Asuntos Aeroespaciales

Desde el espacio le tienen que acertar a un barco de 90m x 50m

 

Eagle_

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La razón por la cual no usan paracaidas es que usando éstos, el cohete caería en cualquier lado del océano y se hundiría.

La primera etapa del Falcon 9 se separa del resto del lanzador fuera de la atmósfera terrestre. En ese momento mediante el uso de thrusters hacen una maniobra para girar el cohete 180° para que el mismo caiga de cola. Luego reencienden brevemente los motores para guiar el mismo hacia el sitio de aterrizaje. Cuando estan reentrando en la atmósfera vuelven a encender motores para frenar la caida y a partir de ahi el guiado es aerodinámico. Cuando están llegando al lugar de aterrizaje, que es una barcaza en el medio del oceano que ellos llaman "autonomous spaceport drone ship" el cohete se enciende por última vez para hacer un aterrizaje de precisión.



No creo que sea el por qué, si la cuestión es sólo que el cohete se hundiría, en vez de inventar un sistema mucho más complejo de guiado y de propulsión, se le pueden anexar flotadores, más baratos, para luego recuperarlo.

Y lo de tener que acertarle a una plataforma, no es así, hoy la tecnología GPS u otros tipos de guiados, como guía láser o por ondas de radio es precisa al nivel de centímetros, como se ve en autos que se conducen solos de una punta a la otra de Estados Unidos, en pilotos automáticos de siembra directa en el agro que mediante GPS avanzan a niveles increiblemente precisa, en aviones, e infinidad de sisemas... Así que luego de ubicar la barcaza en un punto estratégico con un estudio de trayectoria balística previa, para el sistema de guía y propulsión/maniobra del aparato no le costará trabajo ubicarse.

Y te concluyo, sigo sin entender la lógica, se gasta muchísimo más en sistemas más complejos y propensos a fallas, como ya hemos visto al menos dos aterrizajes fallidos, que les costó carísimo diseñar y fabricar, para que por su diseño y sistema de aproximación, terminaron en la destrucción de los mismos. Con unos paracaidas, con un costo que es una fracción mínima a la del aterrizaje propulsado, no se destruían ninguno de los dos.

Saludos!
 
No creo que sea el por qué, si la cuestión es sólo que el cohete se hundiría, en vez de inventar un sistema mucho más complejo de guiado y de propulsión, se le pueden anexar flotadores, más baratos, para luego recuperarlo.

Y lo de tener que acertarle a una plataforma, no es así, hoy la tecnología GPS u otros tipos de guiados, como guía láser o por ondas de radio es precisa al nivel de centímetros, como se ve en autos que se conducen solos de una punta a la otra de Estados Unidos, en pilotos automáticos de siembra directa en el agro que mediante GPS avanzan a niveles increiblemente precisa, en aviones, e infinidad de sisemas... Así que luego de ubicar la barcaza en un punto estratégico con un estudio de trayectoria balística previa, para el sistema de guía y propulsión/maniobra del aparato no le costará trabajo ubicarse.

Y te concluyo, sigo sin entender la lógica, se gasta muchísimo más en sistemas más complejos y propensos a fallas, como ya hemos visto al menos dos aterrizajes fallidos, que les costó carísimo diseñar y fabricar, para que por su diseño y sistema de aproximación, terminaron en la destrucción de los mismos. Con unos paracaidas, con un costo que es una fracción mínima a la del aterrizaje propulsado, no se destruían ninguno de los dos.

Saludos!

Estás pensando en una caja chica. Cuando dominen ésta tecnología sería aplicable a otros vehículos y a aterrizajes interplanetarios. Ya la NASA y otra empresa han probado cohetes de aterrizaje vertical.
 

Eagle_

Colaborador
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Sí, estás repitiendo lo que ya dijo Joseph, nada nuevo y lo habíamos entendido, sólo contesto de por qué no es la lógica usar propulsión sólo porque se hundan al reingresar.
 
