Noticias sobre Pluna
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bullrock
o sea que , el estado nacional deberia beneficiar a una linea aerea privada con mas rutas rentables de las que vuela a cambio de? volar las super rutas rentables de cabotaje en chile?
por otro lado, si el estado hace gran esfuerzo por fomentar el turismo y el consumo interno, porque va a beneficiar a una privada, siendo que es el estado el que tiene que hacer las inversiones en el campo aerocomercial, y en la linea aerea de bandera.
porque no empiezan por ofrecer hacer los vuelos no rentables en lugar de borrarse fuera de temporada, antes de salir a reclamar mas rutas??
quieren llevarse todos los caramelos y que la espinaca se la coma el estado.. en usa te sacan a patadas en el tujes con esos planteos... en brasil...
incluso uruguay cierra una empresa para no HACERSE CARGO de un juicio!!! y nadie dice nada.
a mi me parece perfecto lo que hacen, ofrezcan algo mas en lugar de seguir pidiendo tanto
LAN, Copa y BQB se disputan a los codiciados pilotos desempleados
Las empresas extranjeras ya hicieron ofertas a varios aviadores
La quiebra de la empresa Pluna generó la oportunidad para distintas aerolíneas de la región que, ante la escasez de profesionales aviadores en el mercado, ya comenzaron a seducir a los pilotos uruguayos que hasta la semana pasada estaban encargados de comandar los vuelos de la excompañía estatal. Tanto la aerolínea LAN, como Copa Airlines y BQB Líneas Aéreas pretenden contratar a parte de los 120 pilotos que se quedaron sin trabajo tras el cierre de Pluna el jueves pasado.
La empresa panameña Copa Airlines realizará esta semana en Montevideo entrevistas de trabajo a los expilotos de Pluna interesados en ser tomados por una de las compañías que domina la distribución de pasajeros en Centroamérica, dijeron a El Observador integrantes del sindicato de pilotos. Copa convocó vía e-mail para viernes y sábado a los aviadores para que se presenten a un work shop que tendrá lugar en el Radisson Victoria Plaza.
“La empresa Copa necesita 60 pilotos antes de fin de año y va a venir a llevarse todo lo que pueda”, dijo a El Observador el expiloto de Pluna, Aníbal Perera. El aviador tiene 13.000 horas de vuelo y fue la persona que comandó el último viaje que la aerolínea estatal realizó desde Madrid a Montevideo en el año 2007 (ver nota inferior).
Los pilotos son codiciados por su experiencia en un empleo considerado de alta calificación. En Pluna hay profesionales que superan las 10.000 horas de vuelo y que nunca tuvieron un accidente de gravedad. En cambio, Copa, por ejemplo, permitía hasta el año pasado el ingreso al entrenamiento para trabajar en la compañía a pilotos panameños con solo haber cumplido 200 horas de vuelo.
Tras el cierre de Pluna, la empresa de bandera chilena LAN también comenzó a contactar por correo electrónico a pilotos de Pluna para contratarlos. Según supo El Observador, la compañía solicitó a aviadores uruguayos interesados que envíen sus curriciculums a la brevedad.
Además, el lunes tres expilotos de Pluna anunciaron al sindicato que comenzarían a trabajar en BQB Líneas Aéreas, una empresa que pretende aumentar las frecuencias de vuelos directos entre Montevideo y Buenos Aires tras la quiebra de Pluna.
La mayoría de los pilotos uruguayos son formados en la Fuerza Aérea. El costo promedio para instruir un aviador era de US$ 250 mil en el año 2008, según dijo el entonces comandante en Jefe de la Fuerza Aérea, Enrique Bonelli.
Si bien el gobierno pretendía frenar la sangría de pilotos desde las Fuerzas Armadas hacia las aerolíneas privadas, la quiebra de Pluna y el interés de las empresas se convierte en una oportunidad para que los trabajadores enviados al seguro de paro puedan asegurarse su fuente laboral.
Los sueldos y la demanda
Copa pretende contratar comandantes y primeros aviadores, que corresponden a distintos rangos de jerarquía pero ambos son pilotos. Según dijo Perera, el sueldo promedio mensual de un comandante de Pluna oscilaba entre $ 60.000 y $ 70.000. El salario de un trabajador del mismo grado de Copa ronda US$ 7.000, alrededor de $ 150.000, dijeron a El Observador otros pilotos de Pluna. Sin embargo, trabajar en el extranjero implica trasladar las familias y no todos los trabajadores están dispuestos a hacerlo.
Copa ya tiene en sus filas a 40 pilotos uruguayos pero necesita abastecer el personal de su flota por la expansión de su mercado en la zona del Caribe. Las fuentes indicaron que la empresa panameña cuenta al momento en su plantilla con cinco aviadores que eran de Pluna.
Copa Airlines tiene 76 aviones, según consigna en su sitio web. Por ejemplo, Pluna tenía 13 aviones y funcionaba con 120 pilotos, entre los cuáles había extranjeros porque en Uruguay también escaseaban.
El sindicato de pilotos de la empresa quebrada asegura que para volar los siete aviones de Pluna que serán rematados por el Estado serán necesarios 90 aviadores.
La vida entre aviones y el último vuelo de Pluna desde Madrid
Aníbal Perera nació el 28 de setiembre de 1955 en el aeropuerto de Laguna del Sauce, en Maldonado. La madre del niño rompió bolsa mientras acompañaba a su esposo, que trabajaba como radio operador en esa terminal aérea. No hubo tiempo para traslados y por eso la mujer dio a luz a metros de una pista de aterrizaje, el lugar que marcaría la vida del recién nacido.
Es que 52 años después Perera comandó el último vuelo que la aerolínea estatal Pluna –ahora en bancarrota– realizó desde Madrid a Montevideo, tras la decisión de su por entonces gerente, Matías Campiani, de suprimir la frecuencia con el trayecto más largo que tenía la compañía. “Ese día marcó mi vida, y a veces prefiero ni recordarlo”, dijo el comandante de ese vuelo a El Observador, mientras se tomaba el rostro con las dos manos.
Antes de asumir, en enero de 2007, Campiani había prometido que la línea Montevideo-Madrid sería uno de los pilares de su gestión, tanto en el transporte de pasajeros como de carga. Pluna dejó de volar a Madrid en setiembre de ese año.
Pero a pesar de la suspensión del servicio, según dijo Perera, en ese momento no se imaginaba que su historia como piloto podría terminar con la quiebra de la empresa que lo acompañó desde que tenía un año (ver foto).
Casi cinco años después de suprimir la línea a Madrid, Campiani dejó la empresa y el gobierno liquidó la compañía. “Te movés entre la bronca y la incertidumbre. La impotencia es muy fuerte. Además hasta la salida de Leadgate a nosotros nadie nos decía nada y te enterabas por la prensa”, afirmó el hombre de 56 años.
Con la aerolínea donde realizó más de 13.000 horas de vuelo fundida, Perera todavía se siente piloto. El hombre era de los funcionarios más experimentados de la empresa.
El sueldo promedio de un comandante de la aerolínea estaba entre $ 60.000 y $ 70.000 mensuales. En el mercado aeronáutico escasean los pilotos (ver nota superior), al punto que Pluna tenía en su plantilla comandantes extranjeros. Además los pilotos pierden la calificación si dejan de volar. Los encargados de manejar los aviones tienen entrenamientos periódicos y cada seis meses deben rendir pruebas físicas y psicológicas para continuar.
Ahora, tras el cierre de Pluna y firmar el lunes el pasaje al seguro de paro en las oficinas del Aeropuerto Internacional de Carrasco, Perera no sabe si quedarse en su casa en el balneario Piriápolis o buscar ofertas laborales para seguir volando.
“Tengo la posibilidad de pasarme al Estado y tener un trabajo ahí pero haciendo algo que no es lo mío”, dijo. Además confesó que tras el cierre de Pluna analiza la posibilidad de jubilarse. “Estoy viendo los trámites y qué posibilidades tengo (de jubilarme) porque la verdad que esto te deja con muy pocas fuerzas”, lamentó.
“En 76 años Pluna nunca mató a un pasajero. Eso nunca se recuerda y es todo por el profesionalismo de los pilotos uruguayos”, concluyó Perera. l
el observador
Novedades de Pluna
http://www.elpais.com.uy/120718/pna...as-y-austral-mas-frecuencias-en-puente-aereo/.
el pais
http://www.elpais.com.uy/120718/pna...as-y-austral-mas-frecuencias-en-puente-aereo/.
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Aca en Chile ya se iniciaron los juicios por defensa del consumidor contra Pluna y las agencias de viaje por los vuelos no ejecutados. Lo lamento por los que se quedaron en tierra sin viajar y también por las agencias de viaje que por ley del consumidor responden ante el cliente en su calidad de intermediarios.
HAY 40.000 PASAJEROS SIN RECUPERAR LO QUE PAGARON
Quedan 40.000 personas que compraron pasajes a Pluna y aún no han podido recuperar su dinero. El Ministerio de Turismo recibió más de 2.000 denuncias de pasajeros damnificados por el cierre de la aerolínea.
Pluna dejó de volar hace 18 días, al inicio de las vacaciones de julio en Uruguay y Brasil, lo que determinó que miles de pasajeros en el exterior no pudieran regresar a su país de origen. Solo en Brasil, Pluna dejó 40.000 pasajeros sin poder hacer uso del servicio, informó el diario O Globo.
Antes de cerrar sus puertas, la aerolínea de bandera uruguaya había vendido 70.000 pasajes, entre ellos había boletos comprados para los meses de noviembre y diciembre. Al día de hoy, aún quedan 40.000 personas que no pudieron recuperar el dinero que invirtieron en la compra del pasaje, dijeron a El País fuentes de gobierno.
Las autoridades del Ejecutivo presumen que esta cantidad de personas pueden presentarse al concurso judicial de Pluna S.A., para intentar recuperar su dinero. Mientras tanto, el Ejecutivo está trabajando para solucionar algunos de estos casos como forma de reducir la cantidad de personas damnificadas, explicaron los informantes.
En contrapartida, los primeros acreedores en recibir su dinero por la subasta de siete aviones Bombardier serán el Scotiabank, al cual se le deben US$ 135 millones por la compra de esas aeronaves. En segundo lugar de la lista se ubican los 700 exfuncionarios de Pluna, luego vienen los acreedores estatales: Ancap (US$ 27 millones) y el Banco República (US$ 16 millones).
A diferencia de las 40.000 personas que no recuperaron su dinero por la compra de boletos aéreos, unos 30.000 pasajeros fueron abarcados por las soluciones que brindó el Estado y las aerolíneas privadas, tras el cierre de Pluna.
Fuentes de gobierno explicaron que una buena parte de esos 30.000 pasajes habían sido comprados por compañías internacionales que hacían conexiones con Pluna y los costos de esos pasajes fueron asumidos por esas aerolíneas.
Dentro de este grupo, también están los pasajeros que habían volado en Pluna a un determinado destino, pero no habían podido regresar a su país de origen. Para facilitar el regreso de los afectados por el cierre de la Pluna, el Ministerio de Turismo firmó un acuerdo con las aerolíneas Tam, Lan, Gol y Buquebus, el cual estuvo vigente hasta el 15 de julio.
El Ministerio de Deportes dispuso de US$ 300.000 para el regreso de los afectados por el cierre de Pluna desde Chile, Argentina, Paraguay y Brasil. En los próximos días se dará a conocer un informe que indicará qué porcentaje de esos US$ 300.000 se gastó y cuántos pasajeros se transportaron.
DENUNCIAS. El subsecretario del Ministerio de Turismo, Antonio Carámbula, dijo a El País que su cartera recepcionó más de 2.000 denuncias vía correo electrónico o de manera presencial de pasajeros afectados por el cierre de la aerolínea de bandera uruguaya.
