Con su regreso el 2 de noviembre a las Bases Aérea de Amendola (FG) y Ghedi (BS) en Italia, los cazas F-35A de la Fuerza Aérea italiana (Aeronautica Militare) finalizaron su despliegue en Polonia como parte de sus Misiones de Policía Aérea expandida (EN-AP) de la OTAN. En total se trató de cuatro aviones de combate de quinta generación adscritos a la “Task Force Air – 32nd Wing”, los cuales operaron durante los últimos meses desde la Base Aérea Malbork.

El objetivo de misiones de Policía Aérea es llevar a cabo una misión de paz y defensa colectiva liderada por la OTAN que opera de manera continua todos los días del año y que está gestionada por el AIRCOM (Allied Air Command) en Ramstein, Alemania. Por su parte, las actividades en operativas en el terreno se realizan bajo coordinación y según las directrices proporcionadas por el Comando Operativo de la Cumbre de Fuerzas Conjuntas de Italia, conocido como COVI (por sus siglas en italiano: Comando Operativo di Vertice Interforze).

El COVI está encargado de la planificación, coordinación y dirección de las operaciones y ejercicios militares tanto a nivel nacional e internacional, incluyendo los cinco dominios (tierra, mar, aire, espacio y ciber). En este sentido, los F-35A de “Task Force Air 32nd Wing” se encuentra bajo la dependencia directa del COVI y tiene como fin específico asegurar la integridad y la seguridad del espacio aéreo de los países de la alianza atlántica, contribuyendo así al fortalecimiento de la postura defensiva y disuasiva en el bloque oriental de la OTAN.

Consiguientemente, el empleo de aeronaves F-35A Lightning II en condición de Alerta de Reacción Rápida – Interceptor (QRA-I), sirven para garantizar una rápida intervención para la protección del espacio aéreo de países aliados, asegurando el control y la salvaguardia del ala noreste de la OTAN. Al respecto, el Teniente Coronel italiano, Ciro Maschione, manifestó: “La actividad llevada a cabo por la Task Force es una demostración tangible de la capacidad de proyección operativa que de la Fuerza Aérea y las Fuerzas Armadas italianas son capaces de expresar (…) Los resultados obtenidos con el despliegue de los aviones de quinta generación F-35 han atestiguado una vez más el papel de liderazgo que el Ejército del Aire tiene en el empleo del preciado sistema de armas”. 

Asimismo, es importante recalcar que el 15 de septiembre del presente año, la En-AP alcanzó su máxima capacidad operativa, contando con el accionar de 120 hombres y mujeres aproximadamente. Luego del mencionado regreso de los cazas F-35A a sus respectivas bases en Italia, fuentes oficiales informaron que estos retomarán con su compromiso en territorio polaco durante lo que será el Bloque Rotacional 64 y que el mismo tendrá lugar a principios de diciembre. 

Siguiendo con esta línea, el Comandante de la Aeronáutica Militare, General Alberto Biavati declaró: “las fuerzas aeroespaciales de la OTAN seguirán reforzando la presencia de la Alianza en el flanco oriental de Europa para protegerse de cualquier agresión. Esto representa un esfuerzo colectivo que compromete a todas las naciones pertenecientes a la Alianza (…) Italia, a través del Ejército del Aire, ha demostrado siempre disponibilidad, capacidad y profesionalidad para contribuir de manera decisiva a la seguridad de nuestros cielos”. Esto es una muestra más de cómo el accionar conjunto Italia-Polonia proporciona, según los superiores del Cuerpo Oficial italiano, una relevante contribución al desarrollo de la doctrina de la OTAN.

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