Nilda Garré echó al jefe de Inteligencia del Ejército

CONDORPLT

Colaborador
gato_ar dijo:
La SIDE desmintió públicamente, mediante un comunicado, la existencia de esas escuchas.

Y esta info, repito que es pública. :mad:

La podemos creer o no. Pero está desmentida.

¿Y ahora a quien lo van? Al Subjefe Pozzi?: ¿SI?

Y mejor que siga Bendini, porque si "ESE":D en el que estoy pensando toma la manija de la Jefatura del EA, muchos van a extrañar al que descolgó los cuadritos.

Saludos

gato

Quien Gato?? Acá se acabaron los guapos, te lo aseguro..
 
DICEN QUE EL DESPLAZAMIENTO DE MONTERO FUE POR "RAZONES DE MEJOR SERVICIO"

Defensa justificó el relevo y negó que haya escuchas



El Ministerio de Defensa aseguró ayer que el desplazamiento del jefe de Inteligencia del Ejército, general Osvaldo Montero, se debió a "razones de mejor servicio". Mediante un comunicado, también se desmintió la existencia de escuchas de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).

"El Ministerio de Defensa precisa que el reciente relevo del cargo de un oficial superior del Ejercito fue determinado por razones de mejor servicio, en el marco de las funciones específicas de las Fuerzas Armadas", se reseña la nota difundida ayer.

La cartera de Nilda Garré también afirmó que "desmiente versiones circulantes acerca del uso de información supuestamente suministrada por otros organismos del Estado". E insistió: "La determinación (en contra de Montero) fue tomada, en el ámbito de las atribuciones de esta jurisdicción, a partir del análisis de información propia que, obviamente, se obtiene de manera habitual en el respeto de las normas vigentes y de las garantías constitucionales".

El comunicado está en línea con el emitido el viernes por el titular de la SIDE, Héctor Icazuriaga, que rechazó que la secretaría a su cargo hubiera realizado las grabaciones que derivaron en el desplazamiento de Montero.

Esa baja la decidió la ministra Garré el 9 de noviembre pasado, aunque se mantuvo en reserva hasta que se conoció el caso la semana pasada. Montero era el titular de la jefatura II Inteligencia del Ejército desde hacía cinco meses. El motivo de su cese fue una serie de desgrabaciones de escuchas telefónicas en las que el militar formulaba fuertes críticas a Garré y a su conducción.

Con reserva de su identidad, una fuente de Defensa explicó a Clarín que Montero no daba información sensible en esas conversaciones, sino que describía "planes y cosas de la gestión de Garré que molestan a las fuerzas" para "generar estados de ánimo adversos y minar su continuidad".

Entre los contactos de Moreno se cuentan un ex funcionario menemista y la directora nacional de Inteligencia, Verónica Fernández Sagari, que depende del ministro del Interior, Aníbal Fernández. Candidato a suceder a Garré -finalmente designado en Justicia-, Fernández desmintió siquiera conocer a Montero. Otras fuentes militares, en cambio, explicaron que Fernández Sagari era el vínculo entre el militar desplazado y el ministro.

Montero habría mantenido esas polémicas conversaciones telefónicas desde un celular intervenido ilegalmente -sin la necesaria orden judicial- por la SIDE. El aparato se lo habría prestado un amigo y director de la secretaría como canal seguro de comunicación. Esto es lo que desmintió Icazuriaga.
 
Forzosamente ahora lo tienen que negar, porque sino estarìan admitiendo un delito. Garrè antes de que asuma su nueva jefa polìtica ya la metiò en un lìo, l dejar trascender a la prensa que las pruebas que tenìan eran escuchas telefònicas, a lo cual le recordarò (el propio Anìbal Fernandez) de manera sarcàstica que no podìa ser porque las escuchas son ilegales, y al dìa siguiente la SIDE tuvo que salir a desmentir dicha escucha.

Ademàs de no ser idònea para el cargo, comete torpezas que sus propios colegas le recuerdan que no puede usar pùblicamente una escucha ilegal como prueba para echar a un funcionario.
 
Van por Bendini

Echaron al jefe de Inteligencia del Ejército. Las internas.



Enfrentados. Bendini podría ser removido también de su cargo. Garré no le tiene confianza.

