Prosiguiendo negociaciones iniciadas hace un año atrás, el gobierno de los Estados Unidos ha autorizado la posible venta de cazas furtivos F-35ª a la República Checa. Así se desprende de la notificación oficial del Departamento de Estado, elevada el 29 de junio al Congreso estadounidense para la aprobación de la operación de venta de equipamiento militar a través del programa FMS.

Actualmente el núcleo operativo de la flota de combate de la Fuerza Aérea de la República Checa se concentra alrededor de 14 cazas Saab Gripen arrendados hasta el año 2027. Con esta fecha presente, el gobierno checo anunció a mediados del año pasado que iniciaría gestiones y negociaciones para la compra de nuevos cazabombarderos F-35A a los Estados Unidos, aprovechando el fortalecimiento de relaciones entre ambos países. Enmarcando en los actuales esfuerzos de modernización de las Fuerzas Armadas del país de Europa Central.

De este modo, prosiguiendo lo reportado en el día de ayer, el gobierno de Estados Unidos autorizó la posible venta de hasta veinticuatro (24) cazas F-35A a la República Checa con un importante paquete de armamento compuesto por misiles de diverso tipo y bombas inteligentes. Gracias a lo pública por la Agencia de Cooperación en Defensa y Seguridad (DSCA), se desprende que el paquete autorizado por el Departamento de Estado alcanza un monto de USD 5.200 millones, teniendo a Lockheed Martin como principal proveedor.

Como fuera señalado, además de los 24 F-35A, la Fuerza Aérea de República Checa habría solicitado un importante paquete de armamento para los cazas furtivos de quinta generación. El cual se compone de lo siguientes elementos:

  • 70 misiles aire-aire AIM-120C-8 AMRAAM
  • 50 misiles aire-aire AIM-9X Block II/II+ Sidewinder
  • 80 bombas inteligentes del tipo planeadoras GBU-53/B Small Diameter Bombs – Increment II (SDB-II)
  • 12 bombas de propósito general de 2.000 libras Mk-84
  • 12 kits de conversión de bombas JDAM

La venta propuesta mejorará las capacidades de defensa de la República Checa y apoyará las operaciones de la OTAN al protegerse contra las amenazas modernas y mantener una presencia constante en la región. La República Checa no tendrá dificultad en absorber estos artículos y servicios en sus fuerzas armadas”, expresó el Departamento de Estado en su comunicado oficial.

Con la autorización del Departamento de Estado, a la cual seguramente proseguirá la aprobación del Congreso, restará avanzar en la futura firma de contratos entre el Ministerio de Defensa de la República Checa y las empresas involucradas. Más que nada para definir de cara a los próximos años el inicio de la formación y transición de los pilotos checos hacia un nuevo sistema de armas, al igual que el cronograma de entregas de los F-35A.

*Fotografías empleadas a modo de ilustración – créditos USAF.

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