El Sarandí y el Bouchard al final no van al UNITAS.
¿Por qué?
El Sarandí y el Bouchard al final no van al UNITAS.
No se si reirme o ponerme a llorar...¿que tienen que celebrar?...hace 3 años que no hay nada operativo...y no hay ni medio plan de recuperar la capacidad en este gobierno....El Comando de la Fuerza de Submarinos conmemoró sus 88 años
Se realizó una ceremonia en la Base Naval Mar del Plata, donde además, se entregaron espadas, como símbolo de mando, al personal de suboficiales ascendidos al grado de Suboficial Segundo.
MARTES 7, SEPTIEMBRE 2021
Mar del Plata – En la mañana del viernes se realizó la ceremonia por el día del submarinista y el 88° aniversario de la Creación de la Fuerza de Submarinos, en la Plaza de Armas Submarino ARA “Santa Fe”.
Fue presidida por el Comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, Contraalmirante Juan Carlos Daniel Abbondanza, contando con la presencia del Comandante del Área Naval Atlántica, Comodoro de Marina Marcelo Luis Fernández, el Intendente del Partido de General Pueyrredón Guillermo Montenegro y el Comandante de la Fuerza de Submarinos, Capitán de Navío Germán Horacio Michelis Roldan. Además, participaron Veteranos de la Guerra de Malvinas, titulares y dotación de los destinos dependiente, personal militar e invitados especiales.
“Constituye una antigua tradición rememorar, a nivel de las personas y de las diversas instituciones, aquellos acontecimientos que marcan su existencia, y en particular las fechas de nacimiento o creación, lo que nosotros hacemos año a año, siempre con esa misma emotividad conlleva remontarse a la génesis de un proyecto institucional que por sobre todo ha estado destinado a ocupar un espacio importante en el centro de las actividades de la Armada Argentina”, dijo en sus palabras el Capitán de Navío Michelis Roldán.
El Comandante de la Fuerza de Submarinos rememoró la formación de los primeros submarinistas en los inicios del siglo pasado, la compra de las primeras unidades: Los Tarantinos y la construcción de la base de submarinos, actual Base Naval Mar del Plata. Continuó con un repaso por la llegada de nuevas generaciones de sumergibles, el Conflicto del Atlántico Sur y otros hitos históricos. Ya posicionado en el presente dijo que “la Fuerza de Submarinos está viva y activa. Los submarinistas aquí presentes somos testigos y muestra fiel de que ello es así”. Y agregó que “más que nunca vemos vivo el espíritu de cuerpo submarinista, espíritu de cuerpo que refleja un sentido de pertenencia y convicción de ideales, que nos hacen sentir respaldados”.
En otro pasaje de su alocución se refirió a la necesidad de incorporar una nueva generación de submarinos que “le permitirá al Estado Nacional recuperar una capacidad estratégica e incrementaría su presencia en el litoral marítimo”, en tanto que no quiso dejar pasar la oportunidad de recordar la lamentable pérdida del Submarino ARA “San Juan” y lo que significó para todo el personal y la Fuerza.
Para finalizar recordó a “todos nuestros camaradas submarinistas que hoy ya no están con nosotros, de todos aquellos que han abrazado esta particular vocación y estilo de vida naval, de todos los que ofrendaron sus vidas en actos del servicio y de todos los que dedicaron sus vidas a la Fuerza de Submarinos, los tripulantes del San Juan, los veteranos de Malvinas y aquellos que mantuvieron encendida a lo largo del tiempo la antorcha submarinista. A ellos nuestro respeto y agradecimiento”.
Luego de sus palabras se realizó la bendición de las espadas que recibieron los suboficiales ascendidos al grado de Suboficial Segundo y que representarán una nueva etapa en sus carreras, acto seguido se realizó la entrega de las mismas. Un reducido grupo de familiares acompañó el emotivo momento.
Finalmente, como cierre de la ceremonia, miembros de la Agrupación de Suboficiales Submarinistas Argentinos realizó un reconocimiento al Comandante de la Fuerza de Submarinos.
Con la Marcha de la Armada entonada a viva voz por los presentes y acompañada por la Banda de Música del Área Naval Atlántica, concluyó la ceremonia.
Créditos: Gaceta Marinera Digital
Dificil imaginarse como deben estar los Submarinistas sin medios propios que tripular .No se si reirme o ponerme a llorar...¿que tienen que celebrar?...hace 3 años que no hay nada operativo...y no hay ni medio plan de recuperar la capacidad en este gobierno....
Una vida agitada sin duda. Una pequeña puntualización, Venado Tuerto esta en la provincia de Santa Fe.En las cercanías de Venado Tuerto – Provincia de Buenos Aires – nació Marcos Zar, el 31 de mayo de 1891. Desde pequeño sintió un gran afecto por los temas concernientes a la defensa nacional y fue así que, con apenas quince años, ingresó a la Escuela Naval Militar, para comenzar su carrera naval.
El 11 de marzo de 1911 se materializó el primer sueño de su vida al egresar como Guardiamarina. Desde allí comenzó su carrera naval, ilustre trayectoria que lo llevó a ser uno de los fundadores de la Aviación Naval.
Primeramente empapó su alma con agua de mar. Fue destinado: al crucero “Buenos Aires”; a los cruceros acorazados “San Martín”, “Garibaldi” y “Pueyrredón”; por ese entonces, unidades más poderosas de la Armada.
