manuel bueno
Veterano Guerra de Malvinas
AFIRMA, DOS QUE LOS CUSTODIABAN, ESTAN JUNTAS LAS FIRMAS.:icon_bs:
Los Q vinieron pintados con la leyenda ARMADA pequeña pintada debajo de la cabina, con la escarapela naval y con matrículas "3-A-2XX". Luego pasaron a ser "A-2XX" con leyenda "NAVAL" y luego la definitiva "3-A-3XX" con "ARMADA" ya sin la escarapela.
Saludos.
ITB en el taller de Puerto Belgrano.
25 de Mayo de 1982, Puerto Argentino
Fuente:
http://us.geocities.com/dggionco/fotos.htm
Ajax Bay
Puerto Argentino recien tomado por los Británicos:
felizalde55
Veterano Guerra de Malvinas
Ese camarote era el mío...
Si tienen ganas de leer, les cuento un poco de la historia de estas fotos...
Las tenía el Gordo Balín, 3er maquinista del Río Carcarañá, compañero de promoción. Nuestro primer viaje como oficiales recibidos. Yo era el 1er oficial de Radio del buque.
Lo que se ve son las consecuencias de la visita de tres Harriers a eso del mediodía del 16 de mayo de 1982. Estábamos fondeados en una ensenada que se llama Puerto Rey, recostada sobre la costa occidental de la Isla Soledad, al sur de la Isla Cisne.
En una de las fotos, se ve la chimenea y el ojo de buey de un camarote. Ese camarote era el mío, donde un ratito antes estaba descansando luego de la guardia. El camarote se encontraba sobre la banda de estribor, la derecha mirando hacia la proa. El ojo de buey, gallego ya que era cuadrado tenía una base de unos 35/40 cm, es como para que se den una idea de los agujeros que hicieron los proyectiles de los Harriers. Los que no explotaban quedaban dando vuelta por los pasillos del buque.
En el momento que aparecen, no se bien como, me desperté, me levanté y me tiré por la escalera que va del puente a la cubierta del capitán, todos nos juntamos en la base de esa escalera en la cubierta principal, el lugar más protegido del barco. Nos destrozaron todos los medios de salvataje que se encontraban en la banda de estribor, la banda de donde venía el sol. La lancha, el bote y la balsa salvavidas. Abandonamos, porque si hacían otra pasada no ibamos a poder abandonar el buque. De todos modos, se fisuró el casco, y una esquirla reventó los botellones o el circuito de aire comprimido que sirve de "burro de arranque" para el motor principal. Una vez en tierra, nos vino a buscar el Forrest a cargo del, en ese momento TN Molini Molina, quien acababa de rescatar a los dos náufragos sobrevivientes del Isla de los Estados, el Marinero López y el CC Alois Payarola, el Colorado, junto con el cuerpo del 1er of de cubierta, Bottaro. ¡Qué día!
Francisco E. Elizalde, VGM
Pancho
Si tienen ganas de leer, les cuento un poco de la historia de estas fotos...
Las tenía el Gordo Balín, 3er maquinista del Río Carcarañá, compañero de promoción. Nuestro primer viaje como oficiales recibidos. Yo era el 1er oficial de Radio del buque.
Lo que se ve son las consecuencias de la visita de tres Harriers a eso del mediodía del 16 de mayo de 1982. Estábamos fondeados en una ensenada que se llama Puerto Rey, recostada sobre la costa occidental de la Isla Soledad, al sur de la Isla Cisne.
En una de las fotos, se ve la chimenea y el ojo de buey de un camarote. Ese camarote era el mío, donde un ratito antes estaba descansando luego de la guardia. El camarote se encontraba sobre la banda de estribor, la derecha mirando hacia la proa. El ojo de buey, gallego ya que era cuadrado tenía una base de unos 35/40 cm, es como para que se den una idea de los agujeros que hicieron los proyectiles de los Harriers. Los que no explotaban quedaban dando vuelta por los pasillos del buque.
