Recientemente, Argentina ha manifestado su interés en fortalecer sus lazos con la de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), buscando convertirse en un socio global de esta organización. Esta iniciativa, que responde a los cambios y acercamiento de la política argentina y a los desafíos emergentes en materia de seguridad, plantea una serie de interrogantes sobre el impacto y las posibilidades que esta asociación podría ofrecer tanto para Argentina como para la OTAN.

La pregunta principal es que podemos esperar de la idea de Argentina como socio global de la OTAN, examinando las implicaciones políticas, militares y estratégicas de esta propuesta, así como los potenciales beneficios y desafíos que podría conllevar para ambas partes.

En primer lugar, ha de enfatizarse que la propuesta por parte del Ministerio de Defensa va en línea por la política exterior de la presidencia, lo que presentaría un impacto en el ámbito del instrumento militar argentino y por ende una relación político-militar.

En ese sentido, la posibilidad de ser considerado por la Organización del Atlántico del Norte como socio global traería consigo una mayor participación en las misiones de operaciones de paz, en donde actualmente la Argentina tiene participación, pero también fortalecería el vínculo en el sentido de la seguridad colectiva garantizando un frente común de naciones que garantice la paz. 

Por otro lado, se podría pensar en un apoyo a la vigilancia y control de los ámbitos marítimos, un aspecto en donde la Argentina tiene un control importante, pero que no llega a ser del todo efectivo si hablamos de la disponibilidad de medios aéreos y marítimos con los que cuenta la Armada Argentina y la Prefectura Naval. En ese marco, cabe resaltar que se debe tener en cuenta la presencia y puja marítima de China tanto en el Océano Pacífico cómo Atlántico del Sur, con lo cual podría generarse un intercambio de información y/o apoyo en cuestiones de pesca ilegal y control de los espacios marítimos. 

Uno de los aspectos clave de la propuesta de Argentina como socio global de la OTAN se centra en la modernización y adiestramiento de sus Fuerzas Armadas para cumplir con los estándares y procedimientos establecidos por la OTAN. Esta iniciativa busca no solo fortalecer las capacidades militares de Argentina, sino también facilitar la interoperabilidad y la cooperación con las fuerzas aliadas de la OTAN en operaciones conjuntas.

En este sentido, se prevé una serie de acciones encaminadas a alinear las estructuras, procedimientos y doctrinas de las Fuerzas Armadas argentinas con los de la OTAN. Esto implica la revisión y actualización de los protocolos de entrenamiento y operativos, así como la incorporación de tecnologías y tácticas modernas utilizadas por las fuerzas aliadas de la OTAN.

Gracias a ello, se podrían promover mayores contactos y colaboraciones entre las fuerzas argentinas y las de la OTAN, incluyendo ejercicios militares conjuntos, intercambio de experiencias y capacitaciones especializadas. Estas actividades no solo permitirán a las Fuerzas Armadas argentinas familiarizarse con los estándares y prácticas de la OTAN, sino también adaptar y mejorar sus propias capacidades en función de las necesidades y desafíos contemporáneos.

Otras líneas que pueden llegar a contemplarse van de la mano con la ciberdefensa, un aspecto relevante que desde las Fuerzas Armadas se ha estado trabajando en los últimos años y que marca una de las primeras líneas de la defensa. En ese sentido, podría llegar a esperar una política más sólida, fortalecimiento y mejorando los sistemas e infraestructuras críticas, como así también el apoyo y asesoramiento de equipos técnicos.

Por último, como socio global de la OTAN, se podría esperar que el ámbito de la defensa pueda recibir apoyo y mayor coordinación en materia de desinformación, especialmente en el contexto de las pujas geopolíticas, los medios de comunicación y su impacto en las estructuras de defensa. Esta colaboración podría incluir estrategias conjuntas para contrarrestar la desinformación y proteger la integridad de las operaciones militares y de seguridad.

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4 COMENTARIOS

  1. Estimada María Victoria, estás son las consecuencias positivas, podrías mencionar cual pueden ser las negativas ? Saludos.

  2. Sra. Pierucci creo que meternos en esa alianza muy sesgada y combativa distraera los pocos fondos operativos de nuestras fuerzas armadas en nuestra región Creo que debemos ocuparnos de. Nosotros mismos y quien venga por aqui hacer los ejercicios q correspondan

  3. Es una pesima idea. Todos los beneficios se pueden obtener sin necesidad de ser socio de nadie y continuar siendo neutrales.

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