Según las noticias provenientes de España, el presidente español Rodríguez Zapatero ha decidido aparentemente “congelar” la venta de doce transportes C-295/235MP a Venezuela y paralizar la firma de un acuerdo entre España y Bolivia; aparte que no tiene prevista ninguna reunión con Morales o Chávez en la próxima reunión de Viena de la unión Europea y Latinoamérica. Ambas medidas son consecuencia directa de la nacionalización de los hidrocarburos por parte de Bolivia y que en Europa ven a Chávez como el mentor de tal decisión. Tampoco ha sido del agrado de muchos gobiernos que Morales y Chávez convoquen para el Sábado 13 una “contracumbre” en Viena para manifestar su rechazo a una serie de empresas europeas que consideran que han realizado violaciones a los Derechos Humanos por sus manejos económicos, figurando entre ellas Repsol YPF, Aguas de Barcelona, Unión Fenosa, Meliá o RIU Resorts.
Hasta hace pocos días el gobierno español estaba firme en la decisión de cumplir con los contratos firmados con Venezuela para la provisión de una serie de corbetas y de 12 aeronaves de transporte y patrulla marítima ( 10 C-295 y 2 CN-235MP) a pesar de la oposición del gobierno de EEUU, sin embargo los hechos sucedidos en Bolivia que afectan intereses españoles, estaría llevando a revisar la posibilidad de dar por resueltos dichos contratos.
Política aparte, todos conocemos que no es fácil reemplazar una planta motriz en una aeronave y por una serie tan corta. Esto implica certificar prácticamente de cero ambos modelos y por el momento no hay una planta motriz disponible en peso y potencia que no tenga componentes norteamericanos.
Es claro que cada adquisición de Venezuela tiene sus vueltas, los 50 Mig 29, los Super Tucano, los SU-27, Su-25 y ahora los C-295/235. Todo muy complicado
Hasta hace pocos días el gobierno español estaba firme en la decisión de cumplir con los contratos firmados con Venezuela para la provisión de una serie de corbetas y de 12 aeronaves de transporte y patrulla marítima ( 10 C-295 y 2 CN-235MP) a pesar de la oposición del gobierno de EEUU, sin embargo los hechos sucedidos en Bolivia que afectan intereses españoles, estaría llevando a revisar la posibilidad de dar por resueltos dichos contratos.
Política aparte, todos conocemos que no es fácil reemplazar una planta motriz en una aeronave y por una serie tan corta. Esto implica certificar prácticamente de cero ambos modelos y por el momento no hay una planta motriz disponible en peso y potencia que no tenga componentes norteamericanos.
Es claro que cada adquisición de Venezuela tiene sus vueltas, los 50 Mig 29, los Super Tucano, los SU-27, Su-25 y ahora los C-295/235. Todo muy complicado