Además el Ministerio atendió un total de 300 llamados en el call center de la cartera (1185 int. 9, que funciona de lunes a viernes de 10 a 18 horas) y el cual es independiente del call center de Pluna S.A.
Muchas de las consultas recibidas eran de personas que habían adquirido su boleto vía internet o en el local de Pluna; esos llamados se derivaban al Servicio de Defensa al Consumidor, donde ya hay presentadas más de 400 denuncias.
Las mayoría de los reclamos recibidos por el Ministerio de Turismo son de personas que ya viajaron en vacaciones de julio pero no pudieron hacer uso de los pasajes de Pluna, explicó Carámbula. "En algunos casos nos consta que han presentado una denuncia, pero después la agencia en poco tiempo les dice que ellos lo resuelven de alguna manera", señaló el jerarca.
Las agencias de viaje poseen un fondo de garantía, el cual se puede activar en determinados casos para cubrir los gastos del cliente damnificado por una situación, como lo fue el cierre de la aerolínea. El fondo de las agencias mayoristas ronda en US$ 180.000.
Carámbula explicó que la garantía se emplea de acuerdo al tipo de venta que se hizo. "Depende del tipo de transacción, no toda las compras por medio de agencias de viajes están incluidas en la cobertura, hay que cumplir con determinadas condiciones y siempre se estudia caso a caso", explicó el jerarca.
Por ejemplo, una persona que adquirió un paquete turístico que incluye más servicios que el pasaje (hotel, traslados y paseos) puede hacer uso del beneficio de la garantía de agencias de viaje.
LAS CIFRAS
300 mil
Monto en dólares que gastó el Ministerio de Turismo para atender a los pasajeros de Pluna que quedaron varados.
135:
Es la cifra en dólares que el gobierno prevé recaudar por la subasta de los siete aviones de los que el Estado es garantía.
El País Digital
Quedan 40.000 personas que compraron pasajes a Pluna y aún no han podido recuperar su dinero. El Ministerio de Turismo recibió más de 2.000 denuncias de pasajeros damnificados por el cierre de la aerolínea.
Pluna dejó de volar hace 18 días, al inicio de las vacaciones de julio en Uruguay y Brasil, lo que determinó que miles de pasajeros en el exterior no pudieran regresar a su país de origen. Solo en Brasil, Pluna dejó 40.000 pasajeros sin poder hacer uso del servicio, informó el diario O Globo.
Antes de cerrar sus puertas, la aerolínea de bandera uruguaya había vendido 70.000 pasajes, entre ellos había boletos comprados para los meses de noviembre y diciembre. Al día de hoy, aún quedan 40.000 personas que no pudieron recuperar el dinero que invirtieron en la compra del pasaje, dijeron a El País fuentes de gobierno.
Las autoridades del Ejecutivo presumen que esta cantidad de personas pueden presentarse al concurso judicial de Pluna S.A., para intentar recuperar su dinero. Mientras tanto, el Ejecutivo está trabajando para solucionar algunos de estos casos como forma de reducir la cantidad de personas damnificadas, explicaron los informantes.
Los pasajeros de Pluna que habían adquirido pasajes antes del cierre estarán entre los últimos acreedores del concurso judicial, reconoció el ministro de Economía, Fernando Lorenzo. En una situación similar están otros 500 ahorristas de un fideicomiso por US$ 15 millones administrado por corredores de Bolsa (Rospide y Renmax), informó el ministro de Transporte, Enrique Pintado.En contrapartida, los primeros acreedores en recibir su dinero por la subasta de siete aviones Bombardier serán el Scotiabank, al cual se le deben US$ 135 millones por la compra de esas aeronaves. En segundo lugar de la lista se ubican los 700 exfuncionarios de Pluna, luego vienen los acreedores estatales: Ancap (US$ 27 millones) y el Banco República (US$ 16 millones).
A diferencia de las 40.000 personas que no recuperaron su dinero por la compra de boletos aéreos, unos 30.000 pasajeros fueron abarcados por las soluciones que brindó el Estado y las aerolíneas privadas, tras el cierre de Pluna.
Fuentes de gobierno explicaron que una buena parte de esos 30.000 pasajes habían sido comprados por compañías internacionales que hacían conexiones con Pluna y los costos de esos pasajes fueron asumidos por esas aerolíneas.
Dentro de este grupo, también están los pasajeros que habían volado en Pluna a un determinado destino, pero no habían podido regresar a su país de origen. Para facilitar el regreso de los afectados por el cierre de la Pluna, el Ministerio de Turismo firmó un acuerdo con las aerolíneas Tam, Lan, Gol y Buquebus, el cual estuvo vigente hasta el 15 de julio.
El Ministerio de Deportes dispuso de US$ 300.000 para el regreso de los afectados por el cierre de Pluna desde Chile, Argentina, Paraguay y Brasil. En los próximos días se dará a conocer un informe que indicará qué porcentaje de esos US$ 300.000 se gastó y cuántos pasajeros se transportaron.
DENUNCIAS. El subsecretario del Ministerio de Turismo, Antonio Carámbula, dijo a El País que su cartera recepcionó más de 2.000 denuncias vía correo electrónico o de manera presencial de pasajeros afectados por el cierre de la aerolínea de bandera uruguaya.
Además el Ministerio atendió un total de 300 llamados en el call center de la cartera (1185 int. 9, que funciona de lunes a viernes de 10 a 18 horas) y el cual es independiente del call center de Pluna S.A.
Muchas de las consultas recibidas eran de personas que habían adquirido su boleto vía internet o en el local de Pluna; esos llamados se derivaban al Servicio de Defensa al Consumidor, donde ya hay presentadas más de 400 denuncias.
Las mayoría de los reclamos recibidos por el Ministerio de Turismo son de personas que ya viajaron en vacaciones de julio pero no pudieron hacer uso de los pasajes de Pluna, explicó Carámbula. "En algunos casos nos consta que han presentado una denuncia, pero después la agencia en poco tiempo les dice que ellos lo resuelven de alguna manera", señaló el jerarca.
Las agencias de viaje poseen un fondo de garantía, el cual se puede activar en determinados casos para cubrir los gastos del cliente damnificado por una situación, como lo fue el cierre de la aerolínea. El fondo de las agencias mayoristas ronda en US$ 180.000.
Carámbula explicó que la garantía se emplea de acuerdo al tipo de venta que se hizo. "Depende del tipo de transacción, no toda las compras por medio de agencias de viajes están incluidas en la cobertura, hay que cumplir con determinadas condiciones y siempre se estudia caso a caso", explicó el jerarca.
Por ejemplo, una persona que adquirió un paquete turístico que incluye más servicios que el pasaje (hotel, traslados y paseos) puede hacer uso del beneficio de la garantía de agencias de viaje.
LAS CIFRAS
300 mil
Monto en dólares que gastó el Ministerio de Turismo para atender a los pasajeros de Pluna que quedaron varados.
135:
Es la cifra en dólares que el gobierno prevé recaudar por la subasta de los siete aviones de los que el Estado es garantía.
El País Digital
Estudio demuestra violaciones porteñas al acuerdo aeronáutico
Argentina puso palos en la rueda a la aerolínea uruguaya
Un estudio del buffet de abogados estadounidense Covington & Burling, sobre el tratamiento de Uruguay y Argentina de los servicios aéreos subregionales, enumera una serie de violaciones a los acuerdos aeronáuticos binacionales por parte de Argentina, ante las solicitudes de la exaerolínea de bandera uruguaya Pluna. El resumen ejecutivo del estudio, al que accedió El Observador, explica que Argentina no cumplió con el Acuerdo de Fortaleza, de 1996, celebrado entre varios países de la región, ni con el Acuerdo de Transporte Aéreo de 1983, de carácter binacional, que tuvo sucesivas modificaciones en 1997, 2003 y 2005, en la gran mayoría de las veces que Uruguay solicitó habilitar frecuencias.
“Uruguay debería poder argumentar que las negativas de la Argentina para aprobar las rutas subregionales desde Montevideo son incompatibles con diversas disposiciones del Acuerdo de Fortaleza, y claramente contrarias al objeto y el propósito de dicho acuerdo”, dice el análisis de los expertos estadounidenses.
Covington & Burling recuerda que Pluna todavía nunca tuvo contestación de Argentina para poder volar Bariloche, y que recibió respuesta negativa a sus pedidos de obtener frecuencias para llegar a las ciudades argentinas de Mendoza, Salta y Trelew. El trabajo se encarga de enumerar las razones por las cuales Argentina debió haber habilitado esas rutas a la aerolínea uruguaya. Indica que las respuestas y argumentos contrarios ensayados por Buenos Aires son “incompatibles” con lo establecido en los tratados.
“La ley no constituye una justificación de las negativas de la Argentina para aprobar un nuevo servicio de Pluna, el cual es coherente con el Acuerdo”, dice el estudio. “La conservación de derechos exclusivos para Aerolíneas Argentinas es extremadamente anticompetitivo”, concluye, en alusión a parte de los motivos de Argentina para rechazar las solicitudes.
Ayer, El Observador informó de nuevas trabas desde Argentina a las frecuencias que otorga Uruguay. Esta vez sucedió con BQB, la aerolínea propiedad del empresario Juan Carlos López Mena, a quien el gobierno de José Mujica le adjudicó en forma transitoria 14 frecuencias para el puente aéreo (Aeroparque-Carrasco). Las autoridades aeronáuticas de Buenos Aires impidieron volar a esa empresa, que debió devolver el dinero de los boletos a los pasajeros afectados.
El ministro de Transporte , Enrique Pintado, consideró ayer que se trata de “demoras”, producto de “trámites burocráticos previstos”. Consultado en rueda de prensa, el ministro negó que se trate de una “traba” ni de “dificultades”.
Fuentes del gobierno, en tanto, explicaron a El Observador que el proceso de solicitud está en proceso y que el pedido no puede ser negado por el gobierno de Cristina Fernández.
el observador
Argentina puso palos en la rueda a la aerolínea uruguaya
Un estudio del buffet de abogados estadounidense Covington & Burling, sobre el tratamiento de Uruguay y Argentina de los servicios aéreos subregionales, enumera una serie de violaciones a los acuerdos aeronáuticos binacionales por parte de Argentina, ante las solicitudes de la exaerolínea de bandera uruguaya Pluna. El resumen ejecutivo del estudio, al que accedió El Observador, explica que Argentina no cumplió con el Acuerdo de Fortaleza, de 1996, celebrado entre varios países de la región, ni con el Acuerdo de Transporte Aéreo de 1983, de carácter binacional, que tuvo sucesivas modificaciones en 1997, 2003 y 2005, en la gran mayoría de las veces que Uruguay solicitó habilitar frecuencias.
“Uruguay debería poder argumentar que las negativas de la Argentina para aprobar las rutas subregionales desde Montevideo son incompatibles con diversas disposiciones del Acuerdo de Fortaleza, y claramente contrarias al objeto y el propósito de dicho acuerdo”, dice el análisis de los expertos estadounidenses.
Covington & Burling recuerda que Pluna todavía nunca tuvo contestación de Argentina para poder volar Bariloche, y que recibió respuesta negativa a sus pedidos de obtener frecuencias para llegar a las ciudades argentinas de Mendoza, Salta y Trelew. El trabajo se encarga de enumerar las razones por las cuales Argentina debió haber habilitado esas rutas a la aerolínea uruguaya. Indica que las respuestas y argumentos contrarios ensayados por Buenos Aires son “incompatibles” con lo establecido en los tratados.
“La ley no constituye una justificación de las negativas de la Argentina para aprobar un nuevo servicio de Pluna, el cual es coherente con el Acuerdo”, dice el estudio. “La conservación de derechos exclusivos para Aerolíneas Argentinas es extremadamente anticompetitivo”, concluye, en alusión a parte de los motivos de Argentina para rechazar las solicitudes.