Tenés que entender que la misión primaria es poner en órbita la cápsula Dragon, por la que SpaceX cobra contratos multimillonarios. El aterrizaje en una plataforma marina para la recuperación de la primer etapa del cohete es algo secundario, y en etapa experimental. Es obvio que van a tener fallas hasta tener la tecnología bien aceitada, pero una vez que logren poner todo a punto, la reducción de costos por lanzamiento va a ser abrumadora. Con un paracaidas es imposible actualmente recuperar la etapa de otro lado que no sea del fondo del mar. A SpaceX todavía le quedan varios contratos de reabastecimiento a la EEI como para seguir perfeccionando el sistema.
 
Averga... Voy a intentar responder a la incógnita de @Eagle_ con respecto al porque utilizar propulsión para hacer aterrizar la primer etapa, en vez de dejar que el cohete americe suavemente mediante un paracaídas como los SRB del Shuttle; con un video de animación de SpaceX donde se ve el sistema funcionando en un Falcon Heavy. Masomenos esto es lo que pretende SpaceX para cuando tenga todo el circo armado y funcionando.
Eagle, prestale atención al pequeño(pero no menos importante) detalle de la "barcaza" sobre la cual aterrizan los boosters y el bloque central de la primer etapa del FH ;)

 

Eagle_

Colaborador
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Mmmm veo el video y no, sigo sin entenderlo por qué ese sistema puede ser más eficiente que abrir un paracaidas en la última etapa en vez de usar los propulsores para el aterrizaje vertical.
 

Eagle_

Colaborador
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Con un paracaidas es imposible actualmente recuperar la etapa de otro lado que no sea del fondo del mar. A SpaceX todavía le quedan varios contratos de reabastecimiento a la EEI como para seguir perfeccionando el sistema.

Por qué? Acaso los boosters del shuttle no flotaban? En caso de no flotar, no es más eficiente anexarle flotadores al momento de tocar el agua?
 
La idea es que aterricen en tierra firme, mas precisamente, en Cabo Cañaveral.
Aterrizando de forma vertical en la misma base de lanzamiento se ahorran el tener que recorrer kms y kms para ir a buscar el cohete al lugar de amerizaje, el tratamiento anti-salitre, tener que diseñar el cohete para resistir las tensiones que generaría el estar a merced del oleaje(por mas corto que sea el tiempo de exposición, si tu meta es reutilizarlo, el cohete no se tiene que partir en dos por culpa de las olas) y el impacto no controlado contra el agua. O sea, de esta forma aterriza en el patio de atrás de Cabo Cañaveral y no tenes mas que ir a buscarlo con un vehículo terrestre para llevarlo de nuevo a los talleres a que le hagan el recauchutaje necesario para que este listo para el próximo lanzamiento, ahorrándose millones en el proceso.
En fin, algunos números interesantes habrán hecho para que terminen eligiendo este método y que no dejen que el cohete caiga al mar con un paracaídas, un flotador y un GPS para que lo encuentren.

Por cierto, también esta la variante rusa de cohetes reutilizables que regresan a su propia base planeando/volando. Pero estos nunca dejaron de ser mas que un interesante proyecto.
 

Eagle_

Colaborador
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Creo que se podría considerar un aterrizaje con paracaidas en tierra y el uso de cohetes activados por radio altímetro a muy baja altura sólo para aminorar la tasa de descenso en los últimos 2/3 metros, como se han usado en viajes a Marte, estimo que sería menos costoso que hacer un descenso exclusivamente por control de propulsión... Pero seguramente, los que saben son ellos.
 

