Tapar el sol con el dedo

Estado
Cerrado para nuevas respuestas

CCH

Veterano Guerra de Malvinas
Veteranos de la guerra de Malvinas: ¿víctimas o protagonistas?*

12 de diciembre de 2011

.............

El académico sostuvo en aquella oportunidad que “estamos obligados a admitir que la idea de víctima supone una visión política de la situación; en otras palabras, es desde el interior de una política que se decide quién es verdaderamente la víctima: en toda la historia del mundo, políticas diferentes tuvieron víctimas diferentes. Por lo tanto, no podemos partir únicamente de la idea de víctima, porque víctima es un término variable“.

Resulta cuanto menos evidente que casi en forma inmediata al cese de hostilidades acaecido el 14 de junio de 1982, cuantiosas producciones mediáticas, académicas y de índole cultural, reprodujeron signos manifiestos del dispositivo victimizante en relación al universo de los veteranos de guerra que participaron del conflicto en calidad de conscriptos. Probablemente tales manifestaciones tuvieran como objetivo coadyuvar a reforzar el carácter despótico, abusivo y cruel de la dictadura cívico-militar.

No obstante, a partir de los numerosas indagaciones que hemos impulsado desde la cátedra de Derecho a la Información que se dicta en la Carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Buenos Aires, de entrevistas a veteranos y familiares, y de investigaciones desarrolladas por el Observatorio Malvinas dependiente de la Universidad Nacional de Lanús, hemos comprobado que, a pesar de los diversos matices que existen en las miradas de quienes participaron en la guerra, la victimización es rechazada por una considerable cantidad de veteranos ya que, según ellos, tal estatus, (el de víctima) no satisface ni contiene sus anhelos ni sus expectativas.

Así, un conglomerado significativamente importante de los entrevistados, consideran que la victimización transmutó su participación en un acontecimiento de alta significación histórica, en una condición de damnificado que los privó de lo esencial: el sentido por el que fueron a luchar y su carácter de protagonistas.
Algunos rechazan además el trillado argumento que sostiene que la derrota en la batalla fuera el hecho primordial que determinara el retorno a la democracia, ya que la restauración del sistema democrático -sostienen- se debió fundamentalmente a la lucha popular entablada contra la dictadura.

En aquellos países que como el nuestro carecen de un ethos guerrero, un episodio bélico constituye un acontecimiento excepcionalmente traumático.
Cabe interrogarse, entonces, si la victimización que recayó sobre nuestros veteranos constituyó un mecanismo eficaz y duradero para elaborar el trauma colectivo que generó la guerra, y muy especialmente, si constituyó un remedio eficaz para que argentinos que participaron directamente en las hostilidades procesaran su llaga.

A casi 30 años de la guerra, como hemos asegurado en alguna ocasión, la tentativa de reducir a nuestros combatientes al papel de simples víctimas, ha constituido una estrategia que en vez de incorporarlos, como merecen, al panteón de la historia, procuró aprisionarlos en la cripta del olvido. Pero más grave aún, su victimización ha intentado menoscabar al país todo, ya que una comunidad que no es capaz de enaltecer la dimensión sacrificial de sus integrantes, mal puede transitar con dignidad los senderos de su propio futuro.

Toda sociedad que se precie de democrática debe aspirar a contener las expectativas de cada uno de sus componentes, y por tanto, al momento de formular proposiciones y diseñar políticas tendientes para superar un evento traumático, debe necesariamente tenerse en cuenta dichas expectativas. Entiendo que la democracia argentina posee una deuda con los combatientes ya que a 30 años sus anhelos no han sido del todo verificados aún.
Afortunadamente el pueblo sin prisa pero sin pausa ha comenzado a devolver la subjetividad a nuestros combatientes.
Mientras la victimización de nuestros soldados fue impulsada de “arriba hacia abajo”, la recuperación de su subjetividad se está operando “desde abajo hacia arriba” ya que en cada ciudad, en cada pueblo de Argentina por más pequeño que este sea, hay una callecita, una plazoleta, un recordatorio o un adoratorio en conmemoración a sus héroes y a la causa por la que batallaron.
...........................

Nota entera:

http://pestanha.telam.com.ar/2011/1...guerra-de-malvinas-¿victimas-o-protagonistas/
 

J@vier63

Veterano Guerra de Malvinas
Que lo pario!, fuimos la cara de la derrota, los culpables de la derrota. los chicos de la guerra y ahora victimas tambien??
De que nos sentimos orgullosos de haber defendido nuestro pais nada no??
CCH: queda claro que mi comentario es sobre el articulo u no sobre vos o hace falta aclarar?
 
Estado
Cerrado para nuevas respuestas
Arriba