Ayer, El Observador informó de nuevas trabas desde Argentina a las frecuencias que otorga Uruguay. Esta vez sucedió con BQB, la aerolínea propiedad del empresario Juan Carlos López Mena, a quien el gobierno de José Mujica le adjudicó en forma transitoria 14 frecuencias para el puente aéreo (Aeroparque-Carrasco). Las autoridades aeronáuticas de Buenos Aires impidieron volar a esa empresa, que debió devolver el dinero de los boletos a los pasajeros afectados.
El ministro de Transporte , Enrique Pintado, consideró ayer que se trata de “demoras”, producto de “trámites burocráticos previstos”. Consultado en rueda de prensa, el ministro negó que se trate de una “traba” ni de “dificultades”.
Fuentes del gobierno, en tanto, explicaron a El Observador que el proceso de solicitud está en proceso y que el pedido no puede ser negado por el gobierno de Cristina Fernández.
el observador
López Mena: “Los aviones están excedidos en el precio”
El empresario Juan Carlos López Mena dijo que “no estamos seguros de entrar” en la subasta por los aviones de Pluna, porque consideró que el precio base de las aeronaves “está excedido” con respecto al valor de mercado.
El propietario de las empresas Buquebus y BQB señaló que los siete aviones Bombardier, con las horas de vuelo que tienen y con buen mantenimiento valen entre 11 y 13 millones de dólares cada uno, pero el Estado pide 18 millones de dólares.
En una extensa entrevista publicada por el portal Infonegocios, López Mena fue consultado por los próximos pasos que darán sus empresas a partir del cierre de Pluna. “Esto ha cambiado un poco el panorama porque Pluna era la principal empresa de bandera, con 75 años de antigüedad, cero accidente y una performance estupenda”, comentó el empresario.
“La empresa como empresa fue avanzando, pero lo hizo sin armonía con la parte financiera y económica. Ese es un error que se paga caro. Haciendo una analogía es como un ejército que avanza y no tiene una retaguardia bien pertrechada. Una empresa implica una estrategia casi de guerra, solo que por la paz”, opinó.
Al preguntársele si la empresa BQB participará de la subasta fijada para el 12 de setiembre, con una base de U$S136.885.156 por los siete aviones, respondió: “Para nosotros el Bombardier que tiene Pluna es un avión con ciertas limitaciones en cuanto a autonomía, pero es apto para un mercado regional de hasta 1.900 kilómetros”.
“Hay muchos pilotos que están certificados en Bombardier y sería una pena desperdiciarlos porque la certificación de un piloto lleva tiempo y es costosa. Estuvimos reunidos con el sindicato de pilotos y copilotos y descubrimos un material humano y profesional valioso”, sostuvo.
“Hoy no estamos seguros de entrar, porque los aviones están excedidos en el precio de mercado. Ese avión, con las horas de vuelo que tiene y estando excelentemente bien mantenido, está entre U$S 11 y U$S 13 millones. Y el Estado pide unos U$S 18 millones. Ya ahí, contablemente habría que tomar una deuda de U$S 135 millones y en el balance pasar a tener U$S 100. Es un tema en el que alguien va a tener que afrontar la pérdida”, enfatizó.
la republica
El empresario Juan Carlos López Mena dijo que “no estamos seguros de entrar” en la subasta por los aviones de Pluna, porque consideró que el precio base de las aeronaves “está excedido” con respecto al valor de mercado.
El propietario de las empresas Buquebus y BQB señaló que los siete aviones Bombardier, con las horas de vuelo que tienen y con buen mantenimiento valen entre 11 y 13 millones de dólares cada uno, pero el Estado pide 18 millones de dólares.
En una extensa entrevista publicada por el portal Infonegocios, López Mena fue consultado por los próximos pasos que darán sus empresas a partir del cierre de Pluna. “Esto ha cambiado un poco el panorama porque Pluna era la principal empresa de bandera, con 75 años de antigüedad, cero accidente y una performance estupenda”, comentó el empresario.
“La empresa como empresa fue avanzando, pero lo hizo sin armonía con la parte financiera y económica. Ese es un error que se paga caro. Haciendo una analogía es como un ejército que avanza y no tiene una retaguardia bien pertrechada. Una empresa implica una estrategia casi de guerra, solo que por la paz”, opinó.
Al preguntársele si la empresa BQB participará de la subasta fijada para el 12 de setiembre, con una base de U$S136.885.156 por los siete aviones, respondió: “Para nosotros el Bombardier que tiene Pluna es un avión con ciertas limitaciones en cuanto a autonomía, pero es apto para un mercado regional de hasta 1.900 kilómetros”.
“Hay muchos pilotos que están certificados en Bombardier y sería una pena desperdiciarlos porque la certificación de un piloto lleva tiempo y es costosa. Estuvimos reunidos con el sindicato de pilotos y copilotos y descubrimos un material humano y profesional valioso”, sostuvo.
“Hoy no estamos seguros de entrar, porque los aviones están excedidos en el precio de mercado. Ese avión, con las horas de vuelo que tiene y estando excelentemente bien mantenido, está entre U$S 11 y U$S 13 millones. Y el Estado pide unos U$S 18 millones. Ya ahí, contablemente habría que tomar una deuda de U$S 135 millones y en el balance pasar a tener U$S 100. Es un tema en el que alguien va a tener que afrontar la pérdida”, enfatizó.
la republica
Exigirán a comprador de Pluna que contrate a 250 técnicos
El Gobierno estableció esa cifra como la mínima para que un inversor constituya una nueva aerolínea con bandera uruguaya
El inversor que compre los siete aviones que pertenecían a Pluna tendrá que contratar a un mínimo de sus 250 exfuncionarios si quiere establecer una aerolínea de bandera uruguaya, informa UNoticias.
Según el matutino, un decreto del Poder Ejecutivo que contiene ese requisito a cambio de las frecuencias está a la espera de que el presidente José Mujica lo apruebe.
Las rutas aéreas, propiedad del Estado, se transformaron en un activo a través de una ley para ligarlas especialmente a la subasta de los aviones.
“El número de trabajadores que estipula el decreto es simbólico”, dijo una fuente oficial a UNoticias, y agregó que se contemplará la situación de quienes tienen un mayor grado de especificidad, como es el caso de pilotos y mecánicos. La causa de esto también es que la línea de aviones Bombardier CRJ-900 que irán a la subasta no cuenta con muchos especialistas en la región, porque las compañías aéreas optan por los fabricantes Airbus, Boeing y Embraer, informa el diario.
Se estima que el comprador de los aviones necesitará más trabajadores sin entrenamiento específico. En ese grupo figuran personal de tierra y otras categorías
El Gobierno estableció esa cifra como la mínima para que un inversor constituya una nueva aerolínea con bandera uruguaya
El inversor que compre los siete aviones que pertenecían a Pluna tendrá que contratar a un mínimo de sus 250 exfuncionarios si quiere establecer una aerolínea de bandera uruguaya, informa UNoticias.
Según el matutino, un decreto del Poder Ejecutivo que contiene ese requisito a cambio de las frecuencias está a la espera de que el presidente José Mujica lo apruebe.
Las rutas aéreas, propiedad del Estado, se transformaron en un activo a través de una ley para ligarlas especialmente a la subasta de los aviones.
“El número de trabajadores que estipula el decreto es simbólico”, dijo una fuente oficial a UNoticias, y agregó que se contemplará la situación de quienes tienen un mayor grado de especificidad, como es el caso de pilotos y mecánicos. La causa de esto también es que la línea de aviones Bombardier CRJ-900 que irán a la subasta no cuenta con muchos especialistas en la región, porque las compañías aéreas optan por los fabricantes Airbus, Boeing y Embraer, informa el diario.
Se estima que el comprador de los aviones necesitará más trabajadores sin entrenamiento específico. En ese grupo figuran personal de tierra y otras categorías
Aviones de Pluna necesitan de un service que cuesta US$5 millones
La empresa que se haga cargo de las aeronaves tendrá que mandar tres de ellas a México para su puesta a punto
La empresa que gane la subasta de los siete aviones de la exPluna, deberá, además de desembolsar como mínimo US$100 millones, asumir una lista importante de obligaciones para empezar a volar, como renegociar la deuda con el The Bank of Nova Scotia, las frecuencias con el Poder Ejecutivo y tomar 250 trabajadores de los que quedaron desempleados en un plazo de 60 días.
A todo ello, se suma que de inmediato el inversor deberá enviar a México a tres de los siete Bombardier CRJ 900 para realizarles una puesta a punto (un service)que tiene un costo estimado de US$5.000.000, informaron a El Observador fuentes oficiales.
Se trata de tres de las siete primeras aeronaves de las 13 que terminaron conformando la flota de la aerolínea de bandera uruguaya bajo la administración de la empresa Leadgate, que tenía 75% de las acciones.
Los tres aviones tienen que ser enviados a México, donde la empresa canadiense Bombardier tiene uno de sus plantas de construcción y reparación, ya que han cumplido con el tiempo de vida útil estipulada para requerir una intervención profunda en su funcionamiento.
La vida útil de los aviones se mide por horas de vuelo o “ciclos” de los motores, que se cumplen con un despegue y un aterrizaje, los momentos donde el avión tiene mayor esfuerzo. “Por hacer vuelos cortos, de pronto, se llega antes a los ciclos que a las horas de vuelo”, explicó una fuente del gobierno.
Cuando se cumple uno de los dos elementos, se debe realizar la puesta a punto.
Tal es así, que los trabajadores que el Poder Ejecutivo mantuvo en la plantilla de la exPluna para cumplir con el mantenimiento de la flota, han tenido especial cuidado en mover poco a esos aviones.
Cuando el Poder Ejecutivo acordó con el socio privado gestionar en minoría la aerolínea de bandera, Leadgate comprometió una capitalización de US$ 15 millones y la renovación de la flota, que a esa altura, en 2007, era vetusta y cara de operar. Cumplió con lo primero durante el primer año de gestión, y luego de largas negociaciones con organismos de crédito, los fabricantes y el gobierno, logró cerrar la operación para adquirir los siete primeros Bombardier CRJ 900 NextGen, con un préstamo del The Bank of Nova Scotia, por US$175 millones, y con la garantía soberana del Estado uruguayo.
Esos siete Bombardier, de los cuales ahora tres necesitan una puesta a punto, llegaron a Uruguay entre marzo y diciembre de 2008. Dos años después, Pluna S.A. decidió ampliar la flota. Introdujo a la canadiense Jazz como accionista, con quienes realizan una capitalización de US$20 millones, y luego, en 2011, concreta la segunda ampliación de la flota, esta vez, por el sistema leasing.
Según la memoria anual de 2011, los aviones de la exPluna completaron 18.107 aterrizajes.
El service de los aviones se realiza cada 6.000 horas de vuelo, según el programa de mantenimiento de Bombardier. La primera se realizó en Uruguay, para lo cual la exPluna invirtió en capacitación y repuestos.
Cada detalle
El Poder Ejecutivo emitió el miércoles un decreto por el cual se establecen las condiciones de negociación con la empresa que gane la subasta de los siete aviones Bombardier el 12 de setiembre en el Aeropuerto al mediodía.
Asegura allí que la garantía del Estado para el pago de la deuda de los aviones no podrá superar 75% del precio de la adquisición de las aeronaves resultante de la subasta de setiembre. Obliga también a quien adquiera el lote de aviones y conforme una aerolínea de bandera a contratar en 60 días a 250 trabajadores de la ex Pluna, en tiempo completo.
También el gobierno reclamará a quien resulte ganador de la subasta documentación expedida por entidades bancarias que avalen su solvencia para obtener la cantidad necesaria para la constitución del capital de trabajo y el financiamiento de los egresos.
