Luego de una serie de exitosos ataques de drones ucranianos, las Fuerzas Armadas de Rusia han implementado diversas contramedidas a los fines de minimizar la creciente amenaza que representan los vehículos aéreos no tripulados y municiones merodeadoras. Una de estas soluciones se pudo apreciar en estos días gracias a la viralización de videos en redes sociales, secuencias donde se aprecia el accionar de helicópteros de ataque Mi-28 contra los drones enemigos.
En uno de los videos recientemente publicado por la Dirección Principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, se aprecia como un drone de reconocimiento ucraniano logró capturar el momento preciso en el que un helicóptero Mi-28 ruso abre fuego con su cañón 2A42 30mm en un intento por derribarlo. Según lo informado por el servicio ucraniano, el incidente tuvo lugar en las proximidades de la península de Tarkhankut, Crimea. El drone fue “…perseguido por dos helicópteros de combate y un avión. A pesar del fuego continuo, nuestro UAV salió ileso del “campo de batalla” y regresó con éxito a la base…”, detalló la fuente ucraniana.
Sin embargo, el accionar de uno de los Mi-28 rusos habría tenido éxito hace algunos días al destruir una munición merodeadora que sobrevolaba el óblast de Oriol. Pese a que la secuencia no permite identificar la aeronave, si deja apreciar el fuego con munición trazante y la posterior explosión aérea. Pese a que la calidad del video no es de las mejores, se puede observar un beacon penas percetible que se desplaza a baja velocidad, más característico del vuelo de un helicóptero.
Pese a que los modelos más modernos de helicópteros de ataque rusos cuentan con la capacidad para operar de día y noche, el conflicto en Ucrania mermó considerablemente la flota de Ka-52, por lo que resulta lógico que los Mi-28 hayan tomado la posta para oficiar como defensa de punto contra los vehículos aéreos no tripulados ucranianos, tanto en territorio anexado como en Rusia.
Con la creciente ofensiva ucraniana contra objetivos de alto valor de las fuerzas armadas rusas, es esperable que este tipo de contramedidas se vayan fortaleciendo con el paso del tiempo. Pese que su presencia seguramente tendrá una incidencia en la efectividad de los drones de Ucrania, lo cierto es que también entra en juego la consideración sobre la disponibilidad de medios. Cada Mi-28 que deba operar en modo defensivo implica una pérdida para el apoyo en los campos de batalla.
Imagen de portada: Captura video de la Dirección Principal de Inteligencia
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