La autonomía no puede ser autismo”, repite. Barañao cree que las ciencias sociales tienen un rol esencial para explicar lo que pasa y convencer sobre el cambio cultural imprescindible si se quiere revertir el modelo de desarrollo basado en los commodities.

–A partir del conflicto con el sector rural, la población se desayunó del crecimiento que ha tenido el cultivo de soja y su incidencia. Usted, como ministro de ciencia, ¿cómo analiza esta situación?

–Ese es un caso claro en el que la tecnología ha hecho tan eficiente un cultivo que se ha convertido casi en una única alternativa. El uso de la siembra directa con las variedades genéticamente modificadas hace que sea muy costo-efectiva la producción de soja y que haya una rentabilidad muy alta. Esto sumado a la explosión en la demanda de proteínas. La soja es muy eficiente para producir proteína que es esencial para la alimentación humana y animal. Nuestra responsabilidad desde este ministerio es darle al productor una alternativa con la que también a través de la incorporación de ciencia y tecnología pueda producir en forma rentable alguna otra cosa. Por otro lado, esto es un fenómeno ya instalado y tenemos que prever las consecuencias. De hecho, tenemos dos proyectos, de alrededor de 4 millones de dólares cada uno, que tienden a ver la sustentabilidad del manejo del suelo, por ejemplo, basado en estos cultivos; ver alternativas, cómo podemos incrementar la productividad y hacerla sostenible conociendo un poco más todos los procesos de los microorganismos que viven en el suelo. Es un ecosistema muy complejo y que si se explota de forma irresponsable puede agotarse súbitamente. El Estado tiene que asumir esa responsabilidad que ningún productor en particular va a encarar o está en condiciones de encarar.

–El Estado ha estado ausente...

–El Estado en realidad viene realizando estudios en este sentido y un gran número de variedades que se explotan localmente fueron desarrolladas por el INTA, por universidades. Hay una cantidad de ventajas que ha tenido el agricultor que vienen del sistema estatal. Ahora, el Estado tiene una función indelegable que es velar por la producción sostenible y por el equilibrio o la equidad en los beneficios que resultaron de esa inversión que ha hecho la sociedad toda. Cuando estamos hablando de una economía basada en el conocimiento lo hacemos porque sabemos que las empresas que se basan en el conocimiento distribuyen en forma más natural los ingresos: una empresa de software distribuye el 60 por ciento de sus ganancias entre sus empleados. El Estado no tiene que intervenir para equilibrar ese beneficio sino que automáticamente eso se derrama y se reinvierte en la comunidad local o en la sociedad que ha aportado el conocimiento inicial. Queremos que esto de ir convirtiendo esta economía basada en la producción de commodities en una basada en bienes y servicios conocimiento-intensivos sea una contribución fundamental a este proceso de democratización y de mayor justicia en la distribución de los ingresos. No siempre se tiene en cuenta este rol social que tiene la ciencia en cuanto a llegar a sociedades más justas. En Finlandia, Irlanda, Israel, donde centran su economía en el conocimiento, tienen sociedades más justas. Estos problemas de distribución de la riqueza o de los ingresos tan asimétricos tienen mucha menor relevancia.


Las prioridades

–¿La continuidad de la dispersión de organismos de ciencia y tecnología en distintos ministerios no atenta contra la posibilidad de diseñar una política desde su ministerio?

–No. Nuestra política es coordinar a través del financiamiento de programas estratégicos, no necesitamos hacernos cargo de las instituciones, que son las que tienen sus misiones específicas. Muchas de ellas tienen actividades que no están estrictamente relacionadas con la ciencia y la tecnología, tienen una mística propia que les ha permitido vivir durante mucho tiempo a pesar de la falta de apoyo. Nosotros estamos estructurando líneas de acción centrales a través de un financiamiento importante y en esos proyectos vamos a convocar a personal que provenga de todas esas instituciones. De hecho ya lo hemos hecho a través de los programas de áreas estratégicas que ya está financiando la Agencia de Promoción Científica y Tecnológica en distintas áreas de conocimiento: nanotecnología, salud, biotecnología. Tenemos la comprobación de que cuando uno brinda un financiamiento generoso y adecuado se puede convocar a los recursos humanos más capacitados en función de un objetivo común. Lo que vamos a hacer es extrapolar eso a una mayor escala.

–¿Logra romper esa lógica corporativo-institucional?

