La independencia de Cataluña de España

Sebastian

Colaborador

FOTO: Un grupo de bomberos se coloca entre manifestantes y Guardia Civil fuera de una mesa de votación en San Julià de Ramis, Gerona DAVID RAMOS GETTY IMAGES
 

Sebastian

Colaborador
Europa condena la violencia en el 1-O y exige diálogo

PABLO R SUANZES

Este domingo, en pocas horas, el Gobierno español perdió la batalla del relato. Hasta el sábado, el Ejecutivo de Mariano Rajoy contaba con el respaldo explícito de más de media docena de jefes de Estado y de Gobierno y del de las instituciones europeas ante un «referéndum ilegal» y una violación «al orden constitucional». Pero las cargas policiales de ayer causaron conmoción y airadas reacciones por todo el continente. La imagen de Moncloa, de Madrid, del país entero, quedó seriamente tocada entre periodistas, analistas y líderes políticos. «Parece que no han entendido que estamos en 2017 y que una imagen viral destruye en cinco minutos el consenso que hayas logrado en años de diplomacia», se lamentaba anoche una alta fuente europea.

En la UE están al día del desafío independentista, sus métodos y discurso. Pero España y el Gobierno nunca han logrado simpatías mayoritarias. Es complicado cuando la narrativa de una parte asegura que sólo quiere ejercer el derecho democrático al voto y que está siendo perseguida y represaliada.
La Europa del siglo XXI es de adhesión rápida y muy sensible a cualquier tipo de acción policial o judicial. «La mano dura de Madrid ha cambiado la conversación: del movimiento separatista hacia la democracia y el derecho al voto», resumía el editor de Internacional del New York Times la jornada dominical.

Aunque este referéndum no contaba con apenas ningún apoyo, más allá del de grupos independentistas escoceses, franceses, italianos o flamencos, en Europa ven y piden como inevitable una salida política. «La violencia nunca puede ser la respuesta. Condenamos todas las formas de violencia y reafirmamos nuestra llamada a un diálogo político», escribió en su cuenta de Twitter el primer ministro belga, Charles Michel. «Estoy preocupado por la situación. Pido un diálogo político, imperio de la ley y soluciones pacíficas», coincidió poco después el primer ministro esloveno, Miro Cerar. Dos homólogos que se sientan con Rajoy en la mesa del Consejo Europeo y que ayer, con los vídeos de las cargas, no dudaron en saltarse la etiqueta y meterse de lleno en asuntos internos de otro país, justo lo que Emmanuel Macron o Paolo Gentiloni aseguraron el viernes que no se debía hacer.

Las portadas de los diarios europeos
Todos los principales diarios europeos siguieron muy de cerca la actualidad desde primera hora. «Violencia en Cataluña, la derrota de Rajoy» (Libération). «Cargas y disparos; 460 heridos» (Il Corriere della Sera). «Domingo sangriento» (Die Zeit). Pero las instituciones europeas permanecieron ayer mudas.
Ni la Comisión ni el Consejo ni el Parlamento dijeron palabra. El equipo de Jean-Claude Juncker estuvo siguiendo muy de cerca toda la jornada y en permanente contacto con Madrid, pero hasta hoy, con una visión más completa, no se pronunciarán. A pesar de la presión de ciudadanos, del embajador catalán ante la UE, Amadeu Altafaj, o del secretario de Estado belga, Theo Francken, que condenó lo que a su juicio es el doble rasero de quienes alzan la voz contra Hungría o Polonia pero ayer optaron por el silencio.

Sí lo hicieron los líderes de liberales y socialistas de la Eurocámara, arremetiendo contra el referéndum, pero también condenando y exigiendo el final de la «violencia desproporcionada» y la vuelta «al diálogo». Los partidos de izquierda, pidiendo mediación europea a la situación. Y el candidato socialdemócrata y ex presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, denunciando que «la escalada en España es preocupante. Madrid y Barcelona deben rebajarla y buscar el diálogo».

En Reino Unido fue el líder de la oposición, Jeremy Corbyn, quien dio el primer paso a la hora de pedir el fin de la violencia. Lo hizo a través de varios tuits, expresando su sorpresa por la situación: «La violencia policial es impactante. El Gobierno de España tiene que ponerle fin ya», informa Alberto Muñoz.

