Recientemente, funcionarios de defensa suecos han confirmado a medios locales ucranianos que la transferencia de dos de sus Saab 340 AEW&C a la Fuerza Aérea de Ucrania avanza según lo previsto, restando únicamente que esta institución realice una serie de modificaciones en sus cazas F-16 para asegurar la compatibilidad entre ambas plataformas. Se trata de una clase de aeronave actualmente en servicio en la Fuerza Aérea Sueca, siendo esta utilizada para labores de alerta temprana y control aerotransportado, cuyo envío a manos ucranianas fue anunciado durante el pasado mes de mayo.
La noticia fue dada a conocer por el medio ucraniano Delfi, el cuál consultó al Ministerio de Defensa sueco por el estado de la transferencia, tanto por cronogramas de entrega como por requisitos para que esta se lleve a cabo. Recogiendo algunas de las declaraciones emitidas por los funcionarios suecos en respuesta: “Las fechas de entrega del ASC890 (NdE: Saab 340 AEW&C) están vinculadas a cuándo estarán listas ciertas modificaciones del caza F-16 (…) Estamos trabajando de acuerdo con el cronograma original, pero por razones de seguridad no informaremos cuándo y dónde se llevaron a cabo o se llevarán a cabo determinadas acciones.“
Cabe recordar en este punto, que las aeronaves en cuestión se caracterizan por integrar potentes radares tipo AESA de la familia Erieye que desarrolla la propia Saab, lo que le brinda una capacidad de detección y seguimiento de objetivos tanto aéreos como navales situados a distancias máximas de entre 300 y 400 kilómetros. Montado en la cara superior del avión, el radar es capaz de operar incluso en áreas geográficas montañosas, con condiciones climáticas hostiles y a pesar del despliegue de elementos de interferencia electrónica del enemigo. Ha de mencionarse también, que la Fuerza Aérea Ucraniana ya ha enviado personal hacia territorio sueco para comenzar a recibir la formación necesaria para operar este tipo de sistemas, manteniendo la esperanza respecto de un considerable aumento de sus capacidades una vez estos procesos culminen.
Por otra parte, resulta de utilidad mencionar que desde Estocolmo ya incluso antes del anuncio de esta transferencia de aviones a Kiev, se contaba con planes para incorporar nuevas aeronaves de alerta temprana para sostener las capacidades de su propia Fuerza Aérea. En ese sentido, ha de mencionarse la adquisición de nuevos ejemplares GlobalEye de Saab por un total de 741 millones de dólares, tratándose de un acuerdo rubricado en 2022.
Finalmente, pasando revista de los diversos paquetes de asistencia militar que Suecia ha enviado a Ucrania, resalta a la vista que los aviones Saab 340 AEW&C a ser entregados son tan solo uno de los múltiples equipos que han sido comprometidos desde el inicio del conflicto. En esa línea, podemos mencionar la transferencia de vehículos de combate de infantería CV90, obuses autopropulsados Archer, tanques Stridsvagn 122 y sistemas de defensa aérea RBS 70 e IRIS-T, entre otros elementos. En términos concretos, esto puede traducirse en más de 61.900 millones de coronas suecas transferidas por el gobierno sueco en asistencia militar, convirtiendo al país en uno de los principales socios europeos de Kiev.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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