–Yo vengo de la fisiología y es un buen modelo para entender esto: cada órgano de nuestro cuerpo tiene su lógica interna pero cuando hay que responder ante un estímulo externo todo el funcionamiento de estos órganos se adecua a esa demanda particular. Lo mismo pensamos hacer con la demanda científico-tecnológica: usar los recursos independientemente de dónde estén para cumplir con las expectativas que tanto la sociedad como el sector político tienen.

–Al asumir usted estableció como áreas prioritarias el software, la biotecnología y la nanotecnología. ¿Cómo se avanzó en eso?

–Tenemos distintos tipos de prioridades dependiendo de los objetivos. Estamos sacando financiamiento adicional que estamos centrando en cuatro áreas: energía, salud, agroindustria y desarrollo social.

–¿Por qué se definieron esas áreas?

–Reúnen una serie de requisitos: hay necesidades que surgen del desarrollo creciente que tiene el país, por ejemplo, la demanda energética, la necesidad de recurrir a fuentes sostenibles. Estamos focalizando en lo que es recuperación terciaria y cuaternaria de petróleo. Es decir, los pozos que ya están agotados, de los cuales no se puede extraer más petróleo por las vías tradicionales. En eso Argentina no ha sido muy eficiente y hoy por hoy, al precio del barril, empieza a ser importante desarrollar tecnología que permitan el aprovechamiento de esos hidrocarburos que todavía están en los pozos. La obtención de gas metano, también de fuentes no tradicionales: hay un tipo de arenas particulares que conservan metanos que están en las formas no tradicionales y que requieren una tecnología para su aprovechamiento. Todo lo que es biocombustibles a partir de cultivos no comestibles, algas, biomasa que es aprovechamiento de energía que está en la celulosa o algún tipo de pastos que son muy eficientes, de forma tal de romper con esta disyuntiva de biocombustible versus alimentos.

–¿Están trabajando en coordinación con los ministerios?

–En cada una de estas áreas se trabaja con el ministerio específico. Lo que pretendemos es que ciencias y tecnologías corten horizontalmente las áreas del gobierno para que tengan un impacto en todos los aspectos de la vida del país, que es lo que ocurre en los países desarrollados. No es algo encapsulado, restringido a la actividad de los laboratorios, sino que queremos demostrar que este conocimiento acoplado a actividades productivas o a la solución de problemas sociales tiene un impacto evidente. Creemos, por ejemplo, que además de solucionar problemas de salud podemos desarrollar una cadena productiva que va de la investigación básica a la producción de fármacos en el país. Ya existe una infraestructura en centros de excelencia, experimentación con animales, existen compañías farmacéuticas locales, existe toda la infraestructura para los ensayos clínicos, que son usados incluso por compañías multinacionales, y existe la posibilidad de crear empresas locales que brinden servicios a compañías del exterior en esto que se ha dado en llamar el outsourcing, la tercerización de la investigación y desarrollo. Un fenómeno muy interesante que es que las grandes compañías multinacionales han encontrado que no son eficientes como tales y están recurriendo a pequeñas empresas para tener servicios o invertir en nuevos desarrollos, de nuevos productos, de nuevos fármacos. Usar la ciencia y tecnología para fomentar la inclusión social es uno de los temas más relevantes, que nos preocupan en mayor medida porque es lo que no se ha hecho hasta el momento.

–¿Por ejemplo?

–En las distintas provincias estamos viendo experiencias muy interesantes. Por ejemplo, en San Juan una fábrica de pasas de uva que usa desde un método muy tradicional para el secado hasta maquinaria producida en el país que reemplaza la mano de obra tradicional y hace que esa misma gente trabaje ahora operando máquinas y haciendo mucho más eficiente su trabajo. Esa empresa ha identificado un mercado en el exterior y exporta con normas de calidad muy estrictas. Tenemos emprendimientos de producción de fibras de camélidos en el norte. Todo lo que es la producción de alimentos para el turismo, para los cruceros que hacen escala en Tierra del Fuego o el turismo gastronómico que tiene lugar en la Puna. Hemos estado apoyando empresas que son a veces unipersonales para que usando los cultivos de la zona estandaricen e incorporen calidad y puedan tener un mayor rendimiento de su trabajo.


Más investigadores

–Usted dijo que para cambiar la matriz productiva del país priorizando la ciencia se necesita triplicar la cantidad de científicos cada mil habitantes. ¿Cómo se va a hacer y en qué plazos?