Los internacionales "preocupados" y "tristes"
  • Boris Johnson, ministro de Asuntos Exteriores británico. "Obviamente estamos preocupados por cualquier incidente violento, pero evidentemente este referéndum, tal como yo lo entiendo, no es constitucional, por lo que es necesario un equilibrio. Esperamos que las cosas se tranquilicen".
  • Anne Hidalgo, alcaldesa de París. "Soy andaluza de origen y parte de mi familia es catalana. Lo que pasa es muy triste. Confieso que no entiendo que Cataluña quiera separarse de España [...] Me cuesta en el plano afectivo y en el racional [...]. Quizá se puedan aportar cambios a la relación entre el poder central madrileño, algo que no siempre es un acierto, y Cataluña, pero ese deseo de independencia me parece muy peligroso para España e incluso para Europa. Estoy preocupada. Espero que España logre encontrar un camino con Cataluña".
  • Nicola Sturgeon, primera ministra escocesa. "Independientemente de las opiniones sobre la independencia, todos deberíamos condenar las escenas que han tenido lugar allí y pedirle a España que cambie el rumbo antes de que alguien salga gravemente herido", tuiteó. "Dejen a la gente votar pacíficamente".
  • Jeremy Corbyn, líder del Partido Laborista británico. "La policía contra los ciudadanos en Cataluña es estremecedora. El Gobierno español debe actuar para parar esto ahora", publicó en Twitter. "Insto a Theresa May a pedirle directamente a Rajoy que termine con la violencia en Cataluña y que encuentre una solución política a esta crisis institucional".
  • Miro Cerer, primer ministro esloveno. "Llamo a que la situación se resuelva de una forma pacífica, democrática y legal", declaró en un mensaje enviado a través de la red social Twitter esta tarde.
  • Charles Michel, primer ministro belga. "¡La violencia nunca puede ser la respuesta! Condenamos cualquier forma de violencia y reafirmamos nuestro llamamiento a un diálogo político".
  • Sauli Niinistö, presidente de Finlandia. Consideró hoy que es fácil que la situación que se vive en Cataluña, "grave" para él. Desemboque en algo "muy problemático" y pidió "cortar la espiral y empezar a negociar".
  • Martin Schulz, líder del Partido Socialdemócrata alemán. "La escalada [de violencia] en España es preocupante. Madrid y Barcelona deben rebajar la tensión inmediatamente y buscar el diálogo".
  • Jean-Luc Mélenchon, líder del partido de izquierda radical francés Francia Insumisa. "El Estado español pierde su sangre fría. La nación no puede ser una camisa de fuerza".
  • Benoît Hamon, ex candidato del Partido Socialista francés a las presidenciales. "En el corazón de Europa, estas imágenes de violencia para impedir VOTAR a la gente en Cataluña son significativas y amenazadoras".
http://www.elmundo.es/espana/2017/10/01/59d13625e2704ef9528b460a.html
 
Cataluña: publican imágenes de personas votando varias veces en colegios distintos (FOTOS)

Publicado: 1 oct 2017 19:12 GMT | Última actualización: 1 oct 2017 19:14 GMT

Las fotografías han sido distribuidas por la Sociedad Civil Catalana, asociación política contraria al independentismo catalán.
https://actualidad.rt.com/actualidad/251731-cataluna-personas-votando-dos-veces

En un pueblecito con menos de 400 electores han sacado 1.200 votos, no se yo, no se yooooo
 
El independentismo catalán mete miedo a los famosos: «Desde lo de Serrat nadie se atreve a hablar»
La mayoría de personalidades públicas rechazan dar su opinión sobre el 1-0 ante las inminentes represalias...

Por ROCÍO F. DE BUJÁN.

