Interesante reportaje.
Fuente: http://www.noticiasyprotagonistas.com/noticias/23108-argentina-for-export/
29.11.2009 | Cuando escuchamos hablar de científicos que diseñan plantas nucleares de baja potencia, o de infraestructuras que posibiliten la exploración tripulada a la Luna, no solemos pensar que se puede tratar de compatriotas exitosos. Pero nos equivocamos.
Héctor Otheguy es gerente general de INVAP. Afirma orgulloso que desde la Argentina, con recursos escasos comparados con otros países, se pueden lograr mejores resultados. INVAP ha desarrollado el Proyecto Carem (Central Argentina de Elementos Modulares), una planta nuclear de baja potencia concebida con un diseño innovador de última generación.
Noticias & Protagonistas: Ya están disponibles los fondos para el proyecto CAREM ¿Existe un programa de trabajo para que sea viable la producción en serie de los módulos?
Héctor Otheguy: El proyecto es que el primer módulo esté en funcionamiento dentro de cinco años. Participan del mismo la NASA y la Nucleoeléctrica Argentina, que es la empresa operadora de las centrales argentinas. Entonces se aúna la experiencia de la CNEA en todo lo que es tecnología nuclear, con la de haber operado centrales de potencia de generación eléctrica por más de 35 años desde que empezó Atucha 1, y otros 25 años de experiencia en Embalse. Reunimos así bastantes años-hombre de experiencia, imprescindibles en proyectos de estas características.
N&P: ¿Cómo está funcionando el reactor vendido a Australia, y cómo está la situación respecto del posible reactor para Holanda?
H.O: El reactor de Australia está funcionando de acuerdo a lo previsto, a plena potencia, produce radioisótopos, una vez por mes se para un par de días para el mantenimiento programado. Estamos conformes, y lo importante es que lo están nuestros clientes. Ellos obtuvieron la habilitación para la planta de radioisótopos, que es complementaria del reactor; y en un momento, en que hay escasez en el mundo porque han parado varios reactores. Es bueno y oportuno que lo puedan tener a plena marcha. Respecto a Holanda estamos esperando el resultado de la licitación; es una decisión de las autoridades holandesas, pero creemos que antes de fin de año tendremos la noticia.
N&P: Hace unos meses, un ministro de la Corte Suprema afirmó que en la Argentina debería dejar de llover droga. ¿Cómo esté el tema de los radares del INVAP?
H.O: Hay dos proyectos separados. Uno esta en plena producción, se instalaron siete, los de control de tráfico aéreo o “secundarios” que ayudan a las autoridades a organizar mejor el tráfico de aviones comerciales, de carga, privados, todos los que deben ser ubicados por estos sistemas. El proyecto del control de frontera e ilegales se maneja con los radares 3D, que detectan los aviones independientemente de la voluntad de los pilotos que no quieren ser detectados. Estamos bien avanzados en el desarrollo, tenemos un primer prototipo de corto alcance, 200 millas marinas, unos 350 a 400km desde el lugar del radar a la distancia máxima, que estaría listo para el año que viene.
Nuestro trabajo está en plena marcha. Tenemos siete radares funcionando, hay otros cuatro más que prevé el contrato firmado, y existe otro contrato por once más. Para septiembre de 2010 todo el país podría estar radarizado, es uno de los objetivos.
Para esa fecha ya estaremos con un prototipo en prueba del de 3D donde Fuerza Aérea lo decida, habiendo arrancado con la fabricación de cinco o seis, según pida Defensa. Está todo en marcha, los resultados son alentadores
Ingeniero Pablo de León
El ingeniero aeroespacial argentino Pablo de León ganó el concurso organizado por la Agencia Espacial Norteamericana (NASA) para el desarrollo de una infraestructura que posibilite la exploración tripulada a la Luna, que se espera para dentro de unos nueve años.
Noticias & Protagonistas: ¿Cuánto tiempo llevan los prototipos nuevos que has presentado, y que demuestran la decisión política de los Estados Unidos de volver a la carrera espacial y colocar una estación permanente en la Luna?