En el momento que aparecen, no se bien como, me desperté, me levanté y me tiré por la escalera que va del puente a la cubierta del capitán, todos nos juntamos en la base de esa escalera en la cubierta principal, el lugar más protegido del barco. Nos destrozaron todos los medios de salvataje que se encontraban en la banda de estribor, la banda de donde venía el sol. La lancha, el bote y la balsa salvavidas. Abandonamos, porque si hacían otra pasada no ibamos a poder abandonar el buque. De todos modos, se fisuró el casco, y una esquirla reventó los botellones o el circuito de aire comprimido que sirve de "burro de arranque" para el motor principal. Una vez en tierra, nos vino a buscar el Forrest a cargo del, en ese momento TN Molini Molina, quien acababa de rescatar a los dos náufragos sobrevivientes del Isla de los Estados, el Marinero López y el CC Alois Payarola, el Colorado, junto con el cuerpo del 1er of de cubierta, Bottaro. ¡Qué día!
Francisco E. Elizalde, VGM
Pancho
ELMA RIO CARCARAÑA
Gracias por compartir sus recuerdos...
Saludos.
Saludos.
El día 16 de mayo luego de los ataques de los SHARs la tripulación abandonó el buque debido a incendios incontrolables. No se si a esa altura y en el lugar que estaba situado valía la pena su recuperación luego de los daños mecánicos que nos comenta Francisco. 5 días después fue cañoneado por buques de la RN y 2 días después fue alcanzado por 2 Sea Skuas por parte de un Lynx de la Antelope que lo hundió definitivamente. Para la fecha que fue abandonado la RN merodeaba muy activamente la zona e intentar salvar ese buque hubiese supuesto seguramente más bajas del lado argentino.
Saludos.
Se parece a un impacto de cañon de un A-4 o Dagger
felizalde55
Veterano Guerra de Malvinas
Jualbo:
ante todo gracias por tu mensaje. Te cuento que el B/M Río Carcarañá estaba amarrado en Dique 4, listo para ir a desguace. Lo reactivamos por causa del conflicto.
Como creo que dije en el mensaje anterior, se había dañado, sin posibilidad de reparación el sistema de aire comprimido que permite la puesta en marcha del motor principal, el de propulsión. Los otros, se les llama auxiliares son los grupos electrógenos del buque.
La posibilidad de un remolque con el Forrest era prácticamente imposible. Los remolcadores, tienen otra potencia en la máquina, de lo que el Forrest carecía. Además que con viento se van ambos artefactos navales a la tierra del famoso Gramajo...
Una premisa que tenemos los marinos es que se abandona el buque solo cuando no hay otra alternativa posible o están todas agotadas. Siempre estás mejor en el buque aunque averiado que en una lancha salvavidas. Recordá que nos habían destruido la mitad del equipo de emergencia, lancha, bote y balsa. La idea era pasar la noche en tierra y ver luego si podíamos hacer algo con el buque. Mientras estabamos navegando hacia tierra, los Harriers nos volvieron a visitar, lo suficientemente bajo como para verle la cara a los pilotos, detrás de las máscaras y su propia parafernalia. No nos atacaron, sino iba a ser bien difícil que te enteraras de algo, por lo menos de mis recuerdos.
Ahí es cuando viene Molini y dice que tiene orden de Pto Argentino de llevarno a Fox.
Unos días después, 2 o 3, se armó un grupo de tripulantes, oficiales, maestranza y marinería, unos 8 o 10, no recuerdo bien, que en la Penélope, la"Feuerland", al mando del TF Horacio González LLanos, fueron a ver que se podía hacer. No había más nada que hacer, recuperaron, ropa, víveres y todo elemento que nos permitiera mejorar la supervivencia en las islas.
Un abrazo.
Pancho
felizalde55
Veterano Guerra de Malvinas
Gracias por algunos de los datos, lo que yo sabía era lo del incendio pero más cerca del 23 de mayo. No recuerdo que el 16 hubieran incendios incontrolables, el humo que había era provocado por los proyectiles, algunos fragmentarios, de los Harriers, que quedaban dando vuelta en los pasillos del buque.
saludos.
