El 30 de noviembre, Canadá y Estados Unidos convinieron mediante un acuerdo entre gobiernos que, el primero de estos países comprará hasta 16 aeronaves multimisión Boeing P-8A Poseidon para la Real Fuerza Aérea canadiense (RCAF). Esta adquisición tiene el fin de modernizar la flota actual de Canadá en pos de cumplir con las necesidades y las obligaciones tanto al interior como en el exterior del territorio. Así lo informaron en un comunicado oficial, funcionarios públicos canadienses.

Específicamente Bill Blair, Ministro de Defensa Nacional de Canadá, Jean-Yves Duclos (Ministro de Servicios Públicos y Adquisiciones de Canadá) y François-Philippe Champagne (Ministro de Innovación, Ciencia e Industria de Canadá) informaron en la jornada de ayer acerca de este acuerdo y aclararon al respecto que se adquirirán 14 unidades Boeing P-8A Poseidon con opción de compra de 2 unidades adicionales. Este proyecto tendrá un costo estimado de 10.4 mil millones de dólares canadienses, incluyendo hasta 5.9 mil millones de dólares estadounidenses para las aeronaves, los dispositivos de entrenamiento, los equipos asociados y la configuración del sistema. Además, la inversión cubrirá todo gasto adicional en torno a infraestructura, simuladores y armamento.

Características del Boeing P-8A Poseidon

El P-8A es la aeronave multimisión elegida para reemplazar a la actual CP-140 Aurora, la cual lleva en servicio más 40 años. La realidad es que, con el paso del tiempo, la flota está quedando cada vez más obsoleta del mismo modo que resulta cada vez más difícil sostenerla y mantenerla operativa. Lo que es más, puede que no sea funcional para la RCAF al momento de contrarrestar los efectos negativos de las próximas amenazas. La misión del Boeing P-8A Poseidon, como hemos mencionado, es lograr que Canadá pueda afrontar las obligaciones en el ámbito internacional como también cumplir sus necesidades en un nivel doméstico.

En este sentido, Jean-Yves Duclos dijo: “Los canadienses sienten un gran orgullo por sus fuerzas armadas y, en el entorno global actual, es más importante que nunca asegurar que quienes sirven a nuestro país cuenten con el equipo adecuado para mantener a Canadá seguro y protegido. La adquisición del Boeing P-8A Poseidon logrará precisamente eso.”

Asimismo, tal y como lo ha informado el gobierno canadiense, el P-8A le permitirá a la RCAF contar con una plataforma avanzada que le proporcione la capacidad de llevar a cabo múltiples misiones de una manera ágil y segura. Ejemplo de estas misiones es el apoyo a los aliados en defensa, como así también la vigilancia en los espacios terrestres y marítimos. Este tipo de aeronaves, con capacidades integradas antisuperficie, antisubmarinas y de C4ISR, son un tipo de sistema de armas complejo cuyo objetivo será salvaguardar a Canadá a lo largo de todas sus costas.

Siguiendo con esta línea, Bill Blair expresó que el Boeing P-8A es la aeronave multimisión adecuada para proporcionarle a Canadá la seguridad y protección suficiente en términos de soberanía, teniendo en cuenta toda la línea costera del país.

Consecuencias de la futura adquisición del Boeing P-8A Poseidon

En el comunicado oficial dice en textuales palabras que: “Después de un compromiso significativo y un análisis exhaustivo, estamos seguros de que el P-8A ofrece las mejores capacidades antisubmarinas e inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) para nuestro país”. La adquisición de la aeronave entonces defenderá los intereses de Canadá y traerá como consecuencia que la RCAF pueda rastrear y detectar las posibles amenazas submarinas y de superficie. Esto será posible gracias a los sensores sumamente avanzados y sofisticados que el P-8A posee. 

Asimismo, cuando Canadá efectivamente adquiera el P-8A, se convertirá en uno de los países que hoy en día tienen en servicio esta aeronave multimisión, como los son los aliados canadienses del FIVE EYES (Estados Unidos, Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda). Al respecto, cabe aclarar que el P-8A operará con sus socios de forma integrada para cumplir con sus requerimientos domésticos pero también con las obligaciones que la OTAN demanda. 

La primera entrega del P-8A se espera para el año 2026, estimando un promedio de una unidad por mes. Consiguientemente, se prevee que la finalización de la entrega de todas las aeronaves sea en 2027. Mientras tanto, el Gobierno de Canadá seguirá esforzándose para suministrarle a la RCAF el equipamiento militar indispensable para la realización de sus funciones. Y, ”continuaremos trabajando con Boeing para asegurar que las empresas canadienses puedan aprovechar al máximo todas las oportunidades relacionadas con esta importante adquisición”, añadió François-Philippe Champagne.

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