La información técnica de la subasta tiene un costo de US$5.000.
Previo a la subasta, el interesado deberá entregar al Fideicomiso del gobierno que administra Pluna, una garantía de mantenimiento de su oferta, por el equivalente a la suma de US$ 13.688.516, “a través de un aval bancario emitido por un banco de plaza”, dice el decreto del gobierno.
Luego, deberá esperar 30 días para que entreguen los aviones, negociar las frecuencias que tenía Pluna y el Ejecutivo reservó, y la garantía soberana del Estado para enfrentar la deuda de US$135,6 con The Banck of Nova Scotia.
Pero la flota de Pluna se componía de 13 aviones Bombardier CRJ 900. Los otros seis, fueron adquiridos por el sistema leasing, un formato de arrendamiento financiero, que consiste en un alquiler con derecho a compra. Esos aviones están en los depósitos de la exaerolínea en la terminal aérea de Carrasco, a la espera de que haya un comprados de los otros siete.
El gobierno, según explicó a El Observador una fuente que participa de la operación, pretende que la nueva empresa de bandera que se constituya pueda absorber parte o la totalidad de los seis aviones. En caso contrario, serán devueltos, ya que el sistema leasing permite esa posibilidad.
Hasta que eso ocurra, personal de la exPluna continúa contratado para realizar tareas de mantenimiento, para que las naves no pierdan valor
el observador
La empresa que se haga cargo de las aeronaves tendrá que mandar tres de ellas a México para su puesta a punto
La empresa que gane la subasta de los siete aviones de la exPluna, deberá, además de desembolsar como mínimo US$100 millones, asumir una lista importante de obligaciones para empezar a volar, como renegociar la deuda con el The Bank of Nova Scotia, las frecuencias con el Poder Ejecutivo y tomar 250 trabajadores de los que quedaron desempleados en un plazo de 60 días.
A todo ello, se suma que de inmediato el inversor deberá enviar a México a tres de los siete Bombardier CRJ 900 para realizarles una puesta a punto (un service)que tiene un costo estimado de US$5.000.000, informaron a El Observador fuentes oficiales.
Se trata de tres de las siete primeras aeronaves de las 13 que terminaron conformando la flota de la aerolínea de bandera uruguaya bajo la administración de la empresa Leadgate, que tenía 75% de las acciones.
Los tres aviones tienen que ser enviados a México, donde la empresa canadiense Bombardier tiene uno de sus plantas de construcción y reparación, ya que han cumplido con el tiempo de vida útil estipulada para requerir una intervención profunda en su funcionamiento.
La vida útil de los aviones se mide por horas de vuelo o “ciclos” de los motores, que se cumplen con un despegue y un aterrizaje, los momentos donde el avión tiene mayor esfuerzo. “Por hacer vuelos cortos, de pronto, se llega antes a los ciclos que a las horas de vuelo”, explicó una fuente del gobierno.
Cuando se cumple uno de los dos elementos, se debe realizar la puesta a punto.
Tal es así, que los trabajadores que el Poder Ejecutivo mantuvo en la plantilla de la exPluna para cumplir con el mantenimiento de la flota, han tenido especial cuidado en mover poco a esos aviones.
Cuando el Poder Ejecutivo acordó con el socio privado gestionar en minoría la aerolínea de bandera, Leadgate comprometió una capitalización de US$ 15 millones y la renovación de la flota, que a esa altura, en 2007, era vetusta y cara de operar. Cumplió con lo primero durante el primer año de gestión, y luego de largas negociaciones con organismos de crédito, los fabricantes y el gobierno, logró cerrar la operación para adquirir los siete primeros Bombardier CRJ 900 NextGen, con un préstamo del The Bank of Nova Scotia, por US$175 millones, y con la garantía soberana del Estado uruguayo.
Esos siete Bombardier, de los cuales ahora tres necesitan una puesta a punto, llegaron a Uruguay entre marzo y diciembre de 2008. Dos años después, Pluna S.A. decidió ampliar la flota. Introdujo a la canadiense Jazz como accionista, con quienes realizan una capitalización de US$20 millones, y luego, en 2011, concreta la segunda ampliación de la flota, esta vez, por el sistema leasing.
Según la memoria anual de 2011, los aviones de la exPluna completaron 18.107 aterrizajes.
El service de los aviones se realiza cada 6.000 horas de vuelo, según el programa de mantenimiento de Bombardier. La primera se realizó en Uruguay, para lo cual la exPluna invirtió en capacitación y repuestos.
Cada detalle
El Poder Ejecutivo emitió el miércoles un decreto por el cual se establecen las condiciones de negociación con la empresa que gane la subasta de los siete aviones Bombardier el 12 de setiembre en el Aeropuerto al mediodía.
Asegura allí que la garantía del Estado para el pago de la deuda de los aviones no podrá superar 75% del precio de la adquisición de las aeronaves resultante de la subasta de setiembre. Obliga también a quien adquiera el lote de aviones y conforme una aerolínea de bandera a contratar en 60 días a 250 trabajadores de la ex Pluna, en tiempo completo.
También el gobierno reclamará a quien resulte ganador de la subasta documentación expedida por entidades bancarias que avalen su solvencia para obtener la cantidad necesaria para la constitución del capital de trabajo y el financiamiento de los egresos.
La información técnica de la subasta tiene un costo de US$5.000.
Previo a la subasta, el interesado deberá entregar al Fideicomiso del gobierno que administra Pluna, una garantía de mantenimiento de su oferta, por el equivalente a la suma de US$ 13.688.516, “a través de un aval bancario emitido por un banco de plaza”, dice el decreto del gobierno.
Luego, deberá esperar 30 días para que entreguen los aviones, negociar las frecuencias que tenía Pluna y el Ejecutivo reservó, y la garantía soberana del Estado para enfrentar la deuda de US$135,6 con The Banck of Nova Scotia.
Subasta. La base del lote con los siete aviones es de US$ 136,8 millones.
evento Se realizará el 12 de setiembre a las 12 horas en el Aeropuerto de Carrasco.
participación Los interesados deben asistir sin necesidad de inscripción previa, pero llevar comprobante de garantía de US$13.6 millones.
Proceso. Si fracasa la primera subasta al alza, se realiza en el mismo momento una a segunda a la baja, desde la base de la anterior y hasta un mínimo de US$100 millones.
Frecuencias. El gobierno negociará luego por las rutas y la garantía soberana.
Esperan colocar los otros seis aviones
La subasta de la exPluna que el gobierno realizará el 12 de setiembre para recabar fondos y poder asumir de esa forma parte de los pasivos que dejó el cierre de la aerolínea de bandera, será con los siete aviones que fueron adquiridos con la garantía soberana del Estado. Por ello, el gobierno pudo intervenir la empresa y cuando dio quiebra, tomó las aeronaves para hacerse de fondos.evento Se realizará el 12 de setiembre a las 12 horas en el Aeropuerto de Carrasco.
participación Los interesados deben asistir sin necesidad de inscripción previa, pero llevar comprobante de garantía de US$13.6 millones.
Proceso. Si fracasa la primera subasta al alza, se realiza en el mismo momento una a segunda a la baja, desde la base de la anterior y hasta un mínimo de US$100 millones.
Frecuencias. El gobierno negociará luego por las rutas y la garantía soberana.
Esperan colocar los otros seis aviones
Pero la flota de Pluna se componía de 13 aviones Bombardier CRJ 900. Los otros seis, fueron adquiridos por el sistema leasing, un formato de arrendamiento financiero, que consiste en un alquiler con derecho a compra. Esos aviones están en los depósitos de la exaerolínea en la terminal aérea de Carrasco, a la espera de que haya un comprados de los otros siete.
El gobierno, según explicó a El Observador una fuente que participa de la operación, pretende que la nueva empresa de bandera que se constituya pueda absorber parte o la totalidad de los seis aviones. En caso contrario, serán devueltos, ya que el sistema leasing permite esa posibilidad.
Hasta que eso ocurra, personal de la exPluna continúa contratado para realizar tareas de mantenimiento, para que las naves no pierdan valor
el observador
Más de 10 interesados en los aviones de Pluna
La argentina Sol y Buquebus, entre ellos; optimismo uruguayo
MONTEVIDEO.- El gobierno de Uruguay renovó su optimismo por la subasta que hará el 12 de septiembre de los aviones de la quebrada aerolínea Pluna, una compleja operación en la que mezcla la licencia para operar el puente aéreo con Buenos Aires, entre otras rutas, y el mantenimiento de buena parte de los trabajadores desocupados.
En las últimas horas, el gobierno de José Mujica publicó un decreto en el que estableció condiciones para el remate, que se hará en el aeropuerto de Carrasco, una terminal aérea que desde inicios de julio, cuando Pluna dejó de volar, ha reducido significativamente su operación.
Se subastarán los siete aviones Bombardier que utilizaba Pluna cuando estaba gerenciada por el grupo argentino Leadgate, que saldrán con una base de US$ 136,8 millones.
El ministro de Economía, Fernando Lorenzo, informó que hasta ahora hubo "más de una decena" de expresiones de interés por el negocio de Pluna y dijo que varios de esos grupos ya compraron los pliegos con la información técnica.
La liquidación de Pluna se está realizando mediante un proceso especial que modificó para este caso la legislación de concurso de acreedores para empresas en proceso de cierre.
El gobierno espera que haya interesados en operar al menos los vuelos que permitan unir Montevideo con Chile, Argentina y Paraguay.
Por eso pretende que la venta de los aviones debe quedar ligada a que las unidades queden en Montevideo para cumplir esa tarea con bandera uruguaya y retomando parte del personal que quedó sin empleo.
Además del mantenimiento de las fuentes de trabajo y de la actividad en el aeropuerto y servicios conexos, el gobierno de Mujica está preocupado por la conectividad aérea del país y la recepción tanto de turistas como de hombres de negocios.
Pluna era una empresa estatal hasta que fue vendida, en los años 90, a la brasileña Varig, y luego de volver un tiempo al Estado había sido concesionada en un 75% al consorcio Leadgate, liderado por el argentino Matías Campiani. Este invierno, luego de acumular pérdidas y deudas, la empresa se quedó sin liquidez y en situación de insolvencia.
INTERESADOS
Entre los interesados para quedarse con los aviones se encuentra la aerolínea argentina Sol Líneas Aéreas, que anunció que abrirá una compañía en Montevideo, Sol Uruguay, y que tiene interés en todos los aviones y una cantidad importante del personal que está a la espera. Por su parte, el dueño del grupo Buquebus, Juan Carlos López Mena, que en primera instancia había dicho que no tenía interés en la subasta, informó que compró los pliegos y que con su aerolínea BQB se propone también competir por el negocio..
la nacion
La argentina Sol y Buquebus, entre ellos; optimismo uruguayo
MONTEVIDEO.- El gobierno de Uruguay renovó su optimismo por la subasta que hará el 12 de septiembre de los aviones de la quebrada aerolínea Pluna, una compleja operación en la que mezcla la licencia para operar el puente aéreo con Buenos Aires, entre otras rutas, y el mantenimiento de buena parte de los trabajadores desocupados.
En las últimas horas, el gobierno de José Mujica publicó un decreto en el que estableció condiciones para el remate, que se hará en el aeropuerto de Carrasco, una terminal aérea que desde inicios de julio, cuando Pluna dejó de volar, ha reducido significativamente su operación.
Se subastarán los siete aviones Bombardier que utilizaba Pluna cuando estaba gerenciada por el grupo argentino Leadgate, que saldrán con una base de US$ 136,8 millones.
El ministro de Economía, Fernando Lorenzo, informó que hasta ahora hubo "más de una decena" de expresiones de interés por el negocio de Pluna y dijo que varios de esos grupos ya compraron los pliegos con la información técnica.
