De Armyreconocimiento:
"España apunta a un portaaviones equipado con catapulta con Navantia mientras la OTAN insta a una mayor inversión en defensa"
Spain Eyes Catapult-fitted Aircraft Carrier with Navantia as NATO Urges Greater Defense Investment
armyrecognition.com
El portaaviones propuesto operará hasta 30 aviones de combate y será propulsado de forma convencional, evocando el tamaño y perfil del Charles de Gaulle de Francia, sin adoptar propulsión nuclear. El diseño tiene como objetivo permitir el lanzamiento y la recuperación de cazas avanzados de ala fija como el F-35C, el Rafale M y, potencialmente, futuras versiones derivadas del FCAS. Paralelamente, España planea adquirir un buque LHD adicional, probablemente siguiendo la configuración del Juan Carlos I, lo que sugiere una estructura de aviación naval sin precedentes compuesta por tres buques.
Estratégicamente, las implicaciones son de gran alcance. Un portaaviones CATOBAR español elevaría el papel de España dentro de las fuerzas navales de la OTAN y reforzaría las posturas de disuasión en el Mediterráneo y el Atlántico. Sigue ambiciones similares por parte de Francia e Italia y podría actuar como catalizador para la cooperación regional en portaaviones o la interoperabilidad entre grupos de combate. En comparación con los LHD de rampa de despegue o las doctrinas centradas en STOVL, las plataformas CATOBAR ofrecen mayor alcance, capacidad de carga útil más pesada y acceso a una gama más amplia de aeronaves, incluidos posibles drones AEW&C o activos de reabastecimiento en vuelo.
El giro de España hacia un portaaviones equipado con sistema CATOBAR representa más que una modernización naval: es una declaración de intención estratégica, ambición industrial y evolución doctrinal. De concretarse, este buque podría convertir a España en la tercera nación europea en contar con un portaaviones CATOBAR de capacidad completa, cerrando la brecha de poder aéreo naval en el continente y reforzando la preparación de la OTAN para enfrentarse a conflictos navales de alta intensidad en un mundo cada vez más multipolar