Pancho
felizalde55
Veterano Guerra de Malvinas
Ya que les ha gustado el relato pasaré a contar otra peripecia:
La noche del 25 de mayo, a eso de las 2000 hs, más o menos, uno de los puestos de avanzada de la Ca Ing 9 informa que hay dos buques ingleses frente a Fox. ¿A qué distancia? Unos 12 mil metros, mi mayor. Fuera del alcance de ls cañones sin retroceso que teníamos." Bien, a recibir y no poder devolver...
Una horita después más o menos, los muchachos empezaron a mandar "encomiendas", en especial de acero, a buena velocidad, y con consecuentes sacudidas en el piso. Los paquetes venían de a cinco. Se siente cuando salen, se escuchan si pasan por arriba y mucho más, cuando impactan.
¡Hay mamita querida! y ahora, ¿qué hacemos?.
Todo el mundo evacuando hacia una parte de la bahía, que quedaba protegida desde el mar y que tenía una barranca, chica pero barranca al fin.
Con el Jefe de Radio, Raúl Bechi, otro "peso pesado", lamentablemente ya fallecido,ya que los dos no éramos precisamente delgados, estábamos haciendo guardia de radio en el puesto comando de Ejército en una casa del poblado, que estaba abandonada por los kelpers y que habíamos ocupado porque estaba, protegida cerca de la barranca mencionada.
El primer ataque fue al voleo, tiraron adonde suponían que podía haber tropa y donde detectaban movimiento. Así fue que sacudieron a una pingüinera a lo pavote, ya que los pingüinos, cuando sintieron las primeras pepas, sensatamente, rajaron al agua.
Comento que ahora lo escribo un tanto jocoso, pero que, disculpen el término pero miedo no me parece lo suficientemente descriptivo, el cagazo padre que tenía hacía que temblara como una hoja, grande, pero una hoja al fin.
Alguién, que no fue mi coequiper Raúl, emitió un corto mensaje a Pto Argentino: "Polenta en Uranio" Esto quería decir bombardeo naval (polenta) en Uranio (Bahía Fox).
Hagan la prueba, diganlo rápido: Polenta en Uranio. Si quieren diganlo dos veces, rápido, claro pero rápido. Bien, no es mucho tiempo lo que se tarda. ¿Adivinen adonde cayeron las siguientes andanadas? Alcanzó para que las fragatas nos triangularan. Con el otro Gordo, habíamos trasladado el puesto comando anterior al actual y el Jefe de la Cía nos preguntó que necesitabamos. Nos miramos con Raúl y al mismo tiempo dijimos: "alguien que se pueda trepar" para bajar coaxiles de los kelpers en las casas y que se trepara para colocar las antenas, cosa que nos estaba, no digo vedada, pero si inalcanzable.
Ahí fue que vino un sargento, "Chaco". "Che, Chaco, dale una mano a los señores así arman la radio en el nuevo puesto comando. "Chaco se trepa como un mono, diganle lo que necesitan y él lo va a ser." Así fue, Chaco, subía bajaba, venía, traía lo que necesitaramos. Mucho coaxil, todo lo que encontrásemos y pudiéramos unir con los conectores, barrilitos y otros menesteres que cartoneabamos entre los equipos requisados. La antena quedó a unos 15 metros de la radio. Un enorme pozo marcaba su posición aproximada. No fue hecho con pala, tampoco tardaron mucho en hacerlo. Como el paquete era de 5 entraron a caer fragmentos, se veian luces naranjas por todos lados. después me di cuenta, mucho después, que era el acero de las esquirlas de la fragmentaria cuando explota. Yo estaba en la casa, no en el puesto mismo, sino en un cuarto aledaño. Eramos como 10 a la espera de ver que pasaba. Cuando empiezan a caer las pepas sobre la antena y sus alrededores, salimos todos rajando. Había dos puertas enfrentadas, una a mi derecha y otra a mi izquierda, miro a la derecha, que era la que usabamos habitualmente para salir hacia afuera y había como 7 grandotes pasando