"El miedo, desde hace años, se ha instalado en Cataluña. Pero desde el comienzo del procés se ha transformado en pánico. Discrepar de la posición oficial es arriesgado en todos los ambientes públicos. De un debate sereno, de confrontación de posiciones, se ha pasado a una discusión bronca que divide o destruye familias, amigos y compañeros de trabajo. El «derecho a decidir», para los que lo proclaman es indiscutible. No se tolera que un catalán puede cuestionarlo. Es condenado a la hoguera: la quema en plaza pública de las redes sociales con descalificaciones personales y profesionales; la acusación de «traidor a la patria»; insultos en su presencia, escarches e incluso agresiones físicas por lanzamiento de objetos, más o menos contundentes. Son las prácticas habituales de los totalitarismos. La amenaza al disidente se palpa en la sociedad y se padece por quien osa discrepar.

La situación, como no podía ser de otra manera, ha llegado a los «famosos». Esos que son más conocidos y que, en distinta medida, tienen lo que en el mundo clásico se llamaba «auctoritas», es decir, influencia social. Los políticos saben bien que una declaración de ellos sobre la independencia o el derecho a decidir tiene enorme repercusión en sus seguidores. Así sucede con deportistas, cantantes, actores o personas con gran presencia en los medios. En menor intensidad, también con intelectuales, en sentido más estricto.

Y ante esta situación, quienes están en contra de lo que está sucediendo, unos se pronuncian y otros no. Depende de la capacidad que tienen de resistir la presión, lo que es comprensible. Pero también depende de si hacen prevalecen sus intereses sobre sus convicciones. Lo cual es humano, pero poco ejemplar. Son los que no se pronuncian porque pierden el favor de los poderes públicos, que los han secuestrado con contratos y subvenciones. Otros se autocensuran a fin de no perder fans pues el posicionamiento se hace en una sociedad catalana dividida y enfrentada.


ABC ha intentado conectar con «famosos» y se ha encontrado con una situación de «omertà», es decir, de silencio impuesto en ambientes mafiosos que impide denunciar cualquier acción de la banda.

La representante de una célebre agencia de actores ha dicho: «Desde lo de Serrat nadie se atreve a hablar». Otras compañías ni siquiera nos han permitido preguntar: «Tenemos una cláusula con nuestros artistas que les impide hablar de política», contestan de manera cortante tras escuchar la propuesta. «Perdona, pero no va a decir nada de este tema», responde un manager.

Frente a este panorama algunos se han alzado con coraje. No consienten ser limitados en su libertad de opinión y expresión. De entre ellos, merece admiración especial Serrat, icono para catalanes y para el resto de España. El amor a su tierra y a su lengua catalana son incuestionables. Pero desde su dignidad personal y su defensa de la libertad se ha sentido obligado a proclamar la verdad: la consulta independentista «no es transparente, está creada con una ley elaborada por el Parlament pero a espaldas de los demás miembros del Parlament». Y con Serrat, Albert Boadella, Jordi Évole, Loquillo, Marc Márquez, Mercedes Milá, Juan Marsé, Eduardo Mendoza, Isabel Coixet, Mireia Belmonte, Estopa, Montserrat Caballé, Javier Cárdenas, Jorge J. Vazquez, entre otros, se han pronunciado contra la fractura social que provoca la independencia ¡Gracias a ellos, todos mantenemos la esperanza!".


Nota mia: Es justo aclarar que lo de la memoria histórica no le funciona a mucha gente. En 1968, Serrat fue invitado por el Régimen franquista a representar a España en Eurovisión. Y se negó en redondo a cantar, si no lo hacía en catalán y hubo que buscar deprisa y corriendo un reemplazante. A este "pájaro" que humilló a España entera en su momento, evidentemente, hoy lo esta persiguiendo "el aleman" (Alzheimer).
 
El que hablo y bastante fue Piqué

Piqué: “Si soy un problema, puedo dejar la selección”
Piqué lamenta entre lágrimas la severa actuación policial durante la jornada del referéndum y critica duramente a Rajoy
https://elpais.com/deportes/2017/10/01/actualidad/1506878465_614070.html

¿Sabes que le pasó a Piqué? Que el quiere ser presidente del Barça y manda mucho en el vestuario y no quería jugar el partido, le daban igual los puntos y tal, pero hay uno bajito que manda mas, mucho mas, y dijo el bajito (de Rosario) que se jugaba y que aquí Gerardo se metía la lengua por el culo.