–El Conicet en los últimos cinco años ha aumentado notablemente el número de investigadores, hemos triplicado el número de becas que se otorgan por año. Estamos trabajando en una mejora de las retribuciones de todo el sistema de becarios, no sólo del Conicet, sino articulando esto con otros organismos. Tenemos un programa de formación de doctores en el exterior. Estamos financiando becas de hasta 25 mil dólares para períodos cortos de forma tal que se formen pero que traccione al laboratorio local para que mantenga un alto nivel de productividad. Estamos destinando en total para este programa de recursos humanos unos 80 millones de dólares. Esto incluye también el programa para favorecer la radicación de investigadores que vuelvan al país. Se les da a los investigadores que vuelven después de un período posdoctoral, gente que tiene 30 y pico de años, les cubre los gastos de reinserción, les da un subsidio para que se instalen en el país, le da a la institución que los alberga un subsidio para que adecuen la infraestructura y les da una compensación salarial para equiparar su salario con aquellos que están en el Conicet, en la universidad o reciben algún otro tipo de incentivo. Hay 320 investigadores que regresaron en la última medición que hizo el Conicet. Estamos cubriendo una serie de aspectos que hacen más atractiva la vuelta al país: el investigador no sólo se ve limitado por una cuestión salarial, quiere seguir produciendo activamente en el país y para eso necesita una infraestructura adecuada, un equipamiento actualizado y eso lo estamos proveyendo.

–¿En qué áreas?

–Desde la biología molecular, los nuevos materiales, algo que requiere microscopía a determinado nivel. Hay un proyecto muy interesante sobre la aplicación de los genes a la producción lechera en la ciudad de Rafaela, donde está volviendo un investigador que estaba en el instituto Sanger de Inglaterra, que es uno de los institutos que participaron en el Genoma Humano.


Money money

–¿En qué tiempo prevé que se va a llegar al uno por ciento del Producto Bruto Interno destinado a ciencia y tecnología?

–Nosotros tenemos como meta llegar en el 2010. El tema es que el PBI sigue subiendo, entonces es una meta que se aleja pero se viene incrementando. Tenemos que ir incrementando el financiamiento al mismo tiempo que aumentamos los recursos humanos. Hay una relación directa entre el número de investigadores y la posibilidad de usar un porcentaje dado de la inversión. El uno por ciento no es un número mágico, no es que uno llega y automáticamente somos un país desarrollado. Somos muy cautos y muy rigurosos. Nos preocupa qué es lo que vamos a hacer con los fondos. Nuestro país está viviendo un crecimiento económico muy importante pero eso no implica que no tengamos que cuidar estos fondos que cuesta tanto a la sociedad poder asignar a ciencia y tecnología. De hecho, gran parte de ese financiamiento creciente ya lo tenemos comprometido a través del financiamiento con organismos internacionales.

–¿Por qué se apela al financiamiento con organismos internacionales teniendo en cuenta que hay recursos genuinos del Tesoro?

–Lo que pasa es que históricamente ésta no ha sido la situación y contar con financiamiento internacional permitía una programación plurianual que daba un horizonte de certeza. En el pasado, la situación era muy diferente, no teníamos crédito externo y los organismos internacionales en algunos casos fijaban condiciones. Ahora la situación es distinta, el país es totalmente solvente, podríamos no recurrir a esto y, por otra parte, los organismos necesitan prestar. La demanda de crédito ha decaído y son ellos los que están preocupados por cómo ubicar sus fondos. Esto nos plantea una situación muy distinta para negociar y lo que conseguimos es formular los programas y luego obtener el financiamiento para lo que proponemos. Por otra parte, son créditos baratos que al Estado le cuestan poco. En materia de infraestructura, donde el país tiene una necesidad muy grande y de hecho se están haciendo obras con requerimientos muy estrictos, el contar con financiamiento específico nos permite comenzar ya con las obras y no tener que discutir prioridades para ver si tenemos que hacer institutos de investigación o puentes o represas o caminos. Otro de los temas que nos preocupan es que ninguno de los países de Latinoamérica por separado puede tener un desarrollo tecnológico comparable con el de los países que en estos momentos encabezan esta actividad. Compañías norteamericanas tienen capacidades de inversión muy superiores a muchos países de Latinoamérica. La cooperación regional es fundamental, por eso estamos trabajando fuertemente con Brasil en proyectos comunes en el marco del Mercosur y con la Unión Europea. La creación de conocimiento debe estar en la medida de lo posible asociada a la creación de riqueza.

–¿Hay independencia absoluta para establecer prioridades?