La liquidación de Pluna se está realizando mediante un proceso especial que modificó para este caso la legislación de concurso de acreedores para empresas en proceso de cierre.
El gobierno espera que haya interesados en operar al menos los vuelos que permitan unir Montevideo con Chile, Argentina y Paraguay.
Por eso pretende que la venta de los aviones debe quedar ligada a que las unidades queden en Montevideo para cumplir esa tarea con bandera uruguaya y retomando parte del personal que quedó sin empleo.
Además del mantenimiento de las fuentes de trabajo y de la actividad en el aeropuerto y servicios conexos, el gobierno de Mujica está preocupado por la conectividad aérea del país y la recepción tanto de turistas como de hombres de negocios.
Pluna era una empresa estatal hasta que fue vendida, en los años 90, a la brasileña Varig, y luego de volver un tiempo al Estado había sido concesionada en un 75% al consorcio Leadgate, liderado por el argentino Matías Campiani. Este invierno, luego de acumular pérdidas y deudas, la empresa se quedó sin liquidez y en situación de insolvencia.
INTERESADOS
Entre los interesados para quedarse con los aviones se encuentra la aerolínea argentina Sol Líneas Aéreas, que anunció que abrirá una compañía en Montevideo, Sol Uruguay, y que tiene interés en todos los aviones y una cantidad importante del personal que está a la espera. Por su parte, el dueño del grupo Buquebus, Juan Carlos López Mena, que en primera instancia había dicho que no tenía interés en la subasta, informó que compró los pliegos y que con su aerolínea BQB se propone también competir por el negocio..
la nacion
Plan B si fracasa remate es alquilar los aviones o crear empresa estatal
Gobierno teme que la subasta de mañana miércoles quede desierta y buscan alternativas.
Ante la posibilidad cierta de que la subasta de los siete aviones Bombardier de la exaerolínea Pluna fracase, el gobierno maneja al menos dos alternativas para, por un lado, hacer frente a las deudas que dejó la empresa y, por otro, recuperar la conectividad del país. El tema fue analizado ayer en el Consejo de Ministros, cuando el titular de Transporte, Enrique Pintado, informó al presidente José Mujica sobre las últimas novedades del remate, que será mañana al mediodía en el aeropuerto de Carrasco.
Fue un repaso rápido del secretario de Estado, y afuera de la sala de reuniones de la residencia de Suárez y Reyes (Prado), en conferencia de prensa, los voceros hablaron de un “Plan B” ante la posibilidad de que la subasta quede desierta.
“En caso de que suceda algo diferente, el gobierno tiene cosas pensadas para hacer”, dijo el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa. “El gobierno tiene un Plan B”, agregó el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia.
Según pudo saber El Observador, las aternativas son dos. Por un lado, formar una empresa estatal que administre los activos, asuma las deudas y retome la operativa. Esta es la opción menos querida en la interna del gobierno, pero que no se descarta en absoluto.
La otra consiste en dar en alquiler las aeronaves y vender las frecuencias que tenía la exPluna – y que ahora el gobierno mantiene en reserva– para hacerse de dinero y cancelar las deudas.
En el Poder Ejecutivo le quitan importancia a la cantidad de empresas que pagaron US$ 5.000 para tener derecho a acceder de primera mano a la información de los aviones, poder visitarlos en Carrasco y realizar preguntas técnicas.
Entre los intereses más visibles se encuentran el empresario argentino propietario de la aerolínea BQB, Juan Carlos López Mena, la venezolana Conviasa, la argentina SOL y la empresa de transporte Cutcsa. Fuentes de BQB no confirmaron ni descartaron que mañana se presenten en la subasta. Lo mismo declaró a El Observador el embajador de Venezuela en Uruguay, Julio Chirino, sobre Conviasa.
Sobre Cutcsa, en tanto, se desconoce aún su participación. Una fuente de la empresa dijo a El Observador que su presidente, Juan Salgado, se encuentra en el exterior, y volvía hoy al país.
El remate de mañana tiene una base de US$ 136 millones. Si no hay ofertas, se realiza en el acto una a la baja, con un mínimo de US$ 100 millones.
Autogestión
El sindicato de trabajadores de Pluna, que en algún momento manejaron la posibilidad de presentarse como oferentes a la subasta de los aviones, comenzaron a gestionar la participación de Conviasa, una vez descartada la primera opción que los involucraba.
Para ello, intercambiaron con los trabajadores de la empresa caribeña, pero hasta ayer no tenían información de que participe o no. Por otra parte, los trabajadores también asumen como una posibilidad el fracaso del remate, y para ello elaboran un proyecto de autogestión.
Según explicó ayer a El Observador el presidente del sindicato, César Iroldi, han trabajado con el PIT-CNT para diagramar ese proyecto, que sería presentado al gobierno en caso de quedar desierta la subasta.
Ajustan operativa del remate
Representantes del Ministerio de Transporte y Obras Públicas se reunieron ayer en el restorán “Patria”, ubicado en la planta superior del aeropuerto de Carrasco, con el encargado del fideicomiso que lleva adelante el proceso del remate, Javier Liberman, para afinar todos los detalles del evento de mañana. En el encuentro participaron también el presidente de la Asociación de Rematadores, Mario Stefanoli, representantes de la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia) y del aeropuerto. Acordaron los detalles de la operativa del remate que comenzará a las 12 horas. Será allí mismo, frente al restorán, en una explanada del tercer piso que da hacia la pista principal del aeropuerto. Stefanoli será el rematador del único lote de siete aviones Bombardier. En caso de colocar las naves, se llevará 0,5% del monto de la operación, aunque un acuerdo interno de la asociación implica que repartirá el dinero entre los profesionales anotados a participar del evento (420). Será para Stefanoli un momento especial, por ello dijo llevará un martillo de metal, obsequio de su esposa, traído de un viaje a México.
el observador
Gobierno teme que la subasta de mañana miércoles quede desierta y buscan alternativas.
Ante la posibilidad cierta de que la subasta de los siete aviones Bombardier de la exaerolínea Pluna fracase, el gobierno maneja al menos dos alternativas para, por un lado, hacer frente a las deudas que dejó la empresa y, por otro, recuperar la conectividad del país. El tema fue analizado ayer en el Consejo de Ministros, cuando el titular de Transporte, Enrique Pintado, informó al presidente José Mujica sobre las últimas novedades del remate, que será mañana al mediodía en el aeropuerto de Carrasco.
Fue un repaso rápido del secretario de Estado, y afuera de la sala de reuniones de la residencia de Suárez y Reyes (Prado), en conferencia de prensa, los voceros hablaron de un “Plan B” ante la posibilidad de que la subasta quede desierta.
“En caso de que suceda algo diferente, el gobierno tiene cosas pensadas para hacer”, dijo el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa. “El gobierno tiene un Plan B”, agregó el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia.
Según pudo saber El Observador, las aternativas son dos. Por un lado, formar una empresa estatal que administre los activos, asuma las deudas y retome la operativa. Esta es la opción menos querida en la interna del gobierno, pero que no se descarta en absoluto.
La otra consiste en dar en alquiler las aeronaves y vender las frecuencias que tenía la exPluna – y que ahora el gobierno mantiene en reserva– para hacerse de dinero y cancelar las deudas.
En el Poder Ejecutivo le quitan importancia a la cantidad de empresas que pagaron US$ 5.000 para tener derecho a acceder de primera mano a la información de los aviones, poder visitarlos en Carrasco y realizar preguntas técnicas.
Entre los intereses más visibles se encuentran el empresario argentino propietario de la aerolínea BQB, Juan Carlos López Mena, la venezolana Conviasa, la argentina SOL y la empresa de transporte Cutcsa. Fuentes de BQB no confirmaron ni descartaron que mañana se presenten en la subasta. Lo mismo declaró a El Observador el embajador de Venezuela en Uruguay, Julio Chirino, sobre Conviasa.
Sobre Cutcsa, en tanto, se desconoce aún su participación. Una fuente de la empresa dijo a El Observador que su presidente, Juan Salgado, se encuentra en el exterior, y volvía hoy al país.
El remate de mañana tiene una base de US$ 136 millones. Si no hay ofertas, se realiza en el acto una a la baja, con un mínimo de US$ 100 millones.
Autogestión
El sindicato de trabajadores de Pluna, que en algún momento manejaron la posibilidad de presentarse como oferentes a la subasta de los aviones, comenzaron a gestionar la participación de Conviasa, una vez descartada la primera opción que los involucraba.
Para ello, intercambiaron con los trabajadores de la empresa caribeña, pero hasta ayer no tenían información de que participe o no. Por otra parte, los trabajadores también asumen como una posibilidad el fracaso del remate, y para ello elaboran un proyecto de autogestión.
Según explicó ayer a El Observador el presidente del sindicato, César Iroldi, han trabajado con el PIT-CNT para diagramar ese proyecto, que sería presentado al gobierno en caso de quedar desierta la subasta.
Ajustan operativa del remate
Representantes del Ministerio de Transporte y Obras Públicas se reunieron ayer en el restorán “Patria”, ubicado en la planta superior del aeropuerto de Carrasco, con el encargado del fideicomiso que lleva adelante el proceso del remate, Javier Liberman, para afinar todos los detalles del evento de mañana. En el encuentro participaron también el presidente de la Asociación de Rematadores, Mario Stefanoli, representantes de la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia) y del aeropuerto. Acordaron los detalles de la operativa del remate que comenzará a las 12 horas. Será allí mismo, frente al restorán, en una explanada del tercer piso que da hacia la pista principal del aeropuerto. Stefanoli será el rematador del único lote de siete aviones Bombardier. En caso de colocar las naves, se llevará 0,5% del monto de la operación, aunque un acuerdo interno de la asociación implica que repartirá el dinero entre los profesionales anotados a participar del evento (420). Será para Stefanoli un momento especial, por ello dijo llevará un martillo de metal, obsequio de su esposa, traído de un viaje a México.
el observador
Gobierno uruguayo teme que la subasta de Pluna quede desierta
Ante la posibilidad de que la licitación de hoy fracase, maneja dos opciones para retomar la conectividad del país: formar una empresa estatal o alquilar los aviones
El tema fue analizado en el Consejo de Ministros, cuando el titular de Transporte, Enrique Pintado, informó al presidente José Mujica sobre las últimas novedades del remate, que será hoy al mediodía en el aeropuerto de Carrasco. Fue un repaso rápido del secretario de Estado, y afuera de la sala de reuniones de la residencia de Suárez y Reyes (Prado), en conferencia de prensa, los voceros hablaron de un Plan b ante la posibilidad de que la subasta quede desierta. En caso de que suceda algo diferente, el gobierno tiene cosas pensadas para hacer, dijo el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa. El gobierno tiene un Plan b, agregó el secretario, Alberto Breccia.
Según pudo saber El Observador, las alternativas son dos. Por un lado, formar una empresa estatal que administre los activos, asuma las deudas y retome la operativa. Esta es la opción menos deseada en la interna del gobierno, pero que no se descarta en absoluto. La otra consiste en dar en alquiler las aeronaves y vender las frecuencias que tenía la ex Pluna -y que ahora el gobierno mantiene en reserva- para hacerse de dinero fresco y cancelar las deudas.
En el Poder Ejecutivo restan importancia a la cantidad de empresas que pagaron u$s 5.000 para tener derecho a acceder de primera mano a la información de los aviones, poder visitarlos en Carrasco y realizar preguntas técnicas.
Entre los interesados más visibles se encuentran el empresario argentino propietario de la aerolínea BQB, Juan Carlos López Mena, la empresa venezolana Conviasa, la argentina SOL y la empresa de transporte Cutcsa. Fuentes de BQB no confirmaron ni descartaron que mañana se presenten en la subasta. Lo mismo declaró a El Observador el embajador de Venezuela en Uruguay, Julio Chirino, respecto de Conviasa.