En 1913 – promovido a Alférez de Fragata- fue destinado al acorazado “Rivadavia”, una de las naves con mayor poder artillero. Allí, Zar pudo lucirse como artillero y obtener – por su desempeño – el ascenso a Alférez de Navío y el premio del diario “La Prensa” de Buenos Aires.
Los Estados Unidos de América cursaron en el año 1916 una invitación a la Armada Argentina para que un grupo de sus oficiales realizaran una serie de cursos en Institutos de la Armada Norteamericana, a fin de adquirir conocimientos en: artillería, comunicaciones, armas submarinas y aviación.
Para el servicio aeronáutico fueron designados dos de los diez oficiales que concurrirían a los cursos (los dos accedieron voluntariamente) y un tercero fue forzado a hacerlo: un joven y destacado artillero, el Alférez de Fragata Marcos Zar.
Con un Macchi M7 el Teniente Zar en su vuelo a Asunción-1920-
En septiembre de 1917 obtuvo el patentamiento como Aviador Naval, del curso de pilotos aviadores navales que realizó en Pensacola – Florida, EEUU –, junto a los Tenientes de Fragata Ricardo Fitz Simón y Ceferino Pouchan. Obtuvo del mismo el brevet internacional Nº 96.
Una vez finalizada la instrucción, ya graduados se dirigieron a Europa integrando la Fuerza Expedicionaria Norteamericana. Realizaron también cursos de postgraduados en escuelas de combate (Italia, Gran Bretaña y Francia), e integraron unidades navales aéreas operativas donde pudieron vivenciar todo lo aprendido en Pensacola escaso tiempo atrás: patrullajes, convoyajes y acción antisubmarina. Una vez finalizada la guerra, Zar realizó en unidades de la Aviación Italiana cursos de alta capacitación en acrobacia y caza, entre otros.
Experimentado en la acción, Marcos Zar vuelve al país finalizada la guerra. A su regreso, encuentra una Aviación Naval cuya situación era crítica – ya que casi carecía de vuelos por falta de medios -, vuelven al país a impartir enseñanzas de las experiencias recibidas.
La Misión Aeronáutica Italiana llegó al país en marzo de 1919 e instruyó al personal de la Marina con aviones construidos en Italia. De regreso a Italia, la Misión obsequió al Ministro de Marina cuatro hidroaviones, coincidiendo con la creación de la División Aviación Naval dependiente de la Secretaría del Ministerio.
La creación moderna y definitiva de la Aviación Naval acontece el 1º de noviembre de 1919, cuando se acepta y recibe esta donación de la Misión Aeronáutica Italiana. Zar, participó en los vuelos, records mundiales sobre mar y ríos, con los Macchi y luego permaneció junto a sus ex compañeros del curso de Pensacola, en San Fernando – donde se encontraban las instalaciones, un hangar y dos hidroaviones MACCHI M-9 y dos hidros MACCHI M-7, donado todo por la misión italiana-.
Marcos Zar en Pensacola en 1919 cuando batió el récord de velocidad y distancia sobre el mar junto a los tenientes de fragata Fitz Simon y Pouchan.
El 30 de marzo de 1920 el entonces Teniente de Fragata Marcos Zar, se embarcó nuevamente a Estados Unidos. Bajo su supervisión: tres oficiales del cuerpo general, dos oficiales ingenieros y diez suboficiales y cabos, realizaron el nuevo curso de pilotos aviadores navales y se especializaron en diferentes ramas de la Aviación Naval.
Zar, fundador de la Aviación Naval, ya había hecho sus primeras armas, ya había obtenido sus primeros récords internacionales y sus aviones ya tenían la escarapela y el ancla. Ahora vendría el reconocimiento, ardua y no fácil labor.
El 29 de noviembre de 1956, luego de años de espera, se sancionó el Decreto Ley Nº 2.578/958, donde amplia y fundamentadamente se nombra al vicealmirante Marcos Zar como uno de los “Fundadores de la Aviación Naval”, homenaje póstumo, ya que sus días habían terminado el 19 de septiembre de 1955.
Asimismo, Zar formó parte de la primera Plana Mayor de la Escuela de la Aviación Naval de Puerto Belgrano, ejerciendo el cargo de Jefe de Plana y Maniobras Aeronáuticas; fue Comandante de la Fuerza Aeronaval Nº 1.
Primer vuelo sobre una unidad naval que quedò registrado con esta fotografía tomada desde el aire de las maniobras de la escuadra naval.
Visionario, precursor y fundador, mantuvo los principios, los que transmitió con su ejemplo, de que volar para la Armada es una tarea de marinos, cual el navegar en los mares y ríos; tareas profesionales, plenas de profesionalismo y eficiencia.
Su ejemplo, al igual que el resto de los fundadores de la Aviación Naval, se enseña hoy en las aulas a los nuevos pilotos. “El Aviador Naval es ante todo y por doctrina, un Marino, al que su vocación por el vuelo lo empeña en el empleo de la Aviación para la defensa de la Patria en el mar”, reza el axioma que ha mantenido desde su creación la Escuela de Aviación Naval de Punta Indio donde se forman los pilotos de la Armada Argentina.
Créditos: Gaceta Marinera Digital
Hay que reconocer la capacidad industrial naval Francesa...