Pluna: falla en motor determinó baja de US$ 1,3: en segundo avión
Cada vez hay menos dinero para pagarle a los acreedores de la exaerolínea de bandera
Mientras espera por la resolución sobre cuál es la calidad de acreedor del Estado en el concurso de Pluna S.A, la sindicatura que tramita la liquidación de la aerolínea de bandera que cerró en julio de 2012 concretó esta semana la venta del segundo avión CRJ 900 a la empresa estadounidense Strategic Air Finance (SAF). La aeronave partió del aeropuerto de Carrasco el miércoles 18 de febrero al mediodía. Antes, el 12 de enero, SAF se había llevado el primer avión, por el que pagó US$ 11 millones.
Sin embargo, por el segundo la empresa abonó US$ 9,7 millones. La diferencia obedeció a que en los motores de esa aeronave se detectaron fallas que llevaron a que se acordara bajar el precio en US$ 1,3 millones, según dijo a El Observador el contador Gabriel Ferreira, integrante de la Asociación Uruguaya de Peritos (AUPE) que ejerce la sindicatura en el concurso judicial de Pluna S.A.
Inicialmente, el acuerdo entre AUPE y SAF implicaba que la empresa pagara US$ 11 millones por cada uno de los siete aviones. Eso hacía que al concurso ingresaran US$ 77 millones que de todos modos no alcanzan para cubrir las deudas con los acreedores de Pluna S.A, que suman US$ 170 millones.
Sin embargo, luego se detectaron fallas en 9 de los 14 motores (cada avión tiene dos) y eso determinó que se rebajaran US$ 6,3 millones del precio total. Así, al concurso finalmente ingresarán US$ 70,7 millones lo que arroja una diferencia de US$ 100 millones para saldar las deudas con todos los acreedores de Pluna S.A.
Ferreira informó que el objetivo es que el tercer avión se vaya del aeropuerto de Carrasco en marzo, con la intención de que en mayo “ya no quede ningún avión en Uruguay”, según comentó el síndico.
Por la venta de los dos aviones concretadas hasta ahora, al concurso de Pluna S.A ingresaron US$ 20,7 millones. Esos fondos fueron depositados en una cuenta bancaria a nombre de la jueza que tramita la liquidación de la empresa, Teresita Rodríguez Mascardi, quien es la única persona autorizada para disponer de ese dinero, según explicó Ferreira.
Pluna Ente
A fines de 2014 Rodríguez Mascardi ratificó la posición de la sindicatura y entendió que los créditos que Pluna Ente Autónomo tiene contra Pluna S.A son subordinados y no privilegiados. En términos menos técnicos eso implica que la entidad estatal que era accionista minoritario en Pluna S.A casi no tendría chance de cobrar debido a que iría al final de la lista general de acreedores.
Ferreira dijo que Pluna Ente Autónomo apeló esa resolución de la jueza y reclamó que sus créditos sean considerados privilegiados, en cuyo caso tendría prioridad y sí se aseguraría el cobro. El síndico explicó que un tribunal de apelaciones deberá resolver sobre la situación del crédito de Pluna Ente Autónomo, cosa que será “clave” para el desarrollo del concurso.
Según lo que establece la ley concursal, los créditos laborales tienen prioridad y están primeros en la cola para cobrar, siempre y cuando no haya alguno post concursal o con prenda sobre los bienes a liquidar. Después se ubican en la lista de prioridades los créditos quirografarios o comunes, y finalmente los subordinados, categoría en la que la jueza Rodríguez Mascardi ubicó a Pluna Ente Autónomo.
Además del exsocio estatal de la aerolínea, entre los acreedores hay varias dependencias públicas que eran proveedoras de Pluna S.A como ANCAP, UTE, ANTEL o el Correo que podrán recibir menos de un tercio de lo reclamado (28,9%), de acuerdo con información surgida del expediente concursal que procesó y publicó el Equipo de Datos de El Observador en setiembre del año pasado.
En total son US$ 14,7 millones que volverían a las arcas del Estado por medio de los entes y empresas públicas, aunque quedarían sin cobrar unos US$ 36,2 millones. Eso pasaría, al menos, con los fondos generados por la venta de los siete Bombardier CRJ 900, el único activo importante de la aerolínea liquidada.
Los acreedores privados tampoco podrán cobrar todos, más allá de que 80% del dinero que ingresará al concurso gracias a la venta de las siete aeronaves se destinará a ellos.
La gran dificultad radica en que las deudas reclamadas son tan elevadas y variadas que no será posible cubrirlas todas.
Las deudas
Acreedores. La verificación de créditos realizada el año pasado por la sindicatura que tramita el concurso de Pluna S.A concluyó que hay un total de 403 acreedores que tienen derecho a cobrar unos US$ 170 millones.
Estado. Entre los acreedores de la aerolínea hay varias dependencias estatales, como Pluna Ente Autónomo (que era accionista minoritaria de la empresa), ANCAP, UTE y ANTEL, que a lo sumo podrán cobrar US$ 14,7 millones.