Sobre Cutcsa, en tanto, se desconoce aún su participación. Una fuente be la empresa dijo que su presidente, Juan Salgado, se encuentra en el exterior, y vuelve hoy al país.
El remate tiene una base de u$s 136 millones. Si no hay ofertas, se realiza en el acto una a la baja, con un mínimo de u$s 100 millones.
Por otro lado, el sindicato de trabajadores de Pluna, que supo manejar la posibilidad de presentarse como oferente a la subasta de los aviones, comenzó a gestionar la participación de Conviasa, una vez descartada la primera opción que los involucraba. Para ello, tomaron contacto con los trabajadores de la empresa caribeña, pero hasta ayer no tenían información de que esta fuera a participar. Por otra parte, ellos también asumen como posibilidad el fracaso del remate, y para ello preparan un proyecto de autogestión. Según explicó ayer a El Observador el presidente del sindicato, César Iroldi, han trabajado con el PIT-CNT para diagramar ese proyecto, que sería presentado al gobierno en caso de que la subasta quede desierta.
cronista comercial
Ante la posibilidad de que la licitación de hoy fracase, maneja dos opciones para retomar la conectividad del país: formar una empresa estatal o alquilar los aviones
El tema fue analizado en el Consejo de Ministros, cuando el titular de Transporte, Enrique Pintado, informó al presidente José Mujica sobre las últimas novedades del remate, que será hoy al mediodía en el aeropuerto de Carrasco. Fue un repaso rápido del secretario de Estado, y afuera de la sala de reuniones de la residencia de Suárez y Reyes (Prado), en conferencia de prensa, los voceros hablaron de un Plan b ante la posibilidad de que la subasta quede desierta. En caso de que suceda algo diferente, el gobierno tiene cosas pensadas para hacer, dijo el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa. El gobierno tiene un Plan b, agregó el secretario, Alberto Breccia.
Según pudo saber El Observador, las alternativas son dos. Por un lado, formar una empresa estatal que administre los activos, asuma las deudas y retome la operativa. Esta es la opción menos deseada en la interna del gobierno, pero que no se descarta en absoluto. La otra consiste en dar en alquiler las aeronaves y vender las frecuencias que tenía la ex Pluna -y que ahora el gobierno mantiene en reserva- para hacerse de dinero fresco y cancelar las deudas.
En el Poder Ejecutivo restan importancia a la cantidad de empresas que pagaron u$s 5.000 para tener derecho a acceder de primera mano a la información de los aviones, poder visitarlos en Carrasco y realizar preguntas técnicas.
Entre los interesados más visibles se encuentran el empresario argentino propietario de la aerolínea BQB, Juan Carlos López Mena, la empresa venezolana Conviasa, la argentina SOL y la empresa de transporte Cutcsa. Fuentes de BQB no confirmaron ni descartaron que mañana se presenten en la subasta. Lo mismo declaró a El Observador el embajador de Venezuela en Uruguay, Julio Chirino, respecto de Conviasa.
Sobre Cutcsa, en tanto, se desconoce aún su participación. Una fuente be la empresa dijo que su presidente, Juan Salgado, se encuentra en el exterior, y vuelve hoy al país.
El remate tiene una base de u$s 136 millones. Si no hay ofertas, se realiza en el acto una a la baja, con un mínimo de u$s 100 millones.
Por otro lado, el sindicato de trabajadores de Pluna, que supo manejar la posibilidad de presentarse como oferente a la subasta de los aviones, comenzó a gestionar la participación de Conviasa, una vez descartada la primera opción que los involucraba. Para ello, tomaron contacto con los trabajadores de la empresa caribeña, pero hasta ayer no tenían información de que esta fuera a participar. Por otra parte, ellos también asumen como posibilidad el fracaso del remate, y para ello preparan un proyecto de autogestión. Según explicó ayer a El Observador el presidente del sindicato, César Iroldi, han trabajado con el PIT-CNT para diagramar ese proyecto, que sería presentado al gobierno en caso de que la subasta quede desierta.
cronista comercial
Aplazan hasta octubre subasta de aviones Pluna
El Gobierno uruguayo aplazó hasta el 1 de octubre la subasta prevista para hoy de siete aviones Bombardier CRJ 900 de la aerolínea uruguaya Pluna liquidada el pasado julio, informaron fuentes oficiales.
La subasta estaba fijada para las 12.00 hora local (15.00 GMT) en el Aeropuerto Internacional de Carrasco con una base de 136.885.156 dólares por el paquete de los siete aviones.
El fideicomiso creado por el Gobierno para dirigir la operación de liquidación de la aerolínea informó en un comunicado de que la subasta se traslada al 1 de octubre "por razones de oportunidad"
En consulta con los ministerios de Economía y Finanzas y de Transporte y Obras Públicas se ha resuelto "postergar la subasta", señala el comunicado.
El objetivo de la medida es "defender los intereses de los beneficiarios", agrega la nota.
Entre las compañías aéreas que han manifestado su interés de participar en la subasta figuran la venezolana Conviasa, la argentina Sol y BQB, propiedad del empresario argentino Juan Carlos López Mena.
También la empresa de autobuses de Montevideo, CUTCSA, que tiene entre sus socios decenas de emigrantes españoles.
El Parlamento uruguayo aprobó el 17 de julio pasado la liquidación de Pluna, tras un proyecto impulsado por la administración del presidente José Mujica, debido a la crítica situación financiera de la empresa.
En el momento del anuncio de su quiebra, el pasado 9 de julio, Pluna operaba unos 250 vuelos semanales desde y hacia Argentina, Brasil, Chile y Paraguay lo que suponía cerca del 80 por ciento del total de vuelos en Uruguay.
Algunas de sus frecuencias le fueron otorgadas temporalmente a otras compañías.
El pasado 15 de junio, el Gobierno uruguayo anunció un acuerdo para una "salida ordenada" con el Grupo argentino Leadgate, que tenía el 75 % por ciento de las acciones de Pluna, mientras que el Estado poseía el 25 % restante.
Tras la intervención, el Gobierno se dio un plazo de un mes para recibir inversionistas interesados en adquirir la empresa, pero no los hubo, lo que detonó la decisión de suspender sus actividades y proceder a la disolución.
Según cifras oficiales, en el momento de la quiebra Pluna tenía deudas por 380 millones de dólares.
Fuente: www.terra.com.ar
fuente: http://cabeceranorte.blogspot.com.ar/
El Gobierno uruguayo aplazó hasta el 1 de octubre la subasta prevista para hoy de siete aviones Bombardier CRJ 900 de la aerolínea uruguaya Pluna liquidada el pasado julio, informaron fuentes oficiales.
La subasta estaba fijada para las 12.00 hora local (15.00 GMT) en el Aeropuerto Internacional de Carrasco con una base de 136.885.156 dólares por el paquete de los siete aviones.
El fideicomiso creado por el Gobierno para dirigir la operación de liquidación de la aerolínea informó en un comunicado de que la subasta se traslada al 1 de octubre "por razones de oportunidad"
En consulta con los ministerios de Economía y Finanzas y de Transporte y Obras Públicas se ha resuelto "postergar la subasta", señala el comunicado.
El objetivo de la medida es "defender los intereses de los beneficiarios", agrega la nota.
Entre las compañías aéreas que han manifestado su interés de participar en la subasta figuran la venezolana Conviasa, la argentina Sol y BQB, propiedad del empresario argentino Juan Carlos López Mena.
También la empresa de autobuses de Montevideo, CUTCSA, que tiene entre sus socios decenas de emigrantes españoles.
El Parlamento uruguayo aprobó el 17 de julio pasado la liquidación de Pluna, tras un proyecto impulsado por la administración del presidente José Mujica, debido a la crítica situación financiera de la empresa.
En el momento del anuncio de su quiebra, el pasado 9 de julio, Pluna operaba unos 250 vuelos semanales desde y hacia Argentina, Brasil, Chile y Paraguay lo que suponía cerca del 80 por ciento del total de vuelos en Uruguay.
Algunas de sus frecuencias le fueron otorgadas temporalmente a otras compañías.
El pasado 15 de junio, el Gobierno uruguayo anunció un acuerdo para una "salida ordenada" con el Grupo argentino Leadgate, que tenía el 75 % por ciento de las acciones de Pluna, mientras que el Estado poseía el 25 % restante.
Tras la intervención, el Gobierno se dio un plazo de un mes para recibir inversionistas interesados en adquirir la empresa, pero no los hubo, lo que detonó la decisión de suspender sus actividades y proceder a la disolución.
Según cifras oficiales, en el momento de la quiebra Pluna tenía deudas por 380 millones de dólares.
Fuente: www.terra.com.ar
fuente: http://cabeceranorte.blogspot.com.ar/
Gobierno no encuentra salida ante falta de oferentes para los aviones
De siete interesados se bajaron tres
La crisis generada con el cierre de la aerolínea de bandera Pluna el 5 de julio por insolvencia financiera es, a esta altura, un martirio para el gobierno. No encuentra una salida clara y segura ante la falta de oferentes para la subasta de los aviones Bombardier, el principal activo con los que pretende cubrir las deudas millonarias; la conectividad aérea de cara a una nueva temporada turística se ve amenazada; y mantiene a los trabajadores expectantes de una salida que les permita conservar su fuente laboral.
Como están dadas las cosas tiene tres opciones y ninguna de ellas es clara. Una posibilidad es que el gobierno venezolano decida dar el dinero para apoyar un proyecto autogestionado entre los trabajadores con participación de Conviasa; que el empresario Franco Macri pueda sacar su dinero de Argentina pese a las reestricciones de la impositiva de es país; o que luego de fracasada la subasta, se le pueda vender los aviones al dueño de Buquebús, Juan Carlos López Mena a un precio inferior. BQB considera que puede pagar US$ 80 millones por los siete Bombardier, pero no más.
Políticamente este es un golpe duro para el Frente Amplio y el gobierno. Así lo asumen todos los jerarcas del Poder Ejecutivo.
Tarde en la noche del martes, el gobierno decidió posponer la subasta que había sido fijada para este miércoles 12 al mediodía en el aeropuerto internacional de Carrasco. Por razones de “oportunidad” y para “defender los intereses de los beneficiarios”, se comunicó en la mañana de ayer que el remate se realizará el lunes 1º de octubre.
A la tarde, el ministro de Transporte y Obras Públicas, Enrique Pintado, informó en conferencia de prensa en Torre Ejecutiva que de los siete empresarios que en algún momento se mostraron interesados en participar de la subasta, tres se habían bajado en las últimas horas, por lo que, en la búsqueda de tener la mayor participación y atendiendo el pedido de más tiempo de algunos de los oferentes, se decidió postergar la fecha.
“Hubiera sido una irresponsabilidad de nuestra parte no haber postergado la realización de la subasta para lograr una mayor participación”, dijo Pintado
La incertidumbre y el desconcierto llevó a pensar a algunos funcionarios del gobierno, incluso, en la posibilidad de no realizar la subasta. Esa posibilidad, sin embargo, demandaría el envío de un nuevo proyecto de ley al Parlamento para anular la subasta que ya obliga la ley aprobada en julio. Por ahora eso quedó descartado y el gobierno va a exponerse a no tener ningún oferente en octubre. De todas formas, ya planea alternativas para cuando eso ocurra.
Los cuatro empresarios que dice el gobierno siguen en pie con interés de pujar por los Bombardier ya compraron los pliegos y accedieron al derecho de revisar las aeronaves, que esperan en Carrasco. Sin embargo, solo dos de ellos fueron efectivamente a verlos y comprobar su estado.