Shandor

Colaborador
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Rusia achica su programa espacial

Rusia recortará el gasto en su programa espacial en más de un tercio durante los próximos 10 años debido a la crisis económica que la obliga a desechar planes para desarrollar un cohete propulsor superpesado.
La exploración espacial es tema de orgullo nacional en Rusia, desde la "carrera espacial" de tiempos de la Guerra Fría con EE.UU. Pero colapsó junto a la ex URSS. Putin intenta revivirla y por ello planea desarrollar su propia estación espacial para 2023, aunque las restricciones económicas se lo impiden por ahora.
cronista comercial
 

Shandor

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Rusia deja la Estación Espacial Internacional y planea construir una propia
Crisis en el Espacio.Estaría lista en 2023. Lo anunció el presidente Putin. Criticó que desde la actual estación sólo se ve el 5% de su país.

¿Los últimos? Mikhail Kornienko, Gennady Padalka y Antón Shkaplerov son rusos y están hoy en la Estación Espacial Internacional..


Entre 1957 y 1975, los Estados Unidos y la Unión Soviética, como parte de una rivalidad cultural y tecnológica, competían por ser la primera nación en colocar un satélite en órbita y apoyar un hombre sobre la faz de la Luna. Cuarenta años más tarde, vuelven a reeditar aquella carrera espacial que mantuvo al mundo en vilo. Es que Rusia planea abandonar la Estación Espacial Internacional (EEI) que comparte con varios países, para desplegar un módulo propio.
Esta iniciativa fue confirmada por el mandatario ruso, Vladimir Putin, quien enfatizó que su país construirá de aquí a 2023 su propia estación espacial.
Uno de los puntos calientes es que desde la EEI, que orbita a una distancia de entre 335 y 460 km de la Tierra y pesa más de 450 toneladas, sólo se puede ver el 5% del territorio ruso. "Necesitamos una estación desde la cual podamos controlar la superficie total de nuestro gigantesco suelo", argumentó el jefe del Kremlin.
Rusia coopera desde 1998 en la EEI, de la que participan 16 países, entre los que se cuentan Estados Unidos, Japón y varias naciones de Europa. Meses atrás, las dos potencias líderes habían acordado seguir operando y financiando a la par la EEI. Al menos, hasta 2024, fecha en la que se especuló que despacharían una estación nueva en conjunto. Sin embargo, la relación política entre las partes -por el bloqueo impuesto por la Unión Europea y los Estados Unidos a Rusia por el conflicto con Ucrania- atraviesa una gran tensión.
Lo que no precisó Putin es si, como se había especulado, desacoplará parte de su módulo en la EEI para ensamblar su propio laboratorio espacial o apunta a un proyecto más ambicioso que modernizar los recursos ya existentes.
Hace años que Rusia viene especulando con su propia estación espacial y este conflicto parece acelerar los planes. Según trascendió, la Roskosmos, agencia espacial rusa, tiene en carpeta la puesta de su PPOI (Infraestructura Orbital Tripulada del Futuro), una estación espacial construida con los módulos del segmento ruso de la EEI, que conservaría la misma orbita.
Pero a finales de 2014 se destapó otra propuesta del instituto TsNIIMash para lanzar los módulos de esta estación sin pasar por la EEI. La principal ventaja de esta opción era articular una estación propia hacia fines de 2017, a la que bautizarían como RVS (Estación Rusa de Alta Latitud). Esta sería similar a la PPOI, pero estaría emplazada en una órbita más inclinada e independiente de la EEI, lo que podría cubrir parte del territorio ruso, como pretende su presidente.
El problema de fondo es que, pese a los esfuerzos de las agencias por contar con sus propios cohetes, hasta ahora tanto la Unión Europea como Estados Unidos dependen en gran medida de los recursos rusos para llegar hasta la EEI.
clarin
 

Negro

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La nave Progress se salta la órbita prevista y se pospone el acoplamiento a EEI
© Foto: NASA

17:53 28.04.2015(actualizada a las 18:18 28.04.2015) URL corto

Una contingencia ha inquietado este martes al sector espacial ruso: el carguero Progress-M27M tras despegar de la base de Baikonur se situó en una órbita superior a la prevista por causas que aún se investigan y por el momento no puede acoplarse a la Estación Espacial Internacional (EEI).
El vuelo que inicialmente estaba programado que duraría seis horas, se ha prolongado dos días para aclarar lo sucedido.

