Llega fin año y surge la necesidad casi imperiosa de realizar un balance sobre el estado y el alcance de nuestros objetivos. Dicho ejercicio implica sincerarse con uno mismo y analizar la relación directa que existió, entre nuestras expectativas y nuestra verdadera capacidad de ejecución.

Si nos tuviésemos que sincerar en relación a las compras presupuestadas durante el 2017 en el Ministerio de Defensa ¿Qué resultados creen que arrojaría?

Desde Zona Militar se realizó un extenso análisis sobre los 11 puntos imprescindibles del presupuesto de defensa argentino para 2017 y ahora nos proponemos analizar sobre,  si dichas expectativas, fueron alcanzadas.

Sin embargo es importante destacar que los presupuestos devengados son una proyección de gastos y que como tal, no necesariamente implica que se cumplan. Muchas veces surgen necesidades, antes no contempladas, que obstaculizan lo proyectado, surgiendo así la necesidad de tapar primero esos baches imprevistos, pero esto no es algo a lo que ya no estemos acostumbrados los argentinos.

En el presupuesto asignado, se puntualizaban 11 puntos indispensables para el correcto funcionamiento de la defensa argentina, a los cuales se les refería un presupuesto propio que incluía desde la compra de nuevos equipos, modernización, misiones en el exterior, la campaña antártica, logística, etc.

Hagamos un repaso sobre cada uno de los puntos del Presupuesto 2017 y veamos si efectivamente se cumplieron:

1- Mantenimiento de Aeronaves para el Servicio de Horas de Vuelo

En el presupuesto se detallaba un monto total de $ 335.134.800,  el cual estaba destinado al aumento en las horas de vuelo vinculado a la necesidad de aumentar la presencia en el espacio aéreo de la Fuera Aérea, pero sobretodo, resucitar el mínimo histórico que se había alcanzado en el último año en materia de entrenamiento y operación de sistemas.

Esto, en parte se logró, puesto que hubo un aumento significativo en la cantidad de horas de vuelo y adiestramiento para la Fuerza Aérea pero hubo una fuerte disminución en las unidades operativas luego de la baja de servicio de los caza Mirage III en el 2015.

Por otro lado, luego de casi 3 años de la baja del Mirage III, no se ha logrado reemplazar a estos aviones dentro de la fuerza y por su parte los A4-AR Fightinghawk, únicos aviones de combate puro en servicio, representan un obstáculo más, puesto que,  su estado de operatividad es menor dado que son viejos y los repuestos no se consiguen. Asimismo, se informó que dichos aviones iban a darse de baja para el 2022 pero dado su estado actual, se espera que la baja sea otorgada para el 2018.

2- Mantenimiento del Material Aeronáutico de la Fuerza Aérea

En este punto se habían asignado $ 4.844.466.165 para solucionar algunos de los grandes problemas operativos en el mantenimiento del material aeronáutico de la Fuerza Aérea Argentina.

Pero, recogiendo un poco lo dicho en el punto anterior, en este tema no hubo avances considerables. El estado de la Fuerza Aérea continua siendo misérrimo dado los pocos aviones que actualmente se encuentran en servicio.

Los A4-AR Fightinghawk son pocos y presentan problemas de sustentabilidad y solo existe un C-130 en condiciones operativas.

3- Remotorización Pucará

Para la remotorización del Pucará se había proyectado un costo de $ 3.832.783.545. Sin embargo, el grado de avance es nulo. Prosigue tan solo el modelo de prueba y lamentablemente hay que enfatizar en que la base del problema radica en la falta de decisión política.

Zona Militar – Pucará A-568

4- Adquisición de Vehículos de Combate Blindados a Rueda

En el 2015 se había anunciado, desde el Ministerio de Defensa, la adquisición de 110 vehículos blindados VN 1 de origen chino obtenidos nuevos a la empresa China North Industries Group.

Pero luego de ese gran anunció, la información respecto de la compra habría dejado de circular, y se comenzó a hablar sobre la búsqueda de unidades ya fabricadas en el sur de Europa, sin embargo, no se avanzó en absoluto.

