En el desarrollo de la materia “Combate”, del Curso Básico de Selección y Formación de Cazadores de Monte Año 2023, dentro de lo que se conoce como TOE (Tropas de Operaciones Especiales), dictado por la Escuela Militar de Monte “Comandante Andrés Guacurarí y Artigas”, se empleó un sistema de IA (Inteligencia Artificial) para la detección y medición de emociones, a través de reconocimiento de micro expresiones faciales sobre los cursantes.

Estas tropas altamente capacitadas y especializadas son responsables de llevar a cabo misiones críticas y complejas en entornos hostiles y de alta tensión e intensidad de acciones tácticas. Para preparar adecuadamente a las TOE (Tropas de Operaciones Especiales) para estos desafíos, se emplean diversos métodos de entrenamiento, incluido el uso de manera estratégica de los llamados “inductores de estrés”.

Estos inductores, como el sueño, el hambre, el frío, el cansancio y la incertidumbre, desempeñan un papel crucial en el desarrollo de los cursos de formación para las tropas de operaciones especiales de monte, debido a que durante las misiones asignadas, se encontrarán en la profundidad del dispositivo táctico, bajo situaciones de permanente aislamiento, bajo presión de elementos hostiles, valiéndose de sus propias capacidades para moverse, vivir, sobrevivir, y combatir en entornos hostiles.

Es por ello que se buscaron medir parámetros emocionales y su correspondiente asociación fisiológica, mediante tecnología de punta, asociada a IA (Inteligencia Artificial).

Este software permite reconocer analíticas emocionales, como ser felicidad, sorpresa, enfado, desagrado, miedo, tristeza, y a su vez contar con parámetros de métricas emocionales, como ser la satisfacción, la activación (respuesta positiva) a estímulos, el compromiso, la experiencia previa sobre un asunto, a través de microexpresiones faciales, basándose en los puntos indicativos del rostro.

Estos puntos, además, se encuentran desde la antigüedad asociados a aspectos fisiológicos, como podemos encontrar en libros antiguos de medicina oriental, ya sea china, japonesa o india.

Asimismo, el software reconoce distintos modos como ser el exaltado, calmado, eufórico, dependiente, relajado, dócil, ansioso, aburrido, hostil o condescendiente, entre otros.

Cada individuo es único en su manera de ver y comprender el mundo que lo rodea, y los eventos que lo impactan, y este aspecto se debe a que no se ven las cosas como realmente son, sino de acuerdo con los mapas mentales y percepciones que se construyen a lo largo del tiempo, basados ​​en el conocimiento, las experiencias y las sensaciones. A medida que tenemos nuevas experiencias, se van actualizando y cambiando dichos mapas mentales, transformando entonces la forma de reaccionar y comprender el mundo que nos rodea.

Estos aspectos relacionados, entre los inductores de estrés, las reacciones fisiológicas, y su expresión en el rostro, fue muy conocido por la serie americana “Lie to me”.

n el entrenamiento de las Tropas de Operaciones Especiales, se busca llegar a extremos de realismo, que permita no solamente la selección de los postulantes, al evidenciar la resiliencia necesaria a estos estímulos, sino también permitir la formación de los mismos, a través de situaciones simuladas que reflejen de manera fehaciente, las situaciones que podrán darse en el combate. Para ello es que cobran fundamental importancia los inductores de estrés anteriormente mencionados.

Cada individuo, posee un registro propio de expresiones faciales, que resultará como su propia “huella digital emocional”, respondiendo a estímulos específicos externos, provocados de manera intencionada con los inductores de estrés, para vivenciar las distintas situaciones que se pueden presentar en el combate.

Uno de los aspectos a tener especialmente en cuenta, en la detección de emociones por microexpresiones faciales, es la ira. Es una emoción negativa extrema, que nubla la conciencia situacional del combatiente, “nublando” la mente y perjudicando la toma de decisiones racionales, y la ejecución de técnicas, habilidades y destrezas necesarias.