El jefe de Inteligencia del Ejército, Osvaldo Montero, sufrió en carne propia el peso omnipresente de la SIDE. Por unas escuchas telefónicas realizadas desde la central de espías, la ministra de Defensa, Nilda Garré, lo desplazó de su cargo. Montero participaba de una operación para reemplazarla en el nuevo Gabinete cristino y habría mantenido varios diálogos con la directora nacional de Inteligencia Criminal, Verónica Fernández Sagari, en los que intentaba desestabilizar a Garré, según las explicaciones del Gobierno. Pero el desplazamiento de Montero también salpica al jefe del Ejército, Roberto Bendini, quien tendría los días contados en su cargo. Garré, que cuenta con el apoyó del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quiere sacarse de encima a Bendini, aliado del ministro de Planificación, Julio De Vido y enemigo de Fernández. La guerra de los ministros se coló en el mundo militar y comienza un nuevo enfrentamiento.

Tensión. Montero siempre fue fiel a Bendini. Era un hombre de su entorno pero tenía una buena relación con la ministra. Dicen que ella le tenía confianza. Entonces, ¿por qué era espiado desde la SIDE? El ministro del Interior, Aníbal Fernández, a quien en las escuchas se lo mencionaba como el sucesor deseado de Garré, salió a decir que pinchar teléfonos “es ilegal” y que los diarios habían inventado todo. Sin embargo, el CD con las escuchas de Montero habría llegado a las manos de Garré a través de un jefe de la SIDE.

En el ámbito castrense aseguran que su remoción es un golpe contra Bendini, a quien Garré también quiere afuera del ejército. Es que Bendini nunca le respondió a la ministra. Su lazo en el Gobierno era el ministro de Planificación, Julio De Vido, quien está enfrentado con el protector de Garré, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández. Un asesor del sector castrense le confió a NOTICIAS el trasfondo del desplazamiento de Montero: “Garré ya bajó a uno y ahora va por Bendini. El telón de este conflicto es la sórdida pelea que mantienen De Vido y Fernández que se traslada a todos los ámbitos donde se disputa poder”.


El ninguneo a Bendini se hizo evidente cuando trascendió la noticia del desplazamiento de su subordinado. La decisión se tomó cuando se encontraba en Brasil en la Conferencia de Ejércitos Americanos y, según el relato de un funcionario de Defensa con llegada a la ministra, nadie le comunicó la determinación.

El reemplazante. Para ocupar el lugar de Bendini, Cristina Kirchner tiene en mente al general Gustavo Schurlein, a quien los K conocen de su paso por la XI Brigada Mecanizada, en Río Gallegos, cuando Kirchner era gobernador de Santa Cruz. Schurlein fue el juez militar que, en mayo de 2006, juzgó a los militares que en Plaza San Martín reivindicaron el terrorismo de Estado y fueron sancionados. Tiene buena llegada a Cristina y además su esposa Liliana es muy amiga de la futura Presidenta.

La partida de Bendini por ahora no se ha definido, pero el tironeo del poder ya se hace sentir. La guerra de los dos ministros más poderosos del Gobierno suma una nueva batalla. Y parece no tener fin.

Revista Noticias
 
Guarda garre no jugues con fuego que te puede salir mal y te pueden meter tanques en la puerta del ministerio de defensa y por lo mal que viene la FAA y la ARA te van a sobrebolar los A-4 y la imara te va tomar el edificio.
 
sebastian_porras [B dijo:
El reemplazante.[/B] Para ocupar el lugar de Bendini, Cristina Kirchner tiene en mente al general Gustavo Schurlein

Este G.S. CONDOR

Saludos

gato
 
S

SnAkE_OnE

nemesis dijo:
Guarda garre no jugues con fuego que te puede salir mal y te pueden meter tanques en la puerta del ministerio de defensa y por lo mal que viene la FAA y la ARA te van a sobrebolar los A-4 y la imara te va tomar el edificio.


me alegro que seas de uno de los pocos que todavia piensan en esas cosas
 
SnAkE_OnE dijo:
me alegro que seas de uno de los pocos que todavia piensan en esas cosas
n ose si fue una ironia lo que me dijiste pero hace bue rato que vengo pensando en que esto va a llegar a una implosion , llegando a un levantamiento militar , desde las partes mas altas de las tres cupulas ya sea FAA , ARA , EA se acuerdan de la madre de garre y perdon por la expresion pero es asi
 
S

SnAkE_OnE

levantamiento militar? jajajja ni los militares piensan en esas cosas mas que algun trasnochado...hay que dejarse de joder con eso
 
