Veto gringo con los F-5 para Perú por las expropiaciones a sus empresas, cortesía del dictador Velasco.
Por cierto, acaban de denunciar ante el Departamento de Justicia gringo el acuerdo de compra de los Gripen colombianos. En la denuncia mencionan la investigación de los Gripen que compró Brasil en el pasado. Yo creo que la FAP y el gobierno peruano deben estar muy atentos con las consecuencias en este tipo de compra de armamentos. Sobre todo porque ya están bajo investigación por ese avión ucraniano trucho que compró la policía peruana.
La querella interpuesta por el profesor Juan Carlos Portilla se fundamenta en información divulgada por los medios de comunicación y el costo del multimillonario acuerdo
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vaya, alguien se animó a citar la historia completa....
Todos conocemos al personaje que ha infectado los foros militares, gritando cifras estratosféricas y “megaproyectos” que jamás han existido.
Ese mismo que sin decencia alguna y a pesar de las sanciones, vuelve camuflado una y otra vez...
Pero detrás de él hay algo peor:
un mecanismo entero dedicado a promover mentiras.
El Perú crece, sí, pero
no lo suficiente para sostener a un país con necesidades tan profundas y un aparato estatal tan ineficiente que o se roba el dinero… o no sabe usarlo.
De los
252 mil millones de soles del presupuesto 2025, un monto increíblemente bajo para un país de 34 millones de habitantes,
alrededor del 70% ya está muerto antes de empezar.
Muerto.
Comprometido.
Intocable.
¿Qué compone ese 70%?
*Planillas del Estado, incluyendo militares y policías.
*Pensiones, incluyendo militares y policías.
*Servicio de la deuda, que desmonta la mentira de “compra al cash” (nos estamos endeudando para la compra de cazas ojo).
*Programas sociales obligatorios.
*Transferencias automáticas a regiones y municipios: canon, Foncomún, etc.
Ese dinero
no se mueve.
No se redirige.
No se reasigna.
¡NO SE TOCA!
Queda apenas un
30% de gasto discrecional.
Y en ese pequeño espacio compite
todo:
carreteras, hospitales, colegios, agua, infraestructura hídrica, tecnología, seguridad, mantenimiento, cultura, agricultura, y recién…
Defensa.
¿Cuánto recibe realmente Defensa?
Apenas
1.1% del PBI.
Y de ese 1.1%…
el 75% se lo come el gasto corriente del aparato militar.
No en aviones.
No en misiles.
No en entrenamiento.
No en mantenimiento.
¡EN BUROCRACIA!
Menos del
20% del presupuesto de Defensa sirve para mantener o modernizar la fuerza.
Y ahí está el punto que los propagandistas jamás quieren que entiendas:
El principal problema de la Defensa peruana no viene de afuera.
Viene de adentro.
De su pésima gestión.
Los casi 300 aviones de combate que desfilaron por la FAP desde los 70 hasta hoy…
¿quién los destruyó?
¿Quién los dejó sin motores, sin repuestos, sin software y sin contrato logístico?
¡Ellos!
Y nunca asumieron responsabilidad.
Nunca.
Pero hoy quieren que Perú se endeude para comprarles
aviones nuevos, como si fueran juguetes de reemplazo después de romper los anteriores.
Y para justificarlo te dicen su frase favorita:
“La defensa no tiene precio.”
Sí lo tiene.
Carísimo.
Inasumible sin una reforma real y por eso pedimos ¡REINGENIERÍA A GRITOS!
Porque Perú no es Arabia Saudita ni todas las monarquías árabes que nadan en petróleo y que compran Rafale.
Perú no es la India.
Perú no imprime petrodólares.
Perú tiene severas restricciones presupuestarias.
Y gastarte miles de millones en el caza más caro, más complejo y con el costo por ciclo de vida más destructivo…
es un crimen contra el país.
Por eso digo:
El dinero existe, sí…
pero no alcanza.
Y cuando venga un payaso a decirles:
“El Perú tiene un PBI de 320 mil millones, hay plata.”
Recuerda este post:
El PBI es producción,
no es presupuesto.
No es caja.
No es dinero disponible.
El presupuesto sale de la
recaudación, que en el Perú es de las más bajas de la región…
y del
endeudamiento, que ya está creciendo demasiado.
Por eso explico esto, porque detrás de cada número y de cada mentira hay todo un “mecanismo” dedicado a pedir dinero sin asumir responsabilidades, sin admitir errores, sin mostrar transparencia, y sin entender que:
Cada dólar desperdiciado en Defensa
es un dólar que no se usa para sacar al país del hoyo.
Y el Perú ya no está para lujos.
Ni para aviones de vitrina.
Ni para compras emocionales.
Ni para sueños húmedos de foristas sin noción económica.
Las mentiras merecen ser aplastadas.
Y hoy lo están.
¡Chao!