Pablo de León: El objetivo es el desarrollo de una base científica permanente en la Luna. El último vuelo fue el del Apolo XVII a principios de los ’70. Ahora la NASA planea establecer una colonia permanente, y para eso solicita diferentes proyectos que sirvan a esa infraestructura; uno de ellos es el mío, que ganó un subsidio por tres años. Lo que yo voy a hacer es un prototipo que será observado en tierra y se analizará el diseño para ver si se instala en la Luna.
N&P: ¿Cuánto tiempo lleva pensar y desarrollar una construcción de estas características?
P.L: Lo que tengo que entregar en estos tres años es un módulo inflable, un hábitat que cumple las características que expresamos en la propuesta; y además un Rover, un vehículo eléctrico presurizado. A diferencia de los otros que fueron a la Luna, donde los astronautas tenían que usar el traje porque no tenían cabina, este tiene que ser presurizado para que se muevan sin él y ponérselo sólo cuando salen. Así que el proyecto completo consta del hábitat, el Rover que tiene que ser interconectado con el hábitat inflable, y el traje, que es mi especialidad principal.
N&P: Se está evaluando la posibilidad de ir a Marte, pero con una tripulación que asuma que no va a volver porque el programa no prevé la vuelta, sino que pasaría el resto de sus vidas en ése planeta, lo que facilitaría mucho el tema de costos y equipamiento.
P.L: Es interesante, porque en los primeros años de la carrera espacial entre EEUU y la URSS hubo un plan de la NASA para llevar un astronauta en una Géminis, y llevarle agua y comida hasta que se descubra la forma de traerlo de vuelta. Es una idea, habría gente dispuesta, pero no creo que se convierta en algo real. Sería mucho más económico porque lo más difícil es traer la tripulación de vuelta. Técnicamente es posible, pero por razones éticas no creo que se realice.
N&P: Es un gran mito americano el de no dejar nunca un compañero. Hay una cuestión cultural, sería romper con códigos preestablecidos.
P.L: Hay un científico, el Dr. Robert Suring, que desde hace años propone este tipo de colonización en Marte; él considera el escenario de no volver y construir una vida allá sirviéndose de lo que exista en el planeta para la supervivencia y cortando el vínculo. La especie se volvería multiplanetaria, no solamente unida a la Tierra sino con un primer paso para la pluralidad en el Sistema Solar.
N&P: ¿Cuánta gente integra tu equipo?
P.L: Por el momento somos 32, y como consecuencia del proyecto nuevo calculo que andaremos en los 50. No es fácil administrarlo porque soy desordenado, porque soy argentino y arreglamos las cosas de otra manera, y por último porque estamos desperdigados por los Estados Unidos. Nos manejamos con teleconferencias: técnicamente se puede pero no es lo mismo, no es fácil.
N&P: ¿Qué ánimo advierte hoy en la NASA con la aparición de China como nuevo gran jugador y con el reacomodamiento de Rusia? ¿Esto ha creado motivaciones como para desarrollar un trabajo sostenido?
P.L: Creo que China se perfila como jugador muy fuerte en lo espacial, pero el próximo país que pondrá un astronauta por medios propios va a ser la India. Yo estuve hace poco y vi las instalaciones; hay competencia y EE UU quiere seguir siendo el líder. Si me preguntan quién vuelve primero a la Luna dudaría entre China y los Estados Unidos.
Los trajes y las naves chinos son muy parecidos a la Soyuz rusa, pero han elegido comprar lo que estaba disponible en el mercado y adaptarlo a sus necesidades. Creo que hacen bien.
Proyectos espaciales del INVAP
El proyecto espacial más avanzado del INVAP es el lanzamiento de un satélite cuya construcción se está llevando a cabo en las instalaciones de Bariloche. Cuenta con la colaboración de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales, la CONAE, y la NASA de los Estados Unidos. El objetivo de la misión será medir la salinidad de los océanos y llevar otros elementos que son de interés local para la República Argentina.
