La Real Fuerza Aérea del Reino Unido (RAF) continua buscando compradores para sus aeronaves C-130J Super Hércules, cuyo retiro del servicio activo se concretó en el mes de junio del año 2023 realizándose un vuelo de despedida. Se trataría en total de unas 14 unidades puestas a la venta, a saber, una aeronave en su versión C-130J (C5) y trece en su variante C-130J-30 de fuselaje alargado (C4).

La Autoridad de Ventas de Equipos de Defensa (DESA, por su sigla en inglés) del Ministerio de Defensa británico afirmó que se tienen a varios destinos potenciales en lista pero ninguno ha mostrado avances: “La Autoridad de Ventas de Equipos de Defensa (DESA) está gestionando el programa de ventas en nombre del Ministerio de Defensa y continúa buscando activamente ventas con varios compradores potenciales”.

Cabe destacar, entre los mencionados destinos potenciales, el interés de la Fuerza Aérea de Grecia para adquirir parte de los aviones C-130J Super Hércules que retiró la RAF. En esa línea se desprendían reportes del medio especializado Janes fechados a finales del 2022, información que hablaba de contactos iniciales entre el Ministerio de Defensa Nacional de la República de Grecia y la empresa Marshall Aerospace and Defence Group del Reino Unido, la cuál fue seleccionada como principal contratista para dar soporte técnico para los futuros usuarios de la plataforma.

El proceso de desprendimiento de aeronaves C-130J por parte del Reino Unido fue iniciado antes de lo previsto en los planes iniciales, respondiendo en su momento a una crisis de financiamiento para la defensa que tornaba necesaria una nueva estructuración de las fuerzas armadas en su conjunto. Para dar una respuesta a la carencia que representaría la pérdida de capacidades asociadas al Super Hércules, tal como puede ser el caso de el despliegue de fuerzas aerotransportadas, la RAF comenzó a utilizar sus nuevas aeronaves A-400M fabricadas por Airbus, de las cuáles posee unas 22 unidades.

Resulta útil recordar que los C-130J de la RAF fueron adquiridos en el año 1993, siendo comprados como reemplazo de las antiguas unidades de Hércules C.Mk 1, también conocidas como la flota “Legacy”. Al momento de emprender dicha operación (en el mes de diciembre de dicho año), la version J del Super Hércules era la mas moderna en el mercado, de los cuáles se incorporaron 10 unidades. Un añadido de 15 aviones en su versión C-130J-30 de fuselaje extendido también fueron compradas en esa ocasión. En cerca de 20 años de servicio los Super Hercules de la RAF volaron una gran cantidad de horas de vuelo, muchas mas de las proyectadas inicialmente; sin embargo su retiro, como fue mencionado, llegó también de forma acelerada, ni más ni menos que 10 años antes.

*Imágenes utilizadas a modo ilustrativo

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8 COMENTARIOS

    • Esos C-130J-30 deben estar cuasi molidos por su participación en los conflictos de Irak y Afganistán entre otros. Dependiendo del precio al que los ofrezcan podrían ser una compra de oportunidad, pero su precio unitario debería rondar los 40/45 palos verdes.

  1. No creo en absoluto que Chile este interesado en su compra. En el 2019 se estrelló un Hercules C-130 en mitad de camino hacia la Antártida. Lo habían comprado usado, en 2014, y fue fabricado en 1978, y ya venía dando problemas. Murieron casi 40 personas.

  2. Walter, en algún momento se dijo que el accidente fue por un problema con las hélices, qua habían sido substituidas por un modelo más moderno. Fue así?

    • El caso del avión Hercules C-130 en 2019 en mitad de camino hacia la Antártida está envuelto en varios problemas, se investigó como cuasi delito de homicidio, lo cual apuntó a que fue una tragedia evitable. No obstante nunca, pero nunca, se mencionó algo sobre la hélice. Los causales del accidente apuntan al avión, muy viejo, y con pobre mantenimiento y posibles condiciones climáticas adversas y un pésimo manejo de protocolos por parte de los oficiales chilenos. Un cabo primero, especialista electro electrónico aéreo, detectó algo y le comunicó a otro para chequear, sobre algo mal en unos medidores o sensores, no tenía un repuesto para cambiar, dieron parte pero un oficial no quiso comprometer el plan de vuelo, ni esperar por un repuesto que habría que pedir a Santiago. El repuesto era para el actuador del “oil cooler flap” porque presentaba una falla. Un dispositivo que regula el flujo del aire que enfría el aceite del motor, también se reportó antes de salir el vuelo un desperfecto que afectaba a 2 motores de los 4, relacionado con la cantidad de combustible. Tampoco los técnicos tuvieron agallas para advertir con fuerza que el avión no saliera, algo que me recuerda al accidente del transbordador espacial Challenger. Incluso el técnico cabo primero que descubrió el tema viajaba en el avión que se estrelló, y con mucha inocencia le comunicó a su compañero que iba a estudiar el tema durante el vuelo y le mandó un mensaje de audio a su mamá antes de salir el vuelo sobre su preocupación por las demoras que estaba causando por el tema del repuesto. Cuando se perdió comunicación con el avión y se declaró perdido, los militares y el gobierno afirmaron que el avión estaba muy bien en mantenimiento e incluso el jefe de meteorología afirmó que hacía buen tiempo, todos se alinearon en que no había de que preocuparse. Luego poco a poco se fueron descubriendo mentiras ante la falta de repuestas que exigían los familiares. La mamá trajo el audio lo que se encaminó la investigación. El oficial de meteorología fue llevado a juicio, por no ser preciso en sus informes. Hubo hermetismo en tema, con el transcurrir de los años se fueron descubriendo otras cosas, como que tenía mínimo 37 años de antigüedad cuando fue entregado a Chile, otros hablan de 40 años, y que había pasado los últimos 5 años a la intemperie, en el cementerio de los aviones, o The boneyard (AMARG), luego le hicieron un mantenimiento y se lo entregaron a Chile. Aun así a ese avión le asignaron viajar a través del Pasaje del Drake, una de las peores zonas por su meteorología, pero claro, algunos jefes insistieron en que el comandante del avión es el que tenía la última palabra de que si sale el avión o no, pero la fiscalía apunta que el problema es institucional, es decir de la Fuerza Aérea.

  3. El Juliette-30 tiene la desventaja de transportar menos peso – pero con mas volumen – que el C-130 J de série. El fuselaje alargado alargardo crea un aumento en MTOW y consecuente disminución en el payload. Creo ser por dicha razón que hasta ahora no se vendieron

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