Respecto a eventuales acuerdos de paz, adhesiones a la Unión Europea y/o a la OTAN hay un detalle normativo a tener en cuenta y que es independiente de si Ucrania tiene una presidencia prolija, o flojita, de papeles.
Detalle que es exactamente igual con la mayoría de los países involucrados en este conflicto.
Por la naturaleza de la división de poderes, los poderes ejecutivos tienen la responsabilidad de representar al país ante el extranjero y pueden negociar y firmar tratados. Pero con esa firma no es suficiente para que tengan vigencia.
Para que un tratado internacional tenga validez tiene que ser ratificado por el poder legislativo. Un acuerdo de paz es un tipo de tratado, así que sometido a las mismas reglas.
En pocas palabras, los presidentes proponen y los parlamentarios disponen.
Lo que cabe esperar es que el gobierno de Ucrania negocie y firme algún acuerdo de paz con otros países en algún momento futuro.
Luego de ello tiene que transformar esa propuesta en una iniciativa legislativa que debe ser aprobada por el parlamento ucraniano, Luego esa decisión debe ser comunicada a los demás Estado-parte firmantes del tratado. Sólo a partir de allí tiene validez.
Estos principios aplican exactamente igual para todos los Estado-parte firmantes. Nadie esta al margen de esta regla.
Si Rusia es la contraparte de ese acuerdo de paz, entones lo que sea que firme su gobierno tendrá que ser más tarde sometido a votación de su parlamento.
Si Estados Unidos, pongamos el caso, es uno de los mediadores y garantes del acuerdo, entonces lo que sea que firme su gobierno tendrá que ser sometido posteriormente a votación de su parlamento.
Si el acuerdo incorpora una cláusula de incorporación a la Unión Europea, entonces tendrán que firmar las autoridades de la Unión y luego proceder al proceso de ratificación previsto en dicha Unión.
Quizás noten que hablo de "gobierno" como sinónimo de Poder Ejecutivo de sus respectivos países. Depende de lo que decida cada país, pero el firmante de un tratado puede ser su primer mandatario o un representante designado por este (su canciller, un enviado especial, un general o almirante, una delegación, por ejemplo).
¿Qué significa todo esto?, que los máximos lideres de los Estado-partes firmen un acuerdo de paz frente a todas las cámaras de toda la prensa internacional no significa necesariamente que se haya sellado la paz. Será necesario esperar que todos los parlamentos de los Estado-partes firmantes también brinden sus correspondientes asentimientos.
Esto puede llevar años y conduce a la pregunta inevitable ¿qué puede pasar en el tiempo que transcurre desde la firma de los gobiernos de los Estado-partes y la correspondiente ratificación de los parlamentos de los Estado-partes? es un período de tiempo donde la intención puede ser la paz, pero donde no esta nada garantizado. Lo que reina es la incertidumbre.
Y cuando eso pasa, no puede descartarse que las hostilidades continúen en el mientras tanto.