Es un proyecto ambicioso que se encuentra muy desarrollado y hoy es utilizado como ejemplo de la avanzada tecnología de nuestro país en este tema, realizado en conjunto por la CONEA y el INVAP.
La NASA provee el instrumento que mide la salinidad de las aguas y que cuesta 150 millones de dólares. Lo facilitan para viajar en un satélite íntegramente argentino en diseño y construcción. El instrumento está ya en contendores especiales en Bariloche, listo para ser instalado a fin de año y en el primer trimestre de 2010 realizar las pruebas finales en Brasil, y de allí llevarlo a Estados Unidos para su lanzamiento.
El lanzamiento se prevé para el segundo semestre del 2010, y permitirá entender mejor el cambio climático, la principal amenaza para la humanidad por el calentamiento global. Será una misión muy visible para el mundo, y un orgullo para la actividad espacial argentina que la NASA los haya elegido.
El otro tema que está avanzado en ingeniería es el del primer satélite argentino de comunicaciones para la empresa argentina SARSAC, que brinda ese servicio. Para fines de 2011 debería estar listo y puesto en órbita en 2012. Esto abre la puerta a los satélites geoestacionarios, más grandes y de mayor complejidad, que posicionan a Argentina no sólo como proveedora de satélites de observación sino también de los de comunicaciones.
Este campo de desarrollo es inmenso, porque el área de las comunicaciones no tiene límites. El haber demostrado que los satélites realizados en el país funcionan bien, abre las puertas a la exportación. Se podría realizar el mismo camino de la experiencia nuclear, pues el haber probado calidad en el mercado internacional por más de 20 años nos encuentra como líderes del mercado. La idea es repetir la receta con una facilidad que no existía cuando el INVAP comenzó a trabajar con lo nuclear. Hoy el INVAP tiene un nombre, es una marca en lo nuclear; eso lo puede posicionar en las licitaciones internacionales. En el campo de los satélites es más nuevos, pero los antecedentes lo favorecen mucho.
Fuente: http://www.noticiasyprotagonistas.com/noticias/23108-argentina-for-export/
29.11.2009 | Cuando escuchamos hablar de científicos que diseñan plantas nucleares de baja potencia, o de infraestructuras que posibiliten la exploración tripulada a la Luna, no solemos pensar que se puede tratar de compatriotas exitosos. Pero nos equivocamos.
Héctor Otheguy es gerente general de INVAP. Afirma orgulloso que desde la Argentina, con recursos escasos comparados con otros países, se pueden lograr mejores resultados. INVAP ha desarrollado el Proyecto Carem (Central Argentina de Elementos Modulares), una planta nuclear de baja potencia concebida con un diseño innovador de última generación.
Noticias & Protagonistas: Ya están disponibles los fondos para el proyecto CAREM ¿Existe un programa de trabajo para que sea viable la producción en serie de los módulos?
Héctor Otheguy: El proyecto es que el primer módulo esté en funcionamiento dentro de cinco años. Participan del mismo la NASA y la Nucleoeléctrica Argentina, que es la empresa operadora de las centrales argentinas. Entonces se aúna la experiencia de la CNEA en todo lo que es tecnología nuclear, con la de haber operado centrales de potencia de generación eléctrica por más de 35 años desde que empezó Atucha 1, y otros 25 años de experiencia en Embalse. Reunimos así bastantes años-hombre de experiencia, imprescindibles en proyectos de estas características.
N&P: ¿Cómo está funcionando el reactor vendido a Australia, y cómo está la situación respecto del posible reactor para Holanda?
H.O: El reactor de Australia está funcionando de acuerdo a lo previsto, a plena potencia, produce radioisótopos, una vez por mes se para un par de días para el mantenimiento programado. Estamos conformes, y lo importante es que lo están nuestros clientes. Ellos obtuvieron la habilitación para la planta de radioisótopos, que es complementaria del reactor; y en un momento, en que hay escasez en el mundo porque han parado varios reactores. Es bueno y oportuno que lo puedan tener a plena marcha. Respecto a Holanda estamos esperando el resultado de la licitación; es una decisión de las autoridades holandesas, pero creemos que antes de fin de año tendremos la noticia.
