ME quedo atónito en como la gente piensa que comprar cazas de combate principales es como comprar autos.
Los precios de los cazas ofertados al Perú no son solo números ojo, reflejan un nivel de confianza política que los estados proveedores tienen hacia nuestro país. Por eso vemos que, en distintos concursos, los precios y condiciones varían tanto. Y con la actual inestabilidad política, no sería de extrañar que esto sufra un retraso hasta al punto de hacerlo políticamente inviable para este nuevo gobierno.
Si bien se ha comentado que la FAP ya habría entregado su informe final al Ejecutivo, el más que probable cambio de ministros —y en especial de sectores clave como Defensa, Relaciones Exteriores y Economía— altera completamente el panorama. Los nuevos funcionarios tendrán que informarse, revisar, y probablemente cuestionar puntos del proceso antes de avanzar. Y eso tomará tiempo, porque ninguno va a firmar una compra de esa magnitud sin comprender y revalidar cada paso previo.
Ahorita mismo y desde la perspectiva de EEUU, Francia y Suecia, se me ocurren criterios críticos que ahora estarán reanalizando en el caso peruano.
1ero. Riesgo político e institucional: los fabricantes y sus gobiernos ya deben de estar observando si existe estabilidad y continuidad. Si perciben que los acuerdos pueden romperse o renegociarse con cada cambio de gabinete, automáticamente te pueden subir la prima de riesgo, es decir, el precio
2do Solidez presupuestal: no sabemos cuál será el nuevo ministro de economía, pero sí sabemos que Jerí ha estado involucrado en un zafarrancho de gasto público, ¿cuál será la nueva posición del MEF? ¿el nuevo gobierno redirigirá fondos? En contextos de incertidumbre como el que estamos viviendo todo cambia, todo, principalmente las condiciones financieras.
3ero. Factores diplomáticos: Ningún contrato de este nivel se firma sin autorización política del gobierno del país fabricante. Si detectan incertidumbre sobre la orientación geopolítica del Perú, o si sienten falta de alineamiento con sus intereses estratégicos, van a preferir esperar antes de comprometerse.
4to. Continuidad técnica en la FAP: La FAP ya cumplió su parte al elevar el informe final y se esperaba que el gobierno evalue ciertos factores críticos ponderados y también decida, esto se ha interrumpido por completo. Los nuevos ministros van a querer dejar su huella, revisar documentos, pedir aclaraciones… y eso significa retrasos inevitables.
5to. Imagen-país y ruido mediático: Si los gobiernos de los países oferentes perciben exposición pública excesiva, denuncias o riesgo de interpelaciones les van a ordenar a sus empresas bajar el perfil y congelar decisiones. ¿Ustedes creen que el escándalo político es poca cosa? Estamos hablando de imágen institucional, eso es oro y debe de cuidarse.
En resumen estimados foristas, con el nuevo escenario de un nuevo Presidente, el proceso probablemente entre en pausa Los gobiernos y los fabricantes van a esperar señales claras, continuidad, respaldo político y confirmación presupuestal -cosas sin importancia como ustedes comprenderán-. No creo que veamos cosas de fondo.
Por cierto, como todos sabemos, la DSCA ya autorizó la posible venta de F16 a nuestro país. La venta se haría bajo el esquema FMS (Foreign Military Sales), administrado por DSCA, lo que implica que el proceso depende de aprobaciones políticas (gobiernos de los EEUU.) y revisión del Congreso de EEUU.
Solo lo digo para que se ubiquen, no es cuestión de cambiarse la ropa e ir a comprar el caza mas pulenta. Depende de como te vistas, como te muevas y como te expresas. Ubicaina señores, esto no solo depende del Perú.
Estamos hablando de percepción de estabilidad institucional, ya si no comprenden esto….
Por cierto, las fotitos y las publicaciones en X están demás, eso es demasiado BÁSICO.
Saludos
Los precios de los cazas ofertados al Perú no son solo números ojo, reflejan un nivel de confianza política que los estados proveedores tienen hacia nuestro país. Por eso vemos que, en distintos concursos, los precios y condiciones varían tanto. Y con la actual inestabilidad política, no sería de extrañar que esto sufra un retraso hasta al punto de hacerlo políticamente inviable para este nuevo gobierno.
Si bien se ha comentado que la FAP ya habría entregado su informe final al Ejecutivo, el más que probable cambio de ministros —y en especial de sectores clave como Defensa, Relaciones Exteriores y Economía— altera completamente el panorama. Los nuevos funcionarios tendrán que informarse, revisar, y probablemente cuestionar puntos del proceso antes de avanzar. Y eso tomará tiempo, porque ninguno va a firmar una compra de esa magnitud sin comprender y revalidar cada paso previo.
Ahorita mismo y desde la perspectiva de EEUU, Francia y Suecia, se me ocurren criterios críticos que ahora estarán reanalizando en el caso peruano.
1ero. Riesgo político e institucional: los fabricantes y sus gobiernos ya deben de estar observando si existe estabilidad y continuidad. Si perciben que los acuerdos pueden romperse o renegociarse con cada cambio de gabinete, automáticamente te pueden subir la prima de riesgo, es decir, el precio
2do Solidez presupuestal: no sabemos cuál será el nuevo ministro de economía, pero sí sabemos que Jerí ha estado involucrado en un zafarrancho de gasto público, ¿cuál será la nueva posición del MEF? ¿el nuevo gobierno redirigirá fondos? En contextos de incertidumbre como el que estamos viviendo todo cambia, todo, principalmente las condiciones financieras.
3ero. Factores diplomáticos: Ningún contrato de este nivel se firma sin autorización política del gobierno del país fabricante. Si detectan incertidumbre sobre la orientación geopolítica del Perú, o si sienten falta de alineamiento con sus intereses estratégicos, van a preferir esperar antes de comprometerse.
4to. Continuidad técnica en la FAP: La FAP ya cumplió su parte al elevar el informe final y se esperaba que el gobierno evalue ciertos factores críticos ponderados y también decida, esto se ha interrumpido por completo. Los nuevos ministros van a querer dejar su huella, revisar documentos, pedir aclaraciones… y eso significa retrasos inevitables.
5to. Imagen-país y ruido mediático: Si los gobiernos de los países oferentes perciben exposición pública excesiva, denuncias o riesgo de interpelaciones les van a ordenar a sus empresas bajar el perfil y congelar decisiones. ¿Ustedes creen que el escándalo político es poca cosa? Estamos hablando de imágen institucional, eso es oro y debe de cuidarse.
En resumen estimados foristas, con el nuevo escenario de un nuevo Presidente, el proceso probablemente entre en pausa Los gobiernos y los fabricantes van a esperar señales claras, continuidad, respaldo político y confirmación presupuestal -cosas sin importancia como ustedes comprenderán-. No creo que veamos cosas de fondo.
Por cierto, como todos sabemos, la DSCA ya autorizó la posible venta de F16 a nuestro país. La venta se haría bajo el esquema FMS (Foreign Military Sales), administrado por DSCA, lo que implica que el proceso depende de aprobaciones políticas (gobiernos de los EEUU.) y revisión del Congreso de EEUU.
Solo lo digo para que se ubiquen, no es cuestión de cambiarse la ropa e ir a comprar el caza mas pulenta. Depende de como te vistas, como te muevas y como te expresas. Ubicaina señores, esto no solo depende del Perú.
Estamos hablando de percepción de estabilidad institucional, ya si no comprenden esto….
Por cierto, las fotitos y las publicaciones en X están demás, eso es demasiado BÁSICO.
Saludos

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