IA-37P
Forista Sancionado o Expulsado
La Fuerza Aérea realizó esta mañana un vuelo de control del sistema para el aterrizaje en el aeropuerto de Ezeiza en una de las aeronaves destinadas a los procedimientos de verificación exigidos por la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) y que permanentemente se realizan en ése y otros aeropuertos del país.
El avión utilizado hoy, el VR-22 de la Fuerza Aérea Argentina, es un bimotor Piper Navajo empleado, entre otras áreas, para las verificaciones de la Terminal Baires (radar primario y secundario y sistemas de aterrizaje en pista). La Fuerza Aérea cuenta también con un reactor Learjet destinado también a este tipo de controles de rutina.
En el día de hoy se realizó la prueba de correcto funcionamiento del ILS de la pista 17/35 de Ezeiza, una de las dos con las que cuenta este aeropuerto internacional. El ILS (Instrumental Landing System, sistema de aterrizaje instrumental) es un sistema de control mediante el cual se va guiando a los aviones en su aproximación a la pista de aterrizaje.
Minutos después de las 10 el VR-22 despegó desde el sector militar del Aeroparque Jorge Newbery de la Ciudad de Buenos Aires; a bordo se encontraban su comandante, el mayor Jorge Cuesta, el segundo piloto, mayor César Grando, y el primer inspector, suboficial principal Jesús Tassin. Personal de la Dirección de Comunicación Social del Ministerio de Defensa también se embarcó en la aeronave.
Tassin fue el encargado de operar la mesa verificadora, un complejo aparato instalado en el avión, que va registrando los parámetros del ILS, e imprime fajas que después servirán para el control y serán archivadas.
Al ingresar en el área del aeropuerto de Ezeiza (y tras coordinar con la torre de control que no haya interferencias con vuelos comerciales) comenzó el procedimiento específico de verificación. Desde tierra, dos suboficiales ayudantes de la Fuerza Aérea dieron el apoyo para la operación: Francisco Juárez como segundo inspector y Alberto Contreras como operador del teodolito, instrumento de medición de ángulos.
El ILS cuenta con dos subsistemas independientes: el localizador (LOC), que guía la dirección lateral, y el glide, indicador de senda de planeo. Por la mañana se realizó la verificación del LOC del ILS en la pista 17/35.
Durante casi dos horas el piloto realizó sucesivas maniobras de ascenso y descenso sobre y alrededor de la pista, desde vuelos rasantes a 20 pies hasta los 4.200 pies, siempre respetando las esperas indicadas por la torre de control. Mientras tanto, el suboficial principal Tassin controlaba los indicadores de la mesa verificadora y registraba en las fajas que se iban imprimiendo sus observaciones. En comunicación permanente con el personal terrestre se realizaban los ajustes necesarios.
Aproximadamente a las 12 el VR-22 emprendió el regreso al aeroparque metropolitano. Por la tarde el VR-22 volvió a Ezeiza para completar el test del ILS con el monitoreo del glide, el otro de sus sistemas.
Buenos Aires, 9 de mayo de 2007
El avión utilizado hoy, el VR-22 de la Fuerza Aérea Argentina, es un bimotor Piper Navajo empleado, entre otras áreas, para las verificaciones de la Terminal Baires (radar primario y secundario y sistemas de aterrizaje en pista). La Fuerza Aérea cuenta también con un reactor Learjet destinado también a este tipo de controles de rutina.
En el día de hoy se realizó la prueba de correcto funcionamiento del ILS de la pista 17/35 de Ezeiza, una de las dos con las que cuenta este aeropuerto internacional. El ILS (Instrumental Landing System, sistema de aterrizaje instrumental) es un sistema de control mediante el cual se va guiando a los aviones en su aproximación a la pista de aterrizaje.
Minutos después de las 10 el VR-22 despegó desde el sector militar del Aeroparque Jorge Newbery de la Ciudad de Buenos Aires; a bordo se encontraban su comandante, el mayor Jorge Cuesta, el segundo piloto, mayor César Grando, y el primer inspector, suboficial principal Jesús Tassin. Personal de la Dirección de Comunicación Social del Ministerio de Defensa también se embarcó en la aeronave.
Tassin fue el encargado de operar la mesa verificadora, un complejo aparato instalado en el avión, que va registrando los parámetros del ILS, e imprime fajas que después servirán para el control y serán archivadas.
Al ingresar en el área del aeropuerto de Ezeiza (y tras coordinar con la torre de control que no haya interferencias con vuelos comerciales) comenzó el procedimiento específico de verificación. Desde tierra, dos suboficiales ayudantes de la Fuerza Aérea dieron el apoyo para la operación: Francisco Juárez como segundo inspector y Alberto Contreras como operador del teodolito, instrumento de medición de ángulos.
El ILS cuenta con dos subsistemas independientes: el localizador (LOC), que guía la dirección lateral, y el glide, indicador de senda de planeo. Por la mañana se realizó la verificación del LOC del ILS en la pista 17/35.
Durante casi dos horas el piloto realizó sucesivas maniobras de ascenso y descenso sobre y alrededor de la pista, desde vuelos rasantes a 20 pies hasta los 4.200 pies, siempre respetando las esperas indicadas por la torre de control. Mientras tanto, el suboficial principal Tassin controlaba los indicadores de la mesa verificadora y registraba en las fajas que se iban imprimiendo sus observaciones. En comunicación permanente con el personal terrestre se realizaban los ajustes necesarios.
Aproximadamente a las 12 el VR-22 emprendió el regreso al aeroparque metropolitano. Por la tarde el VR-22 volvió a Ezeiza para completar el test del ILS con el monitoreo del glide, el otro de sus sistemas.
Buenos Aires, 9 de mayo de 2007
