El reciente despliegue de los aviones de transporte KC-130 TC-70 “BAM Malvinas” y el Boeing 737-700 T-99 “Islas Malvinas” de la Fuerza Aérea Argentina, en marco de la operación militar de evacuación de ciudadanos argentinos desde Israel “Regreso Seguro”, escribe un nuevo capítulo en la historia del transporte militar en nuestro país, demostrando una vez mas la importancia de contar con aviones de transporte estratégico de largo alcance.

Fiel a una tradición de servicio, la Fuerza Aérea Argentina pone a disposición de la nación a dos de sus principales medios de transporte. El primer avión desplegado con destino a Israel, el TC-70, es uno de los dos aviones KC-130 con los que cuenta el Grupo I de Transporte Aéreo de la I Brigada Aérea de El Palomar. Valorados por su versatilidad para realizar diferentes tipos de misiones, como ser el cruce entre el territorio argentino (Río Gallegos o Ushuaia) y la Antártida (Base Marambio), el también el transporte de carga y de personal, capacidad para realizar navegaciones tácticas, vuelos de búsqueda y salvamento y lanzamiento de tropas, los KC son los únicos con capacidad para realizar reabastecimiento en vuelo a otras aeronaves de combate (O/A-4AR Fightinghawk) de la Fuerza Aérea Argentina.

La utilización de un KC-130 para vuelos como el de la operación “Regreso Seguro”, demuestra la necesidad de contar con aviones de transporte estratégico de largo alcance. Esta capacidad, perdida con la salida del servicio del sistema Boeing 707, es una vacante que debe ser ocupada considerando sus ventajas operativas. Por otra parte, el T-99, unidad que espera una segunda para su Escuadrón, presta continuamente servicios para la FAA y LADE, teniendo la limitación propia de una aeronave de transporte de mediano alcance en este tipo de misiones humanitarias.

Ejemplo de esto fue el despliegue por parte de la Fuerza Aérea Brasileña de aviones KC-30 (A330-200) permitió que en tan solo dos vuelos (martes 10/10 y jueves 12/10) evacuar a 211 y 214 ciudadanos brasileños respectivamente, frente a los 49 que fueron evacuados en el KC-130 TC-70 de la FAA.

La importancia de contar con transporte aéreo estratégico

La falta de asignaciones presupuestarias llevaron a la baja prematura del sistema Boeing 707, que encontraba hacia el año 2006 con el Boeing 707 TC-91 en inspección mayor con tan solo 24.800 horas de vuelo realizadas, lo que representa aproximadamente un cuarto de su vida útil, considerando que la célula se encuentra preparada para superar las 100.000 horas. El Escuadrón V del Grupo 1 de Transporte, llego a contar con una dotación de 6 aviones B-707 de configuración mixta (carga y pasajeros) y exclusivamente pasajeros.

Las características propias de este avión permitieron adquirir nuevas capacidades a la FAA, de acuerdo a necesidades y requerimientos operativos, como ser el desarrollo de una aeronave de guerra electrónica de acuerdo al programa denominado FAS 240, que consistió en la modificación de un avión Boeing 707 intercontinental (matricula TC-93) para albergar una cámara para fotografía aérea del tipo LOROP (Long Range Oblique Photography) junto a una cámara de TV en tiempo real y una cámara IR (barrido de firmas infrarrojas). Como es norma ante la falta de presupuesto, ambas capacidades no fueron reemplazadas.

Dentro de los planes de incorporación de nuevo material de transporte, se espera concretar la adquisición de un segundo Boeing 737 en configuración pax (pasajeros), previéndose en un futuro su conversión para carga mixta. Cabe recordar que la intención original de la Fuerza era incorporar una aeronave configurada para el transporte mixto de carga y pasajeros, más precisamente, aquellas denominadas como QC, o “Quick Change”.

Airbus KC-30 de la Fuerza Aérea Brasileña

Asimismo, la FAA inició en el mes de julio del corriente el procedimiento de licitación para la compra de dos Embraer ERJ 140/145 de segunda mano. Dentro de las opciones que serán consideradas por la institución se incluyen los modelos ERJ-140LR, ERJ-145LR y ERJ-145XR, los que complementarían a los veteranos Fokker F-28 recuperados ante la falta de un remplazo tras su baja en 2019.

La incorporación de aviones de transporte de largo alcance se suma a la necesidad de recuperar la capacidad de caza supersónica. Es una oportunidad para la FAA pensar a futuro en sistemas complementarios y compatibles. Un ejemplo de esto es nuevamente la Fuerza Aérea Brasileña con sus cazas Saab Gripen F-39E y los aviones de transporte KC-30 (A330-200). Incorporados estos últimos en 2022, la FAB prevé avanzar con la conversión de ambas aeronaves al estándar Multi-Role Transport Tanker (MRTT), ampliando la capacidad de reabastecimiento aéreo brindada por los KC-130 y los KC-390.

Tal vez te interese: La Fuerza Aérea Argentina despliega al Boeing 737 T-99 para apoyar la repatriación de ciudadanos argentinos de Israel

Publicidad

3 COMENTARIOS

  1. Durante años los 707 eran “reacondicionados” en un carrousel de mini empresarios que hacían y deshacian ” trabajos” una y otra vez sin poner un solo avión en condiciones, y las modificaciones” made in ” avellaneda” sólo debilitaron estructuras y aparte de golpes y maniobras límites solo fueron aeronaves justificados de presupuestos. La Fuerza no necesita aeronaves civiles INMODIFICABLES, necesita aeronaves específicas. No compras de dudosa funcionalidad, para beneficio de intermediarios y ” gerentes” de mantenimiento.

  2. Lo más importante es que FAA ha demostrado su capacidad para sobrevolar un teatro de guerra coordinado con las autoridades militares de Israel y en un operativo de traslado donde se ha previsto incluso el amerizaje en el Mediterráneo de todos los pasajeros.

    Bien por nuestros profesionales militares.

  3. La Fuerza Aérea Argentina siempre se nutrió de aviones de Aerolíneas Argentinas y Austral pero hace más de 25 años se corto esa relación la cuál debería volver a funcionar

Dejá una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.