N&P: Hace unos meses, un ministro de la Corte Suprema afirmó que en la Argentina debería dejar de llover droga. ¿Cómo esté el tema de los radares del INVAP?
H.O: Hay dos proyectos separados. Uno esta en plena producción, se instalaron siete, los de control de tráfico aéreo o “secundarios” que ayudan a las autoridades a organizar mejor el tráfico de aviones comerciales, de carga, privados, todos los que deben ser ubicados por estos sistemas. El proyecto del control de frontera e ilegales se maneja con los radares 3D, que detectan los aviones independientemente de la voluntad de los pilotos que no quieren ser detectados. Estamos bien avanzados en el desarrollo, tenemos un primer prototipo de corto alcance, 200 millas marinas, unos 350 a 400km desde el lugar del radar a la distancia máxima, que estaría listo para el año que viene.
Nuestro trabajo está en plena marcha. Tenemos siete radares funcionando, hay otros cuatro más que prevé el contrato firmado, y existe otro contrato por once más. Para septiembre de 2010 todo el país podría estar radarizado, es uno de los objetivos.
Para esa fecha ya estaremos con un prototipo en prueba del de 3D donde Fuerza Aérea lo decida, habiendo arrancado con la fabricación de cinco o seis, según pida Defensa. Está todo en marcha, los resultados son alentadores
Ingeniero Pablo de León
El ingeniero aeroespacial argentino Pablo de León ganó el concurso organizado por la Agencia Espacial Norteamericana (NASA) para el desarrollo de una infraestructura que posibilite la exploración tripulada a la Luna, que se espera para dentro de unos nueve años.
Noticias & Protagonistas: ¿Cuánto tiempo llevan los prototipos nuevos que has presentado, y que demuestran la decisión política de los Estados Unidos de volver a la carrera espacial y colocar una estación permanente en la Luna?
Pablo de León: El objetivo es el desarrollo de una base científica permanente en la Luna. El último vuelo fue el del Apolo XVII a principios de los ’70. Ahora la NASA planea establecer una colonia permanente, y para eso solicita diferentes proyectos que sirvan a esa infraestructura; uno de ellos es el mío, que ganó un subsidio por tres años. Lo que yo voy a hacer es un prototipo que será observado en tierra y se analizará el diseño para ver si se instala en la Luna.
N&P: ¿Cuánto tiempo lleva pensar y desarrollar una construcción de estas características?
P.L: Lo que tengo que entregar en estos tres años es un módulo inflable, un hábitat que cumple las características que expresamos en la propuesta; y además un Rover, un vehículo eléctrico presurizado. A diferencia de los otros que fueron a la Luna, donde los astronautas tenían que usar el traje porque no tenían cabina, este tiene que ser presurizado para que se muevan sin él y ponérselo sólo cuando salen. Así que el proyecto completo consta del hábitat, el Rover que tiene que ser interconectado con el hábitat inflable, y el traje, que es mi especialidad principal.
N&P: Se está evaluando la posibilidad de ir a Marte, pero con una tripulación que asuma que no va a volver porque el programa no prevé la vuelta, sino que pasaría el resto de sus vidas en ése planeta, lo que facilitaría mucho el tema de costos y equipamiento.
P.L: Es interesante, porque en los primeros años de la carrera espacial entre EEUU y la URSS hubo un plan de la NASA para llevar un astronauta en una Géminis, y llevarle agua y comida hasta que se descubra la forma de traerlo de vuelta. Es una idea, habría gente dispuesta, pero no creo que se convierta en algo real. Sería mucho más económico porque lo más difícil es traer la tripulación de vuelta. Técnicamente es posible, pero por razones éticas no creo que se realice.
N&P: Es un gran mito americano el de no dejar nunca un compañero. Hay una cuestión cultural, sería romper con códigos preestablecidos.