A este respecto el experto en esta área Ígor Afanásiev cree que "la situación no es irremediable y puede ser corregida".


El Progress-M27M lleva a la plataforma orbital más de dos toneladas y media de diversas cargas, entre ellas combustible, oxígeno, alimentos, equipos para experimentos científicos y una réplica de la bandera roja que fue izada sobre el edificio del Reichstag en Berlín en mayo de 1945 y simbolizó la victoria sobre la Alemania nazi.

Algo salió mal

El lanzamiento se realizó a la hora prevista, a las 10:10 hora Moscú (7:10 GMT) y nueve minutos más tarde la nave se separó de la tercera fase del cohete como estaba planificado.

Nada presagiaba una emergencia e incluso el portavoz del Centro de Control de Vuelos Espaciales dijo a la agencia RIA Nóvosti que el acoplamiento a la EEI tendría lugar seis horas después.

Por su parte el fabricante del cohete afirmó que los propulsores funcionaron con normalidad.

Sin embargo, media hora más tarde se anunció que las estaciones terrestres no recibían los datos telemétricos completos de la nave espacial.

"Se ha descartado llevar a acabo el acoplamiento a las 16:07 hora Moscú y el vuelo se va a prolongar 48 horas", informó el portavoz del Centro de Control de Vuelos Espaciales.

El funcionario precisó que no se había podido confirmar el despliegue de algunos elementos de la nave.

Se pierde contacto con la nave

Los técnicos del Centro de Control de Vuelos Espaciales intentaron establecer contacto con la nave espacial que aún se encontraba en la zona de visibilidad de las estaciones terrestres.

La primera oportunidad se presentó a las 11:30, sin embargo los intentos fueron infructuosos.

"Veíamos a la nave en los radares, pero no logramos recibir datos telemétricos nuevos en su primera vuelta alrededor de la Tierra", comunicó el portavoz.

Según sus palabras, la nave se encuentra en una órbita elíptica que ronda los 278 kilómetros en el apogeo, 38 km por encima de la trayectoria prevista.

Una fuente en la industria espacial atribuyó este hecho a un posible desajuste del motor de la tercera fase del cohete.

Causas y conjeturas

El experto en propulsores espaciales Ígor Afanasiev cree que es inapropiado especular sobre las causas que generaron esta situación, ya que "no es irremediable y puede ser corregida".

"La nave tiene autonomía para volar cierto tiempo, un período en el que habitualmente se resuelven los problemas, y en el mejor de los casos se puede posponer el acoplamiento y en el peor, simplemente no se acoplará", estimó.

Al mismo tiempo, opina que el personal haría todo lo posible para impedir el peor escenario y el último recurso sería recurrir al acoplamiento manual de la nave.

http://mundo.sputniknews.com/espacio/20150428/1036870676.html#ixzz3YefVn3Is
 

rojo

Desde el Nacional
Colaborador
Revelaron la zona donde puede caer la nave Progress: ninguna gran ciudad está a salvo


Después de los intentos fallidos por retomar el control del carguero, fuentes de la agencia espacial rusa filtraron cómo son los pasos para que abandone su órbita y caiga hacia la Tierra

Fuentes del Centro de Control de Vuelos Espaciales (CCVE) de Rusia revelaron a la agencia Interfax, también de ese país, cuál es el rango posible para la caída del carguero espacial Progress M-27M lanzado este martes y declarado "fuera de control".



"Si no se logra salvar la nave, tendrá lugar su salida de la órbita. En ese caso, los restos que no se quemen a su paso por la atmósfera caerán en cualquier punto entre el paralelo 52 norte y el paralelo 52 sur", dijo la fuente de CCVE citada por Interfax.

