Boeing, junto a su socia en el programa T-X, Saab, será la suministradora del nuevo sistema avanzado de entrenamiento de la USAF al haber sido designada la vencedora de la evaluación llevada a cabo de los diferentes modelos presentados al concurso convocado hace cinco años.

La USAF tiene prevista la adquisición de hasta 475 T-X y 120 simuladores para la formación de sus pilotos de caza y bombardeo, si bien por el momento está prevista la adquisición de 351 aviones y 46 simuladores por un importe de 9.200 millones de dólares, incluidos equipos de apoyo en tierra.

Según ha declarado Heather A. Wilson, secretaria de la Fuerza Aérea, se estima que se ahorrarán al menos 10.000 millones de dólares gracias a la competencia del concurso. El coste inicial estimado para los 351 T-X era de 19.700 millones de dólares.

La base aérea conjunta de San Antonio-Randolph (Texas) será la primera que recibirá estos nuevos aviones y simuladores, y posteriormente lo irán haciendo las de Columbus (Mississippi), Laughlin (Texas), Sheppard (Texas), y Vance (Oklahoma).

Por ahora la USAF y Boeing han firmado ya un primer pedido, valorado en 813 millones de dólares para el desarrollo de ingeniería y fabricación de cinco aviones y siete simuladores. El sistema de entrenamiento debería ser declarado operativo en 2024 y completamente operativo en 2034.

Los Northrop T-38C Talon a los que sustituirán estos aviones cuentan ya con cerca de 50 años de servicio y la USAF cuenta con 456 en servicio más otros 35 que se emplean para el entrenamiento de pilotos de la Fuerza Aérea de Alemania que lucen emblemas de la USAF y opran desde la base aérea de Sheppard.

Publicidad

2 COMENTARIOS

Dejá una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.