juntos y al mismo tiempo por ella. Entre mí, pensé: "En la **** vida salgo de acá por ahí." Me tiré para el otro lado, craso error. Yo estabacon un Winchester 22 que quería usar para cazar algo distinto a un cordero. Recordando viejas épocas de colimba, el arma nunca se abandona, y ahí rajaba yo con el Winchester. Salgo agachado y siento un terrible sacudón en la mano, algo que me quema, suelto el arma y rajo para la puerta que da hacia afuera. El pomo de la puerta era redondo. Como soy zurdo, trato de abrir la puerta con esa mano. No puedo, agarro el pomo, siento mojado y no tengo fuerza. ¿Qué pasaba? "A falta de pan, buenas son tortas", pruebo con la derecha, que siempre fue muy pero muy torpe. Aprieto el pomo, y tampoco puedo abrirla, porque no tenía pinza con la mano. La desesperación, ¿qué hago ahora? Me puse de costado, y agarre el pomo mojado con el dedo anular y el meñique de la mano derecha. La abrí y salí, ahí veo el agujero que reemplazaba la antena, el humo espeso de la explosión. llego hasta la barranca, mientras seguía el bombardeo. En un momento, para variar, aparece Abel, el médico neuquino. "¿Hay alguien herido?" "Creo que yo", todavía no me dolía, ni tenía mucha conciencia. Vino, dijo "Ajá, tenela lejos de la tierra para que no se infecte. Después te curo. Ahora no tengo suficiente." Siguió su camino entre los proyectiles que caian viendo si había otros heridos.
Las fragatas paraban un rato y luego seguían, a veces caían los proyectiles muy cerca.
En un pequeño intervalo, en un silencio profundo, de esos claritos como cuando uno dice una huevada en una reunión y justo todo el mundo se calla, quedando como eso, como un huevón, se escucha una voz: "¡Ay, Virgencita Santa! Si me salvo de ésta, nunca más le pego a mi mujer!". Las carcajadas de todos los que estábamos por ahí se escucharon mientras los inglesses volvían a sacudirnos.
La noche del 25 de mayo, a eso de las 2000 hs, más o menos, uno de los puestos de avanzada de la Ca Ing 9 informa que hay dos buques ingleses frente a Fox. ¿A qué distancia? Unos 12 mil metros, mi mayor. Fuera del alcance de ls cañones sin retroceso que teníamos." Bien, a recibir y no poder devolver...
Una horita después más o menos, los muchachos empezaron a mandar "encomiendas", en especial de acero, a buena velocidad, y con consecuentes sacudidas en el piso. Los paquetes venían de a cinco. Se siente cuando salen, se escuchan si pasan por arriba y mucho más, cuando impactan.
¡Hay mamita querida! y ahora, ¿qué hacemos?.
Todo el mundo evacuando hacia una parte de la bahía, que quedaba protegida desde el mar y que tenía una barranca, chica pero barranca al fin.
Con el Jefe de Radio, Raúl Bechi, otro "peso pesado", lamentablemente ya fallecido,ya que los dos no éramos precisamente delgados, estábamos haciendo guardia de radio en el puesto comando de Ejército en una casa del poblado, que estaba abandonada por los kelpers y que habíamos ocupado porque estaba, protegida cerca de la barranca mencionada.
El primer ataque fue al voleo, tiraron adonde suponían que podía haber tropa y donde detectaban movimiento. Así fue que sacudieron a una pingüinera a lo pavote, ya que los pingüinos, cuando sintieron las primeras pepas, sensatamente, rajaron al agua.
Comento que ahora lo escribo un tanto jocoso, pero que, disculpen el término pero miedo no me parece lo suficientemente descriptivo, el cagazo padre que tenía hacía que temblara como una hoja, grande, pero una hoja al fin.
Alguién, que no fue mi coequiper Raúl, emitió un corto mensaje a Pto Argentino: "Polenta en Uranio" Esto quería decir bombardeo naval (polenta) en Uranio (Bahía Fox).
