Se presentó el nuevo bombardero estratégico estadounidense de sexta generación al mundo. Diseñado y fabricado por la firma Northrop Grumman, conocida por su trabajo previo en el bombardero B-2 Spirit, este nuevo vehículo promete ser la punta de lanza en la tríada nuclear y del arsenal estratégico norteamericano.

Presentado el viernes pasado, en la planta de Northrop en Palmdale, California, frente a diversas autoridades. La ceremonia fue presidida por la CEO de Northrop Grumman, Kathy Warden, el Subjefe del Joint Chiefl of Staff[1], el Almirante Christopher Grady y el Secretario de Defensa, Lloyd Austin.

Figura 1: Presentación del B-21 en vivo, con la palabra del Secretario de Defensa. Fuente: ABCNews

Con indudables y aún misteriosas capacidades para el resto del mundo, este vehículo seguro impresionará con capacidades furtivas (baja visibilidad al radar), una capacidad de carga útil seguramente mayor que el bombardero B-2 al cual pretende reemplazar y alcance de nivel estratégico capaz de atacar de manera impune, como su contraparte ha hecho hasta ahora, blancos de gran importancia.

Lleva su nombre en honor a los Doolittle Raiders que realizaron el primer bombardeo estadounidense en territorio nipón durante la segunda guerra mundial, el 18 de abril de ’42.

Un poco de historia de las capacidades Stealth

Indudablemente el aspecto más cautivador del bombardero es la capacidad del sigilo o stealth. Esto le permite sobrevolar espacios aéreos vigilados sin ser detectado y por ende atacar sin impedimentos y volver a la base sano y salvo, habiendo cumplido la misión. Sin embargo, esta capacidad no es nueva y ya ha sido implementada en otras aeronaves como el F-117, SR-71, F-22 “Raptor” y el B-2 “Spirit”. Estos vehículos comparten firmas el común, a saber, Northrop Grumman y Lockheed Martin, quienes, en el mercado occidental, han mantenido el estado del arte de esta capacidad que ha sido clave en el desarrollo de las aeronaves venideras.

Rebobinando un poco la historia, existen varias formas de obtener esta capacidad de disminuir la detección del radar, caracterizada por la Radar Cross Section (RCS) por sus siglas en ingles. Por ejemplo, a través de materiales tipo RAM[2]. Los primeros de ellos eran pinturas especiales que contenían microesferas de hierro que transformaban la energía de la onda electromagnética que impacta sobre el fuselaje y la disipaban en forma de calor. Dándole así su distintivo color negro a las aeronaves y su capacidad de no reflejar ondas de radar.

Otro método de evitar la detección consiste en predecir como la onda de radar rebotará contra la superficie del avión y desviarla de manera tal que no vuelta a la fuente. El primer paso en este camino geométrico fue el programa “Echo 1”. Un software que permitía predecir el rebote de las ondas de radar para un problema de bi-dimensional. Lo cual originaba como resultados un vehículo de caras planas (el F-117) en vez de uno más amigable con la aerodinámica. Sin lugar a duda, este software ha avanzado al punto de lograr resultados tridimensionales y de mejor calidad, desde su origen en 1975. Obteniéndose así aeronaves aerodinámicamente más amigables y de mejor capacidad de sigilo.

A pesar de esto, se deben tener en cuenta otros factores para ser realmente sigiloso. Por ejemplo, mitigar la señal infrarroja de los gases de escape que impulsan el motor, señales acústicas, visuales, etc. Podemos citar el B-2, que tiene sus canales de escape de motor sobre el fuselaje, dejando la fuente misma escondida por el avión para alguien que quisiera lanzar un misil buscador infrarrojo desde tierra.

Un verdadero vehículo furtivo empleará un combinado de todas las tecnologías disponibles para ser realmente indetectable y por lo que podemos ver, el B-21 Raider no es la excepción, sino más bien el superior.