Esto significa que casi todas las grandes ciudades del planeta, menos Moscú, están en la amplia zona en la que Progress podría precipitarse, pero no se sabe cuándo ocurrirá esto. Ya diosiete vueltas a la Tierra y con cada minuto disminuyen las posibilidades de maniobrarlo.


 
Testing successful of a new morphing wing tech that has potential to save fuel, reduce weight & decrease aircraft noise:


NASA successfully completed flight tests of a morphing wing technology. Flap angles were adjusted from -2 degrees up to 30 degrees during the six months of testing.
Credits: NASA


NASA Successfully Tests Shape-Changing Wing for Next Generation Aviation
NASA researchers, working in concert with the Air Force Research Laboratory (AFRL) and FlexSys Inc., of Ann Arbor, Michigan, successfully completed initial flight tests of a new morphing wing technology that has the potential to save millions of dollars annually in fuel costs, reduce airframe weight and decrease aircraft noise during takeoffs and landings.

The test team at NASA’s Armstrong Flight Research Center in Edwards, California, flew 22 research flights during the past six months with experimental Adaptive Compliant Trailing Edge (ACTE) flight control surfaces that offer significant improvements over conventional flaps used on existing aircraft.

“Armstrong’s work with ACTE is a great example of how NASA works with our government and industry partners to develop innovative technologies that make big leaps in efficiency and environmental performance,” said Jaiwon Shin, associate administrator for NASA’s Aeronautics Research Mission Directorate at the agency’s headquarters in Washington. “This is consistent with the agency’s goal to support the nation’s leadership in the aviation sector.”

AFRL began work with FlexSys in 1998 through the Small Business Innovative Research (SBIR) program. AFRL and FlexSys developed and wind tunnel tested several wing leading and trailing edge designs for various aircraft configurations through 2006. In 2009, AFRL and NASA’s Environmentally Responsible Aviation (ERA) project agreed to equip a Gulfstream III jet with ACTE flaps designed and built by FlexSys, incorporating its proprietary technology.

ACTE technology, which can be retrofitted to existing airplane wings or integrated into entirely new airframes, enables engineers to reduce wing structural weight and to aerodynamically tailor the wings to promote improved fuel economy and more efficient operations while also reducing environmental and noise impacts.

"The completion of this flight test campaign at Armstrong is a big step for NASA’s Environmentally Responsible Aviation Project," said ERA project manager Fay Collier. "This is the first of eight large-scale integrated technology demonstrations ERA is finishing up this year that are designed to reduce the impact of aviation on the environment."

Flight testing was key to proving the concept’s airworthiness. The test aircraft was flown with its experimental control surfaces at flap angles ranging from -2 degrees up to 30 degrees. Although the flexible ACTE flaps were designed to morph throughout the entire range of motion, each test was conducted at a single fixed setting in order to collect incremental data with a minimum of risk.

“We are thrilled to have accomplished all of our flight test goals without encountering any significant technical issues,” said AFRL Program Manager Pete Flick, from Wright-Patterson Air Force Base in Ohio. “These flights cap 17 years of technology maturation, beginning with AFRL’s initial Phase 1 SBIR contract with FlexSys, and the technology now is ready to dramatically improve aircraft efficiency for the Air Force and the commercial aviation industry.”

All the primary and secondary objectives for the test were successfully completed on schedule and within budget. The results of these flight tests will be included in design trade studies performed at NASA’s Langley Research Center in Hampton, Virginia, for designing future large transport aircraft.

For more information on NASA’s research in next generation aircraft, visit:

http://www.nasa.gov/subject/7565/future-aircraft/


Traducción automática:

La NASA prueba con éxito Shape-Cambio de ala para la próxima generación de Aviación
Investigadores de la NASA, trabajando en conjunto con el Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL) y FlexSys Inc., de Ann Arbor, Michigan, completado con éxito las pruebas de vuelo iniciales de una nueva tecnología ala morphing que tiene el potencial de salvar millones de dólares al año en costos de combustible , reducir el peso del fuselaje y disminuir el ruido de aeronaves durante los despegues y aterrizajes.