Hagan la prueba, diganlo rápido: Polenta en Uranio. Si quieren diganlo dos veces, rápido, claro pero rápido. Bien, no es mucho tiempo lo que se tarda. ¿Adivinen adonde cayeron las siguientes andanadas? Alcanzó para que las fragatas nos triangularan. Con el otro Gordo, habíamos trasladado el puesto comando anterior al actual y el Jefe de la Cía nos preguntó que necesitabamos. Nos miramos con Raúl y al mismo tiempo dijimos: "alguien que se pueda trepar" para bajar coaxiles de los kelpers en las casas y que se trepara para colocar las antenas, cosa que nos estaba, no digo vedada, pero si inalcanzable.
Ahí fue que vino un sargento, "Chaco". "Che, Chaco, dale una mano a los señores así arman la radio en el nuevo puesto comando. "Chaco se trepa como un mono, diganle lo que necesitan y él lo va a ser." Así fue, Chaco, subía bajaba, venía, traía lo que necesitaramos. Mucho coaxil, todo lo que encontrásemos y pudiéramos unir con los conectores, barrilitos y otros menesteres que cartoneabamos entre los equipos requisados. La antena quedó a unos 15 metros de la radio. Un enorme pozo marcaba su posición aproximada. No fue hecho con pala, tampoco tardaron mucho en hacerlo. Como el paquete era de 5 entraron a caer fragmentos, se veian luces naranjas por todos lados. después me di cuenta, mucho después, que era el acero de las esquirlas de la fragmentaria cuando explota. Yo estaba en la casa, no en el puesto mismo, sino en un cuarto aledaño. Eramos como 10 a la espera de ver que pasaba. Cuando empiezan a caer las pepas sobre la antena y sus alrededores, salimos todos rajando. Había dos puertas enfrentadas, una a mi derecha y otra a mi izquierda, miro a la derecha, que era la que usabamos habitualmente para salir hacia afuera y había como 7 grandotes pasando juntos y al mismo tiempo por ella. Entre mí, pensé: "En la **** vida salgo de acá por ahí." Me tiré para el otro lado, craso error. Yo estabacon un Winchester 22 que quería usar para cazar algo distinto a un cordero. Recordando viejas épocas de colimba, el arma nunca se abandona, y ahí rajaba yo con el Winchester. Salgo agachado y siento un terrible sacudón en la mano, algo que me quema, suelto el arma y rajo para la puerta que da hacia afuera. El pomo de la puerta era redondo. Como soy zurdo, trato de abrir la puerta con esa mano. No puedo, agarro el pomo, siento mojado y no tengo fuerza. ¿Qué pasaba? "A falta de pan, buenas son tortas", pruebo con la derecha, que siempre fue muy pero muy torpe. Aprieto el pomo, y tampoco puedo abrirla, porque no tenía pinza con la mano. La desesperación, ¿qué hago ahora? Me puse de costado, y agarre el pomo mojado con el dedo anular y el meñique de la mano derecha. La abrí y salí, ahí veo el agujero que reemplazaba la antena, el humo espeso de la explosión. llego hasta la barranca, mientras seguía el bombardeo. En un momento, para variar, aparece Abel, el médico neuquino. "¿Hay alguien herido?" "Creo que yo", todavía no me dolía, ni tenía mucha conciencia. Vino, dijo "Ajá, tenela lejos de la tierra para que no se infecte. Después te curo. Ahora no tengo suficiente." Siguió su camino entre los proyectiles que caian viendo si había otros heridos.
Las fragatas paraban un rato y luego seguían, a veces caían los proyectiles muy cerca.
En un pequeño intervalo, en un silencio profundo, de esos claritos como cuando uno dice una huevada en una reunión y justo todo el mundo se calla, quedando como eso, como un huevón, se escucha una voz: "¡Ay, Virgencita Santa! Si me salvo de ésta, nunca más le pego a mi mujer!". Las carcajadas de todos los que estábamos por ahí se escucharon mientras los inglesses volvían a sacudirnos.