Que esperar del bombardero de Sexta Generación

Promocionado como el primer bombardero del mundo de sexta generación, aún se conoce muy poco de sus capacidades. Sin embargo, conociendo más información del B-2 Spirit, podemos estimar que se puede esperar del B-21. Por ejemplo, se conocen los siguientes datos del B-2:

  • Carga útil de 18 toneladas de munición convencional o nuclear
  • Techo de vuelo de 15 mil metros
  • Alcance: sin especificar, pero intercontinental con capacidad de reabastecerse en vuelo.

Esto nos indica que para el B-21 debemos esperar performaces mucho mayores, un vehículo caracterizado por ser presentado como un “bombardero digital” implementando software avanzado para su uso, diseño y fabricación, con idea de actualización continua de sus sistemas, en vez del tradicional upgrade en bloques. Además, se ha generado un cambio de paradigma en su desarrollado dado que gran parte de los sistemas informáticos se operan desde la nube, compartiendo información desde las primeras etapas de desarrollo con la Fuerza Aérea Estadounidense. Esto incluyó simulación de escenarios y pruebas llevadas a cabo con un gemelo digital del bombardero. Esto redujo costos y mejoró los tiempos de desarrollo. A futuro, este gemelo digital será clave para la implementación del proceso de mejora continua prevista para la aeronave.

Respecto a número más concretos, la Fuerza Aérea de Estados Unidos publicó la intención de adquirir al menos cien bombarderos B-21, para referencia, del modelo B-2 se adquirieron solo 21 aeronaves. Sin embargo, algunos analistas, se inclinan más por los doscientos si la intención es que se convierta en el “caballito de batalla” de la fuerza de bombarderos del país del norte. Actualmente se estima existen seis vehículos en la línea de producción. Respecto a su ubicación, un análisis preliminar ubica sus bases de operaciones en los estados de Dakota del Sur, Tejas y Oklahoma en sus respectivas bases aéreas principales.

Figura 2: B-21 en el exterior. Fuente: Redes sociales de la Fuerza Aérea Estadounidense (Instagram) US Air Force. Link: https://www.instagram.com/p/ClsFFCLtSiL/

El futuro

Al terminar la ceremonia de presentación, la CEO de Northrop Grumman a modo de cierre, mandó el avión “a dormir” y explicitó ante el público que la próxima vez que lo veamos, sería volando, dejándonos a la espera de la próxima muestra.

Autor: Ingeniero Mecánico en Armamentos Pablo Ignacio Mari Thomsen. Egresado de la Facultad de Ingeniería del Ejército, docente e investigador.


[1] La institución sería equivalente al Estado Mayor Conjunto.

[2] RAM: Radar Absorbing Material, son materiales especiales que tienen la propiedad de absorber las ondas del radar, con lo cual no rebotan, efectivamente haciéndolos “invisibles”

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6 COMENTARIOS

  1. Si bien hay fuentes que citan diversos valores, no hay ninguno oficial dado el alto nivel de confidencialidad del proyecto. Pero podes tomar como referencia el del B-2, aunque estimo que con los avances tecnológicos y los números que se plantean adquirir sea más asequible

  2. La USAF en 2010 dio un precio de 550 millones de dólares que ahora serían unos 753, y un prestigioso periódico de finanzas Español, El Economista, lo cifra según datos de la USAF en la presentación en 692 millones de dólares unidad.

  3. Buenas tardes! si es verdad que la Fuerza Aerea Estadounidense tiene un estimado por 692 millones de dólares, analizandolo desde el punto de vista del “costo unitario de adquisición”. Si bien mi intención no es meterme en cuestiones de costos, para el 2021 el programa entiendo recibió 2800 millones de dólares según : https://www.saffm.hq.af.mil/Portals/84/documents/FY21/SUPPORT_/FY21%20Budget%20Overview_1.pdf?ver=2020-02-10-152806-743
    Remarco no soy especialistas en costos asi que tomen mi comentario con pinzas

  4. Mientras tanto, en el mundo real siguen los B52 en servicio y en Ucrania armamento de la guerra fria. Esos proyectos van a quebrar la economia de USA. Ya no consiguen fabricar ni un jeep barato…

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