P.L: Hay un científico, el Dr. Robert Suring, que desde hace años propone este tipo de colonización en Marte; él considera el escenario de no volver y construir una vida allá sirviéndose de lo que exista en el planeta para la supervivencia y cortando el vínculo. La especie se volvería multiplanetaria, no solamente unida a la Tierra sino con un primer paso para la pluralidad en el Sistema Solar.
N&P: ¿Cuánta gente integra tu equipo?
P.L: Por el momento somos 32, y como consecuencia del proyecto nuevo calculo que andaremos en los 50. No es fácil administrarlo porque soy desordenado, porque soy argentino y arreglamos las cosas de otra manera, y por último porque estamos desperdigados por los Estados Unidos. Nos manejamos con teleconferencias: técnicamente se puede pero no es lo mismo, no es fácil.
N&P: ¿Qué ánimo advierte hoy en la NASA con la aparición de China como nuevo gran jugador y con el reacomodamiento de Rusia? ¿Esto ha creado motivaciones como para desarrollar un trabajo sostenido?
P.L: Creo que China se perfila como jugador muy fuerte en lo espacial, pero el próximo país que pondrá un astronauta por medios propios va a ser la India. Yo estuve hace poco y vi las instalaciones; hay competencia y EE UU quiere seguir siendo el líder. Si me preguntan quién vuelve primero a la Luna dudaría entre China y los Estados Unidos.
Los trajes y las naves chinos son muy parecidos a la Soyuz rusa, pero han elegido comprar lo que estaba disponible en el mercado y adaptarlo a sus necesidades. Creo que hacen bien.
Proyectos espaciales del INVAP
El proyecto espacial más avanzado del INVAP es el lanzamiento de un satélite cuya construcción se está llevando a cabo en las instalaciones de Bariloche. Cuenta con la colaboración de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales, la CONAE, y la NASA de los Estados Unidos. El objetivo de la misión será medir la salinidad de los océanos y llevar otros elementos que son de interés local para la República Argentina.
Es un proyecto ambicioso que se encuentra muy desarrollado y hoy es utilizado como ejemplo de la avanzada tecnología de nuestro país en este tema, realizado en conjunto por la CONEA y el INVAP.
La NASA provee el instrumento que mide la salinidad de las aguas y que cuesta 150 millones de dólares. Lo facilitan para viajar en un satélite íntegramente argentino en diseño y construcción. El instrumento está ya en contendores especiales en Bariloche, listo para ser instalado a fin de año y en el primer trimestre de 2010 realizar las pruebas finales en Brasil, y de allí llevarlo a Estados Unidos para su lanzamiento.
El lanzamiento se prevé para el segundo semestre del 2010, y permitirá entender mejor el cambio climático, la principal amenaza para la humanidad por el calentamiento global. Será una misión muy visible para el mundo, y un orgullo para la actividad espacial argentina que la NASA los haya elegido.
El otro tema que está avanzado en ingeniería es el del primer satélite argentino de comunicaciones para la empresa argentina SARSAC, que brinda ese servicio. Para fines de 2011 debería estar listo y puesto en órbita en 2012. Esto abre la puerta a los satélites geoestacionarios, más grandes y de mayor complejidad, que posicionan a Argentina no sólo como proveedora de satélites de observación sino también de los de comunicaciones.
Este campo de desarrollo es inmenso, porque el área de las comunicaciones no tiene límites. El haber demostrado que los satélites realizados en el país funcionan bien, abre las puertas a la exportación. Se podría realizar el mismo camino de la experiencia nuclear, pues el haber probado calidad en el mercado internacional por más de 20 años nos encuentra como líderes del mercado. La idea es repetir la receta con una facilidad que no existía cuando el INVAP comenzó a trabajar con lo nuclear. Hoy el INVAP tiene un nombre, es una marca en lo nuclear; eso lo puede posicionar en las licitaciones internacionales. En el campo de los satélites es más nuevos, pero los antecedentes lo favorecen mucho.