El estrés podemos decir que es el producto resultante de reacciones químicas, biológicas y psicológicas, que se desencadenan en un organismo cuando se enfrenta de una manera o forma brusca con un agente nocivo, externo o interno, cualquiera que sea su naturaleza.

Los agentes inductores de estrés en el entrenamiento y formación de estas tropas, son detonadores de respuestas orgánicas, y además son capaces de desequilibrar los mecanismos reguladores homeostáticos referidos precedentemente, de manera tal que el organismo pierde capacidad de mantener sus balances fisiológicos dentro de los límites normales, y por ende su relación con los estados psicológicos.

El estrés puede ser también considerado como un desajuste entre la “expectativa y realidad”, no necesariamente presentada de manera violenta por acciones de combate. Por todo ello, es que dentro de las etapas de capacitación, se tomaron muestras previas y posteriores a la ejecución de actividades que proporcionaron experiencias específicas, buscando medir los parámetros detectados en cada uno de los individuos, identificando porcentajes las emociones predominantes.

¿Cómo se realizó el estudio? Explicando la actividad a realizar, su finalidad, importancia, situación táctica y aspectos de ejecución a ser tenidos en cuenta. Estos aspectos marcan expectativas en los individuos, como indicadores de rendimientos y de logros a alcanzar, que asociados a los inductores de estrés seleccionados para la ejecución de la actividad, disparan respuestas emocionales asociadas al entrenamiento y experiencia percibida. Todo ello fue medido y registrado de manera individual, y extrayendo conclusiones del grupo de trabajo de manera colectiva.

Finalizada la actividad, se realizó la RPA (Revisión Posterior a la Acción), reviviendo la experiencia de aprendizaje, y registrando las emociones asociadas a la misma, nuevamente ejecutando las mediciones individuales, y extrayendo posteriormente las métricas colectivas del grupo de trabajo.

Esta experiencia se llevó a cabo dentro de la Unidad, exclusivamente con el personal que participa del curso.

De manera complementaria a la medición de los parámetros emocionales, se convalidaron los resultados mediante un CDM (Centro de Diagnóstico Móvil) de la empresa EXO Soluciones Tecnológicas, que mide la presión sistólica y diastólica, temperatura corporal, saturación de oxígeno, y pulsaciones cardíacas por minuto.

¿Por qué es importante la respuesta fisiológica asociada a la detección de emociones mediante el software de IA (Inteligencia Artificial)?

Porque este mecanismo fisiológico, necesario para la supervivencia, en caso de resultar excesivo por intensidad, duración o ambos, produce enfermedad, de menor a mayor grado, llegando sus extremos al colapso físico, nervioso, fisiológico y espiritual.

Conclusiones a la experiencia asociada al empleo de IA en la educación operacional.

Las analíticas emocionales detectadas por el software (la felicidad, la sorpresa, el enfado, el desagrado, el miedo, y la tristeza entre las principales), sumadas a las métricas emocionales detectadas (la satisfacción, el grado de activación emocional ante estímulos, el compromiso, los niveles de experiencia previa, entre los principales), y finalmente, los modos emocionales detectados (exaltado, calmado, eufórico, dependiente, relajado, dócil, ansioso, aburrido, hostil, condescendiente, entre los principales), registrados de manera previa y posterior a las situaciones de entrenamiento planteadas, permiten percibir y seleccionar los mejores escenarios de realismo basados en las experiencias bélicas modernas contemporáneas.

Los registros fisiológicos asociados, registrados con el CDM, permiten inferir las reacciones que se producirán en dichos escenarios, facilitando la dosificación de los inductores de estrés más apropiadas para alcanzar los mejores indicadores de logro en la formación de las Tropas de Operaciones Especiales, y de otro tipo de tropas.

En esta práctica profesional militar realizada, la experiencia obtenida y medida, de manera simulada en el adiestramiento operacional, puede considerarse equivalente a la respuesta o reacción del combatiente de índole física y/o emocional a una situación táctica real en el campo de combate, que permite contar con parámetros para el diseño de acciones educativas a futuro, generando escenarios de adaptación y/o tensión en el combatiente, de manera más realista y eficaz.

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