El equipo de pruebas en el Centro de Investigación de Armstrong Vuelo de la NASA en Edwards, California, voló 22 vuelos de investigación durante los últimos seis meses con experimentación adaptativa Cumple borde posterior (ACTE) las superficies de control de vuelo que ofrecen mejoras significativas con respecto a las aletas convencionales utilizados en los aviones existentes.

"El trabajo de Armstrong con ACTE es un gran ejemplo de cómo funciona la NASA con nuestros socios de gobierno y la industria para desarrollar tecnologías innovadoras que hacen grandes saltos en la eficiencia y el desempeño ambiental", dijo Jaiwon Shin, administrador asociado del Directorio de Misiones de Investigación Aeronáutica de la NASA en la sede de la agencia en Washington. "Esto es consistente con el objetivo de la agencia para apoyar el liderazgo de la nación en el sector de la aviación".

AFRL comenzó a trabajar con FlexSys en 1998 a través del programa de Pequeños Negocios Innovadores de Investigación (SBIR). AFRL y FlexSys desarrollados y túnel de viento a prueba varios ala anterior y posterior diseños de última generación para diversas configuraciones de aviones hasta el 2006. En el 2009, el proyecto de la NASA Ambientalmente Responsable de Aviación (ERA) AFRL y acordaron dotar a un jet Gulfstream III con solapas de ACTE diseñados y construidos por FlexSys , la incorporación de su tecnología patentada.

Tecnología de ACTE, que se puede reequipar con alas de los aviones existentes o integrado en su totalidad los nuevos fuselajes, permite a los ingenieros para reducir ala peso estructural y adaptar aerodinámicamente las alas para promover una mejor economía de combustible y operaciones más eficientes y al mismo tiempo reducir el impacto ambiental y de ruido.

"La finalización de esta campaña de pruebas de vuelo en Armstrong es un gran paso para el Proyecto Aviación Ambientalmente Responsable de la NASA", dijo el director del proyecto ERA Fay Collier. "Esta es la primera de las demostraciones de tecnología integrada de ocho a gran escala ERA está terminando este año que están diseñados para reducir el impacto de la aviación sobre el medio ambiente."

Las pruebas de vuelo fue clave para demostrar la aeronavegabilidad del concepto. El avión de prueba fue volado con sus superficies de control experimentales en ángulos de solapa que van desde -2 grados hasta 30 grados. Aunque las aletas flexibles de ACTE fueron diseñados para transformarse a través de todo el rango de movimiento, cada ensayo se realizó en un entorno fijo solo con el fin de recoger datos incrementales con un mínimo de riesgo.

"Estamos encantados de haber logrado todos nuestros objetivos de pruebas de vuelo sin encontrar problemas técnicos importantes", dijo el Gerente del Programa de AFRL Pete Flick, de Wright-Patterson Air Force Base en Ohio. "Estos vuelos cap 17 años de tecnología de la maduración, a partir de la fase inicial de 1 contrato SBIR del AFRL con FlexSys, y la tecnología ahora está listo para mejorar drásticamente la eficiencia de las aeronaves de la Fuerza Aérea y la industria de la aviación comercial."

Todos los objetivos primarios y secundarios de la prueba se completaron con éxito a tiempo y dentro del presupuesto. Los resultados de estas pruebas de vuelo se incluirán en los estudios comerciales de diseño realizados en el Centro de Investigación Langley de la NASA en Hampton, Virginia, para el diseño de un futuro avión de transporte de gran tamaño.

Para obtener más información sobre la investigación de la NASA en los aviones de nueva generación, visite:
 
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