El drástico aumento en el uso de diferentes tipos de UAVs en la guerra en curso entre Israel y las organizaciones terroristas Hamas y Hezbollah cambiará de manera significativa la forma en que se utilizan estos sistemas no tripulados. Una idea que se está evaluando actualmente es equipar los tanques Merkava del IDF con UAVs y drones para permitir al comandante ver más allá del rango actual disponible. Otra idea es equipar los tanques con sistemas de armas merodeadora que aumentarán la capacidad de fuego de los tanques.
Antes de la guerra, se inició una evaluación del posible uso de un porta-UAV. Los portaviones y portahelicópteros sirven a grandes armadas en el mundo. Actualmente, los UAVs se operan desde buques de la armada para diferentes misiones. Sin embargo, el cambio drástico en la forma en que se operan los UAVs ha vuelto a poner la idea en la mesa para Israel de un portaaeronaves marítimo dedicado para UAVs. Esto se debe principalmente a las primeras lecciones de la guerra en Ucrania y la guerra en Gaza.
Los portaaviones han demostrado su efectividad en muchas armadas, al igual que los portahelicópteros. Estas bases aéreas flotantes tienen una tarea en cada conflicto militar importante que estalla donde la geografía presenta mares y océanos. En los últimos años, las armadas han planteado un número creciente de demandas operativas para tener UAVs en sus barcos. Esto está sucediendo, y en los últimos años, algunos fabricantes israelíes de UAVs han comenzado a considerar la idea.
Aeronautics, fabricante israelí de sistemas aéreos no tripulados (UAS), ofrece la opción de operar su UAS Orbiter-3 desde buques de la armada. El Orbiter-3 tiene una envergadura de 4.2 metros, un peso máximo al despegue de 28 kg y una autonomía de 7 horas. Lleva una carga útil de 5.5 kg. En operaciones terrestres, se lanza con una catapulta y se recupera mediante una combinación de paracaídas y airbag. En los barcos, se utiliza una red especial para atraparlo al final de la misión.
La adaptación del Orbiter-3 para operaciones marítimas se produce algunos años después de que su versión más pequeña, el Orbiter-2, se adaptara para esa misión y ya esté en funcionamiento en los buques de la armada israelí. Según Aeronautics, hay una creciente demanda de la operación de UAVs desde buques de combate. En algunas armadas, esto es el reemplazo directo de un helicóptero operado desde la cubierta. Las plataformas aéreas son necesarias principalmente para la detección temprana de amenazas. Pero, como se ha demostrado en conflictos importantes actuales, los UAVs armados se han convertido en un activo esencial.
Hasta ahora, los UAVs que pueden operar desde barcos son relativamente pequeños. Por lo general, se lanzan con algún tipo de catapulta y aterrizan en una red. Con las nuevas capacidades de diferentes tipos de UAVs desarrollados por empresas israelíes, la idea se está evaluando nuevamente como una capacidad futura muy importante. Fuentes en la industria de defensa israelí imaginan un portador dedicado con una cubierta que permitirá el despegue de “diferentes tipos” de UAVs. La idea gana impulso cuando el 80% de las horas totales de vuelo de la fuerza aérea israelí son realizadas por diferentes tipos de UAVs.
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