Según pudo saber El Observador en base a fuentes oficiales, esas cuatro empresas son: la estatal venezolana Conviasa; BQB, propiedad del empresario argentino Juan Carlos López Mena; el Grupo Macri, que conduce el empresario argentino Franco Macri; y una cuarta de origen paraguayo en la que no depositan muchas expectativas.
Las otras tres eran: la argentina Sol, que envió una carta el martes explicando el retiro de su interés por falta de financiación; un empresario uruguayo que gestionaba la llegada de inversores de Alemania; y una firma estadounidense que pidió más tiempo.
Pintado fue preguntado por las suspicacias levantadas tras la suspensión de la subasta, y el ministro respondió. “Fantasmas se pueden ver en todos lados”.
El martes a la noche, cuando terminó el partido entre Uruguay y Ecuador en el Centenario, López Mena se comunicó con Pintado para avisarle que pretendía ofertar menos dinero del que establecía la subasta, por lo que no se presentaría en las condiciones actuales. El ministro se fue a reunir con el presidente José Mujica, y allí resolvieron postergar la subasta.
Telenoche informó ayer, en base a fuentes del mercado, que varios de los principales interesados habían manifestado que los aviones Bombardier estaban “sobrevalorados” (la base es de US$136.885.156), y estimaron que pueden costar US$80.000.000.
Un tercio menos de frecuencias del puente aéreo
La conectividad del país se vio afectada por el cierre de Pluna. Hasta el 5 de julio, la aerolínea de bandera utilizaba todas las frecuencias disponibles para volar desde el aeropuerto de Carrasco (Montevideo) hacia Aeroparque (Buenos Aires). Según lo establece el tratado binacional entre Argentina y Uruguay, cada país puede adjudicar a aerolíneas de bandera hasta 60 frecuencias semanales, siempre y cuando la otra parte autorice las licencias. De esa forma, hasta su cierre Pluna viajaba 60 veces por semana esa ruta, que es la más rentable del negocio. A su vez, también antes del cierre de Pluna, Aerolíneas Argentinas, en acuerdo con Austral, volaba 18 veces por semana con las licencias argentinas. En total, los pasajeros tenían 78 frecuencias semanales para elegir cuándo y a qué hora viajar. Después del 5 de julio, ya sin la aerolínea de bandera uruguaya, las frecuencias se redujeron drásticamente. Hasta el 1º de agosto sólo quedaban las 18 de Aerolíneas Argentinas, quien desde ese día elevó las frecuencias a 43; a fines de agosto se le otorgaron 14 frecuencias provisorias a BQB para volar el puente aéreo. Por lo tanto, mientras antes del cierre de Pluna habían 78 frecuencias semanales del puente aéreo, ahora hay 57 (27% menos).
el observador
--- merged: 13 Sep 2012 a las 16:25 ---
Diego Cánepa no quiere que Pluna vuelva a la órbita del derecho público
El prosecretario de Presidencia dijo que “no es posible competir en el mundo de hoy” de esa manera
El prosecretario de Presidencia, Diego Cánepa, declaró en entrevista con Radio Carve que no es partidario de que Pluna regrese a regirse por el derecho público. “A título personal, lo que no veo es repetir la experiencia de una empresa del Estado bajo derecho público. Creo que no es posible competir en el mundo de hoy bajo el derecho público”.
Con respecto a los motivos de la suspensión de la subasta de los aviones de Pluna, pautada para este miércoles, Cánepa dijo que han sido “muy claros en cuanto a que no estaban dadas las condiciones para establecer un procedimiento competitivo, según la evaluación que hicieron los ministros de Economía y de Transporte”.
Consultado por las salidas que el gobierno maneja para la situación, dijo que “no le gustaría hablar de un plan B”. Sostuvo que “todas las alternativas van a ser exploradas, pero hoy hay una ley y hay que seguir un procedimiento establecido legalmente”. Según explicó el prosecretario, lo que se buscó fue garantizar la transparencia del procedimiento.
La salida de la autogestión es uno de los planteos más fuertes que hacen desde el sindicato de Pluna. Cánepa se refirió a esto y comentó que “si los trabajadores consiguen crear, con el formato que sea, una cooperativa, una sociedad, con alguien que aporte el capital, y se presentan al remate y ganan, van a ganar como cualquier otro”.
el observador
De siete interesados se bajaron tres
La crisis generada con el cierre de la aerolínea de bandera Pluna el 5 de julio por insolvencia financiera es, a esta altura, un martirio para el gobierno. No encuentra una salida clara y segura ante la falta de oferentes para la subasta de los aviones Bombardier, el principal activo con los que pretende cubrir las deudas millonarias; la conectividad aérea de cara a una nueva temporada turística se ve amenazada; y mantiene a los trabajadores expectantes de una salida que les permita conservar su fuente laboral.
Como están dadas las cosas tiene tres opciones y ninguna de ellas es clara. Una posibilidad es que el gobierno venezolano decida dar el dinero para apoyar un proyecto autogestionado entre los trabajadores con participación de Conviasa; que el empresario Franco Macri pueda sacar su dinero de Argentina pese a las reestricciones de la impositiva de es país; o que luego de fracasada la subasta, se le pueda vender los aviones al dueño de Buquebús, Juan Carlos López Mena a un precio inferior. BQB considera que puede pagar US$ 80 millones por los siete Bombardier, pero no más.
Políticamente este es un golpe duro para el Frente Amplio y el gobierno. Así lo asumen todos los jerarcas del Poder Ejecutivo.
Tarde en la noche del martes, el gobierno decidió posponer la subasta que había sido fijada para este miércoles 12 al mediodía en el aeropuerto internacional de Carrasco. Por razones de “oportunidad” y para “defender los intereses de los beneficiarios”, se comunicó en la mañana de ayer que el remate se realizará el lunes 1º de octubre.
A la tarde, el ministro de Transporte y Obras Públicas, Enrique Pintado, informó en conferencia de prensa en Torre Ejecutiva que de los siete empresarios que en algún momento se mostraron interesados en participar de la subasta, tres se habían bajado en las últimas horas, por lo que, en la búsqueda de tener la mayor participación y atendiendo el pedido de más tiempo de algunos de los oferentes, se decidió postergar la fecha.
“Hubiera sido una irresponsabilidad de nuestra parte no haber postergado la realización de la subasta para lograr una mayor participación”, dijo Pintado
La incertidumbre y el desconcierto llevó a pensar a algunos funcionarios del gobierno, incluso, en la posibilidad de no realizar la subasta. Esa posibilidad, sin embargo, demandaría el envío de un nuevo proyecto de ley al Parlamento para anular la subasta que ya obliga la ley aprobada en julio. Por ahora eso quedó descartado y el gobierno va a exponerse a no tener ningún oferente en octubre. De todas formas, ya planea alternativas para cuando eso ocurra.
Los cuatro empresarios que dice el gobierno siguen en pie con interés de pujar por los Bombardier ya compraron los pliegos y accedieron al derecho de revisar las aeronaves, que esperan en Carrasco. Sin embargo, solo dos de ellos fueron efectivamente a verlos y comprobar su estado.
Según pudo saber El Observador en base a fuentes oficiales, esas cuatro empresas son: la estatal venezolana Conviasa; BQB, propiedad del empresario argentino Juan Carlos López Mena; el Grupo Macri, que conduce el empresario argentino Franco Macri; y una cuarta de origen paraguayo en la que no depositan muchas expectativas.
Las otras tres eran: la argentina Sol, que envió una carta el martes explicando el retiro de su interés por falta de financiación; un empresario uruguayo que gestionaba la llegada de inversores de Alemania; y una firma estadounidense que pidió más tiempo.
Pintado fue preguntado por las suspicacias levantadas tras la suspensión de la subasta, y el ministro respondió. “Fantasmas se pueden ver en todos lados”.
El martes a la noche, cuando terminó el partido entre Uruguay y Ecuador en el Centenario, López Mena se comunicó con Pintado para avisarle que pretendía ofertar menos dinero del que establecía la subasta, por lo que no se presentaría en las condiciones actuales. El ministro se fue a reunir con el presidente José Mujica, y allí resolvieron postergar la subasta.
Telenoche informó ayer, en base a fuentes del mercado, que varios de los principales interesados habían manifestado que los aviones Bombardier estaban “sobrevalorados” (la base es de US$136.885.156), y estimaron que pueden costar US$80.000.000.
Un tercio menos de frecuencias del puente aéreo
La conectividad del país se vio afectada por el cierre de Pluna. Hasta el 5 de julio, la aerolínea de bandera utilizaba todas las frecuencias disponibles para volar desde el aeropuerto de Carrasco (Montevideo) hacia Aeroparque (Buenos Aires). Según lo establece el tratado binacional entre Argentina y Uruguay, cada país puede adjudicar a aerolíneas de bandera hasta 60 frecuencias semanales, siempre y cuando la otra parte autorice las licencias. De esa forma, hasta su cierre Pluna viajaba 60 veces por semana esa ruta, que es la más rentable del negocio. A su vez, también antes del cierre de Pluna, Aerolíneas Argentinas, en acuerdo con Austral, volaba 18 veces por semana con las licencias argentinas. En total, los pasajeros tenían 78 frecuencias semanales para elegir cuándo y a qué hora viajar. Después del 5 de julio, ya sin la aerolínea de bandera uruguaya, las frecuencias se redujeron drásticamente. Hasta el 1º de agosto sólo quedaban las 18 de Aerolíneas Argentinas, quien desde ese día elevó las frecuencias a 43; a fines de agosto se le otorgaron 14 frecuencias provisorias a BQB para volar el puente aéreo. Por lo tanto, mientras antes del cierre de Pluna habían 78 frecuencias semanales del puente aéreo, ahora hay 57 (27% menos).
el observador
--- merged: 13 Sep 2012 a las 16:25 ---
Diego Cánepa no quiere que Pluna vuelva a la órbita del derecho público
El prosecretario de Presidencia dijo que “no es posible competir en el mundo de hoy” de esa manera
El prosecretario de Presidencia, Diego Cánepa, declaró en entrevista con Radio Carve que no es partidario de que Pluna regrese a regirse por el derecho público. “A título personal, lo que no veo es repetir la experiencia de una empresa del Estado bajo derecho público. Creo que no es posible competir en el mundo de hoy bajo el derecho público”.
Con respecto a los motivos de la suspensión de la subasta de los aviones de Pluna, pautada para este miércoles, Cánepa dijo que han sido “muy claros en cuanto a que no estaban dadas las condiciones para establecer un procedimiento competitivo, según la evaluación que hicieron los ministros de Economía y de Transporte”.
Consultado por las salidas que el gobierno maneja para la situación, dijo que “no le gustaría hablar de un plan B”. Sostuvo que “todas las alternativas van a ser exploradas, pero hoy hay una ley y hay que seguir un procedimiento establecido legalmente”. Según explicó el prosecretario, lo que se buscó fue garantizar la transparencia del procedimiento.
La salida de la autogestión es uno de los planteos más fuertes que hacen desde el sindicato de Pluna. Cánepa se refirió a esto y comentó que “si los trabajadores consiguen crear, con el formato que sea, una cooperativa, una sociedad, con alguien que aporte el capital, y se presentan al remate y ganan, van a ganar como cualquier otro”.
el observador
Se demora la subasta y pilotos de Pluna pueden perder sus licencias
Fideicomiso busca evitar la situación pagando capacitación de miembros del personal en Madrid
La falta de vuelo durante más de dos meses deja a los expilotos de Pluna al borde de perder la licencia para volar, motivo que obligará a la empresa que se haga cargo de los aviones y las líneas de la exaerolínea a pagarle a instructores extranjeros para que vuelvan a capacitar a los trabajadores.
