Imagen cortesía de Asia Times

El presidente chino, Xi Jinping, quién también dirige la Comisión Militar Central, habría probado un nuevo y poderoso rifle valorado en medio millón de yuanes (US$ 78.000) durante su reciente visita a un equipo de combate de infantería bajo el Comando Central de Teatro del Ejército Popular de Liberación.

El arma grande, que forma parte del sistema QTS-11 del EPL, es el resultado de una década de esfuerzos para ponerse al día en la carrera para armar soldados, emulando el programa revivido Land Warrior del Ejército de los EEUU.

Con un peso de alrededor de 5 kilogramos, los rifles de calibre 5.8 milímetros, integrados con lanzagranadas de 20 mm, son capaces de disparar blancos en un radio de 200 metros de forma similar a una ametralladora, según declaró Science and Technology Daily, con sede en Beijing.

Junto con otros equipos portátiles como cámaras térmicas, telémetros láser, computadora portátil y posicionamiento, comunicación y cascos de alerta situacional, el kit completo QTS-11 cuesta un gran total de 1 millón de yuanes por unidad. Ya se han desplegado unos 50.000 soldados de infantería y otras tropas para tareas especiales, asalto aéreo y brigadas de paracaidistas de 13 ejércitos de campaña, informa el periódico Ming Pao de Hong Kong.

Esta nueva inversión esta destinada a aumentar la fuerza de combate, con el énfasis puesto en un soldado de infantería individual como una unidad completa en lugar de como un segmento de una fuerza más grande dentro la guerra urbana.

Sin embargo, queda por ver cuándo se puede desplegar el QTS-11 para equipar a más tropas en unidades de infantería del EPL.

Los analistas señalan que como las gafas de visión nocturna, el cristal a prueba de balas, los apuntadores ópticos y otros equipos, han sido durante mucho tiempo, parte del equipamiento estándar  de cualquier soldado estadounidense, pero para sus contrapartes chinas, todavía son un lujo. Hasta, incluso los chalecos antibalas, figuran dentro del equipamiento poco frecuente dentro de las tropas chinas y la policía armada.

“Desde 2008, algunos think tanks occidentales afirman que el gasto militar de China ha ascendido al segundo más alto a nivel mundial, pero el título de ‘segundo en el mundo’ no les ha dado a los soldados chinos una mayor sensación de seguridad”, The Wall Street Journal citó un informe de 2014 de Southern Weekly, con sede en Guangzhou.

“El costo del equipo de soldado individual, una cuestión de vida o muerte en el campo de batalla, se ha mantenido en los niveles vistos desde hace cinco años”, dijo el artículo de 2014.

El gasto de defensa de Estados Unidos vale cinco veces más que el de China, pero la diferencia de costos entre los dos países en términos de equipamiento de soldados individuales es más de diez veces mayor”.

Aún así, el sistema QTS-11 podría cambiar las reglas del juego, y también se ha informado que se está desarrollando un traje de peso similar al Ironman  como un “esqueleto usable” para llevarlo en cada uno de sus soldados de infantería.

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