SnAkE_OnE dijo:
levantamiento militar? jajajja ni los militares piensan en esas cosas mas que algun trasnochado...hay que dejarse de joder con eso
capas que me exprese mal, no para co nel gobierno si no para con el ministerio de defensa , se le pueden llegar a revelar , pero que se puede llegar a armar se puede llegar a armar , el denigramiento tiene un limite en que va na explotar , si a vos te dicen que n oservis para nada , que sos una mierd@ , que sos lo otro etc , algun dia te vas a pudrir , y sabiendo que tenes mas poder que el que te denigra
 
S

SnAkE_OnE

no se le van a rebelar a nadie, a lo sumo putearan, les daran la baja o el pase a retiro y gracias..lo otro que planteas es lisa y llanamente una locura
 
SnAkE_OnE dijo:
no se le van a rebelar a nadie, a lo sumo putearan, les daran la baja o el pase a retiro y gracias..lo otro que planteas es lisa y llanamente una locura
es que me nace del corazon snake que queres que te diga , ver tanta denigracion para con las fuerzas armadas me da una bronca barbara :(
 
S

SnAkE_OnE

nemesis dijo:
es que me nace del corazon snake que queres que te diga , ver tanta denigracion para con las fuerzas armadas me da una bronca barbara :(


no todo es tan simple y eso mucho menos es la solucion, nadie con 2 dedos de frente se le ocurriria
 
Tiene que ser alguien que sepa el que ocupe este cargo...pero pregunto yo, y perdonen la ignorancia, cual es el titulo de la Garre?, licenciada en algo?, ex-fuerzas especiales?? que experiencia tiene como para decidir que es lo mejor para las FFAA, aparte de la base democratica y bla bla bla
 

Derruido

Colaborador
SnAkE_OnE dijo:
no se le van a rebelar a nadie, a lo sumo putearan, les daran la baja o el pase a retiro y gracias..lo otro que planteas es lisa y llanamente una locura
Snake, si vos tenés un perro, lo podés cag.. a palos, matar de hambre, molerlo nuevamente a palos, hacerlo morir de frió. Te va a seguir siendo fie:cool: :cool: :cool: l, pero un día puede hacer dos cosas.:rolleyes:

1- Si te entran los ladrones, bueno se hará el dormido, dejara que te roben todo, te violen a la jermu y se lleven a tus hijas.:rolleyes:

2- Se levante con la loca y te termina mordiendo hasta matarte, sobre todo si es un Dogo.:rolleyes: :rolleyes: :rolleyes:

La paciencia es una virtud:cool: , pero también tiene un límite.:rolleyes:

Salute
Derru
 

Derruido

Colaborador
LA OPINION DE MORALES, LOPEZ MURPHY, TOMA Y JAUNARENA


La oposición denuncia irregularidades en el caso del militar echado
Cuestionan las escuchas que habrían perjudicado al jefe de Inteligencia del Ejército. Por: Marcelo Helfgot

La oposición detectó una ristra de irregularidades en la hoja de ruta que derivó en la destitución de Osvaldo Montero, jefe de Inteligencia del Ejército, a partir de escuchas telefónicas que lo habrían descubierto en un complot contra la ministra de Defensa, Nilda Garré.

En el Congreso, fue el senador Gerardo Morales, jefe nacional de la UCR, el que hizo punta en el reclamo de la "inmediata presencia" de Garré en las comisiones de Defensa de ambas Cámaras, para explicar un episodio que consideró "por demás confuso". Según el legislador, la ministra "tiene que aclarar por qué y de quién tiene escuchas telefónicas ajenas a cualquier causa judicial". Morales destacó que "la ley de inteligencia prohíbe las pinchadura de teléfonos que no sean autorizadas por la Justicia". Y opinó que Garré trató "como un opositor interno del Frente para la Victoria" al general separado de la conducción del área de Inteligencia.

Fuera del Parlamento, el más duro fue el peronista anti K Miguel Toma. Titular de la SIDE con Eduardo Duhalde y coautor de la Ley de Inteligencia, de 2001, Toma aseguró que en la secuencia de la separación del oficial "se cometieron delitos en cadena". El ex funcionario enumeró las normas que pudieron ser violadas: escuchas telefónicas sin permiso judicial o uso de escuchas permitidas para fines distintos a los autorizados, violación del secreto de Estado (al difundirse que la operación se hizo desde la SIDE) e incumplimiento de los deberes de funcionario público, por no haberse denunciado la eventual conspiración contra una ministra como violación a la Ley de Defensa de la Democracia.