Privados. Ente los acreedores privados hay varios operadores logísticos y hasta una farmacia.
el observador
Cada vez hay menos dinero para pagarle a los acreedores de la exaerolínea de bandera
Mientras espera por la resolución sobre cuál es la calidad de acreedor del Estado en el concurso de Pluna S.A, la sindicatura que tramita la liquidación de la aerolínea de bandera que cerró en julio de 2012 concretó esta semana la venta del segundo avión CRJ 900 a la empresa estadounidense Strategic Air Finance (SAF). La aeronave partió del aeropuerto de Carrasco el miércoles 18 de febrero al mediodía. Antes, el 12 de enero, SAF se había llevado el primer avión, por el que pagó US$ 11 millones.
Sin embargo, por el segundo la empresa abonó US$ 9,7 millones. La diferencia obedeció a que en los motores de esa aeronave se detectaron fallas que llevaron a que se acordara bajar el precio en US$ 1,3 millones, según dijo a El Observador el contador Gabriel Ferreira, integrante de la Asociación Uruguaya de Peritos (AUPE) que ejerce la sindicatura en el concurso judicial de Pluna S.A.
Inicialmente, el acuerdo entre AUPE y SAF implicaba que la empresa pagara US$ 11 millones por cada uno de los siete aviones. Eso hacía que al concurso ingresaran US$ 77 millones que de todos modos no alcanzan para cubrir las deudas con los acreedores de Pluna S.A, que suman US$ 170 millones.
Sin embargo, luego se detectaron fallas en 9 de los 14 motores (cada avión tiene dos) y eso determinó que se rebajaran US$ 6,3 millones del precio total. Así, al concurso finalmente ingresarán US$ 70,7 millones lo que arroja una diferencia de US$ 100 millones para saldar las deudas con todos los acreedores de Pluna S.A.
Ferreira informó que el objetivo es que el tercer avión se vaya del aeropuerto de Carrasco en marzo, con la intención de que en mayo “ya no quede ningún avión en Uruguay”, según comentó el síndico.
Por la venta de los dos aviones concretadas hasta ahora, al concurso de Pluna S.A ingresaron US$ 20,7 millones. Esos fondos fueron depositados en una cuenta bancaria a nombre de la jueza que tramita la liquidación de la empresa, Teresita Rodríguez Mascardi, quien es la única persona autorizada para disponer de ese dinero, según explicó Ferreira.
Pluna Ente
A fines de 2014 Rodríguez Mascardi ratificó la posición de la sindicatura y entendió que los créditos que Pluna Ente Autónomo tiene contra Pluna S.A son subordinados y no privilegiados. En términos menos técnicos eso implica que la entidad estatal que era accionista minoritario en Pluna S.A casi no tendría chance de cobrar debido a que iría al final de la lista general de acreedores.
Ferreira dijo que Pluna Ente Autónomo apeló esa resolución de la jueza y reclamó que sus créditos sean considerados privilegiados, en cuyo caso tendría prioridad y sí se aseguraría el cobro. El síndico explicó que un tribunal de apelaciones deberá resolver sobre la situación del crédito de Pluna Ente Autónomo, cosa que será “clave” para el desarrollo del concurso.
Según lo que establece la ley concursal, los créditos laborales tienen prioridad y están primeros en la cola para cobrar, siempre y cuando no haya alguno post concursal o con prenda sobre los bienes a liquidar. Después se ubican en la lista de prioridades los créditos quirografarios o comunes, y finalmente los subordinados, categoría en la que la jueza Rodríguez Mascardi ubicó a Pluna Ente Autónomo.
Además del exsocio estatal de la aerolínea, entre los acreedores hay varias dependencias públicas que eran proveedoras de Pluna S.A como ANCAP, UTE, ANTEL o el Correo que podrán recibir menos de un tercio de lo reclamado (28,9%), de acuerdo con información surgida del expediente concursal que procesó y publicó el Equipo de Datos de El Observador en setiembre del año pasado.
En total son US$ 14,7 millones que volverían a las arcas del Estado por medio de los entes y empresas públicas, aunque quedarían sin cobrar unos US$ 36,2 millones. Eso pasaría, al menos, con los fondos generados por la venta de los siete Bombardier CRJ 900, el único activo importante de la aerolínea liquidada.
Los acreedores privados tampoco podrán cobrar todos, más allá de que 80% del dinero que ingresará al concurso gracias a la venta de las siete aeronaves se destinará a ellos.
La gran dificultad radica en que las deudas reclamadas son tan elevadas y variadas que no será posible cubrirlas todas.
Las deudas
Acreedores. La verificación de créditos realizada el año pasado por la sindicatura que tramita el concurso de Pluna S.A concluyó que hay un total de 403 acreedores que tienen derecho a cobrar unos US$ 170 millones.
Estado. Entre los acreedores de la aerolínea hay varias dependencias estatales, como Pluna Ente Autónomo (que era accionista minoritaria de la empresa), ANCAP, UTE y ANTEL, que a lo sumo podrán cobrar US$ 14,7 millones.
Privados. Ente los acreedores privados hay varios operadores logísticos y hasta una farmacia.
el observador
