La Presidenta les dedicó una serie de elogios a los militares, que están más acostumbrados a su frialdad que a los halagos. Además, dijo que seguirá condenando la rémora colonial del Reino Unido que pretende la soberanía de las islas a pesar de estar a 14.000 km de distancia.
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Tras la maniobra con los decretos, el Central ya giró reservas para pagar deuda externa
En medio de un discurso cargado por fuertes críticas a los medios de comunicación, a la Justicia y a los opositores, Cristina Kirchner se hizo un lugar para los halagos. Sorprendidos, los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas que estaban presentes en el Congreso escucharon de boca de la mandataria una serie de elogios a los que no están acostumbrados.
Tras pedirle a la Justicia que termine de juzgar a los responsables de crímenes de la dictadura, Cristina se deshizo en elogios para los militares. "Se planteó que odiábamos a las Fuerzas Armadas, por Dios; nosotros los peronistas contra los militares; somos el único partido político vigente en la Argentina fundado por un general", dijo haciendo referencia a Juan Domingo Perón.
"Nuestro ADN se gestó allí cuando las Fuerzas Armadas acabaron con el fraude patriótico de la década infame y Perón fue presidente", sorprendió Cristina. "Así que no tenemos nada, al contrario. Yo creo que han humillado mucho más a las Fuerzas Armadas los que las redujeron a ser simples encapuchados en lugar de defensores de la soberanía nacional", recordó con los grupos de tareas de la última dictadura en su cabeza.
Esos fueron los que "humillaron a nuestras gloriosas Fuerzas Armadas de San Martín, Belgrano y más a la actualidad de los generales Savio y Mosconi. Por eso nosotros queremos recuperar a esas FF.AA. e iniciamos una muy fuerte política de la recuperación del rol industrial de la Defensa, que ha sido clave en el desarrollo estratégico de la Defensa nacional", aseguró.
También dijo sentirse "orgullosa" de la misión ejemplar que llevan a cabo los Cascos Azules argentinos en las diferentes Misiones de Paz de la ONU. "Hubo otros que las encapucharon y hubo otros que las escondieron cuando volvieron de Malvinas. Ni encapuchados ni escondidos, con orgullo de haber pertenecido a una historia y a un país que merece tener otro destino".
Malvinas fue otro de los espacios preferidos de la Presidenta que recordó que su gobierno seguirá reclamando la soberanía de las islas vía diplomática y el derecho internacional y seguirá "condenando la rémora colonial que significa hoy que el Reino Unido pretenda que tiene soberanía a 14 mil kilómetros de distancia".
"Lo único que debemos es sentarnos como indica Naciones Unidas a discutir con el Reino Unido teniendo en cuenta los intereses de los habitantes de Malvinas, pero queremos que se cumpla esta resolución de que nos sentemos a discutir".
"No pueden ampararse más en Galtieri, ellos eran los que reconocían gobiernos como los de Galtieri, no nosotros, la mayoría de los argentinos", destacó la mandataria.
Luego, recalcó "el apoyo más contundente que se tenga memoria" de los países americanos y caribeños a la Argentina respecto a la soberanía sobre el archipiélago del Atlántico Sur.
"Tuve el orgullo en la cumbre (de Cancún, México) de la que participaron todos los países de América y del Caribe, excepto Estados Unidos y Canadá, de tener el apoyo en nuestra causa de Malvinas más contundente del que se tenga memoria"
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En medio de un discurso cargado por fuertes críticas a los medios de comunicación, a la Justicia y a los opositores, Cristina Kirchner se hizo un lugar para los halagos. Sorprendidos, los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas que estaban presentes en el Congreso escucharon de boca de la mandataria una serie de elogios a los que no están acostumbrados.
Tras pedirle a la Justicia que termine de juzgar a los responsables de crímenes de la dictadura, Cristina se deshizo en elogios para los militares. "Se planteó que odiábamos a las Fuerzas Armadas, por Dios; nosotros los peronistas contra los militares; somos el único partido político vigente en la Argentina fundado por un general", dijo haciendo referencia a Juan Domingo Perón.
"Nuestro ADN se gestó allí cuando las Fuerzas Armadas acabaron con el fraude patriótico de la década infame y Perón fue presidente", sorprendió Cristina. "Así que no tenemos nada, al contrario. Yo creo que han humillado mucho más a las Fuerzas Armadas los que las redujeron a ser simples encapuchados en lugar de defensores de la soberanía nacional", recordó con los grupos de tareas de la última dictadura en su cabeza.
Esos fueron los que "humillaron a nuestras gloriosas Fuerzas Armadas de San Martín, Belgrano y más a la actualidad de los generales Savio y Mosconi. Por eso nosotros queremos recuperar a esas FF.AA. e iniciamos una muy fuerte política de la recuperación del rol industrial de la Defensa, que ha sido clave en el desarrollo estratégico de la Defensa nacional", aseguró.
También dijo sentirse "orgullosa" de la misión ejemplar que llevan a cabo los Cascos Azules argentinos en las diferentes Misiones de Paz de la ONU. "Hubo otros que las encapucharon y hubo otros que las escondieron cuando volvieron de Malvinas. Ni encapuchados ni escondidos, con orgullo de haber pertenecido a una historia y a un país que merece tener otro destino".
Malvinas fue otro de los espacios preferidos de la Presidenta que recordó que su gobierno seguirá reclamando la soberanía de las islas vía diplomática y el derecho internacional y seguirá "condenando la rémora colonial que significa hoy que el Reino Unido pretenda que tiene soberanía a 14 mil kilómetros de distancia".
"Lo único que debemos es sentarnos como indica Naciones Unidas a discutir con el Reino Unido teniendo en cuenta los intereses de los habitantes de Malvinas, pero queremos que se cumpla esta resolución de que nos sentemos a discutir".
"No pueden ampararse más en Galtieri, ellos eran los que reconocían gobiernos como los de Galtieri, no nosotros, la mayoría de los argentinos", destacó la mandataria.
Luego, recalcó "el apoyo más contundente que se tenga memoria" de los países americanos y caribeños a la Argentina respecto a la soberanía sobre el archipiélago del Atlántico Sur.
"Tuve el orgullo en la cumbre (de Cancún, México) de la que participaron todos los países de América y del Caribe, excepto Estados Unidos y Canadá, de tener el apoyo en nuestra causa de Malvinas más contundente del que se tenga memoria"