Lamentablemente, el ejército Argentino continúa  a la espera de una decisión política definitiva para poder contar con este elemento.

5- Avión de Transporte Mediano – Versión Patrulla Marítima

El presupuesto proyectado era de unos $3.363.967.209 y se especulaba sobre dos opciones para la Fuerza Aérea Argentina, por un lado, el C-295M y por el otro, el C-27J Spartan.

Pero no hubo avances, y hasta la fecha no se concretó la compra de ningún avión de transporte.

6- Patrullero Oceánico Multipropósito (OPV)

El proyecto de la POM Patrulleros Oceánicos Multipropósito viene ya de larga data, y la historia es siempre la misma.  En 2005, se inició nuevamente tentativas para adquirir este tipo de buque pero el proyecto fue interrumpido por falta de presupuesto, otra vez.  Para este año se le había asignado un monto de $ 7.200.000.000 para producirlo localmente o comprarlo en el extranjero.

Dadas las necesidades actuales de la Armada, pesca ilegal entre otras,  la adquisición de un OPV sería imperativa para la defensa marítima, pero de las OPV, ni noticias tenemos todavía.

7- Buque Polar

En este punto destacamos la puesta en marcha y modernización del rompehielos ARA Almirante “Irizar”. El presupuesto proyectado fue de  $3.278.800.000 devengado en cuatro años para contar con apoyo para las futuras campañas antárticas.

El “Irizar” ya realizó las pruebas de mar pero hay que destacar que para las campañas logísticas a la Antártida, la Argentina continúa dependiendo del rompehielos, sin poder concretar la compra de un buque nuevo para hacer más eficiente la Campaña Antártica.

8- Buque Multipropósito

Pese a las diversas noticias surgidas en medios masivos de comunicacion al igual que comunicados de parte del astillero ARS, no hubo avances, compras, ni proyectos comenzados.

9- Avión Entrenador Primario/Básico

Se había anunciado la compra de 24 Texan II, de origen estadounidense para la Fuerza Aérea Argentina, pero luego por falta de presupuesto se bajó la cifra a 12 unidades. La reducción fue adjudicada a cuestiones económicas aducidas por el gobierno nacional que no pudo hacer frente a los pagos por 12 unidades por tener un presupuesto acotado.

Por consiguiente, solo llegaron al país 4 unidades T-6C Texan II.

Zona Militar – T-6C Texan II

10 – Aeronaves Supersónicas

Volviendo al punto 1 y 2, La Fuerza Aérea Argentina nunca reemplazó al Mirage III y depende del A-4AR  que se encuentra en estado jadeante.

Se pensó, (expectativa), reemplazar a ambos sistemas con nuevos aviones supersónicos. Al tal motivo, se había asignado un presupuesto de unos $ 5.805.324.435, pero la puja hoy se centra en la compra de nuevos FA-50 y el M-346, así como  también, se puso el ojo en los viejos Kfir y Mirage F-1, ya descartados.

El ministro Aguad declaró recientemente que no tenía en sus planes gastar unos 160 millones por unidad en un avión supersónico.

11- Aeronaves de Transporte Mediano de Mediano Alcance

Como en el punto 5, lamentablemente aquí tampoco hubo avances y no se ha concretado la compra de ninguna unidad.

¿Sorprendido?

Para cerrar, está a la vista que las expectativas vuelan muy por encima de la realidad. La Armada Argentina se encuentra desfalleciendo, y debemos reflexionar, para la posteridad, sobre las causas verdaderas  detrás del estancamiento de los grandes proyectos a los cuales se aspira. Porque la noticia no es nueva, pareciera que nos encontramos dentro de un círculo mañoso del cual la Argentina, como Estado, no puede salir.

La defensa como tema de agenda, es esencial en cualquier país, y en aquellas grandes naciones a las cuales tanto nos gusta admirar, representa la agenda primordial a atender. En la actualidad existen numerosas amenazas y puntos flacos a los cuales no estamos prestando atención como país.

Faltan decisiones políticas, liderazgo y proyección con sustento y promesa de cumplimiento. La defensa del territorio nacional es muy importante, vista desde distintos ángulos, pero la pregunta  central  a formular es  ¿para quién?

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