El Departamento de Defensa de EE.UU. anunció el pasado martes 12 de marzo un nuevo paquete de asistencia militar para Ucrania. La decisión fue descrita como una medida extraordinaria para atender algunas de las necesidades de seguridad y defensa más apremiantes de Ucrania. La nueva ayuda, valorada en hasta U$D 300 millones de dólares, contempla capacidades para apoyar las necesidades inmediatas de defensa antiaérea, artillería y antitanque de Ucrania.

El paquete de ayuda militar de EE.UU. llega en un momento crítico para las Fuerzas Armadas de Ucrania, las cuales han tenido que ceder terreno en todos los frentes ante la creciente presión de las fuerzas invasoras rusas. Pese a que los avances han sido limitados y costosos, se teme que las fuerza locales estén llegando al límite de sus recursos materiales y humanos, lo que podría dejar expuesto alguno de los frentes de batalla.

Esta situación crítica se debe en parte a los limitados recursos humanos que dispone Kyiv, los cuales ya están mostrando el desgaste de más de dos años de combates ininterrumpidos. La fallida contraofensiva de verano también está pasando factura, ya que la operaciones ejecutadas consumieron una considerable parte de los efectivos entrenados en occidente, así como medios provistos por países aliados.

Otro de los punto críticos ha sido la pausa en el envío de nuevos paquetes de ayuda militar por parte de EE.UU., iniciativa que llegó a un parate obligado luego de que se agotaran los recursos presupuestarios a fines del 2023. El alto por parte de Washington, sumado a la lentitud europea en hacer traccionar sus planes de ayuda, pusieron a Ucrania en una posición crítica, particularmente en lo que refiere a disponibilidad de munición de todo tipo.

Repitiendo los primeros meses de la invasión, las fuerzas locales se vieron superadas por el poder de fuego ruso, el cual no solo ha logrado proveerse de la industria propia, sino que ha recibido asistencia de países como Irán y Corea del Norte. Llamativamente, ayuda que se materializó de manera más veloz que la implementada por occidente.

Conforme a lo informado por la cartera de defensa de EE.UU., este paquete extraordinario se logró concretar gracias a que se identificaron ahorros en contratos de financiación suplementaria previamente consignada que pueden aplicarse para reponer las existencias del Departamento de Defensa.

“…El anuncio de hoy (por 12 de marzo) proporciona un paréntesis a corto plazo, pero no es ni de lejos suficiente para satisfacer las necesidades del campo de batalla de Ucrania. Sin financiación suplementaria, el Departamento de Defensa seguirá teniendo dificultades para satisfacer las necesidades de capacidades de Ucrania en un momento en que Rusia está presionando sus ataques contra las fuerzas y ciudades ucranianas…” aclaró la gacetilla emitida por la cartera de defensa estadounidense.

Las capacidades incluidas en el paquete extraordinario incluye:

Misiles antiaéreos FIM-92 Stinger
Munición adicional para los sistemas de artillería de largo alcance y precisión M142 HIMARS
Munición de artillería de 155 mm, incluida del tipo alto explosivo y de racimo mejorada de doble propósito
Munición de artillería de 105 mm
Sistemas antiblindaje AT-4
Munición para armamento ligero
Municiones de demolición para limpieza de obstáculos
Piezas de repuesto, mantenimiento y otros equipos auxiliares.

Vale recordar que el gobierno de EE.UU. aún mantiene una disputa legislativa para la aprobación de un presupuesto de miles de millones de dólares destinado a Ucrania. El año electoral así como disputas por diversas cuestiones internas han paralizado las iniciativas, situación que pocos consideran que se resuelva en el corto plazo.

Imagen de portada ilustrativa. Créditos: Fuerzas Armadas de Ucrania

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