El Ejército Australiano recibió recientemente los dos primeros Sistemas de Artillería de Alta Movilidad M142 (HIMARS) M142, englobados dentro de la adquisición de un total de 42 MRLS a los Estados Unidos, y enmarcados en un programa destinado a reforzar las capacidades de apoyo de fuego y ataque a largas distancias de la fuerza. Estos primeros ejemplares fueron recibidas en el día de ayer por las autoridades locales tras dos años de haberse concentrado el acuerdo de compra, siendo transportados al país a través de aeronaves de transporte Boeing C-17A Globemaster III de la Real Fuerza Aérea Australiana.
Como fue descripto, el gobierno de Australia se encuentra trabajando en el refuerzo de sus capacidades de las Fuerzas de Defensa Australiana bajo el programa conocido púbicamente como Revisión Estratégica de Defensa, y que impulsó la decisión de adquirir nuevos sistemas sistemas de artillería HIMARS destinados a fortalecer las capacidades de apoyo de fuego y ataque a grandes distancias del Ejército.
Estos objetivos empezaron a tomar forma cuando en el año 2022 el Departamento de Estado de EE. UU. autorizó la venta de un primer lote compuesto por 20 lanzadores M142 HIMARS junto con a paquetes de munición y apoyo. Posteriormente, en el 2023, las autoridades australianas volvieron a realizar un pedido por 22 nuevos MRLS a los EE.UU., el cual fue autorizado por un monto aproximado de US$ 975 millones de dólares, lo que elevó el número a un pedido de un total de 42 lanzadores ordenados.
Con una inversión que alcanza los 1.600 millones dólares australianos (USD 1.000 millones), los lanzadores M142 HIMARS estarán equipados con un cohetes guiados GMLRS-AW y los nuevos misiles balísticos PrSM (siendo estos el reemplazo de los actuales ATACMS del Ejército de EE.UU.) que proporcionaran al sistema una potencia de fuego precisa y de gran letalidad con alcances superiores a los 500 kilómetros. Según lo comunicado oficialmente, los sistemas serán operados por la recientemente creada 10.ª Brigada de Artillería con asiento Adelaida.
Por otro lado, y no en menor medida, el gobierno australiano logró adjudicarle un contrato a la empresa Lockheed Martin para iniciar la fabricación local de cohetes guiados GMLRS. Se espera que el país oceánico participe en la fabricación de municiones guiadas y Contenedores de Lanzamiento del Sistema de Lanzacohetes Múltiples Guiados (GMLRS). Para ello, un equipo de ingenieros de la sección australiana de la compañía multinacional se formará en Estados Unidos en lo referente a producción de armas guiadas, siendo este el paso previo al trabajo en el país.
En ese marco, el Ministro de Industria para la defensa, Pat Conroy, expresó: “Igualmente cruciales serán las municiones y los sistemas de apoyo que respaldan a los HIMARS, por lo que este año comenzaremos a fabricar misiles GMLRS en Australia. Esto fortalecerá nuestras cadenas de suministro internas bajo nuestro control y generará empleos locales.”
Por último, conforme a la llegada de las primeras unidades de acuerdo al calendario previsto, se espera que el despliegue de los nuevos sistemas se concrete entre entre 2026 y 2027, lo que supondrá no soló un avance significativo de las capacidades del Ejército australiano, sino que también un aumento de la interoperabilidad con las fuerzas armadas estadounidenses y el fomento de una industria local de defensa.
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