–De hecho, el financiamiento del BID-Banco Mundial para las líneas que nosotros establecimos. Los proyectos estructurales de energía, salud, desarrollo social y agroindustria, por un lado, biotecnología, nanotecnología y Tics los hemos fijado nosotros basados en el Plan Bicentenario, que se hizo con un amplio debate con todos los sectores. También es cierto que la mentalidad de estos organismos ha cambiado y esta visión del libre mercado y condena a las políticas de intervención directa está seriamente cuestionada. Vivimos un cambio de esas instituciones y pasamos ahora a tener una conducta mucho más preactiva. Tenemos prioridades y nos vamos a jugar a esto.
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¿Al final en que quedó lo del "poderoso satélite? ¿Se puede construir y lanzar tan solo en 20 meses? ¿No es un lapso muy breve?

Saludos

gato
 
Estimado Gato:

No es un "poderoso satélite", como erróneamente se titula el Tópico, sino sólo un satélite absolutamente comercial donde todo ya está probado y todo ya ha sido fabricado (tengo entendido que EDAS tiene varios de estos satélites en orbita) así que no hay nada que inventar. Y si EADS se comprometió con el plazo, supongo qure podrán cumplir, sino, multas draconianas y listo. En realidad es casi 100% civil y de militar va a tener casi nada, al contrario de cuando empezó este proyecto.

"Poderosos" Saludos.
 
Estimado Gato:

No es un "poderoso satélite", como erróneamente se titula el Tópico, sino sólo un satélite absolutamente comercial donde todo ya está probado y todo ya ha sido fabricado (tengo entendido que EDAS tiene varios de estos satélites en orbita) así que no hay nada que inventar. Y si EADS se comprometió con el plazo, supongo qure podrán cumplir, sino, multas draconianas y listo. En realidad es casi 100% civil y de militar va a tener casi nada, al contrario de cuando empezó este proyecto.

"Poderosos" Saludos.

Ah! OK, lo que pasa es que me pareció un lapso demasiado breve, esperemos el lanzamiento para el bicentenario entonces.

Mis saludos también.

gato
 
Un gran saludo a todos los foristas en mi primer post!!!!!:hurray:

Así es, la verdad es que el sátelite (civico-militar) será operado por la FACH en conjunto con algunas Universidades para ver temas de pesca, urbanización estudio de terrenos, forestación y clima (para realizar ciertos estudios de cambio climático)

Pero también esas imágenes que puede tomar pueden ser usadas como material militar. Ahora bien, yaunque es geoestacionario, sus utilidades militares como tal son muy bajas (ya que dara la vuelta al mundo más rápido que la rotación de la tierra).

Ahora como el satélite va a pasar por varios paises, se podría compartir la información no militar con nuestros vecinos...sobre todo con quienes no poseen esa tecnología para ayudarlos en su desarrollo y porque no, en la lucha contra el terrorismo.

SALUDOS CORDIALES! :cheers2:
 

Armisael

Forista Borgeano
Colaborador
(...)Ahora como el satélite va a pasar por varios paises, se podría compartir la información no militar con nuestros vecinos...sobre todo con quienes no poseen esa tecnología para ayudarlos en su desarrollo y porque no, en la lucha contra el terrorismo.(...)

Bienvenido BrahMos

Creo que debería aclarar un par de cosas:

1) No es geoestacionario (el geoestacionario permanece en un punto del espacio "fijo" cubriendo en forma permanente la misma superficie del globo), lo que no es el caso de este satélite (ni el precio -$$$$$$$- del mismo).

2) Los satélites tiene limitaciones de uso, por el tema de la vida útil de los equipos (arriba no hay mantenimiento) y la extensión de la vida y capacidad de los paneles solares y el tiempo de recarga baterías, por lo cual no funcionana 24/24 horas, sino por lapsos limitados de tiempo (de acuerdo a la capacidad, desde algunos minutos hasta algunas horas por día), por lo cual se lo "enciende" cuando está sobre su blanco.

3) Por esa razón, y dado que la capacidad de generar información que tiene este tipo de sistemas es limitada (temporal y espacialmente), se debe considerar que el tiempo de uso "prestado" a otros usuarios, se resta del total disponible para uno, creo que Chile tiene demasiadas necesidades propias (de estudio, geográficas y ambientales), como para permitirle un préstamo a terceros.

De hecho, creo que ni siquiera va a permitir una cobertura completa del territorio de Chile en una sola pasada (no es moco de pavo, son más de 5500 km de una).

Saludos.
 
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