Así como en el Aeropuerto Internacional de Carrasco personal de Pluna realiza tareas de mantenimiento a los aviones Bombardier que serán subastados el 1º de octubre, pilotos de la compañía con participación estatal -cerrada el 5 de julio por insolvencia financiera-reciben la instrucción mínima necesaria para mantenerse activos.
La licencia de cada profesional se compone de la capacitación general y específica para los modelos de aviones (en este caso, los CRJ900 NextGen de la fabricante canadiense Bombardier) y de la habilitación. Esto último tiene fecha de vencimiento y cada piloto debe capacitarse con simuladores con una periodicidad que depende de su categoría.
Además, al no volar por determinado tiempo (los exPluna ya llevan más de dos meses sin hacerlo) tendrán que ir acompañados de un instructor cuando vuelvan a subirse al mando de un Bombardier, relataron a El Observador fuentes del sindicato de extrabajadores. Ello tendría un costo extra para traer desde el exterior los instructores que falten. En Uruguay existen y se capacitan, pero son los menos.
La ley que habilitó al Poder Ejecutivo a subastar los aviones y crear un fondo con los créditos laborales de los trabajadores plantea que en el caso de fracasar el primer remate al alza, se realiza un segundo a la baja con un piso de US$ 100 millones. En ese caso, el inversor deberá formar una aerolínea de bandera y contratar en un plazo de 60 días a 250 trabajadores de la empresa liquidada en régimen de tiempo completo, tomados de un registro previamente elaborado para el caso.
Para la calificación de los pilotos en este modelo de Bombardier, la exPluna había invertido cerca de US$ 30.000 por piloto. Ese capital no se pierde, pero la habilitación se debe renovar. Para los comandantes las normas internacionales requieren una actualización semestral, mientras que para los copilotos es de un año. Por ello, cerca de una decena ya ha viajado a Madrid (España) a realizar la capacitación correspondiente que les permita continuar habilitados.
Según pudo saber El Observador, entre pasajes, estadía y costo del curso se invirtieron unos
US$ 3.000 por cada piloto. Todo ello fue a costo del fideicomiso que administra la subasta.
La capacitación consta de pruebas en un simulador, pero también existen otras pruebas en el agua y sobre mercancías peligrosas.
“El simulador es un cajón. Una máquina que tiene exactamente los movimientos y ruidos de un avión, la cabina es exactamente igual. Te ponen ahí adentro y te simulan cosas: te prenden fuego un motor, no te baja el tren de aterrizaje. Tenés fallas varias, y eso es lo que se practica para mantener la habilitación, porque obviamente esas fallas no se pueden hacer en el avión real porque se corre riesgo de vida”, relató a El Observador Francisco Mazzilli, presidente de la Asociación Civil de Pilotos de Línea Aérea (Acipla).
Mazzilli comentó que muchos pilotos y profesionales vinculados a Pluna esperaban con especial interés el resultado de la subasta del 12 de setiembre, que fue postergada por el gobierno para el próximo lunes 1º de octubre. Recordó que ha habido propuestas de trabajo de aerolíneas extranjeras a los trabajadores desempleados por el cierre de la compañía, pero todas requieren irse a vivir al exterior.
Además de las ofertas de países regionales, recibieron ofrecimientos desde Indonesia y Vietnam, por ejemplo. “Mucha gente apostó a la subasta y, como no se hizo, cayó como un balde de agua fría. Nosotros somos pilotos, otra cosa no sabemos hacer”, concluyó el dirigente sindical.
EL OBSERVADOR
Fideicomiso busca evitar la situación pagando capacitación de miembros del personal en Madrid
La falta de vuelo durante más de dos meses deja a los expilotos de Pluna al borde de perder la licencia para volar, motivo que obligará a la empresa que se haga cargo de los aviones y las líneas de la exaerolínea a pagarle a instructores extranjeros para que vuelvan a capacitar a los trabajadores.
Así como en el Aeropuerto Internacional de Carrasco personal de Pluna realiza tareas de mantenimiento a los aviones Bombardier que serán subastados el 1º de octubre, pilotos de la compañía con participación estatal -cerrada el 5 de julio por insolvencia financiera-reciben la instrucción mínima necesaria para mantenerse activos.
La licencia de cada profesional se compone de la capacitación general y específica para los modelos de aviones (en este caso, los CRJ900 NextGen de la fabricante canadiense Bombardier) y de la habilitación. Esto último tiene fecha de vencimiento y cada piloto debe capacitarse con simuladores con una periodicidad que depende de su categoría.
Además, al no volar por determinado tiempo (los exPluna ya llevan más de dos meses sin hacerlo) tendrán que ir acompañados de un instructor cuando vuelvan a subirse al mando de un Bombardier, relataron a El Observador fuentes del sindicato de extrabajadores. Ello tendría un costo extra para traer desde el exterior los instructores que falten. En Uruguay existen y se capacitan, pero son los menos.
La ley que habilitó al Poder Ejecutivo a subastar los aviones y crear un fondo con los créditos laborales de los trabajadores plantea que en el caso de fracasar el primer remate al alza, se realiza un segundo a la baja con un piso de US$ 100 millones. En ese caso, el inversor deberá formar una aerolínea de bandera y contratar en un plazo de 60 días a 250 trabajadores de la empresa liquidada en régimen de tiempo completo, tomados de un registro previamente elaborado para el caso.
Para la calificación de los pilotos en este modelo de Bombardier, la exPluna había invertido cerca de US$ 30.000 por piloto. Ese capital no se pierde, pero la habilitación se debe renovar. Para los comandantes las normas internacionales requieren una actualización semestral, mientras que para los copilotos es de un año. Por ello, cerca de una decena ya ha viajado a Madrid (España) a realizar la capacitación correspondiente que les permita continuar habilitados.
Según pudo saber El Observador, entre pasajes, estadía y costo del curso se invirtieron unos
US$ 3.000 por cada piloto. Todo ello fue a costo del fideicomiso que administra la subasta.
La capacitación consta de pruebas en un simulador, pero también existen otras pruebas en el agua y sobre mercancías peligrosas.
“El simulador es un cajón. Una máquina que tiene exactamente los movimientos y ruidos de un avión, la cabina es exactamente igual. Te ponen ahí adentro y te simulan cosas: te prenden fuego un motor, no te baja el tren de aterrizaje. Tenés fallas varias, y eso es lo que se practica para mantener la habilitación, porque obviamente esas fallas no se pueden hacer en el avión real porque se corre riesgo de vida”, relató a El Observador Francisco Mazzilli, presidente de la Asociación Civil de Pilotos de Línea Aérea (Acipla).
Mazzilli comentó que muchos pilotos y profesionales vinculados a Pluna esperaban con especial interés el resultado de la subasta del 12 de setiembre, que fue postergada por el gobierno para el próximo lunes 1º de octubre. Recordó que ha habido propuestas de trabajo de aerolíneas extranjeras a los trabajadores desempleados por el cierre de la compañía, pero todas requieren irse a vivir al exterior.
Además de las ofertas de países regionales, recibieron ofrecimientos desde Indonesia y Vietnam, por ejemplo. “Mucha gente apostó a la subasta y, como no se hizo, cayó como un balde de agua fría. Nosotros somos pilotos, otra cosa no sabemos hacer”, concluyó el dirigente sindical.
EL OBSERVADOR
Mas malas noticias para los aviones de la exPluna
http://www.elpais.com.uy/120930/pnacio-666839/nacional/-mucha-oferta-de-esos-aviones-/
Tan mala compra hicieron los uruguayos??????????????, que nos espera con los Embraer entonces??????????
No hay como los BOEING o los AIRBUS
http://www.elpais.com.uy/120930/pnacio-666839/nacional/-mucha-oferta-de-esos-aviones-/
Tan mala compra hicieron los uruguayos??????????????, que nos espera con los Embraer entonces??????????
No hay como los BOEING o los AIRBUS
Aerolínea española compró los aviones de Pluna
Se adjudicaron en subasta a la empresa Cosmo, con base en Madrid, por US$ 137 millones. La compañía uruguaya declaró un pasivo de US$ 379,8 millones
Los siete aviones Bombardier de Pluna ya tienen dueño. Luego de que la aerolínea uruguaya suspendiera la subasta del 12 de septiembre por falta de interesados, esta vez la empresa española Cosmo adquirió las aeronaves por US$ 137 millones, un millón por encima del precio base.
La empresa de vuelos charter opera aviones Airbus A320 y su base está en Madrid. Según informa el diario uruguayo El País, comenzó a operar en julio de este año y Antonio Álvarez es su accionista mayoritario. Piensa relanzar sus operaciones este año y su sitio web está en construcción.
Así, el Estado uruguayo -que se hizo cargo de la aerolínea tras la quiebra- utilizará el dinero para pagar una deuda con el Scotiabank. La compañía uruguaya declaró un pasivo de US$ 379,8 millones, entre deudas financieras, comerciales y otras conocidas “diversas”, entre las que se encuentran los pasajeros que compraron boletos pero nunca pudieron volar.
Luego de los siete minutos que duró la subasta, funcionarios de Pluna festejaron, pero enseguida la preocupación bañó sus rostros. Es que, de acuerdo con información publicada por El Observador, aún no se sabe si los aviones operarán en Uruguay o en otra región.
El presidente José Mujica había anunciado horas antes que había más de un interesado en la subasta. En principio, BQB y la argentina Sol se habían mostrado como los compradores más seguros. “Se tendría que llamar a gente que tiene decenas de años de seriedad y hablar con ellos. No tendría que haber subasta porque viene un narcotraficante y si paga US$ 130 millones le dan la línea”, criticó Juan Carlos López Mena, propietario de Buquebus y BQB.
Si bien se vendieron los aviones, las frecuencias siguen sin ser adjudicadas y sus ex trabajadores no serán recontratados. El sindicato de la ex Pluna se reúne en asamblea para decidir los pasos por seguir.
infobae
Se adjudicaron en subasta a la empresa Cosmo, con base en Madrid, por US$ 137 millones. La compañía uruguaya declaró un pasivo de US$ 379,8 millones
Los siete aviones Bombardier de Pluna ya tienen dueño. Luego de que la aerolínea uruguaya suspendiera la subasta del 12 de septiembre por falta de interesados, esta vez la empresa española Cosmo adquirió las aeronaves por US$ 137 millones, un millón por encima del precio base.
La empresa de vuelos charter opera aviones Airbus A320 y su base está en Madrid. Según informa el diario uruguayo El País, comenzó a operar en julio de este año y Antonio Álvarez es su accionista mayoritario. Piensa relanzar sus operaciones este año y su sitio web está en construcción.
Así, el Estado uruguayo -que se hizo cargo de la aerolínea tras la quiebra- utilizará el dinero para pagar una deuda con el Scotiabank. La compañía uruguaya declaró un pasivo de US$ 379,8 millones, entre deudas financieras, comerciales y otras conocidas “diversas”, entre las que se encuentran los pasajeros que compraron boletos pero nunca pudieron volar.
Luego de los siete minutos que duró la subasta, funcionarios de Pluna festejaron, pero enseguida la preocupación bañó sus rostros. Es que, de acuerdo con información publicada por El Observador, aún no se sabe si los aviones operarán en Uruguay o en otra región.
El presidente José Mujica había anunciado horas antes que había más de un interesado en la subasta. En principio, BQB y la argentina Sol se habían mostrado como los compradores más seguros. “Se tendría que llamar a gente que tiene decenas de años de seriedad y hablar con ellos. No tendría que haber subasta porque viene un narcotraficante y si paga US$ 130 millones le dan la línea”, criticó Juan Carlos López Mena, propietario de Buquebus y BQB.
Si bien se vendieron los aviones, las frecuencias siguen sin ser adjudicadas y sus ex trabajadores no serán recontratados. El sindicato de la ex Pluna se reúne en asamblea para decidir los pasos por seguir.
infobae
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