Con todo, Toma admitió que los organismos de espionaje están habilitados para hacer escuchas sin orden judicial "cuando cumplen tareas de contrainteligencia". Pero aclaró que las mismas se justifican cuando se sospecha de amenazas externas. "Por lo que se sabe hasta ahora, no fue esa la finalidad con la que se usaron las escuchas", sostuvo.

"Si era lícita la obtención de la información y si efectivamente había una conspiración de un general que intenta evitar una decisión soberana como definir un puesto político, no se cumplió con la obligación de hacer una denuncia. Y si conspiraba no hay que echarlo, sino llevarlo a la Justicia", reflexionó Toma.

Para Ricardo López Murphy, primer ministro de Defensa de la Alianza y ex candidato presidencial de Recrear, "el episodio es tan raro que no se sabe si fue una operación de contrainteligencia o el Gobierno espía a todo el mundo". Enseguida comentó: "Si sucede lo segundo, estamos ante un grave problema".

López Murphy agregó: "Tengo pocos elementos de juicio, pero hay varios hechos que me llaman la atención. Por ejemplo, no me explico por qué el jefe de Estado Mayor del Ejército no dice nada en un tema que involucra a su segundo. El número dos no hace nada sin que lo sepa el uno".

Distinta es la visión de Horacio Jaunarena, un radical orgánico que tiene el récord de haber ocupado la cartera de Defensa con Raúl Alfonsín, Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde: "Es un asunto sin importancia institucional, da pena que se gaste tiempo en estas cosas cuando el verdadero problema de las Fuerzas Armadas es el estado de debilidad en el que se encuentran".

Jaunarena insistió en que "el Ejército tiene municiones para un solo día de combate, hay récord de pedidos de baja y la ministra no dice nada". Y admitió que "las escuchas son cosa de todos los días, se usa la contrainteligencia para espiarse entre las máximas autoridades". Además, consideró "ridículo" que se considere que Garré fue ratificada "porque se descubrió que había gente operando en su contra".

Se sabe que el origen de las sospechas contra el destituido jefe de Inteligencia era que conspiraba para que Aníbal Fernández reemplazara a Garré en el futuro Gabinete de Cristina. Finalmente, la ministra seguirá en su cargo y el ministro pasará de Interior a Justicia, llevándose la estratégica Secretaría de Seguridad


Me parece que a Nilda le han hecho pisar el palito y entró con todo.:rolleyes: :rolleyes: :rolleyes: :rolleyes: :rolleyes: :rolleyes:
 

Derruido

Colaborador
Las intrigas que ya complican a Cristina
Por Carlos Pagni
Para LA NACION
Lunes 26 de noviembre de 2007 |
Cristina Kirchner todavía no asumió su gobierno, pero ya debe lidiar con una solapada crisis en su gabinete.

¿Cómo hará la ministra de Defensa, Nilda Garré, para convivir con su colega de Justicia, Aníbal Fernández, que fue acusado de integrar, junto con el ex jefe de Inteligencia del Ejército general Osvaldo Montero, una red de conspiradores que pretendía desplazarla del cargo? ¿Con qué ánimo participará del mismo equipo que Garré el jefe de la SIDE, Héctor Icazuriaga, después de que ella lo señaló como responsable de las intervenciones telefónicas a través de las cuales se detectó el complot de Fernández y Montero? ¿Con qué argumentos justificará Icazuriaga ante los Kirchner que Garré se enteraba de las tormentas antes que ellos? ¿Cómo hará Roberto Bendini para seguir al frente del Ejército bajo la sospecha de haber alentado las maquinaciones de su jefe de Inteligencia?

En cada uno de estos interrogantes está el germen de un conflicto que corroe desde ahora la gestión de la nueva presidenta. De todos modos, bien se podría esperar de ella la capacidad que exhibió su esposo para administrar conflictos cada vez más velados y más potentes, como el de Alberto Fernández y Julio De Vido.

El Ministerio de Defensa y la cúpula del Ejército explicaron, con gran soltura, que el general Montero había sido pasado a retiro porque en las conversaciones telefónicas que le escuchaba la SIDE aparecían comentarios inconvenientes. Al parecer, es cierto: Montero hablaba pestes de Garré. Lo que necesita todavía una explicación es con qué cobertura institucional el organismo que conduce Icazuriaga realizaba esas escuchas.