Y se jugó.
 
El independentismo catalán mete miedo a los famosos: «Desde lo de Serrat nadie se atreve a hablar»
La mayoría de personalidades públicas rechazan dar su opinión sobre el 1-0 ante las inminentes represalias...

Por ROCÍO F. DE BUJÁN.

"El miedo, desde hace años, se ha instalado en Cataluña. Pero desde el comienzo del procés se ha transformado en pánico. Discrepar de la posición oficial es arriesgado en todos los ambientes públicos. De un debate sereno, de confrontación de posiciones, se ha pasado a una discusión bronca que divide o destruye familias, amigos y compañeros de trabajo. El «derecho a decidir», para los que lo proclaman es indiscutible. No se tolera que un catalán puede cuestionarlo. Es condenado a la hoguera: la quema en plaza pública de las redes sociales con descalificaciones personales y profesionales; la acusación de «traidor a la patria»; insultos en su presencia, escarches e incluso agresiones físicas por lanzamiento de objetos, más o menos contundentes. Son las prácticas habituales de los totalitarismos. La amenaza al disidente se palpa en la sociedad y se padece por quien osa discrepar.

La situación, como no podía ser de otra manera, ha llegado a los «famosos». Esos que son más conocidos y que, en distinta medida, tienen lo que en el mundo clásico se llamaba «auctoritas», es decir, influencia social. Los políticos saben bien que una declaración de ellos sobre la independencia o el derecho a decidir tiene enorme repercusión en sus seguidores. Así sucede con deportistas, cantantes, actores o personas con gran presencia en los medios. En menor intensidad, también con intelectuales, en sentido más estricto.

Y ante esta situación, quienes están en contra de lo que está sucediendo, unos se pronuncian y otros no. Depende de la capacidad que tienen de resistir la presión, lo que es comprensible. Pero también depende de si hacen prevalecen sus intereses sobre sus convicciones. Lo cual es humano, pero poco ejemplar. Son los que no se pronuncian porque pierden el favor de los poderes públicos, que los han secuestrado con contratos y subvenciones. Otros se autocensuran a fin de no perder fans pues el posicionamiento se hace en una sociedad catalana dividida y enfrentada.


ABC ha intentado conectar con «famosos» y se ha encontrado con una situación de «omertà», es decir, de silencio impuesto en ambientes mafiosos que impide denunciar cualquier acción de la banda.

La representante de una célebre agencia de actores ha dicho: «Desde lo de Serrat nadie se atreve a hablar». Otras compañías ni siquiera nos han permitido preguntar: «Tenemos una cláusula con nuestros artistas que les impide hablar de política», contestan de manera cortante tras escuchar la propuesta. «Perdona, pero no va a decir nada de este tema», responde un manager.

Frente a este panorama algunos se han alzado con coraje. No consienten ser limitados en su libertad de opinión y expresión. De entre ellos, merece admiración especial Serrat, icono para catalanes y para el resto de España. El amor a su tierra y a su lengua catalana son incuestionables. Pero desde su dignidad personal y su defensa de la libertad se ha sentido obligado a proclamar la verdad: la consulta independentista «no es transparente, está creada con una ley elaborada por el Parlament pero a espaldas de los demás miembros del Parlament». Y con Serrat, Albert Boadella, Jordi Évole, Loquillo, Marc Márquez, Mercedes Milá, Juan Marsé, Eduardo Mendoza, Isabel Coixet, Mireia Belmonte, Estopa, Montserrat Caballé, Javier Cárdenas, Jorge J. Vazquez, entre otros, se han pronunciado contra la fractura social que provoca la independencia ¡Gracias a ellos, todos mantenemos la esperanza!".


Nota mia: Es justo aclarar que lo de la memoria histórica no le funciona a mucha gente. En 1968, Serrat fue invitado por el Régimen franquista a representar a España en Eurovisión. Y se negó en redondo a cantar, si no lo hacía en catalán y hubo que buscar deprisa y corriendo un reemplazante. A este "pájaro" que humilló a España entera en su momento, evidentemente, hoy lo esta persiguiendo "el aleman" (Alzheimer).


Por sentirse español tiene alzheimer?
 
Arriba