Ese detalle es tan evidente que el propio secretario de Inteligencia se encargó de desmentir esas prácticas ilegales. La ministra Garré esperó hasta el sábado para avalarlo. Hasta donde llegan las informaciones de este intrincado enredo, los dos tienen razón. No fue la SIDE la que escuchaba las conversaciones de Montero. Fue personal de ese organismo que, al parecer, ocultaba a sus jefes directos la naturaleza de sus operaciones. En el Ministerio del Interior dejaron trascender a la prensa el nombre de Fernando Pocino. Allí creen que fue este agente de inteligencia quien realizaba escuchas al servicio de Garré, no de Icazuriaga ni de Kirchner. Por eso fue la ministra la que entregó las grabaciones al Presidente y no al revés.

Dada la naturaleza de su profesión, las veces que Pocino apareció en los diarios ya fueron demasiadas. El periódico Perfil le dedicó una producción fotográfica el verano pasado, al salir del agua y mientras tomaba sol en Pinamar. Le adjudicó después ser el responsable de una unidad de seguimiento de políticos opositores y periodistas. También lo señaló como el funcionario que proveyó a la prensa del antiguo legajo del diputado Juan José Alvarez en su paso por la SIDE.

Aunque no hubo desmentidas, es imposible verificarlo. En cambio, está certificada la vinculación de Pocino con el Centro de Estudios Legales y Sociales, que preside Horacio Verbitsky, para el que hizo algunos trabajos académicos, junto con el actual jefe de la Policía Aeronáutica, Marcelo Saín, y el secretario de Seguridad Interior, Eduardo Tibiletti, quien en teoría reporta al ministro Fernández, blanco de las investigaciones de aquel agente de inteligencia.
En el Gobierno desligan al vocero presidencial, Miguel Núñez, de esta trama. Creen necesaria la aclaración porque es quien mejor conoce a Pocino en el círculo de la próxima presidenta: el trato entre ambos se remontaría a cuando el espía prestaba servicios en el Congreso y Núñez se desempeñaba como jefe de prensa de la diputada Kirchner. Tiempos en que el entonces gobernador de Santa Cruz y su esposa se enteraron de que la SIDE los tenía como objetivos en la provincia.

Funcionarios que trabajan en la Casa Rosada y que serían independientes de esta trama fantasean con una segunda intención del agente Pocino: promover a su amiga Garré a la jefatura de Inteligencia y ubicarse él mismo en el segundo escalón de ese organismo. De ser así, Garré le hacía a Icazuriaga lo que Fernández le hacía a ella.

Balance provisional: en algún momento Garré deberá explicarle a Kirchner la razón por la cual se sirvió de voluntarios informales de la SIDE para escuchar las conversaciones del jefe de la inteligencia militar. También Icazuriaga tendrá que justificar ante el Presidente el comportamiento de subordinados suyos, como Pocino, si es que se verifica que prestan servicios fuera de todo marco institucional. ¿O Kirchner y su "Señor 5" estaban al tanto de esos movimientos y lo ocultaban?



* * *


Quedan todavía dos funcionarios en problemas. Uno es el ministro del Interior, Fernández: negó conocer al general Montero, pero admitió que su jefa de Inteligencia Criminal, Verónica Fernández Sagari, tenía contacto con él. Fuentes cercanas al Ejército afirman que no habría que reducir a esa funcionaria el vínculo del ministro con la conducción de la fuerza. Sostienen que el intercambio entre Fernández y varios militares era mediado por amigos comunes. "En el Ejército teníamos expectativas muy concretas con la llegada de Aníbal a Defensa; por ejemplo, que mejorara la situación de los camaradas a los que Garré mandó a cárceles comunes", confesó un oficial retirado. Misterios de este mundo: al parecer hay un sastre, en la calle Florida, que conoce los secretos de esta historia.

El otro de quien el Presidente espera explicaciones es el general Bendini, jefe del Ejército. En la Casa Rosada sospechan que él avalaba el reemplazo de Garré por Fernández, en el que estaban empeñados Montero y los amigos del ministro del Interior. Los Kirchner no pretenden que Bendini le jure lealtad a Garré. Ya es tarde para eso. Sólo quieren una explicación de por qué al frente de la jefatura de Inteligencia de la fuerza designó a alguien tan inexperto como Montero. A diferencia de su segundo, el coronel César Milani, el general pasado a retiro es un artillero ajeno a la especialidad. Además, sus problemas con la ministra venían de antiguo: desde que Garré comenzó a exigir al Ejército los listados de funcionarios civiles de Inteligencia. Montero se negó a proveerlos, según sus amigos, por razones de Estado. Según sus detractores, para ocultar alguna irregularidad en la